Partida Rol por web

23 de Rova de 4.070 AR. Tarde.

La chica de Garridan Viskalai termina de retirar los platos del pequeño comedor de El Ciervo Blanco. La mesa se encuentra pegada a una pared con ventanas dando al encrespado mar del golfo de Varisia. Las gaviotas revolotean lanzándose de cuando en cuando en picado a las aguas para capturar algún pececillo y huir con él antes de que sus compañeras se lo arrebaten del pico.

Con un licor de hierbas y palillo en los dientes, decidís dar comienzo a la sobremesa.

-Amigos..!...pensaba que no íbais a sobrevivir a esos jabalíes ni al extraño Foxglove !!...ja, ja , ja !-dijo Camlo mientras se estiraba en su asiento y seguía "espiando" el trasero de Ameiko de cuando en cuando.

Lapidus se rasco bajo la barba. Viejo, estas tratando de estafarme? Este caballo vale bastante mas que eso. Que tal si ofreces 50 po?

Lapidus se encojio de hombros y carcajeo mientras palmeaba en el brazo a Davirem. Viejo zorro, has hecho un buen negocio. Cogio las 37 monedas oro y las 5 de plata y las introdujo en su bolsa.

 -Espero que vuestra cacería no fuera muy provechosa,... -Dijo Kaddok con una sonrisa- Os hemos esperado para ir a hablar con la alcaldesa, pero creo que deberíamos ir lo antes posible a verla.

Bueno, cazamos un jabali, y mas imporante un caballo, dijo el enano mientras guiñaba a sus compañeros.

Grygory y Galstak aportan poco más a los comentarios de Lapidus y, superada la modorra, conseguís levantaros de la mesa y acudir a vuestra cita en el ayuntamiento. La casa consistorial no queda muy lejos del Ciervo Blanco, no tenéis más que seguir la Calle del Acantilado hasta alcanzar la Calle Principal. en esa misma esquina, frente a la Guarnición de Sanpoint, os espera vuestro destino.

La mayor parte de la planta baja de este edificio de dos pisos consiste en un salón de reuniones con asientos suficientes para la mayoría de adultos del municipio, aunque en las reuniones municipales rara vez asisten la mitad de los ciudadanos. El piso superior contiene oficinas y almacenes, mientras que una bóveda en el sótano hace las funciones de banco del pueblo desde hace décadas.

La reunión tiene lugar en una confortable sala de la segunda planta a la que os conduce un ujier nada más veros aparecer por la puerta. En ella se encuentran el hosco Sheriff Hemlock, la alcaldesa Deverim, a la que reconocéis por haber asistido a su discurso en la apertura del Festival de la Mariposa, y una tercera persona a la que no habíais visto antes por las calles de Sandpoint. Se trata de una elfa de aspecto juvenil, como todas, espigada, con el pelo rubio recogido en una coleta, grandes pendientes y adornos de plumas y huesos sobre una armadura de cuero muy gastada.

-Buenas tardes, señores, tomen asiento.- Os ofrece la alcaldesa con una sonrisa cordial.- Antes de nada quisiera agradecerles en mi nombre y el de los ciudadanos de Sandpoint su intervención en la fatídica noche del festival y en el hogar de los Barett esta mañana. Y ahora, Sheriff, si es tan amable de hacer las presentaciones...

Hemlock toma la palabra y hace los honores. -Señores, ésta es la señorita Shalelu Andosana, podríamos decir que se trata de un miembro no oficial de la milicia. - La elfa inclina cortesmente la cabeza.- Shalelu, ésta es la última hornada de héroes de Sandpoint, los señores Camlo, Grygory, Kaddok, Galstakk y Lapidus Rocabrecha. Hace años que Shalelu es una espina que las tribus goblins tienen clavada. Hay pocos en la región que sepan tanto de esas bestias como ella. La señorita Andosana acaba de informarnos del reciente aumento de acitividad goblinoide en la zona, no sólo en nuestra localidad. Ha habido un notable incremento de asaltos de goblins en el Camino de la Costa Olvidada, especialmente en el valle situado entre Bosqueortiga y Musgobosque. Ayer mismo una granja al sur de Musgobosque fue quemada hasta los cimientos por una banda de goblins. Afortunadamente Shalelu se encontraba cerca de allí y, aunque no pudo hacerse nada para poder salvar la granja, pudo rescatar a la familia y poner a los goblins en fuga. La familia se ha instalado en otra granja cercana, pero el problema goblin no ha terminado. Y ahora viene lo más interesante. Shalelu, por favor...- Cede el turno a la miembro "no oficial" de la milicia.

