Partida Rol por web

Uno de los heroes ya sabia la historia de este lugar... 

Los hermanos de dragones negros no fueron los primeros en recoger un tesoro en su cámara subterránea. Al final de la Era de los Demonios, el Altar del Ojo del Dragón fue sellado detrás de trampas y puertas secretas. Los dragones que lo ocultaban empleaban poderosa magia para mantener el altar en secreto de demonios y dragones por igual, y luego asignaron uno de su propio tipo como su guardián.

Este dragón, Kha'shazul, acumuló su tesoro en la cámara de acumulación, convirtiéndose eventualmente en un dracolich. Los chamanes lagartijos atraídos por la adoración de Kha'shazul construyeron el templo sobre su guarida, manteniendo el altar escondido bajo esta nueva fachada. Con el tiempo, Kha'shazul fue asesinado por un rival que adorador del gran dragón Rhashaak. El tesoro de Kha'shazul fue saqueado hace mucho tiempo por otros dragones, dejando sólo su enorme esqueleto detrás. El Altar del Ojo del Dragón se encuentra más allá de un laberinto de trampas astutas y mortales. Aquellos que sobrevivan a deben entonces lidiar con el guardián final del altar.

Por supuesto, no podía faltar el laberinto de trampas y de seguro al final del mismo nos espera un poderoso constructo que nos está esperando, listo para hacernos pomada.

Pues bien. ¿A qué esperamos? Y más importante de todo ¿Quién va a ir al frente?  En definitiva no yo, a menos que todos quieran morir, pues las trampas y yo no somos para nada compatibles. - digo con seriedad, mientras observo el pasillo que se abre ante nosotros.

Maravillada ante los conocimientos de historia de sus compañeros, la halfling dijo:  Pues esa historia del dragón esta más impresionante que nada que haya oído.  ¡Son eones de tiempo!  

Se quedó meditativa.  Yo tengo humildes habilidades de buscar y desarmar trampas.  Mi entrenamiento de artífice con los gnomos padrinos algo me dejó.  Si puedo mejor complementar lo de otro que sea mejor sería mejor, que son limitadas.  Abrió las manos en gesto de que eso era lo que mejor podía hacer, y su hablar recordaba el de su madrina gnoma más que otra cosa. 

De comenzar, se echaría encima el hechizo de Guidance, para un poco de ayuda mágica en encontrar lo que seguramente eran trampas letales a más no poder.  Su habilidad druídica de invocar el poder felino para los reflejos también ayudaría.  Más que eso, la suerte halfling era todo lo que tenía a su favor. 

Se puso hasta adelante, esperando a ver si el valenari que habían encontrado tenía algún truco bajo su manga en este respecto. 

En silencio, Marcus escuchó el relato mientras mordisqueaba un trozo de raiz de quien sabe que, que compró en el mercado antes de salir del pueblo. Cuando acabó su explicación, se sacó la raiz de la boca, la miró con gesto algo confuso y después decidió tirarla. Ahora si lo estaba flipando.

- Eh............ - Comenzó a decir, mientras se quitaba el sombrero,  le quitaba algunas de las canas que en él permanecían y después se lo volvía a poner. - Quizás debería echarle un vistazo yo al tema este de las trampas. Después de todo los dragones, mazmorras, elfos, magias y medianos son cosas vuestras. Lo mio es más... la mecánica. - Acabó por decir, haciendo un círculo con ambas manos. Y dicho esto, se adelantó con intención de inspeccionar el lugar en busca de esas trampas que había mencionado el elfo.

Shahnaz se quedó en silencio después de la lección de historia sobre Kha'shazul. Había sido la historia que Kylara, mucho más leída que él, les había contado a su antiguo grupo antes de internarse en las junglas infestadas de hombres lagarto. Cuando Marcus se hizo cargo de rastrear en busca de trampas, el elfo valenar lo siguió.

-Te cubro las espaldas. 

A12. PASAJE SECRETO
La puerta secreta de la guarida de los dragones lleva a este largo y ancho pasillo. El pasaje se extiende 80 pies antes de terminar en un puerto de hierro.Un amplio pasillo se extiende lejos de ti en la oscuridad. A medida que avanza por el pasillo, se ve un portcullo por delante, sus barras de hierro que impiden el progreso.
Este pasillo aparentemente vacío esconde una trampa mortal. Una comprobación de búsqueda DC 21 revela que los últimos 10 pies de paso son una placa de presión apenas visible. La placa de presión se extiende hasta dentro de 6 pulgadas de las paredes a ambos lados del pasillo, pero un personaje que tiene éxito en un cheque DC 15 Balance (o que salta sobre la placa) puede llegar a una sección de 1 pie de piso seguro delante de El portcullis. Más allá de la grúa, se puede hacer un vuelo de oscuros escalones de piedra que conducen hacia abajo. Más cerca una palanca se coloca en la pared al lado de la parrilla del hierro. Al pisar la placa de presión, se dispara la trampa, pero la palanca situada junto al portculo es un segundo gatillo. Se requiere una comprobación de la búsqueda DC 25 para determinar que la palanca no está conectada a la portcullis.

* 1 TRAMPA DEL CORREDOR: La pared al final del pasillo se mueve a una velocidad de 10 pies por ronda hasta que se golpea contra el pórtico, aplastando a todas las criaturas que permanecen en el pasillo. Trampa de pared deslizante: CR 5; mecánico; Desencadenador de ubicación; Reajuste automático; Oculto interruptor de derivación (búsqueda DC 25, Disable Device DC 25); La pared se mueve hacia los rastrillos (10d6 daño, aplastar); Objetivos múltiples (todos los objetivos en el corredor); nunca olvides; 

Al conocer de la presencia de las trampas, espero a que Marcus se haga cargo de la prensa para no quedar despatarrado contra el rastrillo y luego recorro el pasillo saltando la trampilla sin problema alguno para continuar mi camino sin mayores contratiempos.

