Partida Rol por web

Antes de que la luche termine, puedes notar un detalle extraño. Al norte suyo, más allá de la pelea, una figura se esconde detrás de una piedra al lado del camino. Al echar otro vistazo, te das cuenta de que esa no era la única roca lo suficientemente grande para ocultar una persona. Y al ser esta una zona con varios peñascos, todo el lugar estaba lleno de estas.

Tori tragó saliva. No sabía que era eso que había visto, pero fuese lo que fuese, no tenía buena pinta. Tori intenta mirar, pero sea lo que sea, estaba escondido detrás de la piedra.- ¿Saqueadores?- Pensó Tori, se acercó a Cristian.- Me pareció haber visto algo en las rocas de allí.- Susurró al oído de Cris, para luego hacer un gesto con la cabeza en dirección a las enormes piedras. Continuaban agachados, por lo que es posible que quizá aún no les hayan visto. Pero al estar plagado de estas, comenzó a dudar entre si ir a avisar o quedarse en el sitio a la espera de que suceda algo.- ¿Crees que deberíamos avisar de esto?- Preguntó Tori a Cris, por una parte, podrían ayudar y, si todo sale bien, salir con vida y tal vez cobrar una recompensa, por otra podría ser muy arriesgado.

Me vuelvo a enfundar el arma caliente por su continuo uso. Tambaleando me acerco al Sheriff y a su ayudante. Uff, gracias. Digo entre gemidos. Esos Geckos llevaban todo el dia persiguiendome. No tendreis algunas vendas en vuestros bolsillos. Agggh, Os lo agradeceria mucho.

Me había escondido para alejarme de la vista de los gecos, aunque al parecer otros ya se habían ocupado de ellos. Aquello hubiera sido una lucha poco provechosa, así que mejor no llevarla a cabo. Escucho entonces a Tori, atendiendo hacia donde ella señala. - ¿Qué has visto? - pregunto, dado que yo no había visto nada, había estado quizá observando más a los gecos. - Depende de lo que sea, y qué podamos ganar. ¿Me gusta estar en el bando ganador ¿y a ti? - Pregunté en un susurro.

No sé muy bien que era.- Respondió con el tono igual de bajo que antes.- Quizá si les ayudamos nos recompensen... O nos den más información.- Dice Tori, continuando murmurando mientras miraba hacia las rocas como esperando ver algo, pero nada, seguían escondidos.- Quizá sean saqueadores, o quizá monstruos , pero los que se encargaron parecían bastante fuertes, ¿tu que crees?- Pregunta Tori, siendo incapaz de despegar su mirada de las rocas, por si se moviesen o atacasen, pero no conseguía ver que se moviese algo, sin duda algo se escondía, pero le gustaría saber el qué, y en caso de ser humanos, el por qué.

- Bueno... podemos ayudar, pero espero que tengan una buena recompensa... y que las cosas no se pongan en su contra, o habremos elegido el bando equivocado... - Contesté en un susurro. Después me acerqué al borde de la roca en la que nos escondíamos, en el lado contrario, mirando hacia el Sheriff y su ayudante. Agarré el arma con una mano, listo por si empezaban los tiros. Traté de moverme entre la cobertura en dirección al Sheriff, pero antes de salir de la roca, se me ocurrió que sería una pena perder el factor sorpresa. - ¿Y si les tendemos una emboscada? Si van a atacar, el Sheriff está ahí, quizá esperen a que se aleje un poco, entonces bajarán... Ahora no nos ven ¿Tienes alguna idea para avisar sin quedar expuestos nosotros? - Pregunté a la necrófaga que me acompañaba.

Si tuviésemos papel y algo con lo que escribir... Creo que podría lanzarlo en forma de papel de avión.- Pensé, no sabía muy bien si era una buena idea.

Andrés mira al técnico y niega con la cabeza

- Qué coño haces aqui sólo.... no eres un combatiente. Así solo vas a lograr que te maten. ¿Qué ha pasado? - menea la cabeza- No, no tengo vendas, ni estimulantes, ni nada para curarte ahora. Más nos vale encontrar lo que estamos buscando y salir de aqui. ¿Y qué se supone que estás buscando tu?

