Partida Rol por web

The Walking Dead - Historias

Escena I: "Atrapado en Port Ginesta"

Cargando editor
07/02/2011, 09:23
Director

Notas de juego

Vale, cuando Isabel vuelva ya describiremos lo que pasa. Perdón la tardanza que he estado el finde out.

Cargando editor
07/02/2011, 10:52
Dr. Lampkin
Sólo para el director

Notas de juego

Sin problemas, mientras ella sepa que debe actuar, y no esperar un post de Mi pj, adelante.

Cargando editor
08/02/2011, 00:22
Isabel Álvarez

-Joder...- fue lo primero que dije al ver el desorden de la pequeña habitación. Llevo una mano a la frente, gesto de frustración mientras observaba cada uno de los objetos de allí dentro.

El olor a humedad y a polvo comenzaban a fastidiar a mi nariz -no puedo perder tiempo...- murmuro y comienzo a adentrarme al desorden.

Cajas y más cajas, que al ser destapadas el polvo inundaba la habitación y me producía estornudos y tos, lo cual hacia que la busqueda fuera lenta y torpe.

Y allí estaba el botiquín, con prisa lo abro, esperaba encontrar medicamentos que sirvieran a Irene, antibióticos y para bajar la temperatura.

Cargando editor
08/02/2011, 11:13
Director

El botiquín no es demasiado grande, así que lo descuelgas de la pared y te lo llevas hacía el vestuario dónde estaban Romo y aquella chica. Al volver a la habitación te quedas pasmada, el impacto hace que hasta se te caiga el botiquín que en esos momentos llevabas en las manos.

Irene yacía en el suelo muerta con el cuello roto y agujereado por una herida que parecía reciente. A su lado estaba Romo Lampkin, con semblante alicaído mirando a aquel cadáver, sus ojos parecían llorosos.

Cargando editor
08/02/2011, 13:42
Dr. Lampkin

Dejo caer la vara de la escoba al suelo. No soy consciente del retorno de Isabel a la sala. Sólo puedo apartarme unos pasos del cadaver de Irene, y al topar con la pared de la sala, mis rodillas flaquean, y termino deslizándome, sentado, todavía con lágrimas en los ojos.

Paso así unos segundos, hasta queel ruido que provoca el botiquín al caer de las manos de Isabel, me devuelve al estado de alerta en el que llevo viviendo desde ayer. Me limpio las lágrimas, pasándome la manga por la cara, para poder mirar a Isabel a los ojos.

- Tuve que hacerlo... ella... ella... no quería que se volviera como... como esos monstruos. - Trago saliva con dificultad. - Asi que... acabé con su dolor.

Me levanto con pesadez, como si cargará un gran peso sobre mis hombros. Mantengo la mirada fija en Isabel. No se como puede reaccionar. Al fin y al cabo, he matado a una persona, la segunda en pocas horas, no importan las circunstancias, y entendería que se asustara.

Cargando editor
08/02/2011, 16:24
Isabel Álvarez

El impacto que sentía era indescriptible. Llevo las manos a mi boca que estaba abierta por la misma impresión del momento. Mis ojos estaban desorbitados, mi corazón latía con fuerza y unas nauseas intensas se apoderaron de mí.

No había pasado mucho tiempo, unos diez minutos quizás y Romo había tomado esa difícil decisión, sin dejarme siquiera intentar algo, salvarla, aunque ambos sabíamos que la posibilidad de supervivencia de Irene, era casi nula, pero, aún así me sentía mal por no haber hecho nada por ella, por incumplir mi promesa.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, por aquella escena y por lo que tendríamos que enfrentar ¿Sobreviviríamos o nuestro destino sería como el de Irene?. Mis dos amigos invadieron mi mente, especialmente Marcos ¿Sería capaz de quitarles la vida? un escalofrío recorrió mi cuerpo y deseché aquel triste pensamiento.

Limpio mis ojos con las manos y me encamino lentamente hacia Romo, pasando cerca al cadáver de Irene. Me detengo enfrente suyo e instintivamente lo abrazo, rodeando su cuello con mis brazos -lo siento...- sabía que éstas palabras no lo reconfortarían, ni aquel abrazo, pero era lo único que podía ofrecerle.

-Debo sacarte de aquí- susurro cerca a su oído, con una voz temblorosa, emotiva. Me aparto de él un poco para mirarlo a sus ojos; le dedico una tierna sonrísa -tomemos lo que nos sea útil y marchemos de aquí cuanto antes.

Cargando editor
08/02/2011, 18:22
Dr. Lampkin

Devuelvo a Isabel la mirada, pero no hay palabras que puedan salir de mi boca que puedan hacerla entender lo que acaba de suceder. Como un niño, me dejo consolar brevemente, abrazado a ella... Pero ese nuevo habitante en mi, ese oscuro pasajero nacido del instinto de supervivencia, casi paranoico, hace que, mientras abrace a Isabel, no quite ojo al cadaver de Irene.

