Partida Rol por web

Unas horas después de partir la niebla se hace más densa , dificultando la navegación por las aguas de la isla Ombo y Helgoy, los navíos más ágiles toman la iniciativa y ayudan guiando al resto de la "flota" con lamparas y sonando los cuernos ... desde tierra aldeas aliadas "saludan" a las embarcaciones con cuernos y campanas ...

Después de las primeras horas "diurnas" del viaje y perdiendo las pocas referencias que ofrecía la claridad Horik decide hacer un alto en la isla de Rott donde el jarl de la isla dará cobijo a los hombres y barcos.

Pero algo ha debido de pasar durante la navegación, pues la isla de Rott no aparece donde debería estar. No obstante un islote lo suficiente grande podría ofrecer leña y algo de alimento para el grupo y así no hacer uso tan pronto de las reservas ...

Un nuevo objetivo se fija a las embarcaciones más ágiles , encontrar una isla adecuada para acampar.

Parte una embarcación karv y vuestro snekkja en dicha búsqueda, el resto de embarcaciones navegarán asegurando y protegiendo al Knarr ...

Tras haber recibido instrucciones de Horik, Arild se dispone a dar ordenes.

- Ya habéis oído, todos a los remos, debemos dar con un sitio digno de vuestros culos antes de que se haga de noche o terminaremos alimentando a los monstruos marinos.

Dicho esto empieza a dar instrucciones a los marineros más experimentados para aumentar la velocidad del barco ya que hasta ahora se había estado navegando por debajo de la velocidad del Knarr debido a la niebla.

... Fryda¡, tu deja los remos , necesito tu vista en el mar y no en la madera ... El resto ganaros vuestra cena y remar, dosificar vuestras fuerzas y recordar que debemos ser constantes al faltar parte de la tripulación me temo que no habrá turnos, pero también habéis estado de paseo hasta ahora ...

Una vez todos en sus puestos Arild se dirige a Snorri.

- En la medida de lo posible, cada cierto tiempo quiero que hagas sonar tu instrumento lo más fuerte posible a modo de señal, no me gustaría dejar sin referencias a nuestros hermanos ... dice mientras señala lo que deducís que es el karv que también se lanza a la expedición.

Se levanta y antes de ponerse en su sitio se acerca a Arild y le susurra algo al oído , este le asiente a lo que parece una petición y acto seguido Fryda se dirige hacia Smilla

- Tu me ayudarás en proa, necesitaremos también tus ojos

-¡Skad! -llamé, en cuanto escuché las órdenes, silbando en un tono agudo, prolongado.

El ave llegó volando poco después, mientras yo caminaba hacia uno de los remos de la proa de la embarcación, y se posó en mi hombro, graznando. 

-Ni siquiera Skad puede vislumbrar dónde nos encontramos -murmuré- esta niebla es tan densa que se podría cortar con un hacha... espero que Fryda y Smilla sean capaces de orientarnos, al menos un poco...

Sin más ocupé rápidamente mi puesto en el primer remo de la izquierda de la embarcación, esperando a que mis compañeros hicieran lo mismo para poder avanzar. 

Guardo mi kraviklyra y saco mi flauta, con la que comienzo a tocar una melodía extraña y aguda mientras presto mi oído a lo que me rodea. Al ver las miradas interrogantes de mis compañeros les respondo sonriendo.

- Era una forma que tenía mi maestro de orientarse entre la niebla, al parecer estos sonidos no se alteran demasiado.

Sonreí al escuchar la explicación de Snorri, me trajo recuerdos. No era la primera vez que veía a alguien orientarse por el sonido en largas distancias, aunque sí con una flauta. Continué remando, con esfuerzo, atenta a las señales de Fryda desde la proa. Skad, por su parte, voló de mi hombro y se posó un rato en el del skalda, le gustaba la música, cualquier sonido proveniente de un instrumento musical le llamaba la atención.

-Estate atento -reí mientras lo veía- lo mismo le da por picotearte la flauta; es su forma de decir "me gusta".

Mi sonrisa se ensanchó aún más.

Si lo desea incluso puede acompañarme. -Dije mientras me llevaba la flauta a los labios para repetir de nuevo la melodía de guía.

