Partida Rol por web

Me giro a Miu, la abrazo por última vez y le digo - Tranquila, si necesitas algo, llámame. Me voy que la directora me reclama. Hasta luego, Miu-san - se despide de ella.

Masamune se acerca a May May y la acompaña por la terraza y pasillos hasta llegar a junto la directora - Gra-gracias por acompañarme, May May-san, pero és-ésto es algo que debo hacer sólo. No sería ju-justo que lo presenciases sin ha-haber hecho nada. Así que hasta lu-luego y gracias - se despide de ella y entra en la sala donde se encuentra la directora.

May May y Masamune volvieron a clase, y, a pesar de haber sonado la campana, todos continuaban allí.

Masamune estaba muy nervioso y le tamblaban algo las piernas. Se acercó a la directora con cautela y la cabeza gacha. Esta avergonzado y con la cara totalmente roja. No por pedirle disculpas a la directora, que tambien, sino porque tenía que hacerlo delante de toda la clase. Debería disculparme pero delante de tanta gente es muy vergonzoso. Mejor se lo digo sólo a ella. Espero luego poder hablar con ella.

Delante de ella, levanta la cabeza muy enrojecida y le susurra - L-lo si-sien-siento, sen-sens-sensei - mientras le hace una reverencia y con miedo a una reacción peligrosa de ella. Respira profundamente por un momento y prosigue - ¿Po-pod-podríamos ha-habl-hablar des-des-después de cla-clase? - dice haciendo una reverencia de nuevo y con un tono amable por no decir miedoso.

Luego, se dirige a su asiento y lo ocupa. Por un momento, miró fugazmente a Lenn y después volvió a mirar a la mesa, ahora vacía con sólo su material escolar que era poco y de mala calidad.

May May había oído el timbre mientras acompañaba a Masamune hacia clase, y sabía perfectamente lo que aquello significaba... ¡Recreo! Nada más entrar en clase, le puso la mano en el hombro al chico triste y le dedicó una sonrisa amable, deseándole de corazón que el marrón no fuese muy malo. Acto seguido, volvió a su sitio para hurgar en su mochila y sacar una cajita con unos cuantos donuts caseros de su padre, sin duda alguna su comida predilecta.

Abrió la caja y enseguida se le iluminó la cara, ¡había un montón! Al parecer Jay había sido considerado conociendo el carácter generoso de su hija. May May no tardó en abrir la caja delante de su amiga Mitsuko, dándole a elegir.

- ¡Haz los honores, Mitsu-chan! Hay para todos. Tee-hee ~

Una sonrisa entusiasta por la competitividad se asomó en su rostro, en aquel momento que estaban discutiendo. A pesar que Ignoró a Mitsuko, le dedicó una mirada y le susurro una respuesta -eso lo veremos...-, mientras la directora ponía en orden a May May.

Al eufemismo que no se hizo esperar, Denis contestó sin esperar también -te veré tragando mi polvo- 

Luego de ello ella sale y vuelve con Kimura, nada importante para Denis; quien se distraía mirando a la directora. Solo hizo un gesto cuando Kimura le pidió hablar con ella a solas, pero disimuló rápido y eficiente.

Por último la niña May May, saca una caja con algo que Denis ni muchos alumnos conocían. La curiosidad pudo más que su orgullo y se puso de pie para ver mejor la caja -¿qué es eso?- pregunta con intriga.

Sin reconocer la voz, May May se giró sonriente y con los ojos cerrados hacia Denis.

- Deliciosos donuts caseros al estilo Yaeger! Coge un-... - Entonces la muchacha abre los ojos y ve de quien se trata. - No son para ti. - Respondió tajante, dejando la caja abierta delante de su amiga Mitsuko para que escogiese el que más le llamase la atención. - Tienes valor levantándote a hablarme después de todo, pero ya sabes el dicho. A palabras necias, oídos sordos ~

Estaba asintiendo comenzando a imaginar a que sabrían tales bocadillos; sin darse cuenta en lo amable que se había tornado May May, ni encontrar algo extraño en ello; pero de pronto la escucha volverse áspera y ruda con él; baja la mirada a verle a la cara, arquea una ceja y responde -bien, no importa, al cabo que ni quería- le saca la lengua.

Se da media vuelta y camina hasta la puerta del salón para salir de éste y buscar algo interesante en otro lado.

