Partida Rol por web

Por fin estabais en la biblioteca... o al menos en UNA biblioteca, y os habían dicho que por la zona había una en la que podríais encontrar información sobre vuestra enemiga.

Y además escuchar la voz de Liz, huída y desaparecida tras los acontecimientos en la carretera,  hace que os animéis, que pensáis que vais a poder estar todos juntos. Cassie se acerca...

Pero lo que sale de detrás de la estantería no es precisamente Liz, tiene su cuerpo, su forma... pero no tiene ni su aspecto ni su ánimo.

-Vaya, pues sí han venido aquí, como dijiste.

Y detrás de ella aparece algo todavía más raro, ¡es una copia auténtica de Izzie! pero si vuestra amiga va vestida desharrapada o como mucho informalmente, ésta tiene un vestidito totalmente normal, como si fuera un uniforme de la universidad.

Su expresión es indescrifrable. A diferencia de la de Izzie que suele ser más expresiva que nadie.

-Vienen a por los libros de demonología, o a por el arma.- Movió un pequeño maletín que tenía en las manos.- Afortunadamente nosotras llegamos ántes.-Mátalos y acabemos de una vez. 

-Hazlo, no podemos resistirnos.

Elizabeth, o quien fuera la que estaba delante de vosotras cerró los ojos y un enorme temblor empezó a tirar los libros de las estanterías, a la vez que la luz de aspecto sobrenatural que atravesaba las ventanas se condensaba en extraños tentáculos que se dirigieron hacia vosotros.

[Claus]

Izzie se quedó totalmente quieta, con la boca abierta, su expresión sería cómica si no fuera en una situación tan tensa.

-¡Joder! Os lo dije ¡Esa soy yo! ¡O es igual! ¡Devuelveme el rostro! ¡Zorra!

Claus estaba preparado para lo que pudiera ocurrir y se encontró moviéndose antes que ninguno de los demás.

[Claus]

¡Sí! ¡Por fin! ¡Acción!

"¿Estás loco? ¿Qué coño vas a hacer?"

"-Tú a dormir. Deja al nene"

Suelto el bidón de gasolina, que ahora mismo solo es un peso mas, y me olvido de la pistola ya que no creo que tenga tan buena puntería como para darle a los tentáculos en movimiento. ¿Qué coño?  Creo que puedo ser mas rápido que esos tentáculos.

Aferro el machete con fuerza y me tiro directo a por Lizz. No sé si es ella o no es ella, pero me la pela.

Sin cortarse un pelo, Lucas... o más bien Claus, se arrojó contra Liz ¡Oye, habían hablado de matarlos! ¡Y él había jurado defender a Annie! ¡Y a las otras de paso! Si, seguro...

Lo más triste es que se lanzó porque le apetecía un poco de acción.

Encima de Elizabeth estaban los extraños tentáculos luminosos así que Claus atacó por abajo, ¡no quería enredarse!, así que el golpe alcanzó a la pobre pelirroja en la cadera, y siguió un poco por el vientre... provocándo una herida horrible que casi hizo derrumbarse de dolor a la joven.

Sin embargo ésta apretó los dientes y aguantó como una campeona... 

-Joder.-dijo con los ojos llenos de lágrimas...-Y yo que no quería matarte...

Y en ese momento, todo se paralizó un instante, cuando la sangre de Elizabeth empezó a chorrear....

Pero algo rompió el encantamiento, vuestra Izzie se llevó la mano al cuello... donde acababa de aparecer un dardo.

-Joder, que es esta mierd...-fue lo último que dijo antes de derrumbarse como un fardo.

-Es un poco de veneno de la cazadora mezclado con algo que te dormirá. Tengo tu mente, Iz, lo se todo sobre mí... bueno, sobre tí, y acerca de Annie... pues viene en el mismo libro que la información que buscábais. -movió su maletín-"Diosas de Luz, Demonios de Oscuridad" es poético.- dijo su reflejo. -Bien hecho Case. ¡Eh! ¿Que haces ahora?.

Encima de otra estantería, pudísteis contemplar a la doble de Casey, ¡la que faltaba! Que con una mueca, soltaba el rifle de dardos y tomaba un M-16.

-Insististe en el dardo... ¡vale para tu doble! ¡Pero al mío le voy a hacer algunos agujeros!.

¡Hostiaputa! Esto ya era lo bastante raro viendo los otros dobles (porque sabía perfectamente que esa NO podía ser Liz) antes de verme a mí misma. Oye, estoy buenísima...¡pero estoy muy loca!

-¡Oye, tía! ¡Que sepas maquillarte mejor no te da derecho a hacerme un colador!-replico, más bien llevada por la sorpresa y el miedo de asesinarme a mí misma. ¿Qué coño le pasa al mundo?

