Partida Rol por web

¡Bueno mi hermano! Acá estamos.

Primero que todo, gracias por ayudarme con esto. Así se me va a hacer mas facil manejar todo el royo de las tiradas, que soy un poco obtuso con eso.

Segundo pues,  asegurate de escribir solo aquí por ahora. Ya con eso de lado ¡Vamos a comenzar! Haz la ficha y hagamos un par de simulaciones.

Eso me honra, me puse aspecto y descripción agregada pero sigo siendo el "Ragdoll Dummy", para este PJ no tener nombre es... Costumbre.

Verás, sobre él... Mira su ropa, mira:

Es un niggah (Más blanco que el culo de un fantasma) delicioso, sí, pero verga que su aspecto no calza con "fantástico-medieval" ni de coñazo, pero necesito que sea él, lo amo. Me hace gracia porque tu topic de lore se llama "Registros Akáshicos" y este PJ en su concepción original era/es un Mago Akáshico de WoD xD, tal cual un espadachín bien cheto y pro y que me gustó su concepto y conducta y etc.

So, ¿cómo lo hacemos? Un guerrero extraño, extranjero tal vez, y ni me pongo con su historia extraña que involucra posibles distorsiones, podría comentarte si gustes pero contigo, con GODdi no quiero pasarme, nunca, primero me corto el puto dedo.

En fin, veamos.

P.D.: Sí, como bien notarás es El Dragón de Katana Zero nada menos, the real one.

Oh dios mio, ¡es el dragón! Me acabas de recordar que el DLC aun no ha salido... ¡Maldita sea! y también me recordaste de una amiga a la que le gusta bastante Katana ZERO... Como sea. Procedamos.

Pues la verdad haz el personaje que quieras, elije la clase que mejor te parezca y todo el rollo. Ya sabes, lo mismo de siempre. Eso si, haz nada mas una sola técnica y un solo hechizo para no perder mucho tiempo en eso. Luego de eso, vamos con las tiradas de prueba.

Ahora, con eso de a quienes voy a seleccionar. Pues por los momentos, aparte de ti, a nadie. Aun no tengo ningún concepto en concreto ni nada por el estilo, así que pues no tengo ningún criterio para ir decidiendo a quien incluir de una y a quien no. El único al que yo estaba seguro de que iba a aceptar era a ti, porque, como te dije antes, eres mi jugador favorito en Dusk, así que mientras mas pueda jugar contigo, mejor.

Ten en cuenta que Justin Stander hizo y hace el fucking 80% del juego, lo único que no hace es la música (Que la hace LudoWic y un par más que le apañan) y creo que el arte sprite, TODO lo demás, historia, programación, él, el tipo es el puto amo de amos, es un Cardi cualquiera.

Vale, pues bien, te cuento brevemente, mi PJ este (Lo dejo como "Muñeco de Pruebas de Trapo" por ahora xD, pero su nombre es otro) viene de fucking Mago Ascensión, el tipo usaba Fuerzas, Correspondencia y Cardinal, era una bestia. Tan así que en la partida donde "nació" peleó con un fucking Nefando y, sí hubo mucha suerte involucrada, le ganó, con 6 agravados encima pero lo mató tal cual, en una pelea que debía ser de 3 personajes (Los otros dos abandonaron la partida y mi chico acá tuvo que llevárselos y alejarlos) él solo. Hecho distinto, o elegido por poderes místicos.

Lo que él hacía era usar energía y distancia (Y poder sagrado/fundamental) para atacar a distancia y cortar usando su battoujutsu/iaido, algo inverso a lo del Dragon Verdadero, pero... Como esto es Testing, hagamos una versión light de mi PJ original bestia y del Dragón mismo pa' no demorarte más. Ya me leí todo así que vamo' pue':

¿Cómo funcionan las Desventajas ¿Es como en WoD o Savage Worlds (Nunca he tenido el gusto de jugar Anima y siempre he querido!) en donde te pones uno en un lado y puedes comprar más Ventajas? Se me ocurre una o dos tal cual para darle aún más toque a este... Muñeco de Pruebas xD.

Entiendo que creo que la cagué con poner Magia 0, porque no dice que deba ponerme mínimo de X a menos que no sepa leer y sí lo decía, pero quería destacar, tal cual, ser full Guerrero en donde mi único Hechizo Especial sea el efecto que me permite "Dragonear", digamos.

Nox podría entenderse como la clásica meditación de combate, o incluso no, o como Ikki de Rakudai Kishi anula los colores para contemplar mejor el campo. Animae puede leerse como la clásica palma de hierro de impacto tipo Wesker incluso, Ouros es más como el rompe-cosas de Sannosuke o el Book of the End (La versión que corta cosas como mantequilla, no la otra super rota rompe líneas de tiempo), ambas podrían asemejarse al Impacto de Un/Cero Pulgadas de Bruce Lee, o el Gatotsu si se usa con espada (Irónico, él usa Battoujutsu/Iaido, pero aún así). Somnos es como... Es rebuscado pero hay un personaje llamado Kiri Haimura que hace exactamente lo que dice, que te corta un poco y sientes como que te raja. Es una técnica de uso cuidadoso y de doble filo porque si se la devuelven, uy, ya que no especifica que no le afecte aún con las inmunidades/aguantes que puedan darle Lumina y el tatuaje Shizen-no-Chikara, punto ciego ahí para un poder choto.

Tempus ya es un estado del ser como lo que hacen los Dragones en Katana Zero, interpretable poco menos, puede ser a lo Soujiro Seta dando Celeridad Vampírica o permitiendo mirar proyectiles lentamente y cortarlos sin detener el tiempo necesariamente, etc., es loco, te lo dejo a tí porque confío en mi deidad personal.

Lumina es, exactamente lo que dice, la Luz de justicia caótica y cruel pero noble que funciona más como un auto-buff para permitirle a Dummy hacer "Dragoneadas" pero del Dragón Verdadero, más o menos, moverse más con una estela lumínica, cortar de lejos, etc.

