Partida Rol por web

-¡NOOOOOOOOO!...- El joven ladrón corre hasta donde se encuentra Cassandra para detener la melodía que apenas iniciaba la bruja, resbala con el fango y atropella a Cassandra rodando por el suelo los dos, la flauta vuela por los aires y cae cerca de el asno Príapo que sigue pastando apaciblemente a la orilla de la laguna, Axys se sonroja al darse cuenta de que se encuentra encima de la bruja en una posición algo sugerente, rápidamente se levanta y se sacude las ropas para disimular un poco.

-Lo siento Cassandra...- le ayuda a incorporarse. -Esa historia que nos haz contado también nos la contaba nuestro mentor Apolecio, esa flauta está maldita... si la tocas... quedarás aprisionada a ella... te otorgará más poderes... pero... poco a poco te convertiras en lo mismo que se convirtió el geniecillo...-

Axys voltea a ver a Malco, recordando las lecciones de Apolecio para robar objetos mágicos.

-Bien mis pequeños bribones... os explicaré que no deben meterse con objetos mágicos ni divinos pues les puede salir más caro el caldo que las albondigas...

Creo que no han escuchado hablar sobre objetos mágicos ó divinos objetos, dotados de gran poder por los dioses. Algunos de ellos fueron usados por grandes héroes como Odiseo, Jasón o Perseo, otros sólo por personajes que deambulan por ahí cómo hadas ó geniecillos en fin, estos objetos son tan valiosos cómo poderosos, algunos son muy útiles, pero otros tan peligrosos cómo una gorgóna enfurecida.

Si van a robar alguno de estos objetos, lo mejor es asegurarse de que poder tiene antes de tocarlo puesto que algunos tienen maldiciones en vez de bendiciones... en especifico los creados por el señor del inframundo... Hades.

-Yo sé el secreto de algunos, pero eso mis jovenes aprendices se los contaré en otra ocasión, por ahora necesito que vayan con el joven Phaedrus y me "traigan" un poco de vino puro para ofrendar a Hermes... ¡ANDEN Y ESPERO NO TARDEN CÓMO LA ÚLTIMA VEZ O LES ASEGURO QUE RACIONARÉ SU COMIDA A UN PAN DE MIJO Y UN PUÑADO DE ARVEJAS EN VEZ DEL CORDERO QUE ESTOY PREPARANDO!...

Finaliza el experimentado ladrón lanzado varazos al aire para espantar a los dos mocosos rumbo a la posada cercana.

-Uff..con lo que disfruto a un hombre fogoso...pero todavia no me llama la atencion hacer el amor a la vista de otros.- dije riendome de Axys, me levanté del suelo, y me limpie el fango queme habia salpicado a los brazos, caminé hacia donde se encontraba la flauta la limpie y la sujeté con fuerza entre mis manos.

-Bueno, no es como que tenga mucho que perder de todas maneras...humanidad?...pf...no somos tan diferentes del resto de las bestias...entonces busca una mejor forma de hacer regresar a Ahirom del Hades Axys.- tomé la flauta y la guardé con cuidado en el interior de mi bolso de viaje...era bastante perspicaz y tenia un sentido común sorprendente, sin contar que habia pasado gran parte de mi vida en la calle, con la crema y nata de la escoria social.

-Me quedaré con esta flauta entonces, ya que solo hay una bruja en este grupo...ah...y será mejor que tu y Malco no intenten " bailar" de nuevo conmigo como lo hizo el muchachito en la taberna, no se me olvida que son ladrones, y hasta el momento, Ahirom, Aeneas, Malco y tu al rehusarse a hablar solo han demostrado lo poco comprometidos que estan con el grupo, lo individualistas que son, y la escasa confianza que pueden despertar...Yo puedo ser benevola...pero Zéfiro tiene un ojo en ustedes...y eres muy guapo para quedarte tuerto Axys.-

Alkaeius sacude su casco y se coloca la espada y el escudo en la espalda, va en busca de su macuto y saca la capa de viaje y se la coloca a los hombros.

-Si Cassandra observo a Ahirom caminando en vez de flotar y gemir lastimeramente  quiere decir que aún no cruza el Aqueronte, y sin óbolos no lo podrá hacer, sugiero continuar en busca de la cura para nuestro vejete amigo y en el camino encontrar una manera de recuperar a Ahirom del inframundo.-

Alkaeius saca de su macuto una antorcha y la enciende con unos pedernales.

