Partida Rol por web

 Viendo que la única forma sería subir por la pasarela, corro hacia la misma utilizando para ello las capacidades que tengo al ser una criatura de la noche.

Los guardias comienzan a moverse intentando ffrenar tu avance y al mismo tiempo flanquearte desde el otro lado, por suerte para ti la celeridad ayuda mucho a tu favor. 

 Venid hacia, vamos-  comenzó a subir las escaleras, sabedor de que no le quedaba mas remedio que seguir avanzando.

El guardia 2 Dispara una rafaga pero como disparo en moviemiento solo una bala te alcanza tambien el pecho. Absorvescasi todo el daño de la misma pero igual esta de hace 1 punto de daño contundente.

El resto de los guardias sigue moviendose hacia sus posciiones. 

Guardia 1 sigue moviendose hacia su posicion.

Guardia 2 vuelve a disparar una rafaga hacia a ti, impactando dos balas mas en el torzo.  El primer impacto solo te hace 1 punto de daño pero el el segundo te hace 2 mas de contundente.

 Sigo avanzando...

El guardia 5 tambien dispara una rafaga intentando frenarte pero todas exepto una de sus balas impactan en las cercanias de tu posicion. La que si te pega, es facilmente absorvida.

 El persistente guardia numero 2 que te disparaba desde que subiste a la rampa efectua su ultima rafaga antes de qeudarse sin municion. varios impactos en tu cuerpo agujerean tu ropa, pero estos nisiquiera te molestan,

Tu cuerpo cadaverico absorve los pedazos de plomo como si te pegaran con gotas de agua.

 Bueno, ya me queda poco- había gastado sangre para curarse, y no quería por el momento malgastar mas. Ya tendría tiempo de cmer

Mientras el guardia recargaba municion su compañero continuaba disparandote incontables balas, pero para su desgracia, ninguna parecia hacer efecto. Las propiedades vampiricas de tu cuerpo hacian que los efectos de los impactos se vieran reducidos a meras molestias en tu cuerpo, mas no en tu ropa, la cual comenzaba a desgarrarse. 

Siguiente Turno.

El guardia que se habia quedado sin municion, vio tu imparable avance y decio retroceder mientras su compañero lo cubria.

 Avanzo lenta pero resueltamente hacia el guardia en cuestión.

Mientras ambos guardias se replegaban la lluvia de plomo no cesaba, otra rafaga impactaba contra tu pecho y cuello, desgarrandolo a un pco pero no lo suficiente para causar un daño severo.

Los otros dos guardias del fondo se preparaban para abrir fuego en cuanto tubieran un tiro limpio y sus compañeros estubieran fuera de la linea de fuego. 

 Mi turno- de un rápido movimiento me coloco al lado del guardia y le lanzo un fuerte puñetazo, dispuesto a tumbarle de un solo golpe