Sin embargo, sentir calor humano de nuevo hace que me tranquilice. O al menos eso es lo que quiero creer, y no que me esté volviendo un asesino despiado... aunque sea contra criaturas como estas, ya son dos las muertes que recaen sobre mi conciencia... Y no se si que me afecten o no es positivo o el germen de una frialdad incipiente.

Descanso mi rostro en el hombro de Isabel, hasta que, decidida, me indica que salgamos de aquí. Lamento tener que separarme de ella, pero hay que ponerse en marcha. Ya algo más tranquilo, respondo con un seco movimiento afirmativo con la cabeza cuando me sugiere salir de aquí.

- Utiliza una de las bicicletas que hay en la sala de almacén, volveremos con tus amigos cuanto antes. - Me dirijo a la puerta de salida, tomando mi propia bicicleta. - Debemos organizarnos cuanto antes.

Cargando editor
09/02/2011, 01:45
Isabel Álvarez

La idea de reunirme nuevamente con mis amigos alegraron un mi estado ánimico, pero ver el cuerpo sin vida de Irene no dejaba de afectarme, pero... debíamos continuar.

Antes de subirme a la bicicleta, abro el botiquín, buscando medicamentos que nos pudieran ayudar en un futuro, aunque sabía que una mordedura de una criatura de esas, era mortal, aún así, cojo todos los medicamentos sin mirar si servían o no y los guardo en mi mochila, al igual que el martillo y el destorinillador que Romo me había prestado.

Regreso nuevamente a la habitación y saco una bicicleta; antes de subirme a ésta miro por toda la habitación en busca de algo que pudiera ayudarnos, pero lo único que podía ayudarnos eran armas y aquella idea me asustaba, pero si tenía que disparar, lo haría.

Salgo lenta y cuidadosamente de aquel pequeño lugar enpolvado y comienzo a pedalear hacia la salida -Es hora, Romo- le dedico una sonrísa y miro una última vez a Irene.

Cargando editor
09/02/2011, 08:26
Dr. Lampkin

Mientras Isabel termina de preparase, dedico unos segundos para cubrir el cadaver de Irene con las toallas que nos habían servido de mantas para pasar la noche. No es lo mejor que podría hacer, pero la situación era caótica, y aun no sabíamos hasta que punto peligrosa.

De modo que deberíamos prescindir de ciertos lujos, como enterrar a un amigo, para poder actuar con rapidez.

Cargando editor
09/02/2011, 09:37
Director

Los dos cogéis una bicicleta cada uno y os disponéis a salir, cuando estáis fuera de la caseta, os quedáis inmóviles durante unos instantes. Un poco más al fondo, dónde empieza el muelle en el que os encontráis, divisáis a una figura, parece un hombre mayor, con traje. Su cuerpo esta lleno de heridas y sangre, parece que esta arrastrando un pie como si lo tuviera roto. Parecía estar vagando por el puerto sin rumbo, pero al cabo de unos segundos repara de vuestra presencia y empieza a andar hacía vosotros alargando las manos como si os quisiera tocar a distancia.

Un poco mas lejos, podéis distinguir otra figura, lo que no acabáis de verla con demasiado detalle.

Notas de juego

No se si te refieres a armas de fuego Isabel, pero en ese caso, no las hay en ese almacén.

Cargando editor
09/02/2011, 11:04
Dr. Lampkin

- Genial... - muevo la cabeza, como demostrando que me esperara algo así - más zombis... Mejor será que pedaleemos lo más rápidamente posible, evitando a estas criaturas, ¿estás de acuerdo, Isabel?

y subiendóme a mi bicicleta, comienzo a pedalear, apartándome lo más posible de los zombis que se aproximan, y pendiente de que Isabel me siga.

Cargando editor
09/02/2011, 16:39
Isabel Álvarez

Y otro más. La situación, sin duda, era preocupante y era inevitable no preocuparse. Debíamos encontrar un lugar seguro para pasar la noche y pensar en planes que nos permitan sobrevivir.

Miro a Romo, alarmada y atemorizada. Asiento una vez la cabeza como respuesta a su pregunta y comienzo a pedalear a su lado, mirando a cada poco tiempo, la distancia que nos separaba del nuevo zombie.

Cargando editor
09/02/2011, 17:22
Director

Cogéis las bicicletas y os ponéis a pedalear por el muelle para salir del puerto, por desgracia aquel zombi parecía avanzar hacía vosotros cortandoos el paso en el estrecho muelle.

Notas de juego

Veamos, necesito que hagáis una tirada y me narréis como intentáis sortear al zombi que esta en medio del camino. Suerte :)

Cargando editor
09/02/2011, 18:51
Dr. Lampkin

Cuando compruebo que Isabel está a mi rueda, vuelvo a mirar al frente sólo para descubrir a ese maldito monstruo tapándonos el paso.

