Partida Rol por web

Ooji giró la cabeza al escuchar a Ku, observó la reacción de Erik y empezó a reirse a carcajada limpia, por toda respuesta. - ¡Jajajajajaja! ¡Vaya tío! ¡Jajajajaja! - algo le había parecido especialmente gracioso, y se llevó las manos al estómago, apoyándose en la borda de la lancha por no poder parar de reir.

Había armado un pequeño escandalo pero Eru, lo detiene tomándole del hombro y explicando que hacia ahí, Erik también hizo lo mismo con Etzuko, bajo la cabeza ante la recriminada de todos entre una risa que se formó por haber hablado de mas, tal vez estaba equivocado y era como todos decían, sintió que no debió abrir la boca de esa manera, todo podría ser una casualidad, una curiosa coincidencia. Lo que más le dolió del momento fue la mano de la chica apretando con demasiada fuerza su hombro para calmarlo, y el desprecio que había hecho Etzuko hacia él, recién la había conocido y ya estaba dando una mala imagen. Se queda en silencio sin saber que decir, Eru se acerca tendiéndole nuevamente el caramelo como si quisiera animarlo  y pidiendo disculpa, él asunto casi lo había olvidado y rápidamente lo recuerda, la ve entrecerrando los ojos y analizando el dulce que sostenía su mano, lo toma y le da la espalda, aunque su voz parecía ser sincera, le miro por sobre el hombro con una pequeña sonrisa, el caramelo había podido más.

-Gracias!......... Eru... - Habla y vuelve a mirar hacia el frente buscando a Etzuko para pedirle una disculpa, estaba preocupado por su reacción y se alejaba del lugar, además había visto las reacciones de Erik, pero no entendió  porque su insistencia, tendría muchos días para poder conocerla a ella y a todos, ella no iba a desaparecer y no la vería nunca más. 

-"¿O si?... y si era como la cenicienta? - Etzuko.-  le llamo a la vez que miraba alrededor por si veía un zapato sin suerte, ¿un fantasma? se preguntó después, nervioso por su pensamiento se acercó al trote justo cuando el chico trataba de llamar su atención, le toca el hombro para ver si su mano no le traspasaba, si ese era el caso saldría volando del barco, pero por suerte era de carne y huesos, suspira ante el descubrimiento.

-Disculpa… no fue mi intención ofenderte, ni tampoco a nadie de este barco, lo siento.-  se inclina ante ella olvidando que estaba al frente de todos.

Ya dando unos pasos hacia atrás  para alejarse de los chicos cuando el más grande intenta detenerla y preguntar por su nombre, Etzuko se gira hacia él, justo en el momento que el chico se ha dado un golpe horrible en la cara y se ha ido de espalda. Ademas, Ayama intenta tocar su hombro, Etzuko apenas siente sus dedos sobre ella, se mueve esquivándolo y lo mira otra vez de una manera oscura,  le había desagrado que intentara tocarla, pero no podía empezar con tan mal pie, la chica soltó un gran suspiro agachándose al lado del chico intentando ayudarlo a ponerse de pie.

- debes tener mas cuidado -le dice a Erik, con una linda sonrisa en los labios, y viendo su nariz, no estaba sangrando, pero si tenía rojo la frente - vaya golpe que te has dado - Ooji reía y la chica pequeña de cabello rosado como el de ella, y que dijo su hombre. Etzuko abrió mucho sus ojos, por fin había escuchado su nombre Eru... Eru.. el corazón de Etzuko se paralizó y sus ojos se llenaron de lágrimas, debiendo ocultar un poco la mirada.

- eh.. me llamo Etzuko Tachibana, y tú eres Erik, lindo nombre, se nota que no eres de aquí -  intenta recuperarse de la impresión que sintió al saber que Eru era la hermanita de su amado - y no me has ofendido, es sólo que no ando de muy buen humor - le sonrió también a Ayama - ¿faltará mucho para llegar?, no me siento muy bien, creo que me he mareado - se quedó sentada en el suelo, necesitaba algo de aire, sus padres la habían en ese viaje para que estuviera bien,pero todo le recordaba a su novio.

