Partida Rol por web

Me miro al espejo y me veo rara con ese tipo de ropa. Sonrío a los demás. 

—Bueno, voy a hacer pasar a los refuerzos —digo mientras me dirijo a la puerta. 

Afuera estaban Ruby, papá y mamá. Les hago una seña. Mi disfraz no es tan perfecto como para que no se me reconozca a escasa distancia. 

Una vez estamos dentro, empezamos a repasar el plan e informamos a Hitomi de todos los pasos. Puesto que mi equipo quedaba cojo, y Matt es el más cercano a ella, le digo que venga con nosotros. De esta forma, estamos equilibrados y somos tres personas por equipo. 

—Equipo azul: Aiko señuelo con Joel y Ace. Equipo amarillo: Leo, Zoe y River. Equipo rojo: Moetan, Lamrod y Ray. Equipo verde: Matt, Hitomi y yo. Por último, el equipo blanco será la propia Aiko, con Jean y acompañada de Green, yellow y Ruby. Serán nuestro refuerzo en caso de que la cosa se ponga fea. Aunque ahora que somos tantos y puesto que el rotom de Jean está en el sistema, quizá, Jean, puedas entrar también. Sólo promete que no serás tan descuidada, por favor... No cuentes información restringida, no actúes de forma incauta. Eres consciente de las consecuencias que puede tener para tu futuro. Sabes defenderte, eres muy buena. Sólo hay que ver tus medallas y la cinta, pero tienes que tener cuidado. Por eso, de entrar, uno de los tres irá contigo —digo señalando a los adultos. 

Hago una pausa para que Jean conteste y ver a quién escoge. 

Obviamente, tanto Green, como Yellow preferirían estar dentro ayudando, Ruby por otro lado no pensó que tuviera que actuar así que le va bien estar de refuerzo.

Jean negó con la cabeza - me he comprometido a cubrirte, no negaré que de mala gana, y que prefería actuar, pero la decisión tomada es la que manda, Rotom facilitará las comunicaciones, y estaré a tu lado con Abra para aportar una fuga de emergencia, también puede ayudar Rotom a manipular las puertas para que se abran 2 cada vez en lugar de una en caso de necesitar que alguien corra a otro sitio.

Además era consciente de que su ímpetu le llevaría a actuar a favor de quien le nesitara, no le preocupaba su futuro, mientras asegurara un futuro para los pokemon y sus amigos, ella era así.

Cuando Kat se rió mientras me iba "desvelando el gran misterio"... yo me iba poniendo rojo al ir comprendiendo como consiguió aquella llave... aunque trate de disimular sonriendo un poco -Si... ya lo entiendo. Tarde, pero lo he entendido. Hoy desde luego no es mi dia más espabilado- dije riendo un poco. Pero como si le empezase a transmitir mi sonrojo a Kat, mientras me lo agradecía ella se iba coloreando y yo normalizando y sonriendo con ganas -Yo también me lo he pasado genial contigo- le terminé diciendo, aunque no podía evitar estar un pelín colorado. Ains... me hubiera encantado ganar el concurso... pero seguro que si insisto a mamá seguro que consigo que presione a papá para que me haga una joya para Kazuki.

Al ver como Kat se preocupaba por lo de Jean, negué con la cabeza con media sonrisa -Tranquila que no eres la mala de ninguna peli... eso se lo dejamos a Juncomam. Iré a felicitarla en otro momento; seguro que lo entiende- dije quitándole peso al asunto. Seguramente a ella la vería en el centro pokemon o cuando nos vayamos a dormir, así que no había problema.

Cuando le quito importancia al tema de Tembladera diciendo que "era de lo que no había", me puse colorado -Gracias por no molestarte...- dije nervioso mientras guardaba a Stunfisk en su pokeball.

Salimos a la calle, donde ella me sorprendió con aquello -¿Quieres que te haga de guía?- pregunté -Es que yo tampoco es que sepa demasiado salvo lo que he leído...- le confesé. Tampoco es que yo supiera demasiado... yo podía contar mil y una cosas de Hoenn porque prácticamente he estado por todo el por mis padres... ¿pero de Kanto? Pufff... era complicado -Bueno... a ver, espera que piense... que me has pillado con la guardia baja- le pedí algo de tiempo cruzando mis brazos y pensando -A ver... aparte del centro comercial y Silph S.A... la estación de tren y al aeropuerto como que no son lugares muy divertidos a no ser que te gusten los trenes y los aviones... hay una arena regional pero no se muy bien que hacen allí, y... ¿el rascacielos ese donde "prueban pokemon"?- iba murmurando mientras casi podría verse humo salir de mis orejas de pensar -Podríamos empezar por el centro comercial supongo...- termine de decidir descruzando los brazos -Creo que desde la azotea se podía ver toda la ciudad... así que desde allí podríamos decidir que hacer y de mientras ver buenas vistas con un zumo... y ojear las cosas y hacer algunas compras...- termine diciendo con media sonrisa. No me parecía tan mal plan -¿Te parece bien?- le pregunté. Se que había dicho que confiaba en mi; pero siempre es bueno saber si opinión.