-Belor ya me ha contado vuestras hazañas contra los goblins. Bien hecho.- Dice con una amplia sonrisa y la perturbadoramente dulce voz propia de una hembra elfo.- He dedicado estos últimos años a impedir que causaran demasiados problemas por estos lares, pero esos renacuajos son tenaces y muy fecundos. Como zarzas que muerden. A lo que iba: hay cinco grandes tribus goblin en la región que siempre se han estado anulando unas a otras con sus riñas y disputas tribales. Sin embargo, por lo que he podido averiguar, hubo miembros de las cinco tribusen involucrados el asalto a Sandpoint. Algunos de los goblins de la tribu de Musgobosque con los que me topé ayer estaban bastante vapuleados, y no paraban de hablar de los "pataslargas" que habían acabado con tantos de ellos. Ahora que nos conocemos parece bastante evidente a quién se estaban refiriendo en sus descripciones. Parece que habéis dejado huella. En cualquier caso, el hecho de que las cinco tribus estén trabajando juntas me resulta muy preocupante. Los goblins no se llevan bien a no ser que tengan planeado algo grande, y los grandes planes requieren grandes jefes. Me temo que alguien se ha hecho con el control de los goblins y les está organizando. Y a juzgar por los recientes asaltos, sea lo que sea aquello para lo que se están organizando no se trata de nada bueno para nosotros.

-Esta misma tarde me voy a Magnimar con algunos de mis hombres para pedir hombres que incrementen las filas de la milicia, al menos durante unas semanas, hasta que hayamos podido determinar la amenaza que suponen los goblins.- Os informa Hemlock.- Mientras estoy fuera Shalelu se dedicará a curiosear un poco por el Bosque de Shank, la Meseta del Diablo y otros lugares donde se sabe que anidan los goblins, para ver si puede averiguar algo más. Si no os importa, me gustaría que permanecierais en Sandpoint durante los próximos días. Los vecinos parecen haberos cogido cariño.- Dice.- Y veros por el pueblo impedirá que se preocupen demasiado por mi ausencia.

Galstak se rascó la barba, algo indeciso.

- Mmmmmm... ¿queréis que nos hagamos ver por las calles, nada más? Yo tenía pensado quedarme... - se puso a contarse los dedos, y repitió la cuenta, por si acaso - s...siete días antes de seguir mi camino. ¿De cuántos días se trataría? - Miró al Sheriff

-Dos semanas como mucho.- Responde Hemlock.- La tardanza es más por la burocracia magnimariana que por el viaje.

-Quizás resulte una tarea peligrosa...-intervino Camlo-¿habíais pensado en una paga para nuestros servicios?. Los materiales de mis conjuros son difíciles de conseguir...

Mientras hubiese paga de por medio le daba igual seguir en Sandpoint unos días más...

Uhm. Y aqui nadie dice nada del fiambre desaparecido? Por lo que pudimos ver pudo tratarse todo de una treta para robar el cadaver del viejo sacerdote. Hemos seguido el rastro de los ladrones hasta una de sus madrigueras. Podriamos acabar con ellos. El enano parecia enojarse mientras hablaba al ver que no iban a partir cabezas de goblin y toda la burocracia que se planteaba...

-y como bien dicen  Lapidus y Kaddok también podíamos ir hasta su guarida y encargarnos de los goblins que se llevaron el cuerpo... -Su mente calenturienta imaginó  multitud de monedas de oro y trofeos en el cubil de los goblins

-¿cuanto nos pagaría la ciudad por la cabeza del lider de los goblins?- dijo Camlo mientras sonreía maliciosamente..y miraba de reojo al druida

- Así que quieren que protejamos Sandpoint. - dijo Kaddok - No parece una tarea muy dificultosa, pero antes de asignarnos la tarea definitivamente, nos gustaría informar sobre lo que hemos averiguado, supongo que no cambiará la situación, pero tampoco nos hará daño. Ayer decidimos seguir el rastro de las criaturas que se llevaron al cuerpo del Padre Tobyn del cementerio. Estuvimos andando varias horas por los caminos de la zona, e incluso nos adentramos en el Bosqueortiga y pudimos seguir su rastro hasta verificar que esos goblins venían de Cimadelcardo. Teníamos intención de ir allí para ver si podíamos averiguar algo más, pero si ustedes creen que lo que debemos hacer es vigilar el pueblo, no tendré impedimentos en hacerlo. 

Shalelu, el sheriff y la alcaldesa escuchan las palabras de Kaddok en silencio e intercambian miradas de preocupación.- La verdad es que no habíamos avanzado nada en la investigación de la desaparición de los restos del padre Tobyn.- Confiesa la alcaldesa Deverim.- Pero lo que cuentan refuerza la necesidad de traer más hombres a Sandpoint y contar con su presencia en caso de que haya otro ataque. Les ruego que permanezcan en el pueblo hasta que Belor vuelva de Magnimar. La expedición a Cimadelcardo parece imprescindible, pero debe esperar. Las arcas de la ciudad no se encuentran en su mejor momento, pero supongo que podremos pagarles 3 monedas de plata al día a cada uno de ustedes. Llegado el caso, si traen la cabeza del líder de los goblins, estoy segura de que todos los vecinos estarán encantados de hacer una colecta para recompensarles como es debido.- Responde a Camlo.