Partida Rol por web

Tierra Muerta

En la ciudad habitan los muertos (Escena IV)

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12/02/2012, 22:55
Cromvar
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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13/02/2012, 14:53
Veidan Kersh

Notas de juego

No me ha quedado claro, chicos. Vast sigue con sigilo a la niña, pero ¿Lean y Zzara't se paran y esperan a que vuelva o le siguen a cierta distancia? Es que si han parado y Veidan no para, se va a dar de morros con el espadote de Lean y no queremos que vuelvan a enfadarse, verdad, tesssssoro?

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13/02/2012, 15:03
Leanúit (Lean) Cailc

Notas de juego

Bueno, es que lo de Vast desaparece fue algo ambiguo, pero Lean sigue avanzando sin prisa pero sin pausa a unos pasos por detrás.

XDDDDD

 Y sip, es probable que una mano, o una cabeza fuera de lugar en la oscuridad Lean no se la tome muy bien. XDDDDDDDD

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14/02/2012, 21:20
Veidan Kersh

El semielfo observó como Vast desaparecía tras doblar la esquina y siguió andando cautelosamente tras los pasos del humano.

- Esta pocilga me está provocando nauseas, espero que esa niña nos esté llevando a un lugar algo menos ofensivo para mi olfato...- musitó gruñendo mientras arrugaba la nariz con desprecio- sigamos adelante...

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14/02/2012, 21:29
Veidan Kersh

Notas de juego

Master, "sentir el peligro" me dice algo? Con la niña, quiero decir.

 NdM: De momento no, a lo mejor si estás más cerca... :P

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14/02/2012, 21:46
Zzarat

Sigo con silencio y prudencia a mis compañeros. Casi preferiría que Veidan no hubiera hecho comentario alguno: constatar en voz alta lo que nuestros sentidos ya detectan no hace más que empeorar la situación. Y no voy a negarlo: ver desaparecer en la distancia el contorno de Vast no contribuye a hacerme sentir más tranquilo.

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15/02/2012, 20:02
Niña (Luan)

- Señor despierte... La voz de la niña era apenas un susurro. Sin apartar la mirada del túnel por donde había venido, intentaba despertar al hombre que yacía en el suelo y parecía dormir. Mientras el niño pequeño, agarrado a los harapos de esta, temblaba. Temblaba pero no producía ruido alguno.

Ninguno de los dos parecía haber visto aun a Vast entre las sombras del túnel.

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15/02/2012, 20:06
Director

El grupo siguió los pasos de Vast después que este desapareciera de su vista al girar una esquina del túnel. Con cautela avanzaron por el corredor, otrora cloaca de la gran ciudad de Tallin.

Después de doblar la esquina en la que habían perdido de vista a Vast, el precavido grupo vio como el estrecho túnel se abría a una sala más amplia. Allí, entre las sombras del túnel, antes de entrar en la sala, se encontraba Vast. Al parecer observando lo que ocurría en la sala. Era una salita lo suficientemente alta como para estar de pie, y en la que se podían estirar para descansar un puñado de personas. En las paredes de la sala había aberturas como la que se encontraban, otros túneles que iban a parar allí. Sin duda, en otro tiempo había sido un infecto lugar donde las aguas fecales de la ciudad se congregaban, ahora, parecía servir de refugio.

El la sala había la niña que habían seguido hasta allí, junto a ella un niño de unos 4 años se agarraba a los mugrientos pantalones de la niña, y esta, a su vez, intentaba despertar a un hombre que yacía en el suelo. Una tenue luz de vela iluminaba el lugar, mientras la niña asustada hacía furtivas miradas hacia el túnel por el que acababa de entrar. El túnel donde se apelotonaba el nutrido grupo de aventureros.
 

Justo cuando los aventureros llegaron a la altura de Vast, que se encontraba agazapado en las sombras, la niña pareció sobresaltarse, tal vez por el ruido producido, tal vez por entrechocar del hierro contra las paredes del túnel. Fuera por lo que fuera, la niña se incorporó, asustada.

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15/02/2012, 20:14
Director

La hora de la cautela y el sigilo se esfumó en un momento. Justo después que la niña hablara, los compañeros de Vast llegaron por el túnel. No es que estuvieran  haciendo una fiesta, pero tampoco parecía que hubieran prestado demasiada atención en ser cautelosos. Menos Cromvar, él si que se movía entre las sombras,casi indetectable.

