Partida Rol por web

Cuando vas a abrir la puerta puedes ver el nombre "L'Atelier" escrito con letra elegante sobre el cristal. Al entrar la música resulta agradable, especialmente si tienes en cuenta que se trata de un restaurante en un polígono industrial.

Detrás de la barra se encuentra el encargado de las reservas, pero está al teléfono. Tanto él como todos los camareros llevan un uniforme impecable y elegante, sin embargo él tiene la cara en sí de ser elegante y muy amable. Enseguida te recuerda a Casimir.

_{Camarero de L'Atelier}

 Sí, tenemos «Calmana» — escucha un momento a su interlocutor —. No, lo lamento mucho. Lo tendremos para la próxima ocasión, pero esta vez es totalmente imposible, señor, lo siento.

El hombre te hace una cara de pena por estar al teléfono, y a su vez busca con la mirada a ver si consigue encontrar ayuda de un compañero que finalmente aparece y se acerca sin ninguna prisa hasta ti, que por contra, empiezas a preocuparte por la hora en caso de no encontrar el lugar con facilidad.

_{Camarero de L'Atelier}

 Buenas noches —dice antes de empezar a abrir la boca para preguntarte probablemente qué deseas, pero sin llegar a decirlo al hablar tu en primer lugar.

Disculpe, ¿los laboratorios ...GEN-Kings? ¿Como puedo acceder? - Pregunta a la primera persona que ve al entrar.

  Pues verás ... — se piensa como indicarte sin mucho entusiasmo.

El otro camarero termina con su llamada, llamando la atención de los dos al sonoro colgar que tiene el teléfono.

 ¡¡Oii!! ¡Perdona, perdona! — se disculpa un par de veces haciéndote expresivas señas de lamentación — Lo compensaremos, justamente tengo que enviar a mi compañero hacia allí.

El señor te sonríe con una calidez excepcional y se gira para ver a su compañero, que en contraste lo mira totalmente desganado.

 Fallon, te preparo un Calmana para el laboratorio. Debe llegar enseguida, es urgente, no te entretengas a fumar ¿vale? — ciertamente hablar de fumar no es algo que de muy buena imagen, pero es totalmente necesario decirlo cuando es algo urgente... y aunque lo dice delante tuyo, te mira con una sonrisa cómplice, casi sientes que se está disculpando por tercera vez contigo, y la quinta contando el teléfono desde que has entrado hace menos de un minuto.

  Sí, claro. No voy a perderme ni nada así.

 Toma, ya está —en nada y menos ha guardado una caja de unos 30-40 centímetros bien empaquetada con papel de seda y la ha puesto en una bolsita—. No te entretengas, y siento darte tanto apuro en un momento tan tranquilo.

  Sí, sí. Está aquí mismo...

Salís de l'Atelier y Fallon te hace un escaneo visual importante, mientras se detiene a encenderse un cigarrillo y le pega la primera calada, entonces sí comenzando a caminar. 

 Es por aquí, chico.—dice con una voz extraña antes de expulsar el humo y recuperar su habla normal, pésima en cuanto al entusiasmo—.Con continuar lo hubieras encontrado. Es raro que nadie de nuestra edad visite el laboratorio. ¿A qué te dedicas? 

La calle es larga y os alejáis de la música. No hay ninguna puerta en el numero siete, poco a poco te haces a la idea de que debe ser ahí sí o sí, pero ya has pedido ayuda y ciertamente van al mismo lugar.

- No soy de por aquí, solo aseguraba el tiro.- Dominic titubea en decirle la verdad sobre su visita a los laboratorios.
”A Casimir se le veía un poco preocupado por que hablara sobre el trabajo en el último mensaje que me envió… ¿quizá es un proyecto secreto?”
 

- Soy estudiante de alquimia. Nos han encargado hacer un trabajo sobre estos laboratorios. ¿Sabes algo sobre ellos? - Dominic es muy receloso en cuanto a compartir datos. Cree que quien posee el control sobre la información, tiene ventaja.

