Partida Rol por web

Ambos se quedan mirando como la tiefling busca señales de lo que ha pasado y dónde pudo haber ido la última carreta, sin encontrar nada, elevando los hombros como diciendo "se hizo lo que se pudo"
Lo que los sorprende, ya que está de pie sobre el rastro más que evidente de la última carreta; la huella de la carreta siendo arrastrada por sobre el lodo, seguida de varias huellas pequeñas del tamaño de las patas de raqik lo que indentifican como huellas de gobo, las cuales se pierden entre la  maleza, por un lugar donde apenas cabe entre los árboles.

[color=#ff0000]Samaara[/color] los mira observándola y responde -¿Qué?
 

Cuando llegan los caballos a ti, te enteras de que están demasiado nerviosos, además puedes ver algunas lesiones en sus cuerpos: una especie de arañazos y uno trae una herida limpia y nítida, como el de una pequeña hoja con filo, en las patas también trae marcas de dientes, una mordida con muchisimos dientes.

Si, Kandu también tiene su post según el resultado de sus tiradas. ;)
Por cierto:

[color=#ff0000]DUDAS OFF-TOPIC[/color]

Después de revisar la carreta comienzo a revisar las huellas y rastros para descubrir o intentar entender que ha sucedido aquí, empiezo a encontrar unas sutiles pistas, que como una bella danza me llevan poco a poco hacia una dirección concreta.

Al estar tan ensimismado en mi tarea, no me doy cuenta que nuestro peludo amigo está haciendo lo mismo y hemos llegado a la misma conclusión... por aquí ha pasado la carreta desaparecida.

Seguimos el rastro hasta que de pronto nuestra tarea se ve interrumpida, por encontrarnos sobre él a la Tiefling.

Encantadora criatura esta Samaraa, después de esta misión me gustaría compartir un vaso de vino especiado, pero ahora hay trabajo, -querida y hermosa señorita, solo quiero señalar que está encima del rastro del carro perdido, empujado por los gobos y que si lo siguiéramos se adentra por la maleza, entre esos arboles.
Que señores lo seguimos o piensas Viggo que con esto -señalando los cofres y enseres encontrados dentro de los carros- es suficiente para concluir con la misión?

En realidad te das cuenta que son recientes enseguida, todavía están sangrando

Los caballos volvieron a ella que los atrajo hacia sí con tranquilidad, la agitación de estos era notable y mientras los acariciaba para tranquilizarlos lo fue examinando. Las heridas que mostraban eran recientes y los relinchos se habían oído en las cercanías. Se puso delante de ellos protectora tras tranquilizarlos y puso la lanza en ristre a la defensiva divisando el camino por el que habían venido y los atacantes los habían seguido.

- Viggo, llama a los demás. Las heridas de los caballos son reciente y puede que fueran propiciadas en el momento que oímos los relinchos no lejos de aquí. dijo seria mientras divisaba la maleza por la ruta en la que los caballos se habían acercado a ellos. Mediante un silbido corto Moonfall se aproximo a su lado en actitud defensiva al entender la posición en la que se encontraba Kandu y usó su olfato para percibir posibles peligros.

ick, ick... Ick! - Con tres agudos chillidos, Raqick pone sobreaviso a su compañero metálico, que comienza a trepar desde donde está, por un árbol cercano hacia arriba, mecánicamente, hacia las frondosas copas de los árboles cuyas ramas entrelazadas no dejan pasar la luz del sol…

- Si las heridas de los caballos son recientes, entonces quien las haya provocado o ya sabe de nuestra presencia aquí… o está camino de descubrirla... - 

Diciendo esto el hombre rata se apresura a subirse sobre la tercera carreta, buscando cobertura entre los cofres de mercancía que quedaban en el carruaje. Deja su lanza en el suelo, abre la tapa de uno de ellos y salta al interior de un baúl cerrando la tapa tras de si sobre su cabeza…

¡Y es que ser enano tenía que tener alguna ventaja!

Amigos, yo he buscado refugio, os recomendaría que hicierais lo mismo… - se oye su aguda vocecilla roedora desde el interior del baúl. De Raqick solo asoma, por una pequeña rendija entreabierta, la punta de su pequeña ballesta apuntando en la dirección por la que volvieron los caballos heridos -...y os preparaseis para una lluvia de flechas...

"Cuadros y pinturas" pensaria confundido mientras observaba el cargamento de la carreta que me toco revisar. Sin embargo no era nuestro trabajo cuestionar por el cargamento, simplemente teniamos que regresarlos con el contratista. 

-Claro Viggo, con gusto. responderia ante el comentario por parte del lider del grupo. Con la mejor actitud y mi fuerza levanta carretas apoyaria en lo que pudiera con tal de recibir la paga lo antes posible. Mientras lo hacia, el hombre rata y la chica veterinaria recomendaban ponerse en guardia ante posibles ataques por parte de algun enemigo o alimana que estuviera esperando nuestra llegada. 

