Partida Rol por web

Descripción: Los hemos visto por separado, luchando codo con codo derrotando a los polémicos campeones nada menos. Y ahora por petición popular, los veremos cara a cara. El Alegre Tiroles; la torre de UWA, tendrá que vérselas contra su compañero, El Pollo Loco; el chapolin de la liga.
Quien ganara esta vez: la hormiga o el elefante.

Tipo de Combate: 1 vs 1

Cinturón en juego: No

Expectación: Popularidad: 1 puntos para cada luchador + 1d4 para el vencedor.

El presentador anunció al Alegre Tirolés con música austríaca de fondo.

-Damas y caballeros, niños y niñas, amantes de la lucha, el sudor, el esfuerzo, el dolor y el valor... tengo el placer de presentarles a un luchador que viene del otro lado del Atlántico... de la remota Austria donde la civilización apenas ha calado y donde los niños beben cerveza desde que son bebes. Un lugar donde los arboles dan quesos de bola y las vacas se sacan a pasear como animales de compañía. Donde las montañas son tan grandes que tapan el sol y, de una de esas montañas, no sabemos si como parte de ella, se desprendió el luchador que presento a continuación. Con una voz capaz de mellar cristales y unos músculos duros como la roca, aquí lo tienen, al sonriente, al dicharachero, al divertido ¡Alegre Tirolés!....

El Alegre Tirolés salió con paso firme custodiado por sus dos hermosas primas que y el hombre con el carrito de cerveza. Las esculturales rubias entregaban jarras de cerveza entre el público mientras avanzabana. El luchador bebió unos largos tragos y comenzó su canción al ritmo de la polka que sonaba por los altavoces.

Ioroliiii oroliliolololooooo iorolooo ioroloo iiiiiiuuu...

Subió al ring como siempre de forma agil y rápida lo que dado su tamaño era un espectáculo digno de ver. Una vez arriba alzó los brazos y saludó a un público que cada vez lo quería más. La gente aplaudió y rió, incluso un grupo, que parecía cada vez más numeroso, era capaz de seguir la alegre canción, cantando con su ídolo.

Se preparó para recibir a su rival, había establecido una breve relación con el Pollo Loco durante un maltrecho combate dos contra tres que habían ganado casi al límite. En cierto modo le dolía tener que enfrentarse a Pollo tan pronto pero por otro lado deseaba hacerlo, era un rival digno y hábil no debía bajar la guardia.

- Co-co-coroco-cococó! Co-co-coroco-cococó! Co-co-coroco-cococó! ARRIBA EL GALLINEROOOOO!!!

La música atrona... pero nadie sale al encuentro de la música. Después de tanto esperar parecería que El Pollo Loco tenga miedo escénico, pero eso es imposible...

De repente una caja es arrojada desde la entrada, una que pone "Pollo Frito" y el publico no sabe que pensar, que esta pasando. Y es entonces cuando la música del luchador cesa repentinamente y comienza a sonar la música de otro luchador, muy diferente a este:

Es Beast quien hace acto de presencia de un salto, cayendo muy cerca de la caja de pollo frito que ahora parece moverse sola.

-¡EI GORDITO! -Saco un micro y pareció dirigirse a El Tiroles. -He preparado un buen plato de pollo para ti. -Pateo la caja y salio un grito de su interior. -Estoy aquí para dejar las cosas clarinete. -Dicho lo cual empezó a caminar hacia el ring, dejando la caja sola en la entrada del black, moviéndose esporádicamente.

-Veras, la pasada ronda ganasteis solamente por culpa de un compañero que no sabe cual es su lugar. Tuvisteis suerte y la suerte es solo para gente que no confía en su propia fuerza. -Hablaba mientras entraba al ring.

-Así que me he ocupado personalmente de que entendáis que la suerte no sirve para nada. Empezando por su enano compañero. -Señalo con el micro la caja. -Y ahora voy a demostrártelo a ti. Demostrar que nosotros eramos los que merecíamos ganar aquella noche y no vosotros, ¡Atajo de suertudos! -Al parecer a Beast se le daba mejor pegar que hablar.

Tiro el micro a un lado e a pesar del asombro por parte de los árbitros, estos decidieron no retrasar mas el combate y darle comienzo.

El cambio de contrincante sorprendió al tirolés que esperaba enfrentarse al que había sido su compañero en un combate por parejas. Beast era un luchador diferente, mas grande y más agresivo. 

