Partida Rol por web

Guerra de sucesión en Poniente

3. Delirios de Grandeza

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25/09/2012, 12:25
mandrell

 

El cielo de Pentos era un magnífico manto de estrellas. Ni siquiera todo el oro de la ciudad podría comprar aquel espectáculo que disfrutaban tanto pobres ladrones, como ricos mercaderes.

Ya había ajetreo en el puerto cuando el primer grupo de tus marineros se estaba marchando. Los guardias ayudaban a apagar un pequeño fuego unos cien metros a la izquierda de donde estaba amarrado Silencio. Luego otro grupo más se marchó y, por fin, te tocó marchar dirección este, cruzando toda la ciudad hasta llegar a la mansión del Magister.  Cuando llegasteis, las puertas de la mansión ya estaban entreabiertas. Pasasteis entre las hojas de madera del portón. Había tres cadáveres en el suelo: dos inmaculados y uno de los vuestros. Os quedaban diecinueves hombres. Aún no se había oído ni un ruido.

Volviste a observar todo el patio de la mansión en su esplendor. Los destellos de la fuente jugando con los reflejos de la luna pitaban a la estatua del jaque con un halo de espiritualismo. Casi parecía un fantasma dispuesto a atacar a vuestros hombres. Observaste más cadáveres. Cuatro inmaculados habían caído desde la pequeña muralla. Cuatro hombres del hierro ocupaban sus lugares, agazapados.  

Ya habíais tomado el control de la parte exterior de la mansión. Y detrás vuestra quince valientes hombres, preparados para continuar… 

Notas de juego

Sírvete de la descripción de la escena anterior para idear algún plan respecto la mansión. 

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25/09/2012, 15:14
Dagon Harlaw

El olor a sangre y hierro era bastante evidente en el lugar. Los cadáveres tenían la firma de los hijos del hierro y tal vez los habrían visto venir si el Magister no tuviera por afición ambientar su casa de aceites y sales aromáticas.

Tanto Noram como el Sacerdote del dios ahogado habían desempeñado de sobremanera sus roles y ahora era labor suya recoger el testigo. Dagon se deshizo de la capa que ocultaba su escudo de cuero endurecido negro y su gran hacha y se encaminó en dirección del porche, habían controlado todo lo que conocían hasta el momento y a partir de ese momento iban a ciegas.

Indicó de nuevo una señal que podía ser un nombre: Silencio, y les indicó el interior de la vivienda porticada tras el porche.

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25/09/2012, 15:51
mandrell

Tus hombres te seguían mientras avanzabas entre amapolas y estanques de agua cristalina. La noche era silenciosa y los hombres de hierro también. Os escurristeis entre las sombras has llegar al porche de la casa. En tu anterior visita a la mansión no habías pisado aquellos escalones de mármol. Incluso creíste verte reflejado en uno de ellos. 

Ya estabas frente a la puerta: el gran portón de madera decorada con clavos que tienen la forma de las monedas de Pentos. 

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25/09/2012, 17:26
Dagon Harlaw

Un portón, parecía que al magister le gustaba cuidarse las espaldas; tratar de abrirlo sólo significaba ruido, con sendas señales indicó a sus hombres varias ventanas próximas, la orden estaba clara, saltadlo y matad todo lo que encontréis.

Más allá el humo se ascendía en forma de espirales de algún lugar de la ciudad.

- Tiradas (1)

Motivo: Percepción

Dificultad: 0

Tirada (4): 3, 5, 3, 2

Guardados (4): 5, 3, 3, 2

Total: 13, Éxito increible

Notas de juego

Hago tirada de percepción para localizar alternativas al asalto

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26/09/2012, 15:33
mandrell

Las dos inmensas hojas del portón de madera parecen combadas hacia dentro, dejando que una leve luz se introduzca entre la rendija que hay entre ellas. 

También te fijas en los grandes ventanales de la mansión. Todos se encuentran en las plantas superiores. 

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26/09/2012, 15:51
Dagon Harlaw

Notas de juego

La posibilidad de trepar/escalar a las ventanas no existe?

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26/09/2012, 16:39
mandrell

Notas de juego

Algunos de tus hombres podrían, tal vez el más atlético. Ten en cuenta que son columnas muy gruesas de mármol lo que sostiene el porche. Tendríais que hacer auténticos Castells para subir. 