Sobre las habilidades, casi todas son semi obvias. "Postura" puede servir desde Jojoposear hasta dar un "Porte noble" o postura de combate iaido tal cual o posarse para esconderse o quién sabe, se me hizo gracioso como útil, no podía poner puros poderes del todo de combate, aburrido.

Observar es para activamente buscar situaciones, caminos, debilidades, en combate o incluso tasando, en alguna persona, etc., en donda Alerta es pues reaccionar y sentir lo que sucede como un instinto reactivo, tal cual. Nulidad es la falta de presencia o más bien de gesto, para imponer sobre el enemigo, o no ser seducido (Y aunque lo sea, ¡no manifestarlo! ¡Matty, podrías aprender de esto! ¿¡Matty!? xD). Improvisar es... Improvisar, inventarse estilos o tonterías, si es muy rara me dices.

Y eso. Si te parece bien. Si debo corregir algo me dice GRAN MAESTRO OF POWER. Y sí, con el estilo de Iaido, lo de las Tormentas y demás este PJ hiede mucho no solo a nuestro amigo el Dragón 15 sino a... Vergil.

I'm motivated, as you said in the tema de sondéo.

Vale vale, primero lo primero: Si hay una regla que establece que tienes que tener como mínimo un 1 en inteligencia XD Pero bueno, nimiedades.

Lo otro que te diría es que la Habilidad de "Combate con Arma (Katana/"Exótica")" la quitaras, porque las habilidades son, generalmente, para uso fuera de combate, y una habilidad como esa no sabría yo como aplicarla.

Aja, aparte de eso, te faltó ponerte una desventaja. Eso funciona así tipo, dos ventajas y una desventaja obligatorias, y si quieres una ventaja extra, tienes que seleccionar dos desventajas mas. Y bueno, ya que te confundiste un poquito con eso de las ventajas, creo que tendré que explicarlo con mayor detalle en la escena de creación de personajes para evitar que algo así ocurra de nuevo.

Pero aparte de eso, lo demás esta todo bien.

Muy bien, ahora vamos con las pruebas.

Necesito que saltes aquella pared:

Seria una tirada de Agilidad con dificultad de 14+

Tira los dados, hasta que lo logres para pasar a la siguiente prueba.

Vale, entonces mi bullshit de ser un "ente sin magia pero con elementos mágicos raros" aplica? Tengo dos ideas para desventaja, como estamos en [modo prueba] usaré una que aplique más para cosas de combate y te diré la otra, o quizá me ponga la otra y otra más para poder agregar una ventaja más que siento que me servirá. Tengo varias ideas que quiero renovar tras pensar.

Igual deberías, en mi humilde opinión, forzar CON a 1 además de INT a 1, porque un ser sin Fuerza es... Incapaz de mover nada o dañar, ya, pero un ser sin Aguante, es literalmente el Primo Deshuesado, se muere ante el más mero virus pasando por en frente de él (Ni siquiera entrándole). Bueno, tu juego, tus reglas.

Ya veré las otras skills si es que "Arma Exótica" no cuenta, vamos entonces...

Con eso dicho... Sir Dummy Radgdoll se prepara.

Por un momento el extraño ser que casi parecía no pertenecer a ese mundo pero era claramente un local y su orgullo yacía en serlo, en ser parte fundamental de este universo que defendería volviéndose justicia y poder encarnados mediante la luz, se enfocó en la muralla, tomó los pasos y decidió usar su existencia carnal, un desafío grande, su espada, la Tenshibana envainada en él. ¿La usaría para una acrobacia? Pensó en hacerlo pero ya para entonces estaba moviéndose.

A veces no diferencia entre cuando usaba Nox, Tempus o Lumina o las tres, realmente. Ya para el instante preciso calculó las posiciones, y entonces hizo una pirueta dando un salto inmenso, usando su mano sobre la piedra, ya que en ningún momento la existencia cósmica declaró cual Demiurgo que no podía tocar la pared, pasando por encima de esta con los pies hacia arriba con facilidad casi, sorprendiéndose a sí mismo pero no distrayéndose y cayendo al otro lado de pie, postura de combate, siempre, luego reasumiendo una pose normal.

Sus dedos se posaron frente a su cara instantes tras no identificar enemigos. ¿Por qué? A veces hacía esas cosas, en total silencio serio. Confundía a los soldados que entrenaban bajo o con él... O a sus enemigos incluso, pero sucedía. Bajó las manos y tronó el cuello.

Siguiente prueba, esperaba silencioso, cual huevo de dragón que nunca eclosionaba.

Ahora sí... Ahora sí... No, no todavía.

- Como era de esperar esa prueba no fue nada para alguien de tus habilidades. Saltar una pared no fue nada... Pero viendo la tarea con mas detalle, puede que para alguien que no posea tu agilidad característica saltar esa pared no sea algo para nada fácil... Como sea, vamos a continuar con la próxima prueba.

Justo frente a ti calló un rayo que te cegó por un instante, pero al recuperarte pudiste ver como si hubiese la silueta de alguien dentro del rallo.

- Muy bien. Frente a ti se encuentra uno de mis campeones favoritos. Ten una pelea con el. Y por cierto, te recomiendo que no te lo tomes a la ligera.

El rayo se disipó y por fin pudiste ver bien a la persona que había caído del cielo. Con solo verlo pudiste sentirlo, su aura era abrumadora, este oponente estaba mas allá del nivel de cualquier cosa a la que jamas te hallas enfrentado.

Así que tu seras mi oponente...

¡Preparate!

Pelea Cuerpo a Cuerpo

Enemigo: Héroe lengendario del páramo

Nombre: Kenshiro

PV: 150

ND: 14

Fuerza: 10

Arma: No necesita, ¡El Tiene Puños!. Daño: 3d10

Daño total: 3d10+10

Tras descender de los cielos observó aquella amplia pradera y eventualmente páramo, un amplio territorio muy a las afueras de Aliburn, hermoso y a su vez desolado, como denotando y demostrando los cambios en el territorio que dejaron las antiguas guerras entre ángeles, demonios y los antiguos celestiales de los que alguna vez habrá leído o escuchado de su padre u otros en su día. Aquel lugar osciló un viento y luego un rayo, como si la tempestad y tormenta vinieran a él.