Pero el que pensara que este cambio amedrentaría al austríaco estaba equivocado. Sorprendido si, pero no asustado.

El saludo irrespetuoso de Beast no le había gustado.

-Buenas noches señor Beast. No lo esperaba por aquí. Y si conoce este bello deporte sabrá que la suerte no influye en absoluto. Fuerza, reflejos y técnica nada más. Pero no se preocupe, hoy dejaremos el tema zanjado.

Y diciendo esto se abalanzó contra el azulado contrincante embistiéndolo de un empujón, sin dejar de correr se subió a una esquina del ring, con sus pies en las primeras cuerdas se impulsó sobre Beast.

Pecando de cierta soberbia el Tirolés intentó una técnica poco habitual en él, quería comenzar el combate dando un buen espectáculo a un público que prácticamente lo acababa de conocer.

Como era de esperar la maniobra no resulto bien y Beast giró su cuerpo para apartarse de la linea de tiro del austríaco que cayó a plomo sobre la lona.

Rápidamente se dispuso a incorporarse sacudiendo la cabeza y pensando en lo inútil de su estrategia.

La bestia no dejo que se levantara a tiempo y encajo un dropkick en el hombro derecho de su rival, arrojándolo de nuevo al suelo, pero esta vez boca arriba y al poco estaba pisando cada una de las extremidades del Tiroles, mientras gruñía, ahogando así los gritos del alemán. Hasta que dejo caerse de rodillas contra su testa, haciendo que su cabeza rebotara en la lona, produciendo un rítmico sonido.

El hombre de pelo azul no le daba un solo respiro, pero si le ayudaría a subir, mientras doblegaba su ímpetu con golpes de antebrazo en su hombro dolorido, hasta que lo tuvo de frente, de pie, magullado y atontado y le propino un sonoro cabezazo antes de practicar su finisher Gorilla Press Slam.

Alzándolo con esfuerzo sobre su cabeza, Beast increíblemente acababa de levantar mas de 100 Kg sobre su cabeza y lo lanzo contra el ring, haciendo un estruendo que mas de un espectador temió que terminara rompiendo el suelo.

-¡VAMOS! ¡VAMOS! -Le gritaba al oído. -¡ESTO NO HA HECHO MAS QUE EMPEZAR GRANDULLON! -No necesitaba gritar para hablarle, porque estaba suficientemente cerca, pero todo valía para atacar a su rival.

El Alegre Tirolés se incorporó sacudiendo su cabeza y dejando caer gotas de sudor sobre el ring. Se había sentido mareado al ser levantado de la manera que lo hizo Beast, rara vez un luchador era capaz de tal proeza con lo que comenzó a ver a su rival de otra manera.

-Vaya Señor Beast, es usted un hombre muy fuerte.

Entonces la montaña de Áustria se avalanzó sobre Beast dándole un empujón que lo dejó visiblemente aturdido y, alzando la pierna en un alarde de elasticidad fuera de lo normal para un hombre de su complexión, el tirolés lanzó una patada con la planta de su pie destinada a impactar en el azulado y peludo pecho de the Beast. Pero Beast era rápido y con un fugaz movimiento de cadera se libró del golpe.

Al no encontrar apoyo el tiroles bajó la pierna hasta el suelo pero este movimiento le hizo perder temporalmente el equilibrio aunque no llegó a caer. Con un visible gesto de frustración se volvió a dirigir a Beast:

-Y también rápido...

Ese alago le saco una sonrisa, una sonrisa que la transformo en sonrisa cuando volvió a por mas.

La bestia se abalanzo contra su rival una vez mas, aprovechando que parecía mareado, para saltar sobre su pecho y derribarlo por completo.

Una vez mas el ring tembló de mala manera, ante la masa de ambos luchadores y RÁPIDO, tal y como había mencionar su rival, busco las rechonchas piernas del alemán para rodearlas con las suyas y formar la figura nºcuatro.

Produciendo un dolor en las patas, que pocas veces habría sufrido aquel europeo.

-¡FUERTE Y RAPIDO! -Grito euforico, mientras hacia mas presión con sus piernas.

Beast continuaba castigando las piernas del austríaco que no podía disimular su dolor. En un momento en el que Beast aflojó, quizá para descansar un poco de su presa el Tirolés giró su cuerpo y logró liberar sus doloridas piernas.

Recuperándo el resuello se puso en pie, la rodilla derecha le dolía y le obligaba a cojear, la cosa no pintaba bien para el europeo.

