Partida Rol por web

El monje mira a Makoto y asiente :

- Bien, lo primero es darte cuenta de tu propia debilidad...pero en algo te confundes no eres un samurai, ese sentimiento es algo que ha llevado a la muerte a demasiados buenos samurais.

El monje parecia tener una mezcla de sentimientos entre decepcion y afirmacion. Pone una mano sobre Makoto y dice:

- Ponte de pie, debes entender que no debes sacrificarte....la Kitsune es importante para ti pero no debe ser lo unico...

Quita la mano del hombro de Makoto y da un paso atras mientras dice:

- Puedo ayudarte, pero debes venir solo conmigo, debes conocerte a ti mismo, has elegido el pasado y es algo importante pero no puedes vivir en el pasado, ven conmigo

El hombre se gira y comienza a caminar hacia donde habia desaparecido las dos hermanas, el pasillo que servia de salida a la sala

Al ver su sonrisa, no se qué pensar. Casi espero alguna represalia por su parte, especialmente cuando se me acerca, pero lo que dice finalmente me descoloca del todo.

¿P-prueba?

Me lanza una nueva pregunta, unas cuantas de hecho, y sólo puedo pensar en esa palabra, prueba, sin comprender las implicaciones que tiene. ¿Quién pone esta prueba? ¿Con qué fin? ¿Quién decide qué es correcto o incorrecto?

¿Quién decide hacerme tanto daño de esta manera?

Ni siquiera he tenido tiempo de sopesar todas las cosas que ha dicho antes, sólo me dejan un poso de amargura, un profundo malestar, y ya me veo arrastrado a pensar en una nueva respuesta. Entiendo que esto también es una prueba, pero sigue siendo doloroso enfrentarse a ella.

La protegeré de lo que sea. -Digo con decisión, aunque esta va desvaneciéndose poco a poco ante la perspectiva de tener que protegerla ¿de mí? ¿Acaso insinúa que puedo perder el control y hacerle daño?- Como buenamente pueda. No soy todopoderoso, no puedo blindarme completamente, sacar garras a voluntad, ni cosas de esas. -Con "cosas de esas" imagino una gran cola con la que barrer a mis enemigos en el campo de batalla, o una flamígera llamarada surgiendo de mi boca, aunque eso también me genera sentimientos contrapuestos. Para llegar a eso ¿tengo que convertirme en... esto que tengo delante?- Si tuviera grandes poderes, puede que me hubiera enfrentado a esos soldados directamente. No los tengo. Tan sólo pensaba en evitar que se pusieran a pegar tiros, ganar tiempo, generar una oportunidad. Manuel nos dijo que las cuevas sólo tenían una salida, así que si nos dejábamos capturar tendríamos que ir hacia él, y él sí controla sus poderes y podía pedir ayuda. Cautela y sangre fría, es todo lo que podía hacer, creo...

El Ben adulto mira a Ben y niega con la cabeza mientras dice:

- No esta mal pero eso no es exactamente lo que me referia, el poder...no todo es el poder, esta equivocado si piensas asi...el poder por poder es lo que tiene esa Kitsune

Cruza los brazos y dice:

- Ella es la mas poderosa pero tiene demasiado poder y es un peligro para todos y para ella, eso es lo que quieres? poder, un poder tan grande que sea capaz de acabar con esos soldados?

Mira fijamente a Ben, en su mirada podia verse que estaba hablando muy serio y con seguridad

No conseguía detener aquello, y la excitación era cada vez mayor, no creía poder resistir mucho más; pero entonces el chasquido de la mujer del reflejo hizo que aquello se detuviera. Se acercó a mí recriminándome mi patetismo y falta de control, para después darse la vuelta decepcionada y comenzar a alejarse.

-¡E-espera! ¡Déjame intentarlo otra vez, por favor! Quiero hacerlo, quiero conseguirlo… - dije aún con las mejillas encendidas. - ¡Quiero poder controlar esto!