Pero por supuesto, su enemigo era la encarnación misma de las tormentas, llegando en una. No tomó mucho de estar en una postura suave y suelta a una afilada pero preparada, observando a un enemigo preparado marcialmente. ¿Oh? Él también sabía y podía pelear con sus puños, pero las palabras del Demiurgo que le recordaban sus momentos con [][][][]-iel en momentos le dejaron claro: No confiarse.

- Soy la luz, honorable oponente, Héroe del Páramo. Soy el dragón que no eclosiona... Un mero títere de pruebas para este mundo, pero algunos me apodan Fulgor Justo... Y te enfrentaré con todo.

Un gesto de cabeza honorable y... ¿Podía hablar? ¿Hablar era una acción gratis? ¿Había honor aquí?

Abrió sus ojos tras asumir postura y se preparó. No demoró ni un instante:

- Lumina...

Murmuró pero audible, posiblemente en donde el Héroe del Páramo Kenshiro lo escucharía. Su ínfimo poder mágico, ese huevo que nunca eclosionaba, como flor de loto eternamente en el mar de las Akashas inagotables, nunca creciendo, nunca yendo a más, nutrida tal esencia por el poder mixto de su espada, de su tatuaje que empezaba a arder apenas y del propio poder de su señor cuyo nombre mantuvo en oculto por ahora para no desviar más su foco, que ya lo estaba lo suficiente por razones que también debía explicar {después} o {alternamente}. Sus circuitos de poder místico devorados desde dentro con apenas un tallo (O un muñón si se mira de forma más pesimista) pero suficiente, usando su propia energía en un efecto que no era magia, era energía.

Luz pura, le envolvía, cubría todo su cuerpo movimientos y su espada, le hacía uno con el destello, el "Fulgor" que se movía y que alguna vez fue una partícula ínfima de luz como las que dejan las libélulas en las noches, algo que otros de otros mundos o tiempos llamaría un [][][]ón... ¿Qué? Suficiente, pensó en ir con todo pero... Eso estaba mal.

Sí, era tonto el dejar dramáticamente cual personaje de cuento bárdico o libro guardar tu mejor as para el final y no explotarlo al comienzo con un enemigo que sabes poderoso y adquirir la ventaja, tal como es inepto y descuidado el no sopezar al menos el poder de tu enemigo primero, era eso sabio, si es que. No iría con todo, aunque usar Lumina en un enemigo, de primera mano para él, y en general, era bastante, si es que nada el Héroe del Páramo lo merecía.

Tono aplicado:

Serpiente y su flujo, el aliento del que repta. Se preparó para moverse, tomando su espada o estar por tomarla. Apenas lo hiciese esta haría ruido y Kenshiro reaccionaría... ¿Podría? Pues precisamente, eso era sopezar el nivel de poder, diferencias, estilos y... ¡Oye! ¿Qué? ¿Qué ha sido eso?

Oh, pero claro.

Su tema fue "rasgado" como quién rasgaría una espada para pulirla en una forja o para hacer un ruido deliberado y el de Kenshiro colocado, por supuesto, en este páramo-pradera incluso. Sonrió, admitía, no importaba el protagonismo, todos somos piezas. Inclinó aún más su postura y mediante Lumina, sacó su espada usando el iaido como le enseñó el ángel y su sensei a su vez, su mentor místico-humano, el sacar el arma como acto de la vaina, y con ese impulso, cortar no hacia arriba sino engañosamente, de arriba hacia abajo, su vaina moviéndose, Tenshibana en su belleza deslizándose hacia abajo desde lo alto en un giro como de "S" generando una onda que cortaría perfectamente hacia adelante en un tramo de luz muy real y con el filo justo en el punto exacto donde ocurría, visibe, evasible, sí, pero bestial.

Al cortar de esa forma, si Kenshiro se quedaba donde estaba sería cortado... O si ya se había acercado a quedar frente a Ragdoll Dummy, sin más, era un efecto con intención, o incluso le cortaría y pararía a medio camino si iba avanzando en tiempo real. De momento, solo haría eso, pero sabía que pocos usos más le quedaría y se imaginaba cuales serían, pero no cuando ni cómo. Además, invocaría el poder de su señor y maestro cósmico que le hizo lo que es, aparte de su señor padre o su gente que le inspiraba como humano, la parte que no le hacía humano de muchos modos.

- ¡...!

O no era un grito sino una mera exaltación del aliento o eran palabras en ningún idioma ni entendibles por humanos que el títere de trapo de pruebas este imitaba. Evocaba la luz de su ángel para que ese corte pegase con ganas. Dudaba que pudiese matar al Héroe Parámico... Pero demostraba al Demiurgo por encima de todos los ángeles y mortales de razas cuales fuesen...

Que no se lo tomaba a la ligera, ni por si acaso, aún con el corte de su tema, y tocando el de su oponente.

¿Honor, justicia...?

Quizá, quizá.

Dos estelas de luz volaron por el aire a una velocidad mas rápida de lo que el ojo humano es capas de percibir en dirección a Kenshiro. El guerrero adopto una pose defensiva inmediatamente al percatarse de que no seria capaz de evitar un ataque a tal velocidad, y se preparó para recibir el ataque de lleno.

Hasta ahora, ninguna persona que halla recibido Lumina de frente de esa forma había podido permanecer de pie. Pero este hombre no solo estaba de pie, parecía como que si el ataque no le hubiese hecho nada.

- Si ya terminaste, entonces es mi turno. -Dijo aun con los ojos cerrados.

Pudiste sentir como la energía alrededor de Kenshiro comenzó a acumularse. ¡Estaba acumulando su Touki! ¡Estaba apunto de desatar una de sus técnicas!

