Partida Rol por web

-¡Por supuesto!-Responde ella con entusiasmo-No es que las simulaciones sean malas, pero seamos sinceros, no cubren ni la mitad de las situaciones reales que podemos encontrarnos ahí fuera. Y ya me las he pasado todas varias veces-Te resulta algo difícil, son bastante largas y hal al menos 20. ¿Cómo ha podido pasarlas todas en dos semanas y media? Los reclutas en prácticas empezaban su periodo de prueba una semana antes que los definitivos, pero aún así... ha debido ser un entrenamiento bastante intensivo-Bueno, algunas más de una vez y algunas sólo una vez-Corrige, siendo consciente de que ha sonado un poco exagerado. Pero aún así, las 20 simulaciones a tí te llevaron casi 5 meses, a dos simulaciones por semana. Ella debía haber hecho varias cada día.-Creo que estoy preparada, pero me gustaría verlo por mí misma-Te sonría-¡Muchas gracias por la oportunidad, Alexander! ¡Vamos a por todas!

Inclina un poco la cabeza.

-¡Ah, por cierto...!-Te dice, cogiéndote la mano y levantándola un poco-La próxima vez intenta estirar un poco menos los brazos y abrir un poco más los codos-Te coloca, poniéndose detrás de ti y moviéndote el cuerpo-Así-Asiente-¡Mucho mejor! Seguro que la próxima vez superas los 2000 puntos.

Mira el reloj de la entrada.

-Vaya... ya casi es hora de cenar.-Suelta la pistola en el cajón correspondiente-¡A zampar! ¡Nos vemos por aquí!

Ella sale de la galería de tiro tarareando una divertida canción de un famoso anuncio de televisión de una marca multinacional muy vendida. Alguna vez habías consumido alguno de sus refrescos. Breeze. No estaban nada mal.

Tras una cena insulsa (Ya que a esas horas el economato ya está cerrado), te diriges a tu barracón justo a tiempo para el toque de queda.

Aitor y Migby te saludan, tu otro compañero de cuarto casi no consigue llegar a tiempo para la llamada del toque de queda, cuando llega ya estáis todos en la cama. Os hace gracia el suspiro de alivio que emite. Es curioso como puedes sentirte cerca de algunas personas simplemente por estar a su alrededor.

La noche se hace corta. Pero el sueño de hoy se te antoja reparador y vigorizante. Te sientes lleno de energía. Solucionar tus problemas con Rick parece haber sido tremendamente efectivo para lidiar con el estrés. Ya era bastante estar encerrado en una lata espacial con unas 300 personas a las que veías todo el rato como para encima tener problemas con uno de ellos.

El aviso de la mañana te pilló ya casi despierto. Ves a Aitor retorcerse por su despertador fisiológico, debe ser duro despertarse a base de descargas eléctricas. Pero cuando no puedes oír... una alarma de esas características no hace gran cosa.

Te saluda, parece un poco cansado hoy. Aunque no te sorprende. Hasta hacía unas horas tú también estabas agotado. La adaptación a una nave espacial era un proceso largo y tortuoso, más para alguien con sus dificultades.

Aquella mañana ya podíais ver por las ventanas el planeta que visitaríais. Venochi. Un planeta selvático de tipo II. Con vida en las primeras fases de evolución. Habría que aprovechar mientras aún se pudiera para explorarlo. ¿Sería aquella la misión del tablón?

-Equipo de tierra, TEL para el aterrizaje en Venochi 16 minutos. Se recuerda a todos los miembros del equipo de tierra que el tablón de asignaciones de la cubierta B es de lectura obligatoria para todos los miembros. Se recuerda también que todos los integrantes del equipo de operaciones deben cumplir su cuota de incursiones mensuales o recibirán sanciones administrativas.-La IV de la nave informa a todos los internos de buena mañana-¡Buenos días!

No querías saber a qué se refería con sanciones administrativas.

-¡Alexander!-Apenas habías puesto un pie en el suelo, la puerta se abre y Virion entra con una sonrisa de oreja a oreja en la boca-¡Buenas noticias, hoy tenemos una misión de lo más importante!-Se acerca y te mira a la cara, aún tienes legañas-Es muy importante, así que no puede esperar. Adecéntate, desayuna y escoge un equipo. Nos vemos en la sala de lanzaderas en una hora.

Se va casi tan rápido como llegó.

Alexander se levantó bastante confundido por el exceso de información repentino que habían dado tanto la IV como su instructor, Virion. Casi no le había dado tiempo a salir de la cama cuando éste ya se había ido por donde había venido, dejando a Alexander con la palabra en la boca. Se encogió de hombros, se frotó los ojos para espabilar y consiguió al fin ponerse en pie.

Decidió ducharse rápidamente y comer algo en seguida. Si tenía que escoger a un equipo y reunirlo en la sala de lanzadera en menos de una hora, tendría que darse cierta prisa. Aprovechó esos momentos para meditar sobre la misión y qué podrían encontrarse: ¿unos Zedian secuestrados? ¿Quién sería el enemigo? Tendrían que tener mucho cuidado para sacarlos a todos de ahí. Ese tipo de asignaciones siempre eran muy complejas y la presión era muy grande porque ver morir a civiles o, aún peor, de causar daños colaterales no dejaba de ser una posibilidad.

Después de desayunar algo ligero, Alexander se había decidido. En ese tipo de misión, necesitaría un equipo versátil y, sobre todo, concentrado en la misión. Gente preocupada por los secuestrados y no por perseguir a los malos. Por eso escogió a Aisha, que sería una buena primera línea de defensa y tenía un gran corazón, y a Rick, que ya había demostrado ser capaz de ingeniarse algunos trucos con la tecnología en caso necesario, y además contaba con la confianza total de Alexander. Además, hizo llamar a Melissa como auxiliar tal y como le había prometido.

Hablando de promesas... Pensó en Collin, pero realmente no lo conocía lo suficiente como para meterlo en una asignación de ese tipo. No necesitaba inseguridades en una situación como esa, sino un equipo coordinado y cohesionado que lo diera todo por la gente en peligro.

Fue a la sala de lanzaderas, esperando encontrar a todo el mundo allí.