Sientes la vibración del movil, ha sido corta. Fallon continúa fumando por el camino, disfrutando mucho de ese placer prohibido.

  De fuera... —Fallon deja que continúes explicando.

Le explicas que eres alquimista y harás trabajos en el laboratorio.

 Ya veo, «de fuera»... —Fallon ríe con una sonora y cortísima carcajada. Se ve siniestro, parece el más loco de todos aquellos científicos que hayas logrado conocer, pero en cambio es camarero.

 No, no lo sé.

"Eso...ha sido bastante extraño, está claro que sabe más de lo que dice... " - piensa mientras saca el móvil para ver qué ha sido esa vibración.

Mientras desbloquea el móvil comenta con un tono neutral, serio. - Es increíble lo que ha hecho con esas personas. - Es un farol para ver como reacciona Fallon. En realidad se refiere a las personas a las que ha curado, que, aunque hayan fallecido al final, es bastante positivo para refinar una posible cura eficaz en un futuro. Darle ese tono de seriedad podría parecer que sabe algo más, algo malo, y así quizá comenta algo que pueda darle un poco de información adicional. 

Sacas el movil para ver de qué se trata, enseguida ves una notificación de Casimir, nunca habíais estado tanto en contacto.

  Casimir responde al mensaje de Casimir:

           ¿Todo bien? Os he visto discutir antes en la cafetería, ¿no le habrás dicho lo del trabajo no?

  Estarás alli ya supongo, ¡Mucha suerte!

El mensaje no dice nada nuevo, pero Casimir se ve intrigado... en cambio tu compañero de viaje se ha vuelto de lo más soso, aunque hace ya rato que te observa al detalle, sin quitar el ojo de encima tuyo ni un momento. 

Girais la esquina y allí está la entrada que consta de una entrada y salida de camiones con una pasarela elevada un par de centímetros del suelo para los caminantes.

  Hemos llegado... entraré primero... disculpa.

Fallon se adelanta sin titubear con paso algo rápido después de haber lanzado la cerilla hacia cualquier parte sin tan siquiera pensarlo.

Por ésta cara de la calle pueden verse grandes infraestructuras que son claramente de laboratorio, pero también tiene vegetación, está claro que aquí tecnología y naturaleza llegan a ser mucho mas compatibles que en areas industriales de Debert.

_{Cara de la calle 2, GEN-Kings del distrito 5 de Kendra}

Te continúas tras los pasos de Fallon, cuando llegas a la entrada principal más allá de los jardines, lo ves volver, sin la bolsa. De nuevo se aguanta una risa macabra.

  Adios eh,... — contiene la risita— nos veremos pronto.

Puedes sostener la puerta una vez él ha salido, lamentablemente lo que fuera que llevara Fallon lo lleva ahora la secretaria, quien camina hacia el interior entre las grandiosas estructuras haciendo sonar cada azulejo con sus tacones. El eco retumba por todas partes, parece una catedral.

^{Imagen del laboratorio con las luces apagadas.}

Enseguida te das cuenta de que el laboratorio ahora mismo está cerrado. Las luces de emergencia imperan sobre las que están abiertas. El edificio está todo cubierto y dentro hay tres bloques separados, dos a cada lado de la entrada principal y uno al fondo, más pequeño pero más alto, el cual tiene algunas luces más abiertas. Allí es a donde se dirige la señorita con la bolsa que proviene del restaurante.

La entrada está desierta, sólo están Dominic y la única luz abierta de la zona.

Domimic se queda parado unos segundos, mirando a su alrededor en busca de alguien. - "No esperaba una comitiva de bienvenida pero... Esto no, desde luego. Todo es demasiado extraño" 

Aún así, Dominic sigue adelante ajeno a su muerte inminente*. 