Al oír los pasos y el tintinear del hierro de la gente que llegaba por el túnel, los ojos de la niña se abrieron como platos, asustados. El instinto de la niña, la hizo incorporar, y cejar en el empeño de despertar al hombre estirado en el suelo. Estaba apunto de salir corriendo de allí, con el niño agarrado de la mano.

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15/02/2012, 20:22
Leanúit (Lean) Cailc

Atrás quedaba la joven fría, distante e incapaz de socializar que había sido Lean al salir forzosamente de su pueblo años atrás. Y tratándose de un par de críos… , en su opinión humanos, una luz de esperanza ante tanta oscuridad, su voz no solo sonó conciliadora sino tan dulces que ni ella se reconocía. -Tranquilos niños.-

Se acercó intentando no asustarles. –No vamos a haceros ningún daño. ¿Sabéis hablar?- Entonces se dio cuenta del hombre que dormía junto a ellos. -¿Es este vuestro papi? ¿Esta enfermo?- No quería que se levantara asustado, así que dejó de acercarse. -Hola... ¿Se encuentra bien?-

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15/02/2012, 20:30
Niña (Luan)

La niña pareció dudar un instante, un instante en el que pudo haber escapado. Pero la voz, la voz de Lean, cualquier voz que hubiera odio, le hizo permanecer quieta en su lugar, agarrando fuertemente la mano del niño pequeño.

- Lo atacaron ayer, y ya no responde... Tengo que arrancarle la cabeza. Aunque su voz era infantil, sus palabras eran duras. Y sus ojos... sus ojos. al igual que los del niño de 4 años eran fríos y distantes. Habían contemplado el horror y la muerte demasiado de cerca, y demasiadas veces.

Aun con todo, se notaba claramente que los niños mantenían una cierta distancia hacia la desconocida que tan amablemente les hablaba. Tal vez por la sangre seca que cubría su ropa, o par la enorme espada que colaba a su espalda, pero los niños aun guardaban recelo.

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15/02/2012, 20:52
Leanúit (Lean) Cailc

“¡M!3%&a!” Piensa Lean.  Por una vez que sentía un poco ilusión de encontrar supervivientes en aquél pozo de horror e inmundicia tendría que sacar la espada y cortar al menos a uno. Estaba cansada, tras casi dos años (sino es que había perdido la cuenta) estaba MUY cansada de todo aquello, pero no tenía opción era seguir o fallecer, si elegía sin más lo último todo lo que había hecho carecería de sentido.

Sin embargo, con su misma voz amable les preguntó intentando mostrarse segura, pero de confianza. -Dime… ¿Os ha mordido a vosotros?-

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15/02/2012, 20:59
Zzarat

Creo que jamás estaremos totalmente inmunizados ante la imagen de la miseria. Mi pueblo ha sido uno al que la Gran Madre ha perdonado la cólera de la plaga muerta, mas aún así no estamos hechos de piedra: el horror, la visión de un rostro demacrado, el desamparo... Esta niña y su hermano, manteniéndose cerca de un hombre que claramente tiene un pie en el Reino de las Almas y el otro sobre una pastilla de jabón, representan a la perfección el clímax de la desgracia.

Lean les habla con una voz reconfortante, amable... tierna. Y no puedo evitar pensar que, a pesar de su carácter hosco y maneras bruscas, su ansiedad en la búsqueda por su padre y su desasosiego por la ausencia de frutos han dado un excelente resultado. No es esta la mujer que encontré hace ya un tiempo, acompañada por unos extraños compañeros. Es ahora una fémina de distinto carácter, recia y fuerte pero a la vez capaz de expresar la más profunda humanidad. ¿No era eso lo que buscaba en realidad? ¿Y si su padre, aparte de su manifestación física, no era más que una alegoría a una parte de sí misma que había permanecido sepultada demasiado tiempo? Si esta era la realidad, creo que la Gran Madre ha permitido a Lean encontrar lo que buscaba.

Dudo entre acercarme a los pequeños para examinarles y ayudarles o mantenerme al margen, pues soy consciente de que mi aspecto puede inquietar a los pequeños. "Dime si necesitas que los examine", pregunto en un susurro a Lean y manteniéndome cerca de Vast. Está claro que habrá que cortar una cabeza. Recemos para que no haya que cortar tres.

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15/02/2012, 21:07
Vast Rahnner

En condiciones normales se habría servido de sus silenciosas habilidades para "adquirir" algo valioso, o vaciar los bolsillos del desgraciado en su defecto.
Pero esta vez, dejando de lado que los niños eran más pobres que la sopa que comieron cerca de Tallin, Vast no se atrevía, quizás por que con la cantidad de monstruos que habían en la ciudad maldita era muy triste robar a un niño vivo.