No debiamos bajar la guardia, finalmente por esto nos habian contratado. Tras apoyar a Viggo, me colocaria en posicion defensiva, mientras aparecia una lanza de Jabali en mi manos, haciendo caso a las palabras de mis companeros.

-Uff ufff, Vaya, amigo, creo que necesitaremos que le pongas un poco más de empeño al asunto - Yo, junto con el fortachón habíamos intentado levantar la carreta pero no se movió ni un centímetro, quizá estaba atorada de alguna forma.

-Estén atentos a lo que pudiera pasar en lo que nosotros hacemos el trabajo chicos!- Se los dije con un ligero sarcasmo, pero temía que no se entendiera, quizá en parte porque estaba temeroso, a diferencia de la mayoría, casi no podía ver nada, si no fuera por la rata mecánica, que ahora se alejaba no habría casi luz en el lugar, exceptuando la flora luminiscente.

o piensas Viggo que con esto  es suficiente para concluir con la misión?

- Con lo que tenemos será suficiente, pero se han llevado lo más importante - digo dudando -Nos harían un gran favor si evitamos que esos canallas nos vuelvan a atacar con armas de calidad... depende de ustedes, yo me encargo de que [Color=#ff0000]Gunner[/color] les bonifique si quieren hacerlo - demonios, esos [Color=#8B4513]Gobos[/color] ya eran un problema de por si, no me quiero imaginar lo que podrán hacer con nuestras armas

En eso la Druida menciona lo de los caballos, y su salvaje amigo empieza a olfatear algo, enseñando los dientes, al parecer [Color=#ff0000]Kandu[/color] también se entera de que hay algo, tras el camino frondoso en que se pierden los rastros de las carretas... la situación se tensa, todos están mirando a ese lugar y un silencio se hace en el bosque.

Nos quedamos quietos unos momentos pero no pasa nada.

No puedo creer que no había visto algo tan evidente! "Probablemente estaba más distraída de lo que pensé" No sabía si sentirme ofendida o apenada por lo que acababa de decir el clérigo, por un lado sus palabras fueron muy dulces, pero quizá condescendientes.

-Es verdad... - al mirar hacia el lugar y prestar atención escuché algunos ruidos extraños; yo era la que se encontraba más cerca de aquel lugar, caminé rápidamente hacia la caravana y se los comenté - No pude distinguir que era, pero debe tratarse de un animal enorme - susurrando. Miré a los demás como intentando adivinar el curso de acción a tomar.

Pasados unos momentos, lo único que escuchan es el ligero sonido de los insectos pululando por el lugar, y una ligera corriente de aire moviendo las ramas de las copas de los àrboles.

Te encuentras extráñamente cómodo dentro del cofre, al mirar las herramientas te das cuenta que hay gran variedad, para su uso en telas, martillos, cinceles, también reconoces algunas llaves, tornillos y tuercas, engranajes y otros artilugios parecidos, de los cuales desconoces su uso, y algunos para escribir y pintar, y hacer mezclas, la mayoría son de madera u algún metal.

Detectas un aroma extraño como oleoso, mezclado con sangre de caballo y algo ligeramente a humo de leña. Tu compañero también parece olfatearlo y adopta posición de batalla.

Después de las palabras de Raqick y con la estraña sensación de que alguien nos observa, no voy a pensar que estamos siendo paranoicos y buscando una zona adecuada, me pongo ha cubierto.

Cojo con fuerza mi espada y me coloco el escudo cubriendo el pecho y el abdomen e intento colocar las piernas para que no ofrezcan un blanco facil.

Pasan los minutos y todos vemos que el enemigo no aparece, esto significa que no esta o espera que estemos lo más vulnerables posible, para atacarnos.

Me acerco a Viggo y a el resto de los compañeros, ya que teniamos que iniciar la marcha y no podiamos esperar más, no se ellos pero yo no quería que nos cayera la noche estando aquí.

chicos tenemos que irnos y salir de nuestra zona de cobertura. Debemos arriesgarnos por que no sabemos que o quien está ahí o si nos va a atacar.

así que Viggo y dos más,suban para dirigir los tres carros y el resto atamos los caballos a las estructuras y los escoltamos a pie, hasta que la situación no parezca peligrosa y entonces montenos

Se mantuvo en guardia, tanto ella como su lobo sabían que algo les acechaba. Los aromas que notaban le gritaban a los oídos que se habían metido de lleno en una trampa. No podía quitarse los tres aromas que había notado y como su compañero se mantenía aún alerta aunque no ocurriera nada. Sin duda debían de estar vigilandoles.

- Preparad los carros rápido mientras nosotros vigilamos. Pueden estar buscando refuerzos. les urgió mientras miraba a su compañero. - ¿De donde vienen esos aromas? le preguntó no esperando respuesta. El grupo necesitaba darse prisa y salir de aquella parte del bosque lo antes posible.

En teoría nadie debería saber que hay a menos que hagan un face check