Sigue a la secretaria, ya que es la única persona que ha visto. - "Seguramente va donde hay más gente, y si logro alcanzarla podré preguntarle a dónde me tendría que dirigir" 

Definitivamente vas a alcanzar a la secretaria pues tienes el ánimo de alcanzarla mientras que ella camina de forma normal, con calma. Sin embargo ella se gira antes al oír tus pasos.

 Uy... —dice cuando te ve llegar, sorprendida—. Lo siento, debí estar en la entrada, tenía un recado y no pensé que fuera a llegar nadie tan pronto. ¿En qué puedo ayudarte? —entonces parece que recuerda algo — El laboratorio está cerrado, debes de ser Dominic Witt.

La chica no parece científica, o tal vez es la impresión que da por lo morena que está y la falta de una bata.

 Te acompañaré a ver al señor Jenkins —por un momento la chica se ve bastante tensa, parece que algo va mal desde que te ha saludado—. Es por aquí, sígueme por favor.

Camináis juntos y puedes observar que lleva esa bolsa con la misteriosa caja que ha traído Fallon la cual se balancea tanto como las caderas de la mujer, quién camina con los pasos uno delante de otro con esos tacones al límite de lo normal ocupando un cargo de secretaria.

Tiene muy buen tipo, su busto es exagerado, su cabello precioso... también tiene unos ojos bonitos y la piel cuidada, pero hay algo que te no está bien en ella y no sabrías decir el qué.

^{Último edificio de GEN-Kings S.L. (planta baja)}

Los salones empiezan a tener luz, y puedes ver algunas de las habitaciones donde se realizan experimentos con maquinarias. Ahora mismo están computándose datos de pruebas que no puedes analizar desde ahí. De vez en cuando ves algún científico trabajando, pero a éstas horas hay muy pocos.

Llegáis al ascensor y entras con la chica, la cual te mira con interés y sonríe levemente, agradable.

 Me llamo Bárbara West, —te explica, ciertamente lleva una identificación en la camisa, pero tiene tanto pecho que está boca abajo y no se ve—. Si necesitas alguna cosa que se le olvide puedes llamar al número del laboratorio. Ahora vamos al último piso, pronto le conocerás.

Al cerrarse la puerta del ascensor inserta una llave en el ascensor y comenzáis a subir a altisima velocidad, pronto estaréis arriba a éste ritmo. Bárbara te entrega una targeta de los laboratorios que ha estado buscando, con su nombre.

 A veces se le olvida dar el contacto, es alguien muy ocupado. ¿Seremos compañeros verdad? — parece que le gusta la idea de que te unas al laboratorio, se mantiene sonriente al mismo tiempo que da por oida la respuesta.

Llegáis arriba y estáis directamente en una planta que es completamente para el relajamiento del señor Jenkins, y él como no podía ser de otra manera, está allí.

 Tan pronto como he oído el ascensor pensé que tal vez llegaríais juntos. Encantado de conocerlo, Witt. He oído mucho de usted. 

Munro se levanta del sillón y se dirige hacia vosotros dos. Te ofrece la mano para estrecharlas, después coge la bolsa que Bárbara trae consigo.

 Gracias guapa, puedes irte ya si quieres, cerraré sólo hoy.

 Mucha suerte. Jenkins, Witt... nos vemos.

Bárbara asiente y camina hacia el ascensor.

 ¿Te ha gustado el laboratorio? Espero que puedas estar cómodo en él y que te interese el puesto. Sólo tu encajas en él, si tienes cualquier duda pregunta sin pensarlo dos veces, nuestra relación tiene que ser sincera.

Munro se dirige entonces cerca del sofá en el que estaba, hay otro delante con una mesa. Justo al lado abre un armario de color negro con algunas decoraciones y fotos en la parte superior. Al abrir el armario, sale un haz de luz y puedes ver brillos cristalinos en su interior.

- Es un honor para mi sr. Jenkins. - Se inclina ligeramente hacia delante al decirlo, en modo de sutil reverencia. Se nota un poco nervioso por la inmensidad de esos laboratorios y hablar cara a cara con alguien de suma importancia.