Al salir, veo que ninguno de los chicos está presente. Les busco con la mirada pero no les encuentro, por lo que me encojo de hombros y me encamino al gimnasio de Ciudad Azafrán.

 - "¡Vamos Umbreon! Tenemos un gimnasio al que desafiar."

Comienzo a caminar mientras pienso en la batalla contra Sabrina. Todos dicen que es una oponente de un poder inmenso y hasta el momento he conseguido a duras penas mis medallas, probablemente desafiarla no sea lo más sabio pero hay una sola forma de saber si estamos a la altura mi equipo y yo.

Camino, cada vez más decidido, para plantarle cara a este nuevo desafio.

Me encontré con los demás en los pasillos y avanzamos juntos hasta llegar al camerino, y fué cuando me fijé en la copia de Aiko, estaba tan bien notado que era imposible notar la diferencia. También me fijé en que tampoco conocía a algunas personas de la sala, exceptuando al amigo de la infancia de Wiss, Matt se llamaba? No estaba seguro... En cuanto acabe esta misión me presento a los que quedan. Al rato nos hicieron esperar fuera del camerino y volver a entrar.

-Guau... esto de hacer doble equipo se nos ha ido de las manos...-

Oh, por Arceus, me dolía la cabeza de ver tantas copias de Aiko juntas en una sola habitación, espero que funcione lo suficiente para mantenerlos ocupados y coger las cosas de Aiko. Segun el plan que decidimos, Ace, la señuelo (que sería la más convincente segun veo) y yo entraríamos en la planta baja a distraer lo máximo posible a los de la organización, mientras que los otros equipos se encargaban de otras funciones. Teníamos que causar la mayoría de estruendo.... y eso aun no sabía como hacerlo, tal vez con la guitarra que vi en la tienda esta mañana? Entonces me acordé, tal vez la aiko real tuviera algun movimento de tipo fuego dentro de ese libro, asi que me dirijí a la "Wisty Verditer" que habia quedado.

-Hey... "Wisty", se que es preguntarlo demasiado a destiempo, pero podrías dejarme el libro de movimientos un momentillo, por favor? No tardaré ni dos segundos- Temía que mis movimientos pokemon no fueran suficientes para enfrentarme a lo que iba a pasar, asi que vale mejor prevenir.

Mientras Aiko(Wisty) replanteaba de nuevo el plan de ataque, Wisty(Aiko), estaba hablando con la Aiko señuelo sobre lo que tendría que hacer, dandole unos papeles y enseñandole las cosas que tenía que presentar. Finalmente después de la respuesta se dió cuenta de la petición de Joel - Lo siento, pero eso es mejor quelo hagamos luego. Apenas si tenemos tiempo para todo.

Entonces se acercó a Aiko(Wisty) y completó el plan de actuación - ¿Puedo añadir algo? Joel y Ace, cuando vayais a la sala de conferencias, no podreis estar donde vuestra Aiko presente los productos, tenedlo en cuenta. Moetan, estos son los codigos de seguridad para acceder al ordenador del sotano - dijo mientras le daba un papel con una serie de codigos - Y Wisty, este es el codigo de la caja fuerte y su llave - dijo dandole lo propio a ella - Esperemos que no sea complicado hacerlo todo.

Matt se limitó a cruzarse de brazos y asentir, con una pequeña sonrisa dibujada en sus labios y situado junto a Wisty disfrazada de Aiko, puesto que pertenecía a su equipo. No podía evitar estar algo nervioso, incluso emocionado, por lo que aquella situación les deparaba. Aún así mantenía la seriedad, e incluso había guardado a Aipom en su Pokéball para evitar que hiciera trastadas varias.

Mia se sorprendió ante tu cambio de actitud. Al irte fuera, salió contigo un poco deteniendote - Espera Ryo - Te dijo mientras te agarraba del brazo - ¿No vas a ir al gimnasio ahora? - su pregunta fue un tanto curiosa, ya que estaba claro que ella pensaba eso. - Entonces... tengo tiempo hasta que deba reunirme con esa gente. - dijo sonriendo.