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26/09/2012, 19:18
Dagon Harlaw

Dagon se asomó por el hueco que quedaba entre las puertas combadas, salvo la luz lo que se apreciaba eran sombras pero nada definido. La luz dejaba entrever la posibilidad de que alguien estuviera despierto al otro lado, el sigilo parecía condenado en aquel momento pero la prisa apremiaba.

Tras descartar las ventanas por su elevada posición señaló un largo leño que apoyaba cerca de una de las puertas que atravesaron, previsiblemente se utilizaba para atrancar la puerta.

-Usadlo como palanca, entrad y entregadles a todos al dios ahogado.- Susurró la orden, sin embargo las órdenes de Dagon aunque susurradas eran perfectamente audibles para sus hombres.

Notas de juego

Vamos que el tema del sigilo como que se ha acabado :-( A las armas

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26/09/2012, 19:28
Magister Illyrio Mopatis

Cuando te apoyaste en una de las hojas del portón para observar por aquella rendija, ésta cedió y agrandó el espacio entre las hojas. Estaban abiertas. Seguiste empujando una de aquellas puertas, observaste que tenían al menos un pal y medio de grosor. 

Cuando la rendija era lo suficientemente ancha como para que tu cabeza pasara por ella, observaste un inmenso recibidor perfectamente iluminado por incontables quinqués. Al fondo de la sala de suelo brillante y limpio crecía una escalera que se ensanchaba conforme los escalones ascendían. Sentado en una gran sofá que estaba haciendo equilibrio en esos escalones, os esperaba la inmensa mole de carne conocida como Illyrio Mopatis. Estaba rodeado de sirvientes, mujeres y hombres que os miraban expectantes, igual que lo hacía el Magister. 

En cuanto las puertas se abrieron más y tus hombres pusieron los pies en la sala, una decena de inmaculados salieron por unos arcos que estaban en la paredes. Eran entradas sin puerta a compartimentos situados en los laterales del recibidor. Había cinco grandes arcos en cada pared que dejaban ver pequeñas o grandes habitaciones en los que había estufas sin usar rodeadas de sillones, cojines de encajes, cortinas de terciopelo y esculturas del mismo material que la del jaque del jardín. 

Los inmaculados se habían colocado en una perfecta fila de a uno que cubría todo el ancho de la sala, mirándoos a vosotros. Sus grandes escudos rectangulares parecían formar un muro de metal y lanzas.  

―Buenas... noches, Lord Dagon. Os dije que os estaba esperando. 

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26/09/2012, 19:44
Dagon Harlaw

Era de esperar del amigo de la araña, enterado de sus planes antes de que tomaran forma en su cabeza.

-Buenas noches magister, una pena que para preparar esta sorpresa hayas tenido que sacrificar a alguno de tus soldados, o eran esclavos... Bueno, para ser muy leal a la reina no seguías sus principios... Magister

El lord comandante observó a los inmaculados, esculpidos como si de estatuas inánimes se trataran a lo largo de todo el recibidor, evaluando posibles estrategias para romper su disciplina y que sus hombres ganaran ventaja.

- Tiradas (1)

Motivo: Guerra

Dificultad: 0

Tirada (6): 1, 2, 4, 2, 3, 1

Guardados (5): 4, 3, 2, 2, 1

Total: 12, Éxito increible

Notas de juego

Hago tirada de guerra para la estrategia. (Menuda mierda)

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26/09/2012, 19:51
Magister Illyrio Mopatis

―Y si tú das la orden de atacar, será aún mayor sacrificio por tu parte... además, en vano.  El cuerno aún está aquí, Lord Capitán, aquí: en mi mansión. Preparado para que alguien se lo lleve... pero claro, un jaque harapiento y lleno de pulgas no se convierte en Magister, ni obtiene todo lo que ves haciendo favores sin pedir nada a cambio... ―a diferencia de la última vez que hablaste con él, esta tarde; ahora hablaba muy serio, fijando su intensa mirada con sus pequeños ojos en los tuyos. 

Notas de juego

Sois 16 contra 10. Pero, sinceramente, sería una locura luchar contra inmaculados ya colocados en su formación de ataque. Si los Dioses están de tu parte....