- He leído sobre sus investigaciones y fármacos para revertir mutaciones, y me parece una hazaña increíble, me tiene muy intrigado. Y estos laboratorios... - Mira hacia los lados - Son... enormes y parece que muy bien equipados. Pero me temo que no se me ha informado del todo acerca del puesto. ¿Cuál sería mi trabajo en estos laboratorios? ¿Podría compaginarlo con la universidad? - Mientras Dom habla, se fija en el armario que acaba de abrir, así como las fotos que hay encima. No ve nada porque le da un bajón de azúcar y ve negro.

 Por supuesto, sí. Necesito que termines con la universidad y las pruebas también.

En las fotos puedes ver alguien que te resulta familiar, pero ahora mismo no caes en quién es, simplemente es una sensación extraña.

Munro saca del armario un par de vasos anchos y los pone sobre la mesa después de dejar caer un hielo en cada uno. Se acerca a la mesa mientras desenvuelve la caja dejando ver el envoltorio oficial de "Calmana" un whisky de 40 plutones que os sirve primero a ti y después a él, simplemente para cubrir el hielo a lo ancho del vaso.

 Un hielo es la cantidad perfecta para quienes no tienen todavía una preferencia. Me hubiera gustado que llegara antes que nuestro invitado, y tambien que fuera uno bueno, pero parece que has atrapado a Bárbara y que tampoco tienen nada mejor. Siéntate porfavor, vamos a hablar. 

Él mismo se sienta, y toma el vaso inclinándose hacia ti al otro lado de la mesa, con interés que además demuestra en cada uno de sus gestos.

 El puesto que tengo reservado para ti es de investigación y reproducción de los métodos que desarrollemos. Además tengo un encargo personal. Verás... el motivo por el que te he hecho venir es porque eres joven y creo que lograrás que tenga tiempo de volver a ver a mi hijo antes de estirar la pata. Él es uno de aquellos a los que tengo que recuperar,... aunque ya lo veremos cuando llegue el momento porque ahora mismo tendremos otros objetivos, entre ellos que termines de formarte, me gustaría que seas mi aprendiz directo, ¿y cómo no voy a querer que pueda acceder a más conocimientos? 

"...” - Por unos instantes Dominic se queda sin habla, no puede creer lo que está escuchando. - “¿A-aprendiz directo? Pensé que sería un trabajo cualquiera de laboratorio, de ayudante incluso”. Parece como si el resto de conversación hubiera quedado eclipsado por esas palabras.

¡Me interesa el puesto! -  Apresura en decir. No tarda en ver que quizá le ha puesto demasiada emoción a su respuesta. Pero como para no estar emocionado - “Casimir tenía razón, esto es una gran oportunidad para mi, es.. demasiado bueno para ser verdad. Además, puedo seguir con la universidad con normalidad”. Es tan buena oferta que hace sospechar un poco sobre las intenciones reales de Jenkins. - “Quizá quiere una cabeza de turco… Leí en la biblioteca que la cpp quería investigarlo…”.

Dom no ha tomado alcohol en su vida. Nunca se ha interesado por ir de fiesta, y el alcohol en sí es demasiado caro para podérselo permitir, tampoco es que le ha llamado nunca la atención. Aún así coge el vaso por educación y da un pequeño sorbo. Intenta mantener la compostura ante ese sabor fuerte y extraño. No le convence.

Aunque no está acostumbrado al sabor duro de las bebidas alchólicas y ésta es ciertamente fuerte, Dom puede sentir que el whisky caro no es como el barato, y a pesar de que no le gusta... Podría llegar a acostumbrarse.

 ¡Genial!  Eres decidido. No puedo decir que me sorprenda por tu elección, Dominic, pero me gusta comprobar que eres tal y como pensaba. Bueno... ¿hay algo que quieras preguntarme? Por mi parte me he expresado, y estás de acuerdo. — Munro bebe del whisky, su trago es sólo ligeramente mayor que el tuyo, a éste paso no os marcharéis nunca.