Un rayo de Touki puro salio disparado de las manos de Kenshiro, dándote de lleno en el pecho y empujándote hacia atrás. Sentiste como que si todos los órganos de tu cuerpo se encontrasen bajo presión extrema, como que si estuvieses bajo el agua a la vez que sentías como que si tu cuerpo entero estuviese en llamas por entrar en contacto con tal cantidad de poder puro impactando contra ti.

Caíste al suelo, aturdido por el golpe, e inmediatamente recobraste tus sentidos alzaste la mirada desde el suelo, solo para encontrar justo frente a ti, a el propio Kenshiro.

Levantate.

Una y dos, era hora. Normalmente este ataque dejaba lisiados o incapacitados a quienes puramente tocaba derrotar o directamente aniquilados a quienes tocaba, bueno, destruir. Pero ahora no solo el corte parecía que sí, le cortó, posiblemente, pero pareciera que no. ¿No le ha impactado siquiera o simplemente es su cuerpo tan poderoso que un daño que debería bajar a alguien normal y romper al menos una roca de mediano tamaño, tal cual el de una persona, o cortarla, que le ignora sin más como si fuese poca y nada cosa?

Pero eso no era todo. Ahora entendía...

Ahora entendía por qué el tema cambió al de él.

Aquel Héroe Parámico aplastó a la serpiente y derrocó al dragón de los cielos al piso y más. Sus brazos alcanzaron a reaccionar con un movimiento, uno con la espada, el otro con sus varios hilos forjados a nivel casi invisible como la "armadura" que usaba y aún pudiendo parar el impacto parcialmente fue simplemente la pura energía, el poder absurdo el que le empujó hacia atrás. Forzó un paso con el pie delantero pero solo le hizo tropezar en un intento de mantener su postura y aún así, caer, soltando un vómito de sangre y sintiendo el quiebre abundante, como si recibiese miles de meteoritos en todo el cuerpo sin aviso ni tiempo lapsado.

Apenas pudo poner una mano en el piso tras caer de bruces, usándola para alzarse de inmediato y reasumir posición. Al verle... Su gesto cambió, el "Fulgor Justo" que era apodado el señorito títere de pruebas rasgoso ahora mismo... Sonreía con malicia, con ánimo, con la alegría de un niño y con el anhelo por la carnicería. Un enemigo que no solo quería sino que podía saciar a su niña, a Tenshibana, su Flor Celestial deseosa de la sangre del mundo completo, la afilada lengua del serpentino que consumía el paraíso, nada menos.

Asintiendo, se empezó a levantar y entendió bien las palabras del Demiurgo por encima de todos los Ángeles, incluso sensei.

Ahora el tema había cambiado a uno más neutro entre ambos pero de concentración y, ya, suficiente de mierdas metas, ahora al menos. Tomó aire y re-envainó su espada con una sola mano, como si Tenshibana supiese o se moviese sola hacia dicha, lo cual era efectivamente tan real como que el cabrón se sabía la posición de sus armas como partes de su cuerpo y lo siguiente, siendo efectivamente su lengua viperina-draconiana. Sentía su tatuaje arder y eso le gustaba, con toda la sangre en su propio traje, en el piso y las heridas abundantes pero no tantas, tampoco era tan débil como Kenshiro-dono podría pensar.

Y usaría eso a su favor.

Activó Nox, y aquel hermoso páramo-pradera prueba de las incontables batallas de los ángeles, demonios y héroes antiguos desapareció, poco a poco el color se deshacía y solamente quedaba nada, el Héroe Parámico incluso dejaba de tener colores, no eran necesarios, solo importaba su posición general y forma general, solo existía Ragdoll Dummy y su enemigo, liberaba su mente de caprichitos y se enfocaba en extremo, dejándose de tonterías, ya había sopezado suficiente (¡Y vaya que sí!).

Ahí, la noche total era su campo de batalla, la oscuridad más absoluta con excepción de sus enemigos y objetos que eligiera dejar, pero ahora, nada, solo el piso general si es que, Kenshiro y nada más, y apenas, era un extremo de su habilidad. No era todo, sin embargo, porque tras envainar... Desenvainaría con un corte esta vez ascendente legítimo, buscando cortar el torso y hombro de Kenshiro sin piedad ni pausa, sin show ni contemplación. Solo él era la partícula de luz que se movía por su cuenta en ese abismo.

Ouros, la oscilancia del dragón serpiente que se mueve y se mueve, el aletéo y a su vez coletazo del devorador de mundos. Un impacto que buscaba no solo cortar con energía (Además de apoyado por Lumina) sino que quebrar lo que tuviese que ser roto, aquel titán de fortaleza que era el Héroe del Páramo. Fue casi instantáneo y se escuchó apenas el resonar de la vaina, pero no "rechinando" sino que simplemente el movimiento de la madera reforzada con metal que la formaba tocando, como haría un tubo de bambú, y si es que, o un adorno en una entrada a la vez que el corte intentaba destajar la carne con un enemigo que seguramente tenía metal por carne o lo siguiente.

Además, sin embargo, se estaría atento, sus pies se prepararían y ahora que carecía de distracciones físicas, estaría atento al siguiente impacto de su enemigo. Incluso, si podía, retaliaría. No podía quedar mal ante el Demiurgo cósmico ni ante el mismo Parámico Héroe, inaceptable.

¿Honor, no? Pues verga que sí, pana.

En el momento en que adoptaste la postura de Nox, Kenshiro pareció reaccionar ante tus movimientos. Se percató de inmediato de la concentración de energía que se estaba dando a tu alrededor y se puso en guardia, preparándose para tu ataque.

Tu Energía Espiritual entró en contacto con su Touki, pero en vez de chocar entre si, la calma y fluidez de ambos causo que simplemente ambas energías se mezclaran, danzando entre si en una incensante pero constante espiral. Ambos estaban preparándose para el próximo movimiento.

Ambos se quedaron estáticos, uno frente al otro, siendo observados nada mas que por los ojos del universo mismo. ¿Quien haría el primer movimiento? ni siquiera la voz del viento podía saberlo.

Entonces...

¡!

