Partida Rol por web

Dante sospechaba que el poder que detentaba Apofis para con la tecnología es lo que le hizo darse cuenta de estar siendo observado e inmediatamente ocultar su presencia. No es improbable que supieran que habían atacado al sirviente, pero esto no iba a cambiar la actitud ya de por si hostil que el individuo tenía hacía el grupo de humanos a los que consideraba ganado.

-Eva, Marcos tiene razón, ve con el niño y ponlo a salvo. Si no hemos regresado en unas horas destruye todas las cúpulas desde el lado de la Tierra. Quizás hasta fuese mejor que lo hiciera nada más subir, sabía que morirían pero no podían arriesgarse a condenar a todo el planeta.

Tomó el walkie-talkie de la mujer y la despidió con un sincero abrazo. Una vez la mujer se encaminó al tubo Dante buscó el resto de las pulseras y las repartió entre el resto de los presentes, guardando una para Hakim.

-Ponéoslas, si por casualidad salimos con vida de esta tendremos que salir como alma que lleva el diablo. Habrá que montar una distracción para que podamos ir subiendo de uno en uno.

Lo que no veía claro era como iban a salir de la pirámide con los insectoides apostados por todo el jardin, amen de los guardias y el propio Apofis. Y luego estaba el asunto de la patrulla que rodeaba a Hakim.

Piensa algo Dante, !maldita sea!, piensa.

-Creo que nuestra única posibilidad sigue residiendo en los collares, de modo que los chantajearemos con destruir estos o las cerraduras de las cúpulas.

Para esto último era necesario que alguien se quedara en la sala de los elevadores, podían marcarse el farol de que Eva estaba ahí, pero tal vez tenían cámaras u otro medio para ver el engaño.

Comentó el plan con sus compañeros, ofreciéndose a acompañar a Moctezuma.

Samuel no aprueba la actitud de Marcos del todo, pero le deja hacer.
Marcos tras ver el obelisco quiere que Eva suba con Dani y se marche a la tierra.
Tambien quiere ir en ayuda de Hakim.
Eva advierte a Hakim por el walkie
Luego piensa en la propuesta de Marcos y en Dani.
Dante opina lo mismo y añade de destruir las cupulas del lado de la tierra sino regresan.
Dante reparte el resto de pulseras y piensa de hacer una distracción. Pensaba en hacer algún tipo de chantaje a Apofis.

Mientras hablas uno de esos bichos parece que va a atacarte.
Usas la tirada de antes con el mas 1?

Apofis esta subiendo las escaleras con tres vigilantes gatos.
Dos suben a Tres escalones de difwrencia de él y el ultimo esta detras de Apofis.
En cualquier momento lo teneis allí.

Contestando a Dante, dice: “Nosotros mismos no debemos quitarnos los collares, son nuestra protección. Y en cuanto al chantaje de destruir nuestro medio de transporte de regreso a la Tierra… puede funcionar si ellos nos creen bastante determinados para cortarnos nuestro propio camino de regreso… Pero ya se acercan. Váyense ahora mismo. Espero que con mi atuendo no repararán en mi y que puedo deslizarme inofensivo dentro de la pirámide y juntarme a Hakim.”

Con esto, entra con un paso decisivo, pero sin apresuramiento exagerado, en los pasillos de la pirámide, tratando de evitar toparse directamente con Apofis e imitando el porte y andar que había observado en el sirviente. Se encamina en dirección de la salida de la pirámide.

-¡No hay manera de que usted o Hakim salgan vivos en un enfrentamiento directo con los alienígenas! gritó a su compañero, mientras lo asía por el brazo.

-La única esperanza que tenemos es la de negociar darles un collar. La idea es que uno se quede abajo como prueba de buena fe mientras el resto sube a la Tierra, luego el último que subiera volverá a bajar con dos collares, uno al cuello y otro para entregar y entonces subiremos los dos. Por supuesto la cabina que corresponde a ese collar habrá que inutilizarla en el lado terrícola. O mejor dicho inutilizarlas todas salvo las imprescindibles.

Primero tendrían que conseguir un salvoconducto para Hakim hasta la pirámide y si la susodicha Bastet se mostraba imperturbable el conocido como Apofis era un hueso aún más duro de roer.

El holocubo te muestra apofis en los subterraneos de un planeta.
Poniendo miles de huevos
De estos nacen los Quinoides

Eva
Al final subes con Dani?

Mientras discutis el proximo movimiento el sirviente comienza a moverse.

Al escuchar la voz de la remilgada Eva Geend el corazón me da un salto.

"¡¿Seguís con vida?! ¿Dó... dónde estáis?"

Emocionado y por un momento ajeno al peligro que me rodea, me dispongo a sumergirme en la conversación, cuando, de repente, tras la roca en la que me oculto, aparece uno de esos bichos. Dejo caer al suelo el walkie para sostener con firmeza el fusil.