- ¿Cuando empiezo? - Es la única pregunta que se le venía a la cabeza, está impaciente por empezar. Ni siquiera piensa en el sueldo, el conocimento es suficiente pago para él. 

Escuchas el sonido del elevador al llegar abajo, Bárbara acaba de irse, pero lo más inquietante es que al mirar hacia el ascensor te das cuenta de que es la única salida disponible en la habitación. Miras al frente y sólo ves al Calmana y a Munro, es entonces cuando preguntas.

 ¿Qué tal mañana? ¿Te va bien?

Vuestros vasos continúan sin avanzar muy rápido, la conversación es más importante.

- Por supuesto. - Ahora que la conversación está más distendida y la sorpresa de la oferta se ha diluido un poco, piensa - “¿Así sin más?” .
Dom quiere preguntarle por qué lo ha elegido a él, pero no quiere sonar grosero ante su nuevo jefe, ya que estaría cuestionando su criterio. Aun así la curiosidad le puede. 

- Uhm… disculpe la pregunta pero… ¿Por qué yo?... Algo tan importante como ser su aprendiz directo… quiero decir… Ni siquiera he sido puesto en prueba. ¿Como sabe que soy el indicado?

 No seas ingénuo —te corta, para seguir momentos después—. Llevas años estudiando en la universidad, conocemos tus resultados, no has dejado de demostrarlo todos los días de cada año. Eres único, Witt.

Munro se levanta entonces, con una sensación de charla profunda que supera sus esfuerzos por mantenerse sereno y dominante.

 Estoy desesperado... —dice con angustia, su voz se rescabraja al hablar del tema—. Te prometo que te hablaré con más detalle acerca de cómo perdí a mi hijo y como vamos a recuperarlo —dice mientras se mueve hasta un rincón del salón. Tras tocar un dispositivo mágico la pared se convierte en un cristal oscuro desde el que véis el exterior—. Eres joven y tienes todo el tiempo necesario para llevarme hasta él. Eso es lo que quiero de ti, eres un talento único que todavía tiene tiempo de reconciliarme.

Ver el exterior te hace acordar de algo muy importante, mañana es el primer día que puedes solicitar el acceso a las pruebas profesian y generalmente se hacen unas colas importantes para todo el tema administrativo y donde conocerás a algunos de tus adversarios y compañeros (que no conocerías si vas el segundo o tercer día).

 Estoy desesperado... —dice con angustia, su voz se rescabraja al hablar del tema—. Te prometo que te hablaré con más detalle acerca de cómo perdí a mi hijo y como vamos a recuperarlo

Dominic puede ver la angustia de Munro en sus palabras. “Perder a un hijo debe ser devastador”. Se siente un poco afligido, cosa que le incomoda un poco. Dom nunca había tenido a alguien cercano como un familiar o un mejor amigo; siempre se ha sentido especialmente afectado por la pérdida. Perder algo que consideras parte de ti, ese amargo dolor que no puedes remediar, es algo que a Dominic se le escapa de su alcance. Es por ello que siempre ha mantenido distancias con todo el mundo, pues no puedes perder algo que no tienes. Esos sentimientos, el amor y la pérdida, no los necesita para nada, así que renuncia a ellos.

Ver el exterior te hace acordar de algo muy importante, mañana es el primer día que puedes solicitar el acceso a las pruebas profesian y generalmente se hacen unas colas importantes para todo el tema administrativo y donde conocerás a algunos de tus adversarios y compañeros (que no conocerías si vas el segundo o tercer día).

"Ahh… mañana empiezan las inscripciones…” - cavila con pesar. Dominic odia estar en sitios concurridos. - “Quizás el último día haya menos gente para inscribirse..., pero entonces no podre elegir grupo...”. - De repente se acuerda de Dora y se estremece. - “Si me toca alguien así… ya puedo dar por perdida la prueba. Ugh… que remedio, tendré que ir mañana”. - Dom aborrece la idea de tener que ir a buscar gente con la que hacer grupo, pero no le queda otra opción si quiere superar la prueba.