Fue mas rápido que un parpadeo. Antes, Kenshiro y tu estaban de frente, con unos buenos 3 metros de distancia, pero a una velocidad mas rápida que un parpadeo, la distancia entre ustedes dos se redujo a unos meros centímetros. El puño del guerrero estaba justo al lado de tu cara y tu Katana apuntando hacia los cielos.

¡Uwaaaaaaaaaa!

¡Habías logrado superar la velocidad del Héroe del páramo! Tu técnica de concentración definitiva te permitió ver todos y cada uno de sus movimientos. Sin nada a tu alrededor que te distrajera, tu cerebro utilizo el 100% de su capacidad para leer los movimientos de Kenshiro y no solo evitar su ataque, ¡si no también contraatacar perfectamente y asestarle un golpe perfecto!

Ouros había surtido efecto, por mas que los músculos de Kenshiro sean mas fuertes que el acero, la mordida perfecta de la serpiente no respeta a nadie. Será por un breve instante, pero Kenshiro no podrá moverse. ¡Esta es tu oportunidad!

_{- Ouros...}

Si bien no quería quitarle crédito a Nox por ayudarle a asimilar la verdadera realidad de la situación, estaba claro que la silenciosa canción y obra nocturna era su secreto, muy como Lumina era su trademark, su marca de haber conocida por cualquier que tuviese ojos, orejas para oir rumores o formase parte y le importase medio milímetro el haber general y puntualmente militar de Aliburn o incluso fuera de pero que lo considerara. Tal cual, soltó ese nombre apenas ese intercambio fuera del tiempo mismo ocurriese, lo que pasaba entre dos guerreros, algo trascendental.

Sentía el poder y veía a Kenshiro-san sangrar y caer como él mismo antes por su intenso golpe. Se secó la boca un poco de sangre y saliva y entonces retomó a envainar la espada, otra vez adentro, fuera y dentro, ese era el estilo, el [][][][][] enseñado por su maestro cósmico.

- Héroe del Páramo. Ya es hora. Honro tu esfuerzo, como has perdonado mi impertinencia.

Mencionó ante el noble gesto del Parámico Héroe antes cuando lo tumbó como un trapo perdonando la falta de consideración del Títere y ahora mismo como ese mismo Sujeto de Pruebas declaraba que los intentos y respeto del mismo Kenshiro eran respetables. Yoshimitsu cambió de posición y activó la única de dos técnicas. Somnos podía usarse al revés, para causar dolor mínimo a cambio de inconsciencia absoluta, como una anestesia de combate, brutal e indolora, en vez de brutalmente extrema para pacificar con gran sufrimiento.

Finalmente, moviéndose con el luminoso destello que le ofrecía Lumina, mró a su oponente, y le respetó. Pero las palabras del cosmos mismos le hicieron entender. Pensó en algo que tanto sensei/kami como su propio señor padre le enseñaron. Contra un enemigo tan poderoso y al que no se le podía ignorar, debía pensar que este enemigo era alguien que iba a ir a matar a toda su familia, aunque su padre ya estuviese muerto. Tenía que imaginarse a Kenshiro como alguien que, aunque obviamente no lo iba a hacer, pudiese hacerlo, el ir, matar a todos esos niños, a todas esas personas, destruir todo lo que él defendía. ¡Pero no podía, era estúpido pensar eso! [][][][][][][][][] era un pésimo actor, no tenía imaginación alguna, excepto para sus reflejos, instintos y esa vez con los cosos de papel, que fue más una inspiración que nada.

Lo tuvo difícil, y al final no pudo, pero procedería. Si no, no era un héroe elegido, después de todo, no podía serlo, no pasaba la prueba. Miró a Kenshiro y estiró al máximo su pierna derecha, la izquierda flectada, suficiente para tener la espada baja, la mano lista y la postura como para un salto de carrera porque eso era. Tomó aire y sintió el flujo como el de antes, el choque de energías absolutas y nulas, oscilando cual impacto de poderes que danzaban, dos serpientes, un titán y un dragón, un extraño símbolo en blanco y negro en su cabeza cual círculo.

Activando Tempus agotaba sus recursos, y con esto veía el universo parar alrededor completamente, por segundos los chirridos de aves paraban y solo quedaba un pitido del viento mismo, desolado como nada, esto sí era un páramo sin duda, el de su alma que aún así protegía al bien, a la justicia, era el fulgor que pretendía heredar la voluntad humana aún si su origen fuese cuestionable.

Dos cojones tenía para poner dos temas en una misma intervención si no, pero es que pensó, por segundos logró hacer lo que los malos actores hacían para volverse excelentes: Imaginarlo. Pensó de verdad en niños llorando, sufriendo, al perder a sus padres, a sus madres, en el abuso como el que sufrieron varias personas a manos de los tipos que realmente se comieron el primer Quiebratormentas, el original, no los mitos de los mitos (Que él mismo a veces propagaba en sus raros momentos de ser odioso y "gracioso" sea con rumores ciertos o ligeramente alterados, como un juego). Pensó en eso y su corazó de encogió de odio pero luego se liberó. ¿Tiempo? ¿Espacio? ¿Dimensiones?

"¿Qué es es? Ahora mismo solo soy el vacío. No estoy aquí, pero lo estaré. No eclosionarás todavía, huevo de dragón, nunca."

Condenó al pobre dragoncillo a no poder eclosionar y seguir durmiendo plácidamente en su cascarón dorado y eterno de loto. Pero ahí, en esa imagen de un bebé durmiendo, sea humano o cachorro, era todo lo que necesitaba para hacer justicia y ser el peón de la luz en este universo, un esclavo voluntario, incluso. ¿Qué mierda iba a necesitar una razón para proteger una sonrisa? Ninguna. Y una lágrima salió de sus ojos porque... Porque Kenshiro era un guerrero fantástico, por algo uno de los, citando, favoritos del Demiurgo cósmico mismo, porque alguien que te deja pararte en vez de pisotearte es un puto héroe.

Y por eso lloraba, porque Kenshiro seguramente jamás haría daño a lo que él defendía... Le ganaría, conocía sus órdenes.