No quiso esperar a que Beast se volviera a poner en guardia y contraatacó mientras la bestia azul se erguía.

Intentó un agarre por la espalda, quería levantar a Beast para despues dejarse caer hacia atrás, era una técnica complicada y requería el empleo de toda su energía. Cuando comenzó a levantarlo notó un pequeño chasquido en su magullada rodilla derecha con el inmediato latigazo de dolor, esto lo hizo trastabillar y perder el equilibrio. 

Cayó hacia un lado soltando a su rival que cayó al ring aunque pronto logró ponerse en pie sin daño aparente.

Qué le estaba pasando, la mente del tirolés estaba tan aturdida como su cuerpo, el combate se le estaba escapando. Mientras volvía a incorporarse podía notar que Beast estaba preparando su siguiente golpe.

Beast estaba sonriente, era una expresión extraña, pero sin duda sonreía. El tiroles estaba siendo zarandeado tal y como la bestia deseaba y eso le provocaba jubilo. Y por eso razón se acerco a él, despacio y menospreciando a su rival, algo que por una vez no pareció pasarle factura, pues paro el brazo de su rival, cuando intento golpearlo en el bajo vientre, Beast agarro ese brazo y con fuerza lo paso por encima de su cabeza, para ponerlo a su espalda y tener a su merced a luchador alemán, para saltar contra el rodearlo con sus piernas y provocar su caida, ambos cayeron al suelo, Beast de espalda y El Alegre Tiroles de cara.

Beast se atrevió a someterle desde el brazo, con un Kimura Lock, donde si no tenia cuidado podria llegar a lesionar el brazo del europeo.

-¿Cuanto piensa seguir aguantando? -Tanteaba a su victima con cierto menosprecio.

Había atacado sus piernas dañando su rodilla y ahora iba a por su tren superior. Por suerte los largos días de entrenamiento levantando rocas y troncos en las montañas de su Austria natal habían convertido sus brazos en dos martillos neumáticos que aguantaron la llave de su rival, no sin sufrimiento.

El Tirolés nunca había sufrido tanto en un combate además, no había sido capaz de contraatacar todavía y sus energías empezaban a agotarse.

Se levantó tambaleante y corrió hacia las cuerdas para coger impulso. Su mente, embotada por el dolor, no sabía como contraatacar, había intentado varias cosas y no le habían salido, Beast era bueno.

Cuando rebotó en las cuerdas se abalanzó sobre el azulado contrincante, quiso dar un salto para caer sobre él con todo su peso pero un simple movimiento de Beast apartándose de su trayectoria lo obligó a seguir, no era capaz de frenarse y saltó sobre las cuerdas con la intención de que, con el rebote poder alcanzar a su rival. 

Su táctica no funcionó, la rodilla lesionada lo volvía torpe y su salto resultó fallido. Se coló entre las cuerdas y dió con sus huesos en el exterior del ring. Ya no sabía que le dolía más, si los repetidos golpes o su también vapuleado orgullo.

-¡¡¡¡MUHAHAHAHHAHA!!!! ¡Eres un autentico bufón! -Beast realmente estaba disfrutando con este combate, su rival no hacia mas que dejárselo en bandeja una y otra vez.

-¿Has pensado en cambiarte el nombre? Y... no se, tener un gorrito de cascabeles y una varita con un títere tuyo en la punta. Creo que serias mejor con eso que con esto. -Y evidentemente se burlaba de él a la mínima oportunidad. -Creo que le he hecho un favor y todo, al enano del Pollo en encerrarlo ahí. -Señalo a su espalda y con el pulgar, la caja de pollo frito que continuaba moviéndose de vez en cuando.

Fue poco después que bajo del ring, mientras el arbitro continuaba su cuenta y el Tiroles continuaba en el suelo.
-Vamos gordo, volvamos al cuadrilátero aun no he acabado contigo. -Lo levanto con esfuerzo y fuerza bruta al Alegre Tiroles, y lo arrastra por debajo de la ultima cuerda hasta meterlo dentro de ring y entrar detrás de él.

-¡LEVANTATE! Vamos a acabar con esto, de una vez. -Gesticulaba con el brazo para que el aleman volviera a levantarse.

Parecía que The Beast le brindaba una última oportunidad al Tirolés.

Volvió rápidamente al ring donde Beas no paraba de proferirle improperios, las falta de respeto de luchador  pretendían desconcentrar al Tirolés pero a él mas que desconcentrarle le enfadaban.

-Vaya, he de admitir que no tengo un buen día.