Condenadas trampas, espero que las demás no sean tan letales como esta, aunque lo dudo mucho, teniendo en cuenta que son trampas de dragón. - comento tras saltar el foso.

Subiéndose en su dinosaurio, Panacea lo hace saltar sobre las baldosas, lo que es pan comido para un depredador de las planicies de Talenta como éste.  

Bien, bien; ahora a ayudar a desarmar esta cosa.  Pero no le resulta tan fácil.  Quería serle de ayuda al pistolero sabedor de mecánica, pero nada, se le escapaban estos mecanismos dracónicos a la pobre halfling verde.  

Lo siento.  No le entiendo nada. -dijo quitándose del camino para que Marcus lo resolviera.

Tras investigar las trampas, las indicó y señaló a sus compañeros. Después, tomó carrerilla y pegó un buen salto hasta el otro lado, aterrizando sobre sus pies y ajustándose el sombrero. - Ahora solo queda lo dificil. - Se acercó a la siguiente trampa, entreabriendo el mecanismo mientras intentaba trastear con ella, secándose el sudor con la manga.

- No te preocupes. - le comentó a la Hafling. - La verdad es que es... de lo más complicada. -

El pistolero seguía intentandolo. Lo cierto era que la trampa era lo más complicado que había visto en mucho tiempo. - Tiene varios resortes que la activarián si intento desarmarla. Además, la construyó alguien mucho más fuerte que yo... no consigo... - comenzó a murmurar, cuando de repente hizo saltar algo... pero nada ocurrió. Cogió aire y carraspeó.

- Veamos si con estas... por aquí.... diantres y..... gr.... - comenzó a farfullar, mientras sacaba uno de los engranajes. - Ya esta... debería estar desactivada. - Acabó por decir, secándose el sudor de la frente. Había pasado un mal rato.

...

Una figura se acerca por el pasillo de la entrada a las catacumbas, destaca que para vuestra sorpresa, no es un lagartijo humano, ni tiene escamas, asi que no levantais las armas almenos de momento

Con la faz estilizada y los movimientos graciles de un elfo, enfunda su espada y se os acerca sonriendo de medio lado, lleva unas tunicas blancas, que le favorecen el gris de su cota de mallas que acompasan sus movimientos a cada paso que da junto con una bella capa de buena manufactura elfica

Explorando el lugar por donde estoy, llego hasta un pasillo, en mi bolsa tengo las pocas monedas de oro que he conseguido encontrar; con la espada desenvainada, voy acercándome poco a poco a una luz que veo a la lejanía; Que serán, goblins? Orcos? Sea lo que sea será divertido ir a comprobarlo.

Que raro huele, eso es... jabón? Sorprendido, pero aún con el arma en alza, voy avanzando poco a poco hacia la luz, y cuando ya puedo ver los rostros de quienes están ahí, decido envainar el arma.

Sonrio. Encantado digo, haciendo una reverencia y una floritura con la mano. grandes aventureros de las cavidades rocosas; mi nombre es Earendil Rendan, pero podéis llamarme Earendil si os place. Puedo tener el honor de saber vuestro nombre? Todo lo decía con una sonrisa de confianza en la boca.

¿Pero que rayos? - pregunto mientras observo con cierto desconciero al recien llegado listo para echar mano del estoque en caso de ser necesario, pues no creía que fuera buena idea lanzar conjuros en un espacio tan reducido.

Mi nombre es Valinor y es todo lo que te diré hasta que me digas quién eres y qué estás haciendo aquí, pues se supone que somos el único grupo con contrato vigente. - digo con evidente desconfianza.

Y por quién eres no me refiero a tu nombre, sino quien eres en realidad, un saqueador, un guardián. - agrego con cierta frialdad.

Bueno, supongo que no me puedo quejar de esa respuesta estando en el lugar que estoy. Digo, mirando a Valinor con cierto reproche.

Y has acertado, no soy más que un buscafortunas, que desafortunadamente, válgase la redundancia, no está encontrando nada. Y vosotros que hacéis aquí? Sois un grupo con contrato? Contrato de que? Si se me permite la pregunta, claro está.

Nos pagaron por matar unos cuantos lagartos y revisar el lugar, podemos conservar lo que encontremos a cambio deun pequeño porcentaje para nuestro patrocinador. - respondo rápidamente relajando mi expresión.

Por cierto, ¿Cómo entraste al templo? pregunto porque sería bueno saber si existe otra salida que nos permita librar el laberinto de trampas de un modo seguro y rápido. - inquiero con amabilidad.

Os importaría si os acompaño aunque sea durante la mazmorra? Todo el mundo sabe que en estos casos estar solo y sin salida es prácticamente un suicidio

Mucho gusto Earendil. -dijo la druida muy amable.

Estábamos pensando en investigar esta zona.  ¿Te unes?  Puede haber más defensores de los dragones negros.  

¿A tí quien realmente te envío?   Lo digo por si queremos hacer compatibles nuestros planes, o limitarnos a ayudamos a salir de aquí, con vida.

Por otra parte, compañeros, a mi lo que me gustaría hacer con mi parte del tesoro es ayudar a los lagartijos grises a volverse los nuevos guardianes de esta pirámide, guardianes del lugar y sus legítimos secretos.  Algo me dice que gobernarían de una manera más digna, respetuosa, que los que estaban ayudando a los dragones, defoliando a todas las tribus alrededor.  

Pero antes, debemos regresar una reliquia a sus verdaderos dueños.

Por aquí, dijo, guiando al grupo arriba de su velociraptor con montura elegante, al estilo de las halflings de las praderas.