Y demostrar que nadie hará que me quede atrás…

Levanto la mirada, enrojecida e irritada, para contemplar de nuevo el rostro de este hombre, con una nueva perspectiva. De repente no parece tan hiriente, tan dañino, aunque lo que dice no tiene demasiado sentido. Me siento descolocado, desconcertado, sin comprender nada.

Pero... Antes dijo... Parecía tan empeñado, tan preocupado por ese tema. ¿Ahora no importa el poder? ¿Y cuando me amenazó con él, o cuando se burlaba de mi falta de ello? ¿Y cuando me acusaba de retrasarme? ¡Claro que con poder se pueden lograr muchas mas cosas! Pero claro...

N-no, claro que no... -Digo dudando- Quisiera tener más poder, ser útil, poder proteger a los míos... Pero no tanto que no pueda controlarlo. No quiero ser un peligro para nadie... -De repente una idea cruza mi mente como una estrella fugaz, el recuerdo de unas palabras casi pasadas por alto- Espera ¿a eso te referías con proteger a Liz de mí mismo? ¡¿Hablas de que puedo descontrolarme como Rina?!

Mi otro “yo” no parecía dispuesta a hacer concesiones, pero aun así me sentía empujada a insistir.

-¡Porque no quiero que algo así vuelva a pasar! – dije gritando y apretando mis puños. – Si puedo hacer algo por impedirlo… ¡Quiero poder hacerlo, déjame hacerlo! Enséñame eso que ibas a mostrarme y que me ayudará a ello. – dije frunciendo el ceño, visiblemente molesta, más como una exigencia que como una petición.

El Ben adulto mira y dice:

- El poder que quieres es para proteger a los demas pero el poder es peligroso no estas preparado para podeer un gran poder y puedes lamentarlo y haras daño a los demas si tienes demaisado poder....

Suspira profundamente y dice:

- No ansies poder, debes ir poco a poco, debes comprenderte antes de ansiar poder ya que no sabes ni siquiera cual es tu verdadera naturaleza, ni tu ni Liz, y eso es algo que os pesara....

Ahora parecia que recordaba algo que no queria recordar:

- Teneis mas poder del que pensais pero se os exigira mucho mas de lo que pensais

La Liz adulta se va desvaneciendo mientras dice:

- Tendras que descubrirlo tu misma, cuando seas lo suficientemente fuerte y madura podras hacerlo, ahora solo te queda ir hacia delante o hacia atras.

La joven se desvanece y de pronto la luz reaparece, frente a Liz unicamente podia ver una sala como la primera, con dos caminos, sin embargo los simbolos eran diferentes no eran los mismos que en la sala donde Rina dijo que ponia pasado y futuro

Mi "yo" adulto desapareció diciéndome que tendría que descubrirlo por mí misma, cuando estuviera preparada para ello.

¿Hacia delante o hacia atrás? ¿Qué querrá decir?

Entonces la otra Liz desapareció y la luz volvió, encontrándome en una nueva sala con dos caminos. Me acerqué al inicio de estos, donde pude ver que cada camino contaba también con un símbolo. Me quedé observándolos durante algunos minutos, tratando de descifrar de qué podía tratarse, pero no tenía ni idea.

Esperé un rato, asustada, sin saber muy bien qué hacer. Comencé a rememorar las palabras de la Liz adulta, llamándome patética y estúpida, diciéndome que no era lo suficientemente fuerte.

- Tengo que ser fuerte... - dije para mí misma y tomé el camino de la derecha.

Makoto acogió las palabras del monje como un baño de agua caliente. De repente todo tomaba forma y veía nacer un objetivo por el que valía la pena sacrificarse y, por si fuera poco, estaba ella.

Volvió la cara hacia la Kitsune. Su mirada recorrió cada centímetro del rostro de la chica forzándose a memorizar cada detalle. Llegados a este punto Makoto no tenía del todo claro que pudiera volver a verla.

Tendió la mano a Kurt y se la apretó, entre agradecido y suplicante, le susurró:

- Cuida de ella.

Fueron sus últimas palabras antes de darse la vuelta y seguir los pasos del monje.