Hoy su alma no le pertenecía, como ayer, y antes de ayer, pero sí su decisión.

- Omae wa mou... -Postura al máximo, preparación.- Ikiteiru...

Un idioma, de nuevo, ese idioma raro que podía hablar y que intentó enseñarle a su padre humano de niño pero nunca pudo, aún con el intelecto y recursos del hombre mayor en sus días. Significaba... "Ahora tú... Vives".

Y pasó de largo a través de a luz, con un único corte. Era algo tan fugaz que no se sabía si era otro corte como el de antes con desenvaine y tajo o si era una estocada en el instante de impactar simplemente estaba en un lugar y fluía a estar en otro, terminando cansado y especialmente al gastar toda su energía interna, Lumina seguramente se apagaría pronto o muy pronto igual, si es que o lo hacía ya mismo, variaba.

Otro envaine de la espada, incluso si se caía, de nuevo, tras vencer o no.

Honor, te lo dije.

El tiempo pareció ir lento mientras tomabas tu postura y te preparabas para lazar el ataque final. El golpe de gracia que cerraría con broche do oro el final de esta batalla. Agotando el resto de tus recursos para usar una ultima técnica.

Tu movimiento fue fluido, preciso, perfecto. Incluso un dragón que nunca eclosionaba podía llegar a volar tan alto como uno adulto, incluso si fuese por solo un instante, un misero pero hermoso destello de pura gracia y belleza. El tatuaje en tu espalda brillo con las llamas abrasadoras de tu pasión y entonces... Ejecutaste tu técnica a la perfección y tu oponente calló, dando fin a la batalla...

Entonces, haciendo los movimientos adecuados, limpiaste la hoja de tu Katana y la envainaste lentamente, guardando el fuego del dragón que nunca nacerá dentro de la vaina.

...

Ya entiendo.

Ahora lo entiendo... Un hombre como tu nunca...

Sangre y fuego.

"Fulgor" significaba, específicamente, una luz tan grande y absurda como las que salían de los mismos soles legendarios, luces tan potentes que podían cegar y hasta herir a multitudes sino mundos completos o al menos pueblos completos de regiones. Tal cual, probablemente ese era el nombre de ese ataque sin nombre usado bajo la habilidad que distorsiona la velocidad propia más la habilidad que mueve mediante la luz. Aquel huevo en la flor de loto navega por los mares de las almas y palpita, descansando como un Dragonite dragón-serpiente descansando, sin tener que ser castigado a no tener patas, ni condenado a volar por la atmósfera sin parar hasta que se acabara el universo. Reposa en un... Fulgor dorado, suave.

No cayendo, a sangre y fuego, usa su esfuerzo entonces y opta por tomar su mano. ¿Por qué no lo haría? No solo porque era un jodido cursi de esos que creía en el honor y el amor y la bondad aún si portaba una espada de brutalidad que ejecutaba justicia y destajo para salvar del mal mediante un frío filo y sin embargo, que él encontraba hermoso, y que debía ser forjado a potentes llamas, no, era porque podía y quería, porque hoy sujetaba sus cadenas.

- Kenshiro-san... Espero pode-

La batalla habia terminado. Te levantaste y te diste la vuelta. En tonces, en ese mismo momento

¡Imposible! ¡Tu técnica había dado de lleno! ¿¡Como era que este hombre seguía de pie!? Y lo que es aun peor ¿¡Como aun tenia tanto poder!? Comparada con esta técnica, la onda de Touki puro que te pego antes parecían cosquillas. Con cada impacto pudiste sentir como cada hueso y órgano de tu cuerpo temblaba ante los puños de este hombre. ¡Decir que era implacable se quedaba corto! ¡Y no se detenía! ¿¡Cuantos golpes fueron!? ¿20? ¿40 60? ¿¡70!? ¿¡90!? No... ¡Aun quedaba mas!

Después de una técnica como esa, no podías si no quedar arrodillado en el suelo.

- Ahora lo entiendo... -Escuchaste la voz de Kenshiro mientras luchabas por recuperar el aliento- Ya se la razón por la cual me eligieron como tu oponente. Durante tu ultimo ataque me llegaron tus sentimientos. Tu tristeza, tu dolor y tu determinación. Todas esas son las emociones que hacen a un gran guerrero... ¡Pero! ¡Tu corazón aun carece de el mas crucial elemento!

¡Dentro de tu corazón no hay Amor!

- ¡Sin el amor de tu lado, no importa que tanto te esfuerces, que tanto sufras ni que tanto luches, la victoria nunca será tuya! Mi misión aquí es demostrarte lo que te falta, y para eso...

¡Ven! ¡Utiliza tu mejor técnica y deposita todas tus emociones y determinación en ella! A cambio de eso, ¡Yo te demostraré que el poder del amor no tiene comparación!

Aquel hombre pensaba que había acabado, y su generosidad, la que aprendió por montones como su credo personal y herencia es la que le haría caer, porque si bien no había sido deshonroso de Kenshiro, simplemente el mismo Monigote de Trapo se había confiado tras asumir, tras dudar, de nuevo, como si posiblemente no aprendiese nada, o quizá sí. Quizá efectivamente el mismo Héroe del Páramo sabía que la batalla era cruel y se debían usar métodos no sabría decir si viles pero al menos, crudos.

Y funcionó. {}{}{}{}{}{}{}{}{}{} recibió los cien y más impactos, al menos, instintivamente entendiendo por algún motivo que eran 100 impactos basándose en alguna palabra o concepto remotamente absorbido mentalmente a pesar de no tener forma de "saberlo" realmente, posiblemente era ese idioma extraño. Al caer, quedó de rodillas.

¡Se arrodilla!

He kneels!

He fucking kneels.

Kenshiro... I kneel.