-¡Tierra a la vista! Allí fijaros se ve fuego ...

Empieza a señalar hacia el oeste y un tintineo resplandeciente se empieza a dibujar a lo lejos. Tan solo unos segundos después empieza a dibujarse un gran islote.

Te has ganado un buen trago Fryda ..., bien ... seguir remando pero reservar todas las fuerzas que podáis, por turnos de a dos ir a por vuestras armas y volver a los remos en unos minutos deberemos recoger las velas ... Tu Wisna ve con Fryda y ambas poneros algo que os haga a las vistas más "frágiles" no sabemos que podemos encontrarnos y quizá vuestra sonrisa os sirva para dormir hoy bajo techo.

Sonríe ante la cara que se imaginaba que estaría poniendo Wisna...
Antes de que protestes, no hace falta que te pongas ropajes de Astrid si no quieres, pero al menos que parezcas más mujer que oso.

Se levanta de su asiento y deja de remar. Se acerca a Arild y le coge del brazo

- Mi querido Arild, si quieres también tengo ropa para ti dicho esto besa su mejilla y posteriormente le da una sonora bofetada.

- Aun no has aprendido que somos nosotras las mujeres, las que os traemos al mundo ... no lo olvides, o la próxima vez dejaré a Wisna que nos defienda, y seguro que ese rojo de tu mejilla no será nada comparado con lo que ella pueda hacerte

Las risas y miradas de complicidad se cruzan entre la tripulación.

- Vasta ya de numeritos¡ ... silencio y seguir remando ... ya hablaremos de esto en privado Astrid. Pero si me obedecéis quizá Wisna y Fryda os puedan salvar de ser violadas si las confunden con una mujer tan inofensiva como el resto. ¿Me he explicado ahora con claridad? , ¿o te crees que ese fuego se ha prendido solo?

Arild planea usar todas las ventajas que estén en su mano, y sabe que si en tierra no hay aliados tendrán que ganarse su respeto, pero si no lo consiguen por la fuerza quizás haya que pagar "tributo", ¿y a quién no le gusta esconder un poco de veneno en un suculento postre?.

Cuando esta cerca de ti , te susurra al oído.

No te preocupes, ya he servido de señuelo otras veces y resulta hasta divertido ... Confía en Arild sabe lo que se hace, aunque a veces no lo demuestre.

Al escuchar la última frase de Arild me di la vuelta y eché una mirada cómplice a Wisna. 

-No pienses que el resto de las mujeres somos... ¿cómo has dicho? inofensivas... -respondí por lo bajo, pero lo suficientemente alto como para que me escuchase, recolocando mi hacha en mi espalda y esbozando una sonrisa lobuna- puede que no vayamos con pieles de oso por ahí pero te aseguro que la apariencia no es todo... 

Sörr estuvo tranquilo el viaje, siempre con las armas a mano, y cuando les incitaron a que se fueran a los remos, se sentó ante uno y se dispuso a remar sin decir nada, manteniendo el ritmo de los demás, pues si tiraba con su fuerza seria un caos.

Cuando lo tocó el turno, se levantó y cogió sus armas antes de volver a remar, pero cuando dijeron que Widna tendría que parecer más mujer que oso, el joven no pudo evitar empezar a reír a mandíbula batiente- eso será digno de ver -comentó el joven, no pudiendo evitar lanzar la puya.

Chasqueó la lengua con evidente disgusto y bien estuvo a punto de soltar un par de maldiciones bastante sonoras.

-El Padre de todos sabe que bien te igualas en combate, Ifrit... pero está visto que los Dioses disfrutan con esto-se desabrochó la piel de oso y se la tendió a Ifrit confiando en que ella sabría ponerla a buen recaudo dado el valor que tenía para la guerrera mientras contestaba a Sörr-recuerda esas palabras cuando te desolle y use tu piel de capa si la del oso se pierde,un gigante luce más que una bestia.

Y dicho esto se encaminó de mala gana tras los pasos de Fryda para cambiarse de ropa.

-Divertido ¿hm? Esperemos que así nos vaya-replicó a la mujer mientras ambas se desvestían para cubrir su desnudez con ropas más adecuadas para el cometido que tenían que cumplir.