Momentos desesperados requieren medidas desesperadas
, pienso para mis adentros. Esquivar al zombi no garantiza que pueda hacerlo Isabel. Ya había perdido a una compañera, y no permitiría que volviera a suceder, aunque me costara mi propia vida.

De modo que me lancé contra el zombi, tratando de hacer algo que no practicaba desde niño, alla en Tallin, donde vivía de niño, una preciosa ciudad a orillas del mar Báltico.

La maniobra consistía en imitar a nuestro heroes de televisión, derrapando mientras giraba, para colocarme de lado frente al zombi, y poder golpearle con la fuerza del impulso de la bicicleta. Esperaba que, al estar cerca del borde del muelle, pudiera tirarle al agua, y dejar el paso libre para que Isabel pudierdiera pasar sin peligro.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d20
Motivo: Empujar al zombi
Resultado: 14

Cargando editor
10/02/2011, 00:09
Isabel Álvarez

Disminuí la velocidad al ver que no sería tan fácil el paso. Sentí miedo en ese instante ¿Y si se abalanzaba sobre nosotros y nos mordía?.

Romeo lo empujó con intensión de tirarlo al agua, casi lo logra, pero me daba la impresión que aquella criatura se incorporaría y le atacaría. Mi instinto me condujo a empujarlo segundos después de Romo, si la primera no tenía éxito completo, quizás la segunda le ayudaría.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d20
Motivo: Empujar al zombie
Resultado: 11

Cargando editor
10/02/2011, 13:36
Director

Lampkin intentó una maniobra desesperada para tirar a aquel zombie, pero tuvo que ir con cuidado de no caer él por el estrecho muelle. Al acercarse el zombie pareció activarse y quiso abalanzarse sobre Romo, pero este, entre la frenada y ayudándose un poco con su pierna derecha consiguió desestabilizar al zombie. Aquel cuerpo herido y magullado, trastabilló un poco y aunque ni siquiera se cayó al suelo, os dio una ventaja suficiente para pasar sin problemas y salir de aquel muelle.

El zombie se recuperó rápido y se giró para perseguiros, pero con la ventaja de velocidad al estar encima de dos bicicletas, no teníais nada que temer, pues no os alcanzaría.

Cargando editor
10/02/2011, 13:53
Dr. Lampkin

Vuelvo atras mi cabeza mientras pedaleo, y veo a Isabel, que ha conseguido esquivar al zombi, tras haberle desestabilizado entre ambos. No le hemos derribado, pero al menos hemos pasado. Sonrio a Isabel, levantando el brazo en alto, como celebrando un triunfo.

Pero esto es sólo el principio. Debíamos encontrar a sus amigos, e intentar descubrir que estaba ocurriendo. Porque si me ponía a pensar en lo peor... uff... la responsabilidad me superaba por momentos, así que me centre en pedalear, ya a menor ritmo, para ponerme al lado de Isabel y entre los dos, volver al lugar donde dejamos a Marcos y Liz.

Cargando editor
10/02/2011, 16:41
Isabel Álvarez

Le devuelvo la sonrisa a Romo, una amplia y radiante, y lo imito levatando el brazo, soltando una carcajada. Quizás no era el momento de reir, pero habíamos esquivado a ese ser y estábamos vivos ¿Qué mejor motivo que ese para celebrar?.

Mantengo el mismo ritmo de pedaleo de Romo, mirando siempre en todas direcciones, sabía que en cualquier momento aparecería otro zombie, por lo tanto, debíamos estar en alerta permanente al menos hasta estar en un lugar seguro.

-¿Tienes alguna idea de donde pueden estar Marcos y Liz?- me asustaba un poco no saber nada de ellos, estar incomunicados, solo esperaba que estuvieran bien y no volverme a separar de ellos, eran como mi familia.

Cargando editor
10/02/2011, 16:55
Director

Os alejáis del puerto, primero pedaleando lo mas rápido que podíais para alejaros de esa aberración, pero poco a poco os vais cansando y disminuis el ritmo. Parece que ya os habéis alejado suficiente. Estáis a la altura del rompeolas que separa la playa del puerto y os paráis un momento para tomar un respiro, mirando siempre de reojo que no aparezca de nuevo aquel tipo.

Aunque hay viento, podéis oír no muy lejos de ahí como está sonando una alarma, no sabríais decir si de un coche, de una casa o una tienda, pero el pitido es muy agudo y se oye incluso a distancia.

Cargando editor
10/02/2011, 18:10
Dr. Lampkin

- Una alarma... ¿Te dijeron tus amigos hacia donde se dirigirían? - sonrio con ligera sorna - Quizá son ellos los que han hecho saltar la alarma...