Ya, vale, que se os ha entendido, que se arrodilla, cojones, que vuestros memes caen en oídojos sordos por lo rebuscados que son aunque C-... DemiurGOD seguramente capte algo de la referencia por ser el puto amo de la galaxia y lo siguiente. Aquí nuestro ¿protagonista? se arrodilla o genuflecta con la espada envainada y hecho pedazos, brazos temblando, mangas rotas, su traje hecho mierda. ¡Costaría bastante rehacerlo, ni hablar de repararlo! Su cuerpo hecho pedazos igual, como si le hubiese arrancado un brazo, se sintió como tal. Jadeando y con tremores, buscaba de nuevo mirar hacia atrás, quedando en el mismo punto en el que quedó tras saltar la muralla y ver al Parámico Héroe caer del cielo.

¿Simbólico, quizá?

Se alza entonces, el corazón de este jodido samurai, y ya suficiente de memes más oscuros que... Pues que la noche misma, que ahora sí no era producto de Nox, su skill, sino que el sol iba cayendo, casi, a punto de mostrar la siguiente fase. Apropiado, quizá, por motivos. Al escuchar a Kenshiro...

Ladeó la cabeza. Momento comico, mandatorio, ya lo sabes, por lo menos no dentro de la partida tal o como un índice, que hasta Berserk los tenía, pero eh, tu juego, yo solo me doy permisiones mínimas porque da, al menos en este extraño territorio ambiguo.

- ¿Ah? A-amor? ¿Qué?

Quedó descolocado, una mierda era que le descolocaran los músculos y huesos y otra era que lo sacaran de lugar. Se acordó de su señor padre, mujeriego de primera, noble y digno pero rodeado de docenas de mujeres, bastantes jovenes, algunas no tanto interesadas usualmente en su plata, pero también en él, y el mismo insistiéndole a {}{}{}{}{} que busara romance. ¿Eso era? Pero si Ragdoll Dummy sentía amor, por su gente, por su mismo padre, en los Grandes Ángeles descanse, y por su causa, con todo considerado. Una imagen vino a su mente, un rostro bonit-...

- No, no, no, no me jodas.

Fuera de lugar. Otra figura entonces vino, un giro hacia atrás y una sonris...

- ¡QUE NO!

Paró en seco sus propias ideas raras de esto y aquello. ¿Qué carajo? Bravo, Héroe del Páramo, acaba de lograr enfadar de verdad a quién hasta ahora se contenía. Un rasgón ligero en el huevo, insuficiente para abrir su contenido apocalíptico, señal del fin de fines, de la voluntad de los Dioses y sus acaboses, pero notable.

Ya girado y de pie con incontables cortes, moretones y sangrado por todos lados, un ojo medio cerrado y su cabello arruinado aunque aún con su larga coleta-extensión desde la base de su nuca hacia abajo, sonrió en extremo. Pensó en esas personas o quizá no, o quizá alguna camarera guapa que le tirase los tablones a su padre cuando joven, o a él, alguna crush, o algo estúpido como alguna señorita que promulgara la palabra y le pusiera las máquinas a tope, alguien por quién morir. Por quien matar.

Absurdo.

- Zaregoto. ¿Amor? Te mostraré, Kenshiro, Héroe del Páramo todo lo que necesito. Tu poder es demasiado, pensé compararte con un demonio de alto nivel... -Tronó el cuello, enloquecido, pero concentrado.- Pero me equivoco, claramente esos son tu desayuno y meriendas. Hoy te mostraré lo que nadie entiende, y es mejor así, quizá.

Y ahora hacemos un pequeño flashback, que será elaborado en otro lado, ya sabes donde, pero ya que estamos.

Aqui el joven 喜充 es apenas un adulto joven. Toda su vida, de niño, enfrentó problemas, por razones múltiples, pero ese día 5 años antes de su enfrentamiento con Kenshiro, fue especial. Aquel día su padre había dejado su herencia de gran fortuna para las obras nobles y caridad, obras hacia otros. Aquel día es que sus supuestos asociados de negocios celebrarían de forma decente cómo llevar al futuro sus fundaciones y obras.

Y ese día les vería. Un sentimiento o quizá un susurro le llevó a ellos. Y ahí estaban en sus mesas, con sus tragos y sus risas, sus burlas, hablando de cómo abiertamente harían apagar poco a poco toda la obra como una flama débil mientras se hacían con todo ese dinero, todo. Entre risas sus sirvientes y asociados. Hablamos de unas 20 personas, como máximo.

Aquel día el odio, fue una fuerza más fuerte, inmensa, ese día se volvió Fulgor y no una copia barata que pretendía ser "Fulgor", sin más. Ese día se volvió de verdad el Caballero Legendario. Ese día... Su primer uso de la aptitud cósmica, su Técnica Legendaria fue simple y claro, los viejos y varios le preguntaban qué hacía ahí, otros que no se metiera, otros incluso osaron decirle que no tenía poder aún siendo el hereero nominal, que les dejara a ellos el asunto.

No importó mucho, no, más bien avivó una flama que se volvió un sol. Aquel día al Quiebratormentas fue usado una primera vez. Un grito ensordecedor de un niño vengando a un viejo que lo único que tuvo fue paciencia y amor cuando pudo tener una vida de lujos siguió de una... Algo, una monstruosidad. Todo lo que quedó tras sacar su arma fue nada. Nada, ni zapatos, ni prendas, apenas. Pulverizó a 20 personas en un chasquido como si fuesen polvo. Aire o menos.

Aquel evento no podría ser culpado en alguien incidenciamente ahí y sin evidencias, pero hasta la fecha seguía siendo considerado, un misterio, la desaparición de los nobles asociados con la casa S{}{}{}{}{}, ¿ves que cada vez oculto menos? Y así.

La segunda vez fue una necesidad, un ejército a detener y dejar inconsciente, la tercera vez fue una utilidad, partir una montaña que impedía el paso de recursos y personas para los pueblos y el reino mismo. Y hoy... Sería la cuarta. 

Ominoso número ese, el cuatro.

Su tatuaje ardía como hizo ese día, Kenshiro se había pasado. ¿Amor? ¡¡¡¡Impensable!!!!

- No pienso subirme a un ariete.

Eso... No tenía sentido. Pero ya estaba listo, concentraba su alma y se volvía...

Sí, se volvía, eso es el tema aquí.