Enseguida se acerca una sombra negra con gafas hacia la chica, rapido pero elegante y se arrodilla justo al lado de Etzuko. Se trataba de Ootori, quien miraba fijamente a la chica con una sonrisa tranquilizadora y familiar, ofreciendole su mano. -Señorita, si lo necesita puedo acompañarla a una habitacion mas apartada donde descansar. No quedaran mas de 5 minutos de viaje, de echo a lo lejos ya se puede ver la isla. Veis todos como poco a poco esa isla que veis a lo lejos se va haciendo mas y mas grande hasta parar en el puerto, donde colocan una plataforma para bajar mientras que el resto de personal baja vuestras cosas y se las llevan. Cuando vais bajando veis todo un camino de madera que os lleva hasta la playa. Ootori y Suo bajan animadamente charlando con vosotros y entre ellos.

             -Ya hemos llegado a la isla Tinue, propiedad de la familia Ootori.

Dice alegremente el chico rubio haciendo una de sus pose delante de todos vosotros para daros la bienvenida. Ahora todos recordabais el nombre Ootori y esa isla. Se trataba de la familia que llevaba no solo varias compañias famosisimas de hoteles en todo el mundo,ademas tambien se encargaba de la sanidad japonesa. Esa isla habia salido algunas veces en television como una de las islas privadas paradisiacas del mundo, en la que la familia habia dispuesto de todo tipo de detalles y preparado tecnologicamente para cualquier cosacon el unico objetivo del uso y disfrute de la familia, a la vez de una total proteccion. Sip, exactamente es lo que pensais. Aquel que esta sirviendoos como un mayordomo es uno de los hijos de un pez gordo mundial...¿quien lo diria? Uniendo cabos recordais entonces a ese chico rubio, su familia es propietaria de casi todos los centros educativos privados, tambien la familia Suou ha montado varios eventos muy conocidos en apoyo a la cultura, el arte, la musica...donde Tamaki aparecio tocando maravillosas piecas musicales con el piano. El chico rubio entonces sigue caminando pidiendo que os siga poniendo pose como si el fuese el elogiado en ese momento hablando amablemente con todos de una forma muy abierta y confiada. Mientras que el chico de lentes habla un momento por telefono y apunta varias cosas de su inseparable libreta. No lograis entender nada aun, simplemente por lo que parece, dos jovenes prometedores con un gran sobrenombre familiar estan dispuestos para vosotros durante 15 dias.

Al escuchar que Etzuko no se sentía bien, miro hacia todas direcciones y de pronto corrió hacia el interior de la lancha, se cruzo con Kazuki al que saludo fugazmente siguiendo su camino, abrió algunas puertas al azar mirando en su interior hasta dar con una habitación que tenia un pequeño bar y un freezer, sabia que encontraría algo así, saco dos aguas minerales de sabor y volvió deprisa.-

-De verdad lo lamento.- No sabía realmente si era por el viaje que se había sentido mal, pero, sentía un poco de culpa, la forma en como lo había evitado cuando quiso llamar su atención dejo un sabor amargo en su boca, sin decir mas abre la tapa un  poco y se la entrega de esa forma para que no tuviera que esforzarse ni en abrirla, luego le tiende una a Erick y se aparta para dar espacio a los demás.

De verdad que no había hablado por  hablar, todo tenía una buena razón de ser, él había ganado el premio en su instituto, pero él director lo boicoteo y lo anulo, finalmente un sujeto desconocido saco el boleto ganador, así que tenia como para  pensar eso, claro que era desconocido para todos esa historia. Puede que lo sucedido sea como siempre su mala suerte y  tengan razón. Pero el asunto por mas que dejarle tranquilo lo llenaba de misterio.

...

-¡Verdad!.- recordó que el chico de gafas había comentado que estaban llegando a la isla,  corre hacia un costado para ver si era cierto lo que estaba diciendo, a lo lejos pudo observar la isla que poco a poco iba aumentando de tamaño a medida que se acercaban, se quedó  inmóvil mirando ese fantástico paisaje, lleno de vegetación, playas, arrecifes y quien sabe que mas. Antes de contar, uno, dos, tres la lancha estaba deteniendo sus motores y atracando en el puerto.