Hizo acopio de fuerzas y se avalanzó hacia de Beast, corrió unos metros para embestirlo el impacto resonó e hizo temblar al estadio, el publico, que vitoreaba a The Beast salvo algunos pequeños grupos a favor del austríaco, quedo en silencio. Despué de la chaquetilla que estaba recibiendo el Alegre Tirolés no se esperaban ya verlo golpeando.

El impacto hizo que Beast perdiera el equilibrio y los dos cayeron al suelo, rodeó su cintura con sus piernas y rodeó el cuello de Beast por debajo de su axila derecha cortando el paso de aire. Beast no lo tenía fácil, se retorció y el tirolés libero su cintura y giró su cuerpo obligando a Beas a girar, lo dejó tirado recuperando el aliento mientras se levantaba.

-Ve señor Beast, también se hacer cosas.

Beast se levanto tan rápido como pudo después de la sumisión sufrida.

-Ya veo, bueno pues sigamos jugando a las agarradas. -Comento mas molesto que jocoso, ofreciendo los brazos en alto para empezar un pulso. Acto que el Alegre Tiroles no quiso en un principio, pero al ver la insistencia de su rival y los gritos del publico para saber quien de los dos era mas fuerte, agarro las manos del azulado para comenzar un pulso, uno que duro mas de lo que ninguno le hubiera gustado. Donde finalmente flaqueo el menos veterano y mas machacado de los dos.

El Tiroles finalmente hinco una rodilla, mientras sus muñecas estaban siendo retorcidas por el luchador de pelo azul, sumisión que termino con un sonoro cabezazo, que acabo dejando semi-caído al alemán y la bestia dando un par de pasos hacia atrás, esperando la respuesta del luchador dolido.

El alegre Tirolés estaba al límite de sus fuerzas, a duras penas logró levantarse, su pelo estaba totalmente empapado en sudor que incluso goteaba en el suelo del ring. Aunque lo veía todo perdido no quería tirar la toalla.

Levantó la vista hacia su rival, estaba lo suficientemente cerca de él como para agarrarlo, hizo un movimiento hacia el pero las piernas le pesaban y volvió a caer sobre una de sus rodillas. La situación no podía ser mas penosa.

Volvió a incorporarse, sacudío su cabeza lanzando gotas de sudor por doquier pero no logró espabilarse del todo. Podía oir las risas de Beast quien ya se daba como ganador.

El combate hasta ahora...

-Bueno, este combate esta bien raro.

-Mas bien loco. Lo que comenzó siendo una rivalidad entre compañeros de lucha. Parece que ha acabado siendo una lucha por ver que luchador es mejor en que... Nah, sigo sin entenderlo.

-Pues al parecer, Beast quiere demostrar que la pareja no esta a la altura de el y los suyos. Aunque en este momento Riot esta... ¿Donde esta Riot?

-Creo que se fue de la marca.

-¿Imposible y T-Rey?

-Tiene un combate mas tarde, pero no creo que se lleven muy bien, recuerda su ultimo encuentro.

-Muy cierto.

-El caso es que Beast parece a ver dejado al Pollo Loco en una caja de nuggets y se encaro con El Tiroles en combate.

-Sorpresivamente el combate parece ser oficial y sigue adelante.

-Y para desgracia del gigante europeo la noche no se le esta dando nada bien.

-¿Crees que es porque esta preocupado por su amigo?

-Tal vez... o simplemente le tenga miedo a la bestia.

-Sea como fuera, al noche esta siendo mas toma para El Alegre Tiroles y menos daca para Beast.

-Sin duda esta dominando el combate, creo que no veía algo así, desde hacia tiempo.

-Y que lo digas...

-Beast parece disfrutar castigando cada extremidad de su rival y cada vez que el otro parece recuperarse, se equivoca.

-Creo que el Tiroles no puede concentrarse con esa caja moviéndose todo el tiempo.

-¿Crees que realmente el Pollo Loco esta dentro?

-Seguro que no tardaremos en comprobarlo.

[...]

-Ambos continúan jugando a las agarradas y tras el certero candado del Tiroles llego el abrazo de la bestia.

-Los dos parecen ser expertos en eso, pero me temo que hay un claro aventajado.

-Ventaja es lo que ahora mismo puede conseguir Beast, El Tiroles esta claramente cansado y en su limite.

-No se lo que le puedan estar pasando por la cabeza a ambos.

-Desgraciadamente yo tengo una ligera idea de lo que puede pensar ese heel.