-Me parece que ya es un poco tarde para eso.- Dice una voz detrás de Cristian. Cuando ambos se dan vuelta, se encuentran con que no había uno, sino tres hombres, vestidos de armadura completa, de forma que apenas se les veían partes de piel al rededor de los ojos y donde los guantes y la manga se unían. Las armas que usaban también eran pesadas. Estaban siendo apuntados con rifles de asalto de aspecto modificado. Pero no de esas modificaciones que uno encuentra por ahí, de alguien que agarró las partes de un arma y las usó para otra, sino de trabajos profesionales.

-Quedense agachados, quietitos y calladitos. No queremos que se enteren de que estamos aca, ¿no?- Dice otro de los soldados. -Es más, les voy a atar para asegurarme de que no se mueven, ¿si?- Mientras decía esto, uno de ellos deja de apuntarles y empieza a sacar unas cuerdas de una mochila que llevaba a la espalda.

Una expresión de mudo asombro se queda en mi rostro cuando veo aparecer a aquellos tres hombres detrás de mi. A parte de por su sigilo, por sus vestimentas. Desde luego una armadura completa que casara completamente y un equipo como el que llevaban no era nada común, dado que la mayoría solo conseguía piezas sueltas que iba juntando hasta conseguir lo que quería. "¿De dónde salen estos tíos?" Me pregunto a mi mismo mientras escucho lo que dicen.

- Espera, espera... - Contesto en susurros. - No creo que las cuerdas sean necesarias. No les debo nada a esa gente, no tengo por qué ayudarlos ni arriesgarme el pellejo por ellos. Pero vosotros parecéis de otra pasta, enseñadme a hacer eso y os juro que yo mismo voy a por esos dos. - Dije, aún sorprendido por el sigilo que habían demostrado. - Podría salir y caminar hacia ellos, distraerles para que les podáis coger por la espalda y con la guardia baja. Podríais acabar con los tres sin problemas, pero podría ser más ruidoso... Yo podría ser una mejor distracción. No se me ocurriría avisarlos, solo haría ruido y acabaría muerto también, no soy tan idiota. Y como he dicho, no les debo nada. ¿Qué me decís? Así sería más rápido y silencioso, en el pueblo ni se enterarían... - Terminé, proponiendo prestar mi ayuda a aquel grupo. Desde luego sus movimientos me habían impresionado, y su equipo aún más, quizá ir con ellos me sirviera para aprender mi oficio de unos verdaderos profesionales.

Tori se dio la vuelta, al ver a los hombres decidió quedarse callada.

Christian, sígueme el juego...- Tori le susurró para que no hiciese nada raro, además, tenía un plan. No era necesaria tanta tontería, aún por encima, eso podría arriesgar sus vidas, en caso de que les dejase ayudar, ¿quien les dice que luego no les van a ejecutar? Y en caso de que Christian pretendiese rebelarse... ¿Quien dice que no acaben con ellos antes? Era muy peligroso tomar casi cualquier decisión.

Vaya, la verdad... La verdad es que no les debemos nada a esos de allí, si queréis hacer algo, adelante, quizá por algunas chapas nos vamos sin más, o mejor, por nuestras vidas... ¿Trato?- Tori ofreció, no sabía si funcionaría o no, pero en caso de funcionar les daría cierta ventaja...

Uno de los soldados, el que no parecía a cargo ni el que sacó la cuerda, se rie. -No necesitas mucha habilidad cuando tienes estos.- El hombre metió una mano en el bolsillo y sacó un pequeño dispositivo. Era como una muñequera grande de metal. La palabra "Stealthboy" podía leerse en uno de los costados. Ambos reconocían lo que era, esas cosas podían ocultarte haciendote invisible y callando casi todo sonido que hagas. No se encontraban en esta región, lo que hizo que se pregunten de dónde los habían sacado.

-Basta.- Dijo el lider. -Atenlos ya.- Luego se dirigió a Cristian. -Desgraciadamente, no está en mis manos la busqueda de nuevos aplicados, pero buen intento.- Al parecer, la cadena de mando no terminaba con él.

Calmate, viejo. Solo intento ganarme el pan como cualquier otra persona. Y ni siquiera la policia va a poder impedir que trabaje. Le digo enfadado al ayudante entre gemidos.

- Si yo fuera policía... o lo que fuese, le respondería que lo que te hemos impedido no es trabajar, sino que te maten - dice escupiendo al suelo- Y también le recordaría que para ganarse el pan, lo principal es no morirse

Miro a Christian y luego al soldado. A pesar de la situación, aún había una esperanza de salir del lío en el que se habíian metido... Tori ya tenía un nuevo plan.