Miro a los chicos que estaban haciendo de guía, algo le resultaba familiar pero no sabía que era. Ayama claramente no era un chico que entendiera de apellidos, compañías o clases sociales, lo único que veía era a dos empleados que estaban trabajando por el premio.  Se acerca a trote hacia la plataforma para descender del barco pero para en seco al ver el largo camino de madera que los separaba de la playa.

-¿Ti...tiburones?.- Pregunta asustado, no estaba de ánimo para perder una pierna, tal vez el ultimo día, pero no  el primero.

Eru apenas era consciente de la reacción que tuvo Etzuko, lo asimilaba todo a que se debía al viaje en barco, quizás se habría mareado por el constante movimiento. 

Sin pensarlo un momento sale corriendo y da un salto hacia la pasarela con su maleta ya en la mano mirándolo todo con una gran sonrisa mientras saca una foto plastificada de su bolsillo -¡Mira hermanito! ¡Hemos llegado! ¿no es fantástico?- lo hace de manera discreta (o eso cree ella). Se guarda la foto de nuevo para que no se pierda.

-¿Tiburones?,¿dónde? ¡Quiero hacerme amiga suya!

-No es recomendable.

Una voz grave suena algo lejos de donde os encontráis. Al fijaros bien alcanzáis a ver a un joven atractivo aunque algo serio, o más bien inexpresivo. 

Sin decir nada coge a Ayama en brazos.

?? : ... ¡¡NO VALE!! ¡¡ES A MI A QUIEN LLEVARÍAS EN BRAZOS, MORI-SENPAI!!

Detrás de él aparece un niño súper adorable con gesto de fastidio mientras abraza un peluche de un conejito. 

-Lo siento Honey-senpai...- (definitivamente parecía no hablar demasiado).

(HONEY)  -¡No importa! Hay que cuidar de los invitados, ¿verdad?- Su gesto de fastidio se convierte en una infantil y encantadora sonrisa. Con graciosos pasos se acerca hasta donde está Etzuko tirando de su camisa con suavidad para llamar su atención mientras la mira con inocencia y le tiende una mano -¿quieres venir conmigo? Agradecería la presencia de una joven dama tan encantadora y bella como usted- estira el peluche hasta Rea para que coja una de sus patas -y si son dos, mejor que una.

Mientras tanto, el capitán del barco, Ootori y unos gemelos pelirrojos que aparecen no-se-sabe-muy-bien-de-dónde os ayudan a bajar las pertenencias de cada uno mientras os explican cómo funcionan las cosas.

Se trataba de una isla tropical privada, bien cuidada, rodeada de arrecifes. En su centro se encontraba la mansión donde habitarían, la cual tenía acceso directo a una cámara inferior donde se encontraban muchas de las zonas de la mansión, siendo así medio terrestre y medio submarina. Si teníais alguna duda o necesitábais cualquier cosa teníais a los que serían vuestros mayordomos las 24 horas del día. 

Miró a Etzuko desde abajo y sonrió cuando dijo lo de su nombre - Si, bueno, mejor que otros es - Observó como Ayama le ofrece un agua y la acepta - No te preocupes pero tranquilo que nadie está aquí por amaños ni trampas en el sorteo, eso seguro - Se levantó y miró la isla cuando le dijeron que habían llegado. Era...tropical por decir algo, no le gustaba mucho pero no diría nada esta vez, se encogió de hombros y se fue a por el bidón de gasolina que había traído. Volvió a donde estaban los demás y bajó de la lancha de un salto, se giró - Ooji, me piro a investigar la isla esta rara ¡Nos vemos luego! - Tras decir esto se fue en cualquier dirección que le llamase la atención. Iba a su rollo, como siempre hacía. Dejó de lado a los millonarios empalagosos vomitadores de azúcar y toda esa mierda para estar cómodo y explorar todo el trozo de tierra por su cuenta.

Era un lugar precioso, sin duda iba a disfrutar de estas vacaciones.
Un joven le tendio un peluche para que agarrara su manita. Se arrodillo un poco y le dio la mano al conejito con una sonrisa.
-Este caballerete me va a guiar? Pregunta con una sonrisa en los labios y torciendo la cabeza.

