Partida Rol por web

Tenia una cara bonita y una sonrisa contundente, era directa y sin pudores.-​​Aprobada, joder.-Dijo Mijail decidido y encantado con la nueva adquisición"Coño, tenemos un perro...porque no una pelirroja peleona y astuta?".

Mijail, relajó la postura y le dirigió la cuestión importante a Atila.-¿La inquisición nos proveerá de las identidades y las vestimentas adecuadas?.-Iba en serio, aunque parecía que lo próximo mas aún.-Si corre de nuestra cuenta podemos entrar como técnicos de mantenimiento...No puedo malgastar el dinero de mi fondo de pensiones.-

Sonrió de oreja a oreja tras el enfrentamiento entre la chavala y el guardia civil y más aún cuando el ruso dio su aprobado. Iba a disfrutar mucho en compañía de Arisa, sobretodo por lo mucho que descolocaba a Chamorro

- ¿Estás segura de que te quieres venir con nosotros? - Preguntó con tono jocoso - Se que vamos a asaltar un casino y eso, pero no somos Pits o Clooneys precisamente. Y no se hasta que punto suena bien... Chamorro's five. O Dashkov's five, para darle un toque mas internacional. O six, contando con Cazador. Y por muy espectacular que puedas estar con un vestido ceñido y escotado y por mucho que pudieras ser la mujer de los sueños de la mitad del personal del casino y de tres cuartas partes del personal de esta sala, te voy a decir una cosa, hay algo que tira mas que dos tetas, por muy buen puestas que estén. - Alzó el móvil, triunfante - Un amigo que trabaje de crupier en el casino Cuervo Ladrón y me deba un favor y... - Echó mano al bolsillo del vaquero y sacó la cartera - La pasta. La pasta mueve el mundo, y yo si me puedo jugar unos euros. No creo que me vaya a salir mas caro que la broma de haber invitado antes a los del bar. - Esbozó una mueca y se rascó la nuca. Se estaba pegando el moco, claro, pero merecía la pena. Además, la Inquisición pagaba, ¿No? O por lo menos cubriría sus gastos de mantenimiento mientras estuvieran trabajando para ellos. O eso deseaba en secreto. También esperaba que Atila respondiera afirmativamente a la cuestión de Chamorro. Se sentiría mucho mas seguro sabiendo que tendrían apoyo en caso de necesitarlo.

*sonriendo descaradamente se separa un poco de juan y se gira para mirar a los demás en concreto a daniel*

-Bueno pues entonces lo tenemos todo,exceptuando un buen nombre por lo que veo, así que la pregunta es ¿nos ponemos en marcha o seguimos jugando? *sonríe cerrando los ojos en una expresión dulce y amable *

-Cazador es un elemento que no servirá para esta operación, dudo que podamos entrar fácilmente con un perro, salvo que la operación sea distinta, si somos dos grupos y uno de ellos por ejemplo se hace pasar por agentes antinarcoticos, podría moverme con facilidad a lado de cazador-. Explicó John al ser consciente de que apenas entrara cazador en acción, la gente del casino podría sospechar de su estancia allí.

A mi me encantaría poder entrar armado, Jhon...pero no creo que se pueda y me aguantaré.-Se encogió de hombros y replicó.-Por que no dejas al perro aqui a salvo, comiendo filetes y eso?.-Le comenta mientras le apoya una mano en el hombro intentando ser comprensivo con el hombre que jamas se separaba de su mascota, por ejemplo Mijail nunca se separaba de sus demonios.

-Los trajes e identidades no seran problemas, en cambio el dinero, puede ser mas complicado.- Explico Atila, algo incomodo.- Dependiendo de vuestro estatus en la Inquisicion, esta os puede confiar mas o menos dinero para gastos de mision, pero no espereis cantidades escandalosas de fajos verdes cayendo sobre vuestras rodillas. Puede que la Inquisicion parezca una caja sin fondo de tesoros, pero lo cierto es que estamos siempre operando con un presupuesto apretado de personal y recursos. Tanto, que hace lo que tengo que pagarle cada mes a mi ex-mujer calderilla en comparacion.- Bromeo, aunque sonriendo a medias y de hombros caidos.

>>En cuanto lo de un equipo de apoyo, si estais en graves problemas, siempre podeis llamar a base y os sacaremos lo mas rapido que podamos. Pero el mejor apoyo que podeis tener sois vosotros mismos.- Dijo Atila mirando a cada uno de vosotros.- Por experiencia os digo, que un pequeño de grupo de personas trabajando como si fueran uno solo, es mas capaz que un ejercito de cien personas desorganizadas. Cubrios las espaldas ahi afuera, os hara falta.

-Lo que dice Atila es cierto, aun asi tened.- Dijo Eva, sacando su movil y pasandoselo a Juanjo.- Grabad mi numero y devuelvemelo cuando termines, si os veis en problemas y estamos cerca, mi equipo podria apoyaros. Ya conoceis al padre James y Bunny, asi que ya conoceis como tres quintos de mi grupo.

-Tienes un perro ? *mira a john con cara de que mono para luego prestar atención a Atila y finalmente a eva*

( bueno pues manos a la obra ) *peso tras mirar al grupo sonriendo emocionada *

Atila no le había dicho nada que no esperase. Irían con una pequeña subvención que más les valía que estirasen y ya estaba. Disfraces y documentos todos los que quisieran, aunque en este caso no les iban a hacer mucha falta. Ni siquiera con el plan... que no iban a emprender... de hacerse pasar por agentes antidroga. Llamar la atención sobre los dos y espantar la liebre no sonaba como su proyecto soñado. De hecho le extrañaba que Keats lo hubiera propuesto, lo tenía por hombre más sensato. ¿Quizá simplemente no hubiera estado en un casino en su vida? Ni siquiera sé si en Inglaterra tienen casinos, ahora que caigo. Igual es eso.

Por experiencia os digo, que un pequeño de grupo de personas trabajando como si fueran uno solo, es mas capaz que un ejercito de cien personas desorganizadas.

Vamos, el cuento de siempre: a lo mejor sí, pero tampoco lo des por seguro. Estar en la Inquisición no era tan distinto de estar de cofrade, con la diferencia de que aunque tenían muchos más recursos la gente escurría mucho más el bulto. Con todo el asunto del Velo la gente anda loca.

-Gracias. Siempre es bueno tener una por si revienta -dijo, tomándose el número- ¿Tenemos tiempo para testar antes de irnos?

Arisa enfatizó la necesidad de la pregunta de Juanjo mirando a Keats emocionada por tener un perro. Reprimió la tentación de sacudir la cabeza... como aquella chica la tuviera mucho en las nubes, iba a ser merienda de negros. Prefería ir sobre seguro.

-Tanto como veais necesario.- Contesto Atila.- Pero intentad no demoraros demasiado, cuanto mas tiempo pasa, mas frio se hace el rastro.

John no estaba muy contento con dejar a su perro, pero no era por el cariño que le tuviera por mas que el tonto de Mijail pensase eso, de hecho consideraba a aquel hombre mucho mas duro. El motivo era simple, cazador era justamente eso, un cazador, era muy bueno para percatarse de muchas cosas que el mismo John no captaba, como en la ultima misión.

-Pues se queda entonces- confirmó John a los demás. -Y, si, tengo un perro, ya te lo presentaré cuando sea oportuno- le dijo John a Arisa con una ligera sonrisa particular.

Sobre la misión, no le importaba, el no estaba al mando del grupo y no era quien había tenido el interés de ir al dichoso casino. Podía arreglárselas dentro sin mucho problema, pero no estaba de ánimos para andar ideando planes.