Al ver a través de la ventana empieza a ser consciente de lo alto que están y siente un ligero vértigo. No llega a miedo a las alturas, pero sí que es cierto que desde que tiene uso de razón ha sentido aversión a las alturas. Se impacienta un poco por acabar la reunión, esta altura le deja intranquilo.

- Haré lo que esté en mi mano.

Te quedas pensando por un buen rato, Munro te ha estado observando desde entonces...

- Haré lo que esté en mi mano.

 Imagino que tendrás mucho en lo que pensar y mucho que asimilar también. —dice marchándose hacia el ascensor—. vamos bajando. Te enseñaré el lugar mientras nos vamos.

Ambos entráis en el ascensor, él inserta la llave especial y bajáis a toda velocidad.

 No se como podría ayudarte a pasar la prueba, no se combatir o algo parecido. Pero si tienes una idea cuenta con el laboratorio.

Mientras os váis Munro te va indicando las diferentes áreas de estudio.

 En éstas secciones más cercanas tenemos el laboratorio de transmutación, ésta otra es la de estimulación neurológica interdimensional, éstas celdas son donde traemos las criaturas afectadas por la corrupción de prana, y ésas donde tenemos los recuperados en observación, lamentablemente todavía no son estables como para estar sueltos. Algunos enloquecen, otros mueren... todo depende del individuo y el proceso con el que hayamos intentado finalizar.

 Bueno, Witt. Ha sido un placer conocerte. Ven mañana cuando quieras, estoy seguro de que dedicarás el tiempo necesario y más a la investigación. Personas como nosotros jamás tenemos la paz mental que otros, aunque si es así, pues ya me está bien. Sería algo digno de envidiar —ríe un poco, consciente de su obsesión claramente marcada en sus ojeras—. Cuidate, y ten cuidado en las pruebas: te necesito de una pieza.

Durante todo el itinerario, Dominic ha permanecido con los ojos bien abiertos, llenos de interés. Si fuera por él, ya estaría investigando en esos laboratorios.

- Vendré a los laboratorios tan pronto acabe la inscripción. Gracias por la confianza. Nos vemos mañana! - Se despide de Munro Jenkins con una sonrisa sincera en la cara. Está pletórico, cosa que no le sucede mucho en su día a día. Una oportunidad así no se le presenta a cualquiera - “AH! Casimir” -  se acuerda de repente. Saca el móvil y le envía un mensaje:

Casimir! Ha ido perfecto! Mañana empiezo :)

Dominic se dirige hacia el tren para ir a su piso, cenar algo y dormir pronto. Tiene que levantarse temprano mañana si no quiere hacer mucha cola.

Se pone una alarma para mañana poder ir con bastante tiempo a inscribirse y pueda así ducharse y desayunar algo, no como hoy, que prácticamente ha sido un día de locos.

Esta un poco nervioso por todo lo que ha ocurrido y no sabe si va a conciliar bien el sueño. Y NO LO CONCILIA, NO, se queda despierto toda la noche, cosa que aprovecha para avanzar proyectos pendientes (con su portátil). Mañana estará muy cansado, pero no es problema para Dominic, no es la primera vez que hace vigilia para perfeccionar sus proyectos y al día siguiente va a clase con normalidad. 

Antes de que pueda darse cuenta, ya es la hora. Suena el despertador. - "Agh justo ahora que empezaba a tener sueño...".

Se ducha con agua fría para despertarse, cosa que consigue. Todavía se nota un poco cansado, pero nada que no pueda soportar. El hecho de poder ir a los laboratorios GEN-Kings le anima bastante. Se mira al espejo y ve que tiene unas ojeras bastante pronunciadas - "Espero que la gente no rehuya de mí por mi aspecto..." -. Desayuna, se viste y se dirige directo a inscribirse a las pruebas y buscar equipo.