Y{}{}{}{}m{}{}{}{} no era humano.

Nunca lo fue, a pesar de verlo y parecerlo al máximo.

Poco a poco se empezó a convertir en la flor de loto, en energía, en luz y poder, su forma real se hacía manifiesta y la distorsión dimensional de su origen se hacía cierta, encarnaba una parte del mismo ángel que le avalaba, haciéndose su adalid, este ser era el verdadero Fulgor perfeccionado al usar su técnica definitiva, aquella que quiebra las tormentas.

Malherido esta "transformación" o más bien "forma legítima", "eclosión", le ayudaba a moverse, aunque... No lo necesitaría, pero quería demostrarle a este señor tan golpetón que sí, quizá un romance o dos le hagan rico y todo como le negó (Más o menos, ya después lo explicaría) a su propio señor adoptador paternal, sí, pero que quizá la tontería del ariete no era tan tonta, porque los memes tomaban forman y eran la esencia, el ADN del alma, muy como ahora él era el "ADN" de su propia verdad.

Tomó a Tenshibana y la puso vertical al piso, mostrando un gesto pacífico, en sintonía con el entorno, como si estuviese pidiéndole permiso y perdón por la que estaba por hacer.

Porque Kenshiro era como bajarse un ejército, cortar una montaña... O pulverizar a 20 seres humanos normales, contaba como eso y más. Un solo objetivo, primera vez. Sonrió malicioso, esto era divertdo.

- Gracias. Ahora... Me vuelvo poder mismo, soy luz, como te dije al comienzo.

Entre su sangre brotaba luz líquida, como oro pero distinta, como fuego, pero distinto, como fuego de dragones.

Pero distinto.

Tomó su espada y ya era uno con ella, prácticamente, sangraba junto con ella, con su flor de loto dracónica.

- "Quiebratormentas"

Y entonces... Simplemente ocurrió. Un destello de poder puro envolvería todo, pero por primera vez siendo su cuarta vez ocurrida y la segundda en que manifestaba tan fuertemente su forma real no humana, iría contra un único objetivo. ¿Amor, eh? Maldito, osando ponerle ideas raras. Subirse a arietes es herejía, la disciplina es todo lo que basta.

O quizá no. Para cuando terminara, el corte debería... ¿Qué sucedería? Francamente, él mismo motivaba los rumores sobre este supuesto poder que todos desconocían porque...

Porque él mismo desconocía realmente su alcance, sobretodo en situaciones tan extremas, siendo esa primera vez toda narrada un vacío en su mente y las otras dos guiadas por necesidad concreta. Una vez terminara, volvería a ser "humano" y envainaría la espada.

O no, tal vez.

Una técnica que no debería existir fue desatada. Un acto que iba en contra de las leyes impuestas por los mismísimos creadores del universo. La habilidad para deshacer su trabajo, la habilidad para borrar por completo la existencia de algo, la habilidad que ignoraba las normas, y las subyugaba bajo su poder puro e inigualable. Con esta, serian cuatro veces las oportunidades en que las reglas del mundo han sido ignoradas por la espada de un mero mortal. Un Dragón imperfecto que a alcanzado alturas aun mas extremas que las de sus contrapartes. Solo Un ser cuyo limite se encuentra incluso mas allá del cielo solo podría ser capaz de ejecutar tal hazaña.

Nada.

Eso era lo que había quedado frente a ti. Nada, solo un paisaje tranquilo que se extendía frente a ti hasta el bosque de la lejanía. No había rastro de la lucha que aquí se había dado momentos atrás, no había nada.

Nuevamente, hiciste los movimientos para guardar tu espada, apaciguando así, tu furia.

Un hombre como tu nunca...

...

...Alcanzará el verdadero poder.

Al mismo tiempo que cerrabas tu Katana, algo paso. Una gota calló al suelo. ¿Que era eso? ese color lo habías visto antes... Claro, tu lo conocías bien, esa tonalidad y esa intensidad, eso era sangre. ¿De donde venia esa sola gota sangre? De tu Katana no podía ser... Un segundo, otra acaba de aparecer junto a la primera... No, eso no podía ser verdad... No sabias como pero, no había duda... Esa sangre venia de ti.

Este es el verdadero poder del Amor.

1, 2, 3, 4, 5, 6, 7 fueron los agujeros que se abrieron simultaneamente en tu pecho, dejando salir un torrente de sangre que se desparramó por el suelo. Haciendo que esta vez, en vez de caer de rodillas, calleses de cara al suelo.

Por alguna razón Kenshiro estaba parado a tras de ti, a tus espaldas. Completamente intacto.

Esta era la cuarta vez que Quiebratormentas era desatada en la faz de este mundo, pero era la primera vez que alguien sobrevivía a ella, y para colmo, Kenshiro no solo sobrevivió a ella, si no que fue capaz de ver a través de ella y contraatacarte con tal letal precisión.

Kenshiro, El Héroe del Páramo, un guerrero que va mas allá de la leyenda, fue el que salió victorioso. Demostrando la fuerza absoluta, el pico del poder existente: El poder del amor. Usando una técnica que va mas allá del mito y la leyenda, una habilidad que solo aquellos que han obtenido la esencia del poder verdadero son capaces de usar o siquiera comprender: Muso Tensei, la técnica definitiva del estilo de artes marciales definitivo, el Hokuto-Shin Ken.

Al verte tirado en el suelo, Kenshiro se dio la vuelta y comenzó a caminar, hacia el horizonte, hacia el futuro.

Hoy vi en ti el alma de un guerrero de verdad. -Dijo mientras se iba- Espero que un día encuentres tu camino y puedas vivir una vida de la que no te arrepientas.

Después de eso, ¿Que fue del ragdoll dummy? Murió desangrado en el suelo. Al fin y al cabo, la heridas que había recibido en ese ultimo ataque eran mas que suficientes para acabar con su vida... Poco a poco, el alma de este ser fue disolviéndose, su conciencia apagándose y el fuego de su pasión se asía cada vez mas y mas pequeño... Este era el final...