La entrada en la biblioteca no es gran cosa, bueno, vale, el edificio es una pasada y hay miles de libros en todas partes, me sentiría más fascinada si no fuera porque me quedo aturdida ante la aparición de más clones terminator. Primero miro a la falsa Izzie, luego a Mí Izzie, no hay color. Luego miro a Liz, es... rara, me gusta más la nuestra, al menos mueve tentáculos de oscuridad no de luz, eso es definitivamente cutre.

-Vale, no volveré a dudar de tu palabra Luke, te debo una disculpa y una violación masiva- murmuro, cínicamente. Claus (sí, cuando veo que se lanza como Conan el bárbaro a por la falsa Liz, deduzco que ahora ya no es el dulce y sensible Lucas) se lanza a por la pelirroja con aspecto de más emo que la nuestra (si es que eso tiene cabida en esta realidad), intento hacerme a una idea de a quien hay que atacar primero, quien es la más peligrosa o algo.

Miro a Liz, ocupada desangrándose y moviendo tentáculos (creepy), luego miro a la falsa Izzie (se merece una paliza por ir con esas pintas, la verdad) y a su maleta (está claro que el libro está ahí y necesitamos ese jodido volumen) y por último levanto la cabeza para ver la falsa Casey con un kalashnikov* en las manos, apuntándonos. Desenrollo la cadena mágica, que le choricé a aquel demonio bobalicón y hortera, pero, y ahí viene mi momento de confusión, me cuesta decidir a quien apunto...

"Vale, tentáculos. Libro. O Kalashnikov. Mierda, esto es muy díficil de elegir!!" gruño mentalmente. "Vale, como decido siempre este tipo de cosas mega-esenciales? Ah si!"

-Pito, pito...- empiezo a canturrear y señalando con el dedo a las tres chicas, mientras Casey intercambia palabras ácidas con Izzie y su otro yo.

-Vale, a la mierda! Dos Caseys locas y emos son demasiadas para un sólo universo!- y haciendo girar el extremo más largo de mi cadena apunto hacia el M-16 que lleva en las manos la falsa Casey.

-Case, ayuda a Luke, digo a Claus con la pelirroja, Izzie a por... Tí!- les grito a todos mis amigos, no sé muy bien en base a qué, pero pienso acabar con la pastelito pseudo-intento de Cruella de Vil y luego iré a por la zorra que le ha robado la jeta y la identidad a mi mejor amiga! Esto de los terminators se va a acabar aquí y ahora!! Por mi madre que va a ser así!!

Annie da un par de vueltas a la cadena cimbreando con estilo su hermoso cuerpo y la arroja contra el fusil de "Casey" que se lo ha subido al hombro y esta apuntando a la cabeza a su gemela.

Y como si fuera el garfio de batman, la cadena se enrolla alrededor del M-16 para que Annie, con un giro de muñeca, lo arroje lejos de su poseedora.

-¡Maldita Puta!-gritó el clon maquillado de Case al perder su arma. -Voy a arrancarte los intestinos. -dijo señalando con su dedo índice a Annie... 

Y en ésto se dio cuenta que su dedo índice no estaba donde acostumbraba, porque el tirón violento de la cadena al arranchar el arma, y el tenerlo metido en el gatillo, se lo habían arrancado de cuajo, unas gotas de sangre salieron del diminuto muñón. Como un escupitajo.

Mirándolo como si no se lo creyera, salta de la estantería y desenfunda una katana que lleva a la espalda. Poniendose perdida de sangre. -Rectifico, te voy a meter ésto por donde no brilla el sol... y luego te voy a sacar los intestinos.

-Te odio más que a mi doble, y eso ya es mucho.

-Mierda... esto no tenía que salir así.-comentó Elizabeth medio llorando otra vez mientras dirigía sus tentáculos hacia Lucas/Claus...

La pobre chica solo podía usar una mano para dirigir su ataque, porque la otra estaba tratando de parar la sangría del tremendo machetazo de Claus.

[Claus]

Quería estar atenta a la que le iba a liar Annie a mi doppleganger, por puro morbo, pero me dice que ayude a Claus (juas, qué graciosa es a veces) con la Liz de mentira y recuerdo de repente que estamos en una pelea.
La tía ya está sangrando; no debería ser difícil pegarle un tiro con la pistola y acabar con esto...Claro está que se trata de mí; no he cogido una pistola muchas veces en mi vida como para acertar un tiro con los nervios a flor de piel.
-¡En serio, Annie! ¿Para qué me dices que ayude?-replico muy cabreada. De verdad, qué cosas me piden.