Partida Rol por web

A pesar del frío de la noche, Rene sentía la camisa empapada de sudor. Logró permanecer silenciosos e inmovil cuando las luces se habían encendido y había escuchado a uno de los soldados registrar la habitación de música, a pesar de que el corazón se le había acelerado cada vez que su sombra se había proyectado en la ventana. Por suerte, se limitó a registrar la habitación, y desde el lugar en el que estaba el guarda que estaba en el jardín no podía verlo. Permaneció inmovil también cuando subió el otro soldado, y tuvo que escuchar impotente como sacaban al vizconde de su escondite.

Probablemente no habían pasado más que unos minutos, pero parecia que hubiesen sido horas las que había tenido que estar en aquel tejado. Pero por fin tenía vía libre. El molesto vigilante del jardín fue llamado al interior de la casa. Oyó cerrarse la puerta de entrada mientras von Braum impartía nuevas órdenes y el soldado que estaba en el piso de arriba arrastraba a Jean Paul hacia las escaleras. Ahora tendría que escoger si retirarse junto a Sven o arriesgarse en una acción desesperada para intentar rescatar al vizconde.

Toso y escupo un poco al piso para recuperar el aire.

-No... no esperaba que... tratarán así a... a quien ya se ha rendido...

Pese a la situación de tensión no pude evitar una mueca de disgusto al escuchar como pregunta por la espia Prusiana

"este hombre es un estúpido incorregible"

La situación se ha tornado de lo mas incomoda, y dentro de poco allí habrían soldados de la condesa y los agentes ingleses. Me mordí el labio al pensar en Lady Alma Foxtroth, estaba entre los invitados, no me cabía duda que cumpliendo una misión similar a la mía, y también sin duda participara en el interrogatorio "otro mas para el interminable listado de amores imposibles del vizconde"

Pero esa no era la cuestión, yo tenía una misión y no podía permitir que las torpezas del vizconde me detuvieran. Tendría problemas, pero como noble debería ser capaz de salir airoso, seguramente pasaría algunos meses en una prisión. Pero mi deber era rescatar a Miranda Wennings, y ahora que todo el mundo estaría abajo en el interrogatorio del vizconde era mi última posibilidad de cumplir la misión. Tras esto la seguridad sería reforzada

En cuanto las cosas se calmaron un poco entre de nuevo en la sala de música, atento al menor sonido o movimiento. Había salido gente de las habitaciones, pero no Miranda, y von Braun ha confirmado que está aquí, solo tenia que encontrarla e irnos rápidamente.

-Debería ir a dormir un poco. -dijo von Braum dándole unas palmadas en la espalda a la persona que aún estaba con él en el pasillo-No se preocupe, no habrá más emociones esta noche

Los pasos de von Braum bajaron por las escaleras, y el otro hombre debió de hacerle caso, porque se oyó cerrarse la puerta de una habitación. Las luces del pasillo seguían encendidas, porque se veía luz entrando bajo la puerta, pero todo parecía en silencio en el piso de arriba. Unos momentos después, varias personas comenzaron a subir las escaleras.

"Miranda ha bajado también, seguramente para identificar a Jean-Paul"

Esta certeza me hizo replantearme seriamente la misión.

Podía esperar a Miranda en su habitación, era la única mujer así que sería sencillo, y tendría que volver, aun era noche cerrada y tendría que dormir. Pero durante la espera llegarían los nuevos guardias de la condesa y los ingleses. demasiada gente. Era bien posible que aguantasen toda la noche entre preguntas e indagaciones

Marcharme e intentar actuar en el baile parecía la opción mas sensata, pero el baile estaría muy vigilado. Sacarla de aquí ahora sería limpio, sacarla durante el baile serían puros fuegos artificiales.

Bajar donde interrogaban a Jean-Paul, una locura sin lugar a dudas.

¿que hacer? tras la puerta de la sala de música la incertidumbre me corroía, finalmente decidí seguir adelante con la misión. Cuando pasaran las personas que escuchaba fuera me metería en la habitación de miranda, me escondería bajo su cama y la esperaría. Solo podía esperar que no tardara demasiado, y que a su vuelta aun tuvieramos tiempo para escapar

A través de la puerta entreabierta, Rene espió como uno de los hombres que había bajado antes volvía a su habitación, y como Miranda y aquel otro joven eran escoltados a las suyas por un soldado, que cerró sus puertas con llave antes de volver a bajar.

No era un inconveniente demasiado grande.Cuando el soldado desapareció por las escaleras René sacó sus ganzúas y entró en el cuarto de Miranda.

La joven encendió la luz cuando Rene entró en su habitación.Estaba sentada al borde de su cama, vestida con su camisón y una bata. Y no parecía muy sorprendida de verlo allí.

-Suponía que eran ustedes. Pero es demasiado pronto, me temo. No puedo irme aún.-dijo, sin la menor señal de nerviosismo.

Cerré la puerta a mis espaldas y sonreí a Miranda

-me alegro de ver que se encuentra bien, aunque me va a tener que explicar eso de que es demasiado pronto, a mi me parece el momento mas adecuado, sus padres están muy preocupados, como ya supondrá-

Antes de que continuase hablando escuche de nuevo a través de la puerta, sería mucho mejor si nadie nos interrumpia

-explíquese por favor, y le ruego que sea breve, mi situación aquí no es demasiado segura-

Miranda se mordió el labio, titubeando, pero luego comenzó a hablar.