-Hay que alejarnos de aquí, aún estamos cerca de la entrada donde nos atacaron esas Furias y de seguro han de estar buscandonos olfateando nuestro humor.-

El guerrerro hoplita emprende camino internandose en el oscuro y pestilente pantano.
 

Todo pasa tan rápido que apenas puedo asimilar lo ocurrido, voy en busca de mis armas y las encuentro cerca, a la orilla del lago, de mi bolsa de viaje saco una manta ligera, me quito la tiara y los brazaletes, así cómo la el peto de la armadura, y seco mi cuerpo lo mejor que puedo.

Vuelvo al bolso de viaje, saco mi manto de viaje, me enfundo en el y guardo mis brazaletes  en el macuto, cargo mi carcaj a la espalda y me ajusto la espada y la daga en la cintura, me coloco el escudo aún sin la protección del brazalete en el antebrazo izquierdo, atravieso el arco sobre mi espalda sujetandolo con la cuerda y cargo el macuto junto con el peto.

-Ahí está tu respuesta hijo de Hermes, seguir al hoplita en busca de un lugar para pasar la noche, no tiene caso exponernos en este lugar ni viajar de noche... los peligros se duplican en la oscuridad-

Finalizo mi comentario siguiendo a Alkaeius y su antorcha en medio de la oscuridad del pantano.

Que bueno, ya apareció Cassandra. -Que agresivo Axys, creo que con ella puedes ser directo... bueno, con respecto eso... lo único que se es que debemos destruir esa cosa rápidamente, puede estar maldita, pero no será indestructible. Cassandra, Axys tiene razón y no deberías tocar esa flauta, deberíamos hacerlo cuanto antes además, no creo que necesites esa flauta para atraer hombres.

Puede que lo correcto sea destruir la flauta, pero Cassandra no está tan desenfocada, si eso se llevó a Ahiron es posible que también lo traiga de vuelta, no sabemos como más podríamos regresarlo, esto si es un acertijo.

-Cassandra, no podemos arriesgarnos a perder dos por culpa de esa flauta no es seguro que eso traerá de vuelta a Ahiron, debemos destruirla, solo tenerla, es un gran riesgo... bailaría nuevamente contigo, cuando quieras, esa vez no te toque, se mover muy bien mis manos, así que no te hagas ilusiones

Me acerco poco a poco hacia Cassandra. -Alkaeius ya encontró a Ahiron, esa flauta no vale la pena. Doy un saltillo para el lado opuesto donde se encuentra Axys para que este aproveche y se muevan rápidamente hacia ella sin que se percate, este juego lo tenemos muy bien trabajado, como si estuvieramos sincronizados. -A pesar que lo niegues, se que quieres "bailar" nuevamente conmigo además, tu amiguito no es tan rápido para llegar en tu ayuda cuando... Axys actúa muy rápidamente y roba la flauta a Cassandra antes de que ella se percate tomando la flauta con la mano cubierta por un pedazo de manta y envuelve la flauta muy hábilmente para alejarse de ella de inmediato y darle contra el suelo hasta destruirla.

-Puede que no te agradara "bailar" conmigo pero, eso se puede arreglar con el tiempo y por otro lado, prefiero tu hermosa imagen justo como está ahora... Debemos continuar nuestro camino hermosa Cassandra.

-¡Hey un momento Malco!.. Si destruimos esta flauta... que de seguro es un objeto divino ó mágico, creado por el mismo Hades... cómo recuperaremos a Ahirom...- Dice Axys sosteniendo la flauta en lo alto y luego la baja rápidamente  recordando a Zéfiro rondando por los aires.

Ese es el dilema, el objeto es muy poderoso, a base de tiradas puedes mover montañas, pero es maligno, pues contiene la tristeza del genio en contraparte de la esperanza del dios Apolo y la flauta de oro, según la historia.

En un principio, no pasaba nada si se destruía la flauta, pero después surgió lo de Ahirom y su visita al inframundo, si destruyen la flauta, más adelante se tendrá que buscar una puerta hacia los dominios de Hades (algo difícil), la flauta de hueso es una llave.