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26/09/2012, 20:26
Dagon Harlaw

Odiaba a los inmaculados, lo que ellos hacían poco o nada tenía que ver con la guerra a sus propios ojos, sin embargo parecía que el magister estaba con ganas de tener conversación.

-Con la intención de negociar por el cuerno vine esta tarde, parece que la inspiración no os vino hasta este momento.- Le respondió mientras observaba la fila de inmaculados, tal vez una antorcha por aquí serviría para abrir una brecha y rodearles... El lord comandante meditaba sus posibilidades mientras parlamentaba con su enemigo.

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26/09/2012, 20:33
Magister Illyrio Mopatis

El rostro del Magister volvió a ser el que visteis por la tarde. Afable. 

―¡Jo, jo, jo! Yo no fui al que le temblaron las quesadillas nada más oír mencionar a Dorne. Tampoco fui el que se me dejó con la palabra en la boca. Te lo advierto, Lord Capitán, si yo no hubiera querido hablar lo habrías sabido... y de muy malas formas ―su rostro se volvió serio mientras decía aquellas palabras, pero luego recuperó su aspecto juguetón―. Ahora bien, dejémonos de tonterías. ¿Qué me ofrecen los Greyjoy?

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26/09/2012, 20:37
Dagon Harlaw

-No os conozco así que no puedo ofreceros nada sin ofenderos... ¿Qué pedís? ¿Para qué un magister necesitaría el poder de Pyke?- Interrogó tanteando a su interlocutor.

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26/09/2012, 20:41
Magister Illyrio Mopatis

Ver cómo los Siete Reinos caen en desgracia. Pero por desgracia, estoy muy viejo; y para ver algo así, tengo que vivir. Quiero ser inmortal. Al menos doscientos años más ―miraba al techo de la sala, como si allí las estrellas le observasen. 

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26/09/2012, 22:00
Dagon Harlaw

Las ambiciones de Illyrio parecían no decantarle por ningún lado en la contienda.

-Sólo conozco una criatura con esa capacidad... Dragones. Y los que intentaron lo mismo que tú no acabaron bien.

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27/09/2012, 18:59
Magister Illyrio Mopatis

El recibidor resonó en carcajadas del Magister. 

―No tengo la intención de exprimir a los dragones para beberme su sangre de la eterna juventud. Eso son cuentos de vieja ¿Sabéis cuantos años tengo? llegaré pronto a los setenta días del nombre... ―era obvio que parecía mucho más joven, a pesar de su desforme físico―. ¿No habéis oído susurros en las tabernas sobre un líder mercenario, Lord Capitán?

 

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27/09/2012, 19:19
Dagon Harlaw

Dagon carraspeó, como si quisiera asentir. Se empezaba a sentir impaciente, sentía la guerra avanzando y el atascado en futiles conversaciones.

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27/09/2012, 21:06
Magister Illyrio Mopatis

―Pues deberíais haber prestado más atención a aquellas palabras de borracho...o de un loco marinero ―una sonrisa cubrió su rostro― El caso es que no ganaría nada manteniendo el cuerno sin utilizarlo. Y como ya dije antes, quiero vivir eternamente para ver como Poniente se mata a sí misma por la ineptitud de sus líderes. 

Illyrio Mopatis os estudió de pies a cabeza. Pasando su mirada por cada ápice de vuestro cuerpo.

―Encontrad a ese líder mercenario. No por mí, sino por vosotros. Él es el que con más ahínco ha reclamado el cuerno. Lo quiere a cambio de su elixir revitalizante. Está loco si cree que pondré un arma tan poderosa en manos de un mercenario. Sin embargo, si vosotros me traéis ese elixir, os daré el cuerno si me prometéis pasar por fuego y espada todos los rincones de los Siete Reinos. 

 

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27/09/2012, 21:26
Dagon Harlaw

-Básicamente me estás dando a elegir perder la mitad de mis hombres a manos del mercenario o bien a manos de tus inmaculados.- Dagon se cruzó de brazos tras dejar el hacha a sus pies -Antes debería ver si ése es el cuerno auténtico, ¿habrás oído de sus propiedades verdad?