Una chica de pelo verde se acerca a May May.- Oye, ¿pasó algo con Denis?- Le pregunta con un tono amable.- Por cierto, eres nueva, ¿verdad? Yo Soy Ren, Aikawa Ren, un placer.- La chica se presenta educadamente y con una sonrisa.

- ¿Que si pasó algo? Agredió a mi amiga Naoko.

Le respondió, recordando la escena que había visto hace poco más de una hora. La chica pregunta si May May es nueva, haciendo que la muchacha recuperase la sonrisa. - Sí, soy nueva. Me llamo May May, un placer también.

¿Agredir? Denis no es así, el es distitnto...- Dice rascándose el mentón.- Debe ser un error, o una confusión.- Le dice totalmente segura de sus palabras, ella había conocido a Denis en otro año, y sabía perfectamente que él no era así.

¿Hablar? ¿De que? Claro que podemos.- Le dice Ai a Masamune.- Por cierto, siento haberte hecho llorar, pero tú debes tener cuidado con lo que dices, ¿entiendes?- Dice con un tono relajado pero severo, además de que tenía la cara completamente ausencia de algún signo de sentimientos, daba miedo, pero todos saben que en esa capa de frialdad se esconde una buena mujer, todos menos los nuevos.

Avergonzado por su comportamiento y por lo que dijo. Al oír a la directora sólo asiente a lo que dice. Sabe que tiene buen fondo pero su capa de rigidez extrema le provoca cierto respeto. Sus manos y piernas no se mueven pues el miedo lo paraliza. Levanta la cara cuando la mujer comienza a hablar lo que le provoca más nerviosismo.

- Si-Sien-Siento haber di-dicho aque-aquello. Ud ti-tie-tiene razón, no deb-debí hab-haberlo dicho - hace una reverencia - Me gus-gusta-gustaría hablar con ud a so-solas, aunq-aunque sea desp-después de cla-clase o en un des-descanso. Si no es mol-molestia - con una mirada inundada por el terror y la vergüenza.

Espera la respuesta de la maestra ante de volver a tomar asiento.

Te acabo de decir que sí, además, ya tocó el timbre... Y es hora del recreo, mejor hablamos a la salida, es mejor que te relajes algo.- Termina por decirle a Masamune.

La chica del pelo verdoso parecía muy segura de sus palabras, tanto que incluso estaba haciendo dudar a May May de que todo había sido un malentendido. Las pruebas eran sólidas: Denis estaba forzando a Naoko en el suelo, pero... ¿Por qué estaba manchado de café y tenía la taza en su ropa? Muchas preguntas sin respuesta que hacían que la cólera de May May se desvaneciese por segundos. Agarró uno de los donuts de la caja y se dispuso a salir de clase. Tendría que haberse parado antes a hablar con Denis en vez de tratarle así de mal.

- Chicas, vengo ahora. He de aclarar un asunto.

Denis había salido y dado un fuerte respiro, luego de eso comenzaba a caminar, intentando liberar cualquier exceso de energía que tuviera. Al salir May May, giró su cabeza para intentar ubicar al rubio; de primera mano parecía que ya se había ido, pero doblando una esquina se notó como él se iba; no andaba a paso apresurado por lo que era alcanzable.

Denis bajó las escaleras y fue al patio, no era difícil de seguir, parecía algo disperso. Finalmente llega a cierto punto del colegio que parecía algo separada del resto, aún se escuchaban algunas voces de alumnos, pues era la hora de receso... Denis se sienta bajo la sombra de un árbol en las calmadas zonas verdes de aquel lugar y se queda en silencio, perdido en sus propios pensamientos.

Aún algo tembloroso se sienta en su sitio procurando calmarse pero no es capaz pues está delante de todos sus compañeros y Leen está aquí también, así que lo tiene algo difícil ¿Qué pensara Leen de mi comportamiento? Seguramente me tome por un cobarde o por algo peor ¡Maldita sea! Masamune mira fjamente a Leen hasta que ella se gira y baja la cabeza como acción refleja. Sigue con la mirada centrada en la mesa y esperando que la directora diga algo si es que lo hace. Mira desde su asiento cómo Denis se va de la clase y también cuando May May sale también.

Me acerco a Masamune Kimura, parece algo nervioso y agitado y me preocupa mucho verle así. Una vez estoy junto a él me lo pienso un poco antes de hacer nada, pero finalmