Partida Rol por web

Tanto correr había pasado su factura. Tras agacharte e intentar abrir la alcantarilla, esta no cede bajo tus manos. Miras hacia un lado, los caminantes vuelven a ponerse cerca de ti... calculabas que aún te daba tiempo a una vez mas antes de que estuviesen en una posición mala para ti. 

VAMOS!!!!! - el sudor corría por la frente de Daryl... no aguantaría mucho mas.

Los caminantes se acercan y tu, con tu último aliento agarras la tapa y estiras con todas las fuerzas que eres capaz de dar, logrando mover la tapa lo suficiente para quitarla y empujarla a un lado. Tras esto, te introduces en la misma y bajas apoyándote en la escalera de la pared. Cuando has bajado un poco, comienzas a mover la alcantarilla para volver a posicionarla en su estado inicial, y justo estas en ello cuando unas manos agarran la tapa e intentan apartarla. 

Aquello era desesperante.. un último aliento, una lucha desesperada por sobrevivir... lástima que la pistola no estuviera ami alcance, con un disparo ganaría el enfrentamiento.

Quizás fue el hecho de que la salida de su situación estaba a su alcance, las ganas de sobrevivir, o simplemente que estaba ya hasta las pelotas de la situación en la que se encontraba, lo cierto es que Daryl movió la alcantarilla con toda la fuerza, cercenando los pobres dedos del caminante que había sujetado la misma.

Podía oír los golpes de los caminantes en la alcantarilla, buscando desesperadamente alguna manera de abrirla. Afortunadamente para Daryl, eran estúpidos y no tenían la suficiente mente para saber que solo podrían abrirla de una manera. Claro que tampoco era plan de quedarse allí eternamente. Era necesario salir de allí.

A pesar de tener eso en mente, tenía un problema. Y es que una vez cerrada la alcantarilla, se había quedado completamente a oscuras.

Daryl bajo las escaleras con sumo cuidado, recuperando el aliento y pensando que haría a continuación. Tomó una nota mental: buscar una puta linterna y llevarla siempre encima.

Tocó el suelo con los pies, estaba húmedo y el olor no era mucho mejor que el de los caminantes, pero aquello no era lo peor. No veía nada y encontrar una salida era prioritario, sus compañeros no le esperarían eternamente, pensarían que estaba muerto. 

Buscó el palo que llevaba colgado y lo tanteó con las manos, lo cogió por el lado que no había afilado y se dispuso a usarlo como el bastón de un ciego. Debía avanzar, sin prisa, pero sin pausa. Hizo un balance mental de su situación, creía saber mas o menos por donde había venido, ahora sólo debía situar el norte. Creía tenerlo localizado, pronto lo sabría, así que rápidamente decidió hacía donde ir ... según él creía que estaba situado el coche. Tiró hacia la derecha, lo que el creía que era el oeste... iba despacio, midiendo sus pasos con el palo.. y buscando no tropezar y adivinar lo que había por delante de él en cada paso. Pronto fue cogiendo confianza y avanzaba algo más rápido .. pero aún así podría no ser suficiente.

Caminas, con la lanza como bastón y apoyándote en todo momento en la pared. Crees que vas por el mejor camino, mas no podías saberlo a ciencia cierta. Al fin y al cabo, estabas a oscuras. Oyes claramente el sonido de pequeños chillidos y pasos, deduciendo claramente que había ratas en el lugar, y de una pequeña corriente, suponiendo que sería agua inundada vete tu a saber que. 

Sigues caminando, intentando mantener la calma y no tropezar, aunque te va costando saber si ibas en la dirección correcta o si por el contrario ya estabas perdido. Al poco rato ves hacia el fondo una pequeño rayo de luz... ¿una posible salida?

El rayo de luz fue , nunca mejor dicho, un haz de esperanza. Las pulsaciones le aumentaron. Por suerte era perro viejo y contuvo las ganas de correr, se dijo así mismo que aún no había salido de allí y mantuvo la velocidad... dirección a la luz. El camino se le hizo eterno.

Tras acercarte lo suficiente, te percatas que el hilo de luz proviene del techo. Al parecer has llegado a otra alcantarilla. Subes las escaleras, hasta llegar a la misma. Esperas unos segundos por si oías algo extraño, pero no oyes nada fuera de lo normal. Aún asi y todo te lo piensas, ¿es seguro abrir?

Daryl sabía que no tenía mas opción que abrir la alcantarilla. Podía no encontrar nada, miles de caminantes, un coche sobre la alcantarilla, una salida a un patio interior y cientos de opciones. Al menos, debía probar.

Empujó la alcantarilla ... y se asomó.

Daryl asoma la cabeza lentamente y mira a su alrededor. La zona le sonaba, vaya que si: al fin y al cabo era el lugar del inicio de sus problemas. No sabía como pero había llegado a donde la tienda donde habían recogido la comida. Lo bueno era que en la zona no había mucho caminante, lo malo era que aún quedaba alguno, no para preocuparse, pero si para salir de allí cagando leches. 

Salió de allí con cuidado... Al fin un golpe de suerte - pensó. Estaba cerca de volver con el resto de sus compañeros. Esperaba que su hermano estuviese allí y todo hubiese salido bien. 

Caminó dirección al coche, el olor y las tripas que colgaban de su cuello le ayudaban a pasar desapercibido. No perdió la cabeza, no quería tropezar tan cerca del final.. así que disimuló sus pasos para pasar por un zombie mas.. el plan había vuelto al principio.

Los caminantes te observan, algunos te ignoran pero otros te miran con mas detenimiento... parece ser que tu "disfraz" ya no surte el mismo efecto. Y no era para menos dado por done habías estado. Así pues aceleras la marcha rumbo de nuevo hacia el coche... afortunadamente para ti, los pocos caminantes que había no son lo suficiente rápidos para alcanzarte, logrando dejarles atrás sin problemas. 

Al poco rato, y sin tener mas encuentros llegas al coche, donde se encuentra Hannah.

Tras esperar no se cuanto tiempo, ves una figura caminando deprisa hacia lo lejos. Es Daryl.

Ya mas tranquilo por estar libre de peligro, al menos de los caminantes que había delante del supermercado, me giro hacia mis compañeros y digo. -Bueno, aun es temprano y quedan suficientes horas de sol como para ir a otra tienda. Lo que no se es si el otro grupo estará esperándonos o no.

Empiezo a revolverme el pelo y añado. -Si queréis ir a otra conozco una no muy lejos.

Daryl llegaba con claros síntomas de cansancio, aunque había recuperado notablemente el aliento. Ya no traía la bolsa de plástico ni las tripas colgando, se las había quitado en cuanto paso el peligro. Sin embargo, olía mal, muy mal... como si se hubiera dado un baño en aguas fecales. Tenía los bajos de los pantalones húmedos y mugrientos, seguro que de ahí venía gran parte de ese apestoso perfume.

La mochila le colgaba de un sólo hombro y llevaba la lanza en la otra mano. Al acercarse al coche no dijo nada, abrió el maletero y metió la mochila.

- ¿Sólo estamos nosotros? - dijo medio preguntando, medio afirmando, conociendo la respuesta.

Me levanto deprisa al ver una figura acercarse, y ya por el palo con el que se había hecho la lanza podía decir que se trataba de Daryl, seguido de un tufillo a cloaca acrecentado por el olor a podredumbre que ya tenía clavada en las fosas nasales y el sol.

-Merle se quedó con la chica y aún no ha vuelto. Pensaba esperar un rato más y volver a buscaros si no regresabais.-respondo a su cuestión, sacudiéndome los pantalones de polvo de tierra.-¿Qué ha pasado con los zombis incendiarios?

- He conseguido escapar por las alcantarillas, por los pelos, son incansables esos hijos de puta. 

Hizo una pausa mientras guardaba la mochila, pensaba en que hacer ahora, quedaban unas horas de luz, pero no demasiadas.. y casi ninguno había vuelto.

- Esperaremos mientras haya luz, el otro grupo aún no ha vuelto. - Volvía a parecer que pensaba - Yo me quedaré hasta que mi hermano aparezca.

Asiento a Daryl y vuelvo a sentarme a la sombra de los coches. Tampoco esperaba otra cosa de él.

-Está bien, me parece justo. Yo...podría quedarme a vigilar el coche si tienes que ir a buscarle, o ir yo contigo.-encojo un hombro.