Pero fuera como fuese, sus compañeros llegaron a la escena. Lean, con su gélida voz, intentaba ganarse la confianza de unos niños que no se fiarían ni del mismo Isgard. Así que viendo el posible percal ¿Y el tipo este lo han mordido? ¡Empezamos bien con las presentaciones! el bribón se aprovechó que no lo habían descubierto para avanzar cautelosamente, formando un arco y rodeando a los chicos... Y el tipo del mordisco

- Tiradas (1)
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16/02/2012, 21:02
Niña (Luan)

- No, a nosotros no. Dijo la niña. En su tono de voz, y en sus reacciones musculares, se podía percibir como bajaba las defensas. - Pero a él si. Señalando al hombre tendido en el suelo. - Ayer salimos en busca de provisiones, y en una incursión, uno de los caminantes atacó a Puk... Hay que acabar con él antes que vuelva. Con la mano que le quedaba libre, se apartó el mugriento pelo de la cara.

- Tenemos que llevar las provisiones con los demás. La niña señaló una especie de fardo que descansaba a los pies del hombre.

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16/02/2012, 21:10
Niño (Vasil)

- A... A mi si. La dulce voz del infante sonó tímida en la sala.

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18/02/2012, 20:34
Veidan Kersh

Veidan se olvidó de respirar. Fueron apenas unos segundos, pero a él le parecieron una eternidad. La trágica confesión del pequeño se le clavó en las entrañas como un puñal de hielo y le costó cierto trabajo reaccionar, pero estaban entre la espada y la pared. Inspiró de golpe y se le aclararon las ideas. Había prioridades, lo primordial ahora era finiquitar el asunto de Puk y de eso se podía encargar él. En lo que respectaba al niño... bueno, Zzara't podía examinarlo y si lo que había dicho era verdad... tendrían que tomar una triste decisión. Se acercó a los críos con resolución, se acuclilló delante de ellos e intentó hablarles con sosiego, estampando una sonrisa cómplice en los labios.

- Esta muchacha tan agradable se llama Lean, chicos. Yo puedo coger las provisiones y encargarme de Puk, ¿porqué no os vais con ella?- dijo mirando a Lean inquisitivamente, esperando que ella comprendiera- Además, con nosotros viaja un gran amigo nuestro que es muy especial, os parecerá salido de un cuento de hadas. Él es muuuuuuy sabio, sabe un montón de historias de los bosques y os las contará si permitís que os cure las heridas que tengais- añadió mirando esta vez a Zzara't y luego señalándole sutilmente al niño con la cabeza- ¿Qué os parece?

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19/02/2012, 19:28
Zzarat

Contemplo al niño con neutralidad, intentando asimilar las palabras de Veidan. Sí, es cierto aquello que dice. Pero, ¿debo mostrar falsa esperanza ante el niño? ¿Debo acaso adoptar una postura distinta a la real? Por prudencia, por respeto, me mantengo alejado. ¿Es acaso necesario que mienta al niño? Si ha de morir, morirá. 

Pienso en el ungüento elaborado con la misma vida de los árboles de mi hogar ancestral. Son estos árboles milenarios, que llevan consigo la mismísima fuerza de la Gran Madre. Esta, si bien es eterna en Su sabiduría y Su bondad, también tiene sus límites. ¿Podría mi ungüento salvar al niño de la esclavitud tras la muerte?

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20/02/2012, 10:43
Director

Notas de juego

Nunca lo has probado. Puede que funcione o puede que no. Es muy difícil que ta cosa funcione, pero existe la posibilidad. De ti depende ^^

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20/02/2012, 10:44
Niña (Luan)

La niña retrocedió un paso sorprendida ante la visión de los nuevos desconocidos, pero tras las palabras de Veidan se relajó.

- Está bien, encárgate de Puk... No era un mal hombre... algo brusco, pero se atrevía buscar provisiones entre las ruinas... Los ojos de la niña miraron directamente al semi elfo. - Hazlo rápido.

La niña se agachó y acarició el cabello del niño pequeño que se aferraba a sus pantalones. - Ves con él. Señalando a Zzarat. - El puede ayudar. La voz de la niña intentaba mantenerse fuerte, pero se le quebraba a cada instante. Intentaba mantener controladas las lágrimas, porque sabía lo que pasaría a continuación.

Cuando el niño se separó de ella, la niña se apresuró a salir por uno de los túneles con las manos en el rostro.