-La verdad quería despejarme viendote combatir contra Sabrina, pero si lo harás mañana podemos hacer otra cosa hoy - Parecía feliz por esa parte, de hecho empezó a mirar a todos lados mirando a los edificios y los carteles de alrededor para proponerte algo que hacer, pero antes de seguir hablando te comentó - ¿A ti te apetece hacer algo? Podriamos ir a esa presentación de objetos nuevos en Silph S.A

Según caminabas hacia el gimnasio, no podías dejar de ver carteles en todos lados sobre una presentación de objetos nuevos productos de Silph S.A. Todos presentados por Aiko, por la imagen que podías ver en los carteles. Llegaste a pensar que incluso había más carteles de los que debieran, pero es ciudad azafrán una ciudad de industria y comercio así que puede que pudiera ser normal.

Lo más raro al llegar al gimnasio es que incluso en el tablon de anuncios del gimnasio también había un par de carteles.

El Gimnasio estaba abierto por lo cual decía que Sabrina estaba dentro, pero no había entrenadores cerca. Igual la fama de lo dura que es, era veridica.

Miro a Mia tras detenerme.

- Iba al centro comercial a ver si tenían piedras noche. Sabrina utiliza pokemon psíquicos, asi que tengo que prepararme adecuadamente. Además, mis pokemon necesitan entrenamiento, Shana acaba de evolucionar y tengo que prepararla para el combate. Además de Ponyta. (suspiro un poco) Te vienes? Lo mismo ves algo bonito para ti.

Katsuki reia al ver tu reacción ante su treta de robo. Realmente era algo muy inteligente y que nadie se esperaría pero... ¿Cuanta gente sabría que la llave de un antiguo laboratorio se reciclo en dos llaves de taquilla? Y más importante ¿Por qué lo hicieron? ¿No era más facil destruir la llave? Eran preguntas que se te pasaban por la cabeza, pero el recordar el concurso te hacia quizás ablandar dichos pensamientos. Así como a ella parecían hacerle más delicada.

Salisteis rápido sin darrle mucha importancia al tema de Jean o al del pokemon en tu taquilla, y ante tu pregunta incredula, Katsuki simplemente asintió, pero sonrió al ver que creias que tu no podías guiarla - Al menos eres más ciudadano, o callejero, que yo. Yo suelo tomar atajos, ya sabes - Ladeó la cabeza en esa última frase ya que hacía referencia a sus robos, pero no quiso darle mucha importancia. Luego tras un rato escuchandote "pensar" sobre lugares a los que ir, se quedó sonriendo mientras paseaba unos pasos alrededor tuya hasta que te decidiste. Entonces miró al centro comercial - El centro comercial ¿Eh? - Miró precisamente a la azotea donde proponías. Sonrió y luego te miró con una cara de decepción - ¿Tan rápido quieres atacar a mi punto debil? - Fue entonces cuando te acordaste del acantilado de la carrera y lo alterada que estaba mientras estabais colgados, obviamente tenía vertigo, pero antes de que pudieras decir nada, te agarró de la mano y empezó a avanzar, tirandote un poco de tu mano - Está bien. Vamos. Confio en ti.

Me ahorre interrumpir, pero miré muy muy mal a Joel. No me puedo creer que se le ocurra pedir el tutor en un momento como este. Sin embargo, no hay tiempo para discutir al respecto. Empiezo a repartir los pinganillos y explico cómo funcionan. 

—Recordar, apretar una vez para hablar. Podremos escuchar siempre a Aiko. Es para coordinarnos. 

También les explico al equipo que se queda fuera cómo funcionan los controles del equipo de Aiko. En ese momento, me doy cuenta de que... los cuatro colores legendarios están presentes. Aunque en lugar de un rojo, es un tono rubí. Quizá eso pueda ayudarnos a coordinar una posible retirada. Pensaré en ello. 

Al ver el cartel, no pierdo tiempo y me dirijo hacia Silph S.A. Aiko es una buena amiga y me gustaría acompañarla en este momento, que debe ser algo muy importante para ella y su familia. Miro a Umbreon mientras corro y le hablo:

 - "El gimnasio no irá a ningún lado. Podremos volver después."

Mantengo el paso, lo más rápido que puedo para así llegar luego y no perderme su presentación. Creo que va a merecer la espera.

Me quedé un poco confundido con su pregunta y su cara de decepción -¿Tu... tu punto débil?- pregunté mientras meditaba... hasta que lo recordé. Soy tonto, soy muy tonto -¡¿Porque siempre recuerdo las cosas después de decirlas?! Kazuki me demostró que tenía vértigo con lo del acantilado... ¡y yo voy y le propongo ir a una azotea altísima a ver el paisaje!- empecé a pensar muy nervioso.

Iba a decir algo, como corregir el plan e irnos a otra parte más cerca del suelo, ella me cogió la mano y me empezó a arrastrar hasta el centro. Lo que dijo... me hizo ponerme un poco rojo -Vale, de acuerdo- dije con una sonrisa algo nerviosa al ver que no se lo había tomado mal.