Lo que dice tiene sentido. Ahora se comporta de un modo muy distinto al agresivo tipo que se apareció ante mí al principio. De un modo mas cercano, más... ¿Paternal? No, quizás decir eso sea exagerado. Pero parece que trate de aconsejarme, de mostrarme un camino.

El problema es que genera más preguntas que respuestas.

Vale, ir poco a poco... Eso lo entiendo. Creo que estoy yendo bastante despacio, de hecho. -Suspiro- Pero ¿como conoceré esa naturaleza? Se suponía que esta excursión era para eso, pero aquí estoy, con más preguntas que antes... -Me miro la mano, cubierta aún de pequeñas escamas reptilianas- Todos hablan de que soy un dragón, o algo parecido, pero no tengo ni idea de lo que significa eso, de lo que soy realmente. Y tú sólo me hablas de un destino aciago, de que tendré poder pero... a un alto precio. -O eso es lo que estoy entendiendo, al menos. Como entiendo que nadie acude desde el futuro para entregar toda la información de lo que va a pasar, pero sí al menos alguna pista de cómo afrontarlo- Dime una cosa, ¿el destino está escrito? ¿Si sigo ese consejo, si comprendo... si comprendemos nuestras naturalezas y aprendemos a controlar correctamente nuestro poder... seguirá pesando sobre nosotros ese futuro funesto? ¿Soy un iluso si albergo esperanzas?

Liz camina por el sendero el cual es bastante largo, de hecho no sabe si ha estado 15 o 20 minutos caminando cuando llega a una sala algo mas grande. La sala tiene el techo totalmente helado, sin embargo la temperatura es agradable, un poco de agua se filtra desde el techo, pero en uno de los laterales una pequeña cascada de agua sale y cae en lo que parece un pequeño riachuelo. no se distingue bien pero comienza a escucharse una melodia relajante pero algo triste y misteriosa

La melodia proviene de una zona situada al fondo de la cueva, Liz puede ver como justo tras el arco de hielo la caverna se abre en una gran cupula y en el fondo hay una pequeña cabaña que es desde donde proviene la musica

Con una mirada seria el Ben adulto dice:

- Pronto lo comprenderas todo...no es solo el poder ni el futuro, todo puede cambiarse y modificarse, el futuro no es mas que una consecuencia del pasado porque el presente no es algo que podamos atrapar, una mujer muy sabia me lo dijo una vez

Sonrie levemente y añade:

- Mujer que veras pronto...aunque realmente podria decirse que no es una mujer,  no te preocupes lo comprenderas pronto

Adelanta su mano y dice:

- Parece que tienes cierto potencial, te dire una cosa, no debes pensar en lo que sentiste cuando tus garras aparecieron, ahi todos se confunden, piensalo, las garras son armas y las armas estan hechas para la lucha, debes pensar de forma mas practica...solo una persona del castillo puede ayudarte a desarrollar tu habilidad y lo hara, pero antes debes demostrarle que eres merecedor de ella

Mira fijamente a Ben y pone una mirada como si estuviera enfadado y de su mano surgen unas garras, entonces dice:

- Un arma nunca surgira con pensamientos positivo, las garras son para matar, en ti esta decididir si es matar para asesinar o para proteger, pero la ira y la agresividad son los sentimientos que debes buscar

Justo despues de eso comienza a caminar alejandose y poco a poco va desvaneciendose

Tanto hablar del pasado, del futuro, del presente... Parece un galimatías, una especie de trabalenguas que no termino de comprender. Pero dice que me lo explicará alguien, una mujer que no es mujer. Otro galimatías, pero al menos dice que todo de aclarará pronto.

Y que puedo tener esperanza.

Comienza a alejarse, a desvanecerse en la oscuridad, tras mostrarme ese poder que no logro controlar, darme las pautas para hacerlo. Miro alternativamente mi propia mano y el camino que ha tomado mi yo adulto.

Agresividad, ira. Extiendo los dedos, haciendo presión sobre ellos, tratando de concentrarme. ¿En qué pensar? Visualizo sin pensar a los matones de mi instituto, esos que abusan de los pardillos por ser más fuertes, las bromas de mal gusto que yo también he tenido que soportar. No es suficiente. Pienso en mi padre, al que ni conozco, abandonando a mi madre, a mí. Ni siquiera le pongo rostro. Pienso en esos soldados anónimos, empuñando sus armas, amenazando a Elizabeth y a los demás. Pienso en la pregunta de mi yo adulto, si podría salvarla. ¿Y si hubieran querido ejecutarnos ahí mismo, si mi plan no valiera para nada? ¿Y si todo tuviera que decidirse entre ellos y nosotros? Veo a esos tipos acercándose, disparando, y sin poder evitarlo veo a Luz recibiendo un disparo...

¡Joder! -Se me escapa un grito que resuena en la oscuridad de la cueva como un eco, cuando unas largas garras negras surgen de mis dedos, al tiempo que las escamas de mi brazo se extienden por toda la mano. Me quedo mirándome la mano con estupor, recordando lo que dijo antes de marchar. "Las garras son para matar, en ti esta decididir si es matar para asesinar o para proteger".

Proteger. Debo proteger. Debo...

Debo salir de aquí.

Comienzo a caminar en la oscuridad, buscando una salida.

No pude evitar quedarme mirando al japonés con una mueca en mi cara simbolizando mi reacción ante lo loco que parecía estar aquel tipo. La verdad no podía hacer mucho pues no sabía que decirle.

Miré a Rina esperando alguna explicación por su parte de lo que estaba pasando y luego, se me acercó para darme la mano para decirme que cuidase de ella.

En ese momento, me quedé boquiabierto del todo. 

-P...pero....-Pero el se alejó hacia no se donde.

Me volví a girar hacia Rina, desesperado por la situación. No entendía nada.

-¿Y ahora? ¿Piensas volver?Si esto iba a servir para aclararnos cosas...creo que ha hecho todo lo contrario, ¿sabes algo de lo que acaba de pasar?

-Vale, no eres un monstruo y nosotras tampoco -dijo sonriente- eres una niña normal y no eres culpable de nada, pero, ¿te puedo hacer una pregunta? -dijo mientras esbozaba una sonrisa- ¿qué es lo que le pasó a Rony? Puede que podamos demostrar que no eres culpable, pues tal y como hablas parece que te culpan de ello, ¿no? -no se acercó a la niña para no asustarla, pero aun así intentó sonsacarla algo de información.

A Nyara los niños no se le daban mal menos cuando éstos no tenían edad suficiente como para razonar y cuando eran unos malcriados insufribles.
Aquella niña no era ninguna de esas dos excepciones pero tenía miedo y era Kyara quien aportaba más seguridad en momentos difíciles... y tras conseguir ayudar a centrarse a una Kitsune (aunque ésta estuviese sumida en su propio dorama personal) eso debía de ser una tarea de niños.

Nunca mejor dicho.

Caminé bastante rato por un largo camino, tratando de no estar asustada, intentando prepararme para lo que viniera, hasta que finalmente di con una sala increíble. Al igual que le primera, era realmente preciosa, pero ya había comprobado que aquello no era necesariamente señal de que algo agradable se avecinara.

Me encontraba observando el arco de hielo, por el cual se filtraba algo de agua, y la cascada que terminaba en un riachuelo, cuando comencé a escuchar una sugerente melodía. Esta era bastante triste, pero también particular, invitando a lo desconocido. Parecía provenir del fondo de la cueva, así que me aproximé un poco más sin pensármelo dos veces, y comprobé que más allá del arco de hielo se abría una gran cúpula en la cual pude ver una cabaña.

La música viene de allí…

Continué avanzando, embelesada por la música y por saber qué era lo que se avecinaba, fuera malo o bueno. Quería saber. Mi futuro yo me había dejado inquieta e intrigada. Al menos ahora sabía que tenía que estar preparada, aunque no supiera para qué.

Llegué hasta la puerta de la cabaña de forma pausada, observando todo a mi alrededor, y cuando me encontré frente a ella toqué la puerta con decisión y la empujé suavemente, abriéndome paso al interior.

-¿H-hola? – dije adentrándome en la estancia.