El chico parecía encantado al ver a Yuri sujetarle la mano a su peluche. Con una sonrisa enorme y eterna en su cara comenzó a correr llevándoos hacia adelante y ametrallaros a preguntas como un niño pequeño.

-¡¡¡WIIIIIIIIIIII!!! ¿como te llamas?, ¿y tú? A mi me llaman Honey porque me encantan los dulces y las cosas lindas, como vosotras. ¿Os gustan los dulces? A mi me gustan sobre todo los pasteles de la hora del té, son muuuuuy dulces y no puedo parar de comerlos, ¿os gusta el te? ¿que os gusta? Aquí hay de todo tipo de tés y de dulces, ¿queréis que tomemos té con dulces? poooooooooooooooooooorfaaaaaaaaaa, vaaaaaaa di que sí di que sí di que siiiiiiiiii. 

 aunque parezca mentira es el más mayor... (lo comentan a la vez y con cara de fastidio, como si fuese algo realmente extraño y difícil de creer).

Habían al fin llegado a la isla, aunque Etzuko y estaba muy arrepentida de estar ahí, insistía, había decidido alejarse de su pasado, pero este volvía con violencia, incluso Eru mencionó a su hermano y Etzuko la escuchó, soltando un suspiro y agradeciendo las atenciones de la tripulación y su preocupación por ella. 

Etzuko se quedó un poco más alejada del grupo, pero si notaría la llegada de la comitiva de recibimiento, una curiosa comitiva ¿por qué los herederos de una de las fortunas más importantes de país estaba ahí, como parte del servicio?. Etzuko se cruzó de brazos, y levantó una ceja ¿era parte de algún castigo innovador de sus padres?, pero los chicos no parecían estar molestos ni nada por el estilo, aunque el chico más alto y serio, parecía no reir mucho, aunque ea muy guapo, se parecía a Tsubasa...

Etzuko sintió los jalones de la ropa y miró al más pequeño, pero la peli negra le habló y el chico se fue con ella, Etzuko infló un poco los mofletes, pero luego sonrió y se fue caminando junto a los chicos de la bienvenida, debía llegar  a su cuarto e intentar evitar a Eru y a Ooji, y cualquier mención a Tsubasa.

Sonrie contenta y toma aire mientras acaricia la cabeza del pequeño.

-Mi nombre es Yuri Rea, encantada de conocerte Honey. Me gustan las cosas dulces, siempre llevo alguna golosiona en mi bolso por si necesito azucar. El calor me afecta de mas y tener algo dulce debajo de la lengua me ayuda a no pensar demasiado y salivar mucho. Estare encantada de tomar te contigo y tu conejito.
Responde todas las preguntas con paciencia y una sonrisa en los labios, sin dejar de acariciar la cabeza del joven.-Asi que eres el mayor? Que grande estas.

¿A... A...Amiga de ti...ti. Tiburones?- dice volteándose hacia Eru con dificultad, al darse cuenta que estaba tartamudeando trata de no mostrarse inseguro.- No...No...No es que les tenga mi...miedo.- Escucha una voz a la distancia y se voltea para ver de quien era,  un chico bastante alto de cabellera negra se acercase a él, sin mediar palabra lo toma en brazos y lo alza como si fuera un crió,  el chico no reacciona por varios segundos, pero cuando comprende por la escenita que estaba pasando comienza a patalear y alterarse. Realmente no estaba acostumbrado al contacto tan directo y menos de forma tan inesperada.

-HEY! ¡Qué haces suéltame!- sintiendo mucha vergüenza comienza a ponerse rojo  -¡Vamos bájame! Degenerado, sin vergüenza... ¡ABUSADOR!.- Haciendo fuerza trata de zafarse de sus brazos.-

Los gemelos miran curiosos con una sonrisa picara ha Etzuko cuando ve a Honey ir corriendo con Rea.
Kaoru se acerca entonces a ti con una sonrisa.
-Aaaaa no te sientas mal, Honey es algo despistado pero la verdad es que me fastidiaria si alguien quisiera irse contigo a tomar el té que no fuese yo.
Su mirada es muy intensa y fija en tus ojos.

La joven volvió sus ojos hacia uno de los gemelos, ¿cómo podría distinguirlos? eran idénticos.  Etzuko se distrajo unos instante con esa idea mientras el pelirojo hablaba,  y la miraba a los ojos, la chica levantó su vista, y se extrañó su última frase, el pelirojo era  un ligón.

- eh... ¿me estás invitando a un té o solo quieres hacerme sentirme bien - se encoge de hombros, y le sonrie, llevado su mano a su hombro, y luego haciéndolo girar para tomarse de su brazo - si es sí a lo primero, acepto, si solo buscabas lo segundo, pues, yo te invito a un te entonces.. y bueno ¿por dónde es? - pregunta sonriendo.

El chico ante tu reaccion se sorprendio bastante aunque puso una sonrisa muy divertida. Te ofrecio su brazo para que lo cogieses y te iba a guiar hacia donde iban Rea y Honey.
-Jamas dejaria que una bella y joven dama como usted invitara a un chico como yo. Ven, hay tes de todos los continentes, ¿o prefieres primero ir a tu cuarto?, estoy seguro de que...
Justo mientras hablabais el otro gemelo se puso enfrente de vosotros agarrandole el brazo a su hermano y tirandolo hacia él.
De pronto frente a Etzuko se veia a Hikaru abrazando con una mano a su hermano y con la otra mano cogiendo su barbilla y hacercando la cara de su hermano a la suya.
-Kaoru...¿acaso me ibas a dejar de lado? Sabes muy bien que no podria vivir tranquilo sabiendo que tengo que compartirte con alguien.
La escena se habia vuelto algo....extraña.
Kaoru se quedo mirandole con cara de chico arrepentido a Hikaru.
-Lo siento Hikaru.... tienes razon. Me deje llevar por las ordenes de nuestro jefe y no me di cuenta de lo que estaba haciendo, no quiero separarme nunca de ti hermanito...
En mitad de esa escena de los hermano Hitachiin, justo cuando la cosa se volvia ya demasiado...rara XD, los hermanos se giraron hacia Etzuko con mirada felina y sonrisa perversa, fue entonces cuando se pusieron los dos a hablar a la vez.

-Entonces estaras con los dos.
Los dos jovenes se separaron y se pusieron cada uno a un lado tuyo sujetandote del brazo y llevando tus cosas.
-Yo soy Kaoru
-Y yo soy Hikaru
-Somos hermanos gemelos, ¿y tu?
Mientras tanto te iban guiando hacia donde estaban Rea y Honey con la sonrisa picara en sus rostros

Etzuko no se hubiera imaginado nunca la escena que estaba delante de ella, o sea, podían ser dos chicos gay, pero estos llevaban el concepto de perversión a otro nivel. La chica habílmente  se zafa de ellos dos, y da unos pasos hacia atrás, con sus manos levantadas.

- eh... yo...- intentaba pensando en que decirles para no ofenderles, pero no estaba  con ganas de ser el mal tercio entre dos mellizos que se abrazaban como si fueran pareja- soy Etzuko Tachibana... y pueden ir ustedes, a tomar el té, yo los sigo después, en serio, no se molesten - da otro paso hacia atrás, deseaba huir de ellos.

Viendo cómo todo el mundo se conocía y entablaba las primeras conversaciones con el extravagante club, me deslizo intentando no llamar mucho la atención dirigiéndome hacia donde está Eru.

-Hola Eru...

-¡Sip! Me quiero hacer amiga de los tiburones... ¡tienen una sonrisa preciosa!- parece bastante orgullosa y segura de su idea. 

Mira con extrañeza y diversión a cada uno de los "mayordomos" (ricos) que les atenderían durante esas dos semanas. Eran bastante guapos, además de muy muy divertidos y extraños, sobre todo extraños... ¡y eso lo hacía aun más divertido!

-¿Eh?- se gira de golpe dando un pequeño salto sorprendida cuando oye su nombre -¡ah! Hola... Kazuki, ¿no? Ya me creía que te habías caído de la lancha... ¿eres un fantasma o algo parecido?- lo mira con verdadera curiosidad, como si de verdad se lo plantease -¿has visto que sitio más chulo?, ¿y los mayordomos que tenemos?- mira con una enorme sonrisa a todos de nuevo -¡¡esto es genial!!

Todavía de la mano de Yuri , Honey se acerca hacia Mori-senpai y Ayama -Mori-senpai no va a soltarte. Indirectamente has pedido ayuda por miedo a los tiburones, ¡y él te va a ayudar! ¡¡No tienes que tener miedo a nada!!- su sonrisa infantil y adorable hace que cada una de sus palabras suenen bastante convincentes. 

 ¿Eeeeeeeh? Los dos hermanos se pusieron a hablar de nuevo a la vez. -¡¡¡Pero nosotros queremos ir contigo a tomar el té!!! ¡¡¡Vaaamooooos, queremos tomar el té contigo!!! ¿¿Por qué te alejas??

 Mientras Etzuko daba unos pasos hacia atrás se choca con el chico rubio que llevó el barco hasta la isla, quien luce una amplia sonrisa muy animada, reluciente, como si esa escena fuera ya costumbre para él.

 Tranquila señorita Etzuko, no pienses mal de ellos dos, no van ha hacer nada malo jajajaja.

Verás, nosotros formamos parte de un club que se encuentra en una de las academias más prestigiosas de Japón. Allí hay muchas jovencitas adineradas con muchísimo tiempo libre. Nuestro club solo pretende entretenerlas hablando con ellas y sirviéndolas como mejor podamos, con el fin de hacer más ameno su tiempo libre. Como esta edad es para cualquier joven muy conflictiva y complicada, nosotros servimos a cada chica de un modo especial...... Digamos que cada uno muestra su personalidad y habilidad y lo explota al máximo. Así, por ejemplo:

- La personalidad de Ootori es fría y calculadora.

- La de los hermanos Hitachiin, por el contrario, son muy apegados el uno al otro mostrando en ocasiones un aspecto algo homo, aunque en realidad es un juego que tienen ellos para entretener a las damas, como ya he mencionado.

- Honey-senpai es muy infantil y adorable, mostrándose bastante tierno, se podría decir que es el chico "shota" del grupo, a pesar de ser el mayor de edad...

- Mori-senpai, por el contrario, es bastante serio y callado, mostrando un aire más salvaje. Aunque es muy protector con Honey, casi siempre los vais a ver juntos a esos dos jajajaja. 

- Y yo, Tamaki Suou soy de personalidad principesca. Además, soy el presidente de este club y el anfitrión preferido por un 70% de nuestras clientas.

Como ves, aprovechamos tanto nuestras habilidades como nuestro aspecto fisico con un fin lúdico, solo para poder entretener a todos nuestros clientes. ¡Y estos 15 dias ustedes seran nuestros clientes VIP! Tal vez ahora mismo no lo comprendas muy bien, pero te acostumbrarás en unos días, cuando nos demos a conocer un poco mejor mademoiselle.

Acaba con una reverencia mirando a Etzuko directamente a los ojos. Se reincorpora y ofrece gentilmente su mano para guiarla con el resto hacia el interior del edificio mientras pasa delante de los gemelos. -Llevad vosotros el equipaje de la señorita.

-¿QUE QUEEÉ?- Protestan los dos a la vez.

 -¡No nos fastidie señor!, nosotros estábamos primero, lleve usted el equipaje.

-Eso, eso, nosotros queremos estar con ella, ¡cargue usted con las cosas! 

De pronto los tres estaban peleando de una forma muy cómica por ver quién estaba con quién.

 Esto solo hay una forma de arreglarlo mi señor-dice Kaoru mientras se remanga la camisa.

  Estoy de acuerdo- respondió Tamaki haciendo el mismo gesto.

¡¡PIEDRA, PAPEL O TIJERAS. 1,2 Y.......!!

 10 segundos después Tamaki estaba llorando desconsoladamente con la maletas detrás de los gemelos, quienes iban cogidos uno a cada brazo de Etzuko, sin darle opción a negarse, girándose de vez en cuando para sacarle burla al cabecilla del grupo. 

(Tamaki)------------------------>