Miro entre sorprendido e indeciso a todo el mundo como reaccionan a la situación en la que estamos, no consigo entender todo lo que ocurre aquí, pero me parece que la situación se va aclarando.

- Necesitamos la pulsera para subir por ese "tubo-ascensor", ¿no? - Me dirijo a Dante mientras me da una pulsera que me pongo con aire distraído. - Y necesitamos las llaves-amuleto para poder activar las esferas e irnos, ¿cierto? Y por lo que parece Apofis quiere usar una llave-amuleto para viajar a nuestro planeta, ¿es así? 

Dejo de hablar mientras me acerco al tubo y miro con curiosidad a mi alrededor. 

- Por desgracia. - Digo con pesar. - No podemos dejar que Apofis obtenga una llave-amuleto de las que activa las esferas bajo ninguna circunstancia, ya que él es como una reina de las hormigas, puede poner miles de huevos y de ellos nacen los insectos antropomórficos que nos atacaron a Hakim y a mi al llegar a este planeta. Si consigue una sola de las llaves-amuleto hemos condenado a nuestro planeta a convertirse en una réplica de este.

​Me encojo de hombros antes de continuar:

​- Tal y como yo lo veo la situación sólo hay tres posibilidades. O bien usamos las llaves-amuleto para escapar de aquí ahora mismo, o las destruimos inmediatamente o condenamos nuestro planeta al exterminio.

Ya, fogoso pero no muy racional, Marcos estaba a punta de lanzarse camino de regreso al apoyo de Hakim, pero las reflexiones de Dante como de Samuel le dan a entender cuán peligroso fue en realidad su plan, no para él sólo, esto al instante no le importa, pero por la humanidad entera. « Dante, apruebo por completo tu plan. Entonces, esperamos aquí a que vegan y los chantajeamos con los collares para que liberen a Hakim. Por lo demás, opino por seguir a la letra todo tu plan. » Se desprendre del atuendo del sirviente, le da al este, que comienza de moverse, un fuerte puñetazo para hacerlo regresar al reino pacible de la inconciencia, y le pone el atuendo que le había de nuevo. “Entonces, hay que esperar a que venga Apofis, ¿no?”

Todos parecen ya metidos en materia así que cojo a Dani en brazos. Le miro su cara rosada, sus ojos cerrados, su pelo rubio y le beso en la mejilla.

-Vamos, cariño-le susurro como si pudiera oirme.

Antes de salir echo una rápida mirada a Dante. ¿Por qué? No lo sé, pero espero que no le pase nada.

-Os veré arriba-pienso mientra siento que tiemblo un poco.

Hakim ve como uno de esos bicho va hacía ti y con el arma disparas y ves como el estomago explota como un globo de agua ante tu disparo, el ruido es como el de un trueno. Tres Quinoides baten sus alas y dan un gran salto hacía ti para atacarte, pero aún puedes hacer otra acción. Mientras una flecha ves como silva en el aire y se intenta clavar en tus carnes (necesitas sacar un 5 para que no te den o reducir el daño)

Samuel comenta sus nuevos descubrimientos tras mirar los holocubos. Es una decisión muy complica la que hay que tomar. Mira la mesa de comida y ve la posibilidad de lanzarla escaleras abajo (df1).

Marcos reflexiona su movimiento ¿tal vez el negociar no sea tan mala idea?.

Eva tiene el walkie y ha conseguido hablar con Hakim este esta en un verdadero apuro. Decide subir al ascensor, para ello se ha de poner la pulsera y el ascensor la elevara hacía el obelisco, mientras esta en el tubo Dani parece respirar con algo más de problema (el tiempo se acaba).

En eso apenas queda cuatro escalones para que apofis invada vuestro espacio de la biblioteca, su escolta va armada con unos extraños palos.

Veo a los bichos brincando hacia mi y a la figura que les da indicaciones dispuesta a disparar el arco. Cubierto por los fluidos corporales del primero de mis asaltantes ya abatido, ruedo sobre mi mismo con suma rapidez a tiempo de evitar que me impacten tanto las zarpas de las bestias como el proyectil.

"Y esa ayuda, ¡¿dónde narices está?!"

Ante mi sorprendente reacción evasiva, creo reconocer en los gruñidos de los insectoides algo parecido a la frustración.

Una vez que Eva ha subido por el extraño tubo elevador me coloco justo en el borde del mismo antes de decir:

- No tengo muy claro lo que queréis hacer. - Digo con aire preocupado. - Pero hagáis lo que hagáis no dejéis que Apofis se apodere de las llaves-amuleto que nos han permitido venir hasta aquí o la Tierra estará condenada.

Mientras lo hago miro con tristeza hacia los monitores donde se ve a Hakim en una situación muy apurada.

Aunque Hakim disparase a la mujer suponía que los insectoides seguirían atacando.

Era Apofis en todo caso quien comandaba y tenía poder sobre los seres.

-¡Apofis! gritó en el idioma alienígena Ordena ahora mismo que cesen el ataque sobre nuestro amigo o no tendrás  collar alguno