Ustedes cómo jugadores pueden hacer lo que quieran siempre y cuando sigan las reglas y obvio si les salen las tiradas, y más aún, si su narración se ajusta magistralmente a la aventura.

De ahí en más, todo va bien, sólo las recomendaciones que les marqué y las reglas de cortesía, es todo.

A salido algo bien, en parte Axys tiene razón con lo de no destruir la flauta. -Vale, pues si no la vamos a destruir, Cassandra va de razón, ella es la que tiene más experiencia con estas cosas así que... creo que no queremos problemas con su halcón. Le pido la flauta a Axys, pidiéndole que la deje envuelta con algo para entregársela nuevamente a Cassandra.

-Lo siento, por un momento pensé en que no debíamos arriesgarnos con esto, de todos modos, ¿podrías dejarla envuelta?... por cierto, me agradaría poder bailar nuevamente contigo, solo bailar claro, a menos que quieras algo más.

Ya es momento de proseguir, ya tardamos mucho en este sitio y ahora debemos buscar donde descansar. -Vamos con los demás, es mejor estar en grupo, creo.

La noche es bastante fría aun en el pantano y no quiero saber que más podemos encontrar.

Aeneas observa silencioso la escena. Desde el intento de Cassandra de usar la flauta y el posterior robo por parte de los ladrones. Tenía sentimientos encontrados respecto de la flauta. Por un lado era claramente un objeto poderoso, capaz de encantar a muchas personas a la vez. Por otro lado, su uso podría acarrear terribles catástrofes, como todo objeto poderoso. Se muerde los labios pensando en el problema de la ausencia de Ahirom y la posibilidad de deber ir hasta el mismo Hades a buscarlo. 

-Creo que Malco tiene razón. No debemos quedarnos aquí mucho tiempo más. Pueden venir cosas mucho peores que Furias o seres encantados. Lo cual me recuerda que las Furias podrían estar siguiéndonos aún....

Reitero que deberíamos irnos entonces.-

Dice al fín el estafador acomodando su escudo y lanza en la espalda, dispuesto a seguir viaje cuanto antes.

Observo la discusión por la flauta, un objeto mágico cómo ese siempre será peligroso, ya ha comenzado a traernos problemas, veo que deciden conservarla, -¡Hagan lo que quieran con esa flauta! pero por Artemis, debemos seguir, la noche apenas comienza y las Furias son muy buenas rastreadoras.- Enfilo hacia el débil resplandor qque queda de la antorcha de Alkaeius, dejando atrás a mis locos compañeros de viaje.

Después del peligroso encuentro con las Furias y el no menos desagradable enfrentamiento con el extraño ente, el resto del grupo continúa su travesía por el pantano Helia, a cada paso siguiendo al antorcha del hoplita, el cansancio, el frío y la humedad comienzan a minar la resistencia de los viajeros.

Axys  silba una vieja canción esmirniana mientras monta en el asno de Ahirom con la pertenencias de este último desaparecido. -Anda Príapo... menudo nombre te han puesto...- espolea al animal el cuál rebuzna como quejandose de que el ladronzuelo sea parte de su carga.

Mientras el grupo avanza en medio de los ruidos propios del pantano y su pestilente olor a fango podrido, Malco detecta un olor diferente y asqueroso, sus demás compañeros no tardan en tener que cubrirse la nariz ante el incipiente olor igual o peor de repugnante que el que los rodea.

Al seguir avanzando encuentran restos al parecer humanos puesto que los cuerpos todavía se les puede percibir la tela desgastada y carcomida por el tiempo que han transcurrido expuestos a la intemperie.

El grupo se mueve por el pantano por ahora bastante tranquilo, hasta Axys está de buen humor, eso no es difícil pero ya vamos con menos uno, ojala aun exista y ese sea temporal.

El camino no es difícil, de hecho el pantano se encuentra bastante calmado, poco tiempo después empiezo a notar algo raro, ¿cuerpos?, pedazos cuerpos humanos desperdigados por el pantano, ¿que está pasando? me acerco a investigar los cuerpos en busca de algunas respuestas sobre que los pudo haber atacado o por qué están así, pobres, esto debe estar ayudando al hediondo olor del pantano. Oye, estas personas ya no necesitarán dinero así que... no estuvo tan mal.