-Supongo que en esta situación no tiene sentido seguir con los secretos. Conozco cual es la versión que cree saber sobre el por qué estoy aquí. Pero no lo sabe todo. El chantaje, el que Wilfred estuviera aquí prisionero, todo eso es real. Pero también era una oportunidad para lograr llegar hasta las instalaciones. Su "rescate" tendría que habernos permitido escapar cuando me hubiese hecho con el arma que piensan instalar en el Carro. Las medidas de seguridad eran demasiadas. Aún no he podido hacerlo.

Considere brevemente lo que podía y que no podía decirle a Miranda, pero el tiempo corría en mi contra y no podía permitirme ser sutil

-¿esta usando su secuestro para robar el arma que instalarán en el carro? Es muy valiente, pero ese arma no estará aquí, y de hecho Jalabar y Moreau se dirigen a Pomerania a por ella, para conseguirla o destruirla. Ya no tiene sentido que permanezca aquí, así que por favor, acompáñeme y escapemos-

Miranda no parecía demasiado satisfecha, pero asintió.

-De acuerdo.-dijo mientras se ponía unos zapatos y cambiaba su bata por un abrigo- Wilfred está en la habitación de al lado. Vendrá con nosotros.-No era una pregunta y se dispuso a salir sin esperar a la respuesta de Rene. Se detuvo justo antes de abrir la puerta y se dio la vuelta para mirarlo.-Y algo más. No sé con quien ha venido pero es importante que los prusianos no sepan que que tenía otro propósito al venir aquí. Si cree que sus acompañantes no serán capaces de mantener el secreto, quizás sea mejor que sigan creyendo que sólo vine por Wilfred.

Considere un momento la posibilidad de que Jean-Paul adivinara que Miranda había accedido a esto para acercarse a esa misteriosa arma. Siendo un romántico empedernido con una fuerte tendencia a rendirse a la mínima ni se imaginaría un acto tan valiente por parte de ella

-no se preocupe, sus verdaderas intenciones están totalmente a salvo. Y me rescatar a Wilfred es un inesperado extra que me parece estupendo- eliminar la herramienta de chantaje de los prusianos sobre Miranda era el colofón de esto. No imaginaba que les encerrarían juntos los muy necios

-no perdamos mas tiempo esos villanos podría regresar en cualquier momento-

Pegue el oido a la puerta para escuchar y luego salí, ganzúa en mano para liberar a Wilfred sin perder mas tiempo

Rene abrió la cerradura de la habitación contigua. Pero antes de que pudiera entrar, fue Miranda quien se adelantó y abrió la puerta. Se agachó junto al extraño perro metálico.

-Silencio-le susurró

Fue hacia la cama donde el muchacho estaba dormido. Los ojos de Wilfred se abrieron llenos de sorpresa y confusión cuando ella le cubrió la boca con la mano.

-Nada de preguntas.-dijo Miranda-Nos vamos.

Por la manera en que miraba a Rene y a Miranda parecía que tenía muchas que hacer, pero asintió y se vistió con rapidez, mientras Miranda metía al pequeño autómata en un maletín.

En el extremo de la calle donde Sven estaba esperando, apareció du Lapin, acompañado de Miranda y otro joven. Jean Paul no parecía estar por ningún lado. Por su parte, Charles también se encontró con que no todo era como se lo esperaba. Donde debería haber dos carruajes aguardando sólo había uno.

¿Que le ha pasado a Jean Paul? preguntó entre el carraspeo de un susurro

¿Y quien es este? señalaba al acompañante Encantado de volver a verla señorita Miranda corrigió en forma de reverencia el haber olvidado saludar a la dama.

¿Que ha pasado?

Ayude a Miranda y Wilfred a subir al carruaje y luego me senté en el lugar del cochero junto a Sven haciéndole una indicación para que emprendiéramos el camino

-Jean-Paul ha sido capturado y ahora mismo deben estar interrogándole, mas nos vale alejarnos pronto, no se lo que tardará en hablar. Hay una hermosa agente inglesa en el grupo de interrogación, así que puede ser muy poco tiempo- Mi voz sonaba algo exasperada, Jean-Paul resultaba demasiado poco fiable en cuanto habían mujeres por en medio

-El acompañante de la señorita Miranda es Wilfred su enamorado, recuerde que la chantajearon para que acompañara "voluntariamente" a ese indeseable que se hacia pasar por americano-

Mientras hablo busco en el cajón del cochero un mapa de carreteras

-en estas circunstancias tendremos que seguir la ruta mas corta hacia francia y rezar porque no nos intercepten-

¿Capturado? preguntó a Du Lapin mientras ayudaba a Miranda a subir al carruaje. No lo puedo creer

Salgamos de aquí. se subió de un salto al cajón del cochero Tendrá que contarme por el camino como pudieron capturar a nuestro aliado. arreó a los caballos para que iniciaran la marcha. Francia está muy lejos.  Me temo que será un duro y peligroso viaje.

Asenti a las palabras de Sven, si sería duro y peligroso -necesitaremos cambiar de caballos para avanzar rápido, y evitar los principales nucleos de población- mientras hablaba buscaba en el mapa la ruta mas idonea a nuestras necesidades

-Respecto a la captura de Jean-Paul fue muy desafortunada, de repente los guardias subieron alertas pese a que no habíamos hecho ningún ruido. Temí que le hubieran descubierto a usted. Los dos nos escondimos, pero Jean-Paul.. bueno, no eligió bien donde esconderse. Con todos esos soldados poco pude hacer yo. Pero el es un noble, espero que eso le sirva para que le respeten-

Aunque cuando descubrieran la ausencia de Miranda y Wilfred no se mostrarían nada amables con tal de descubrir nuestros planes. Con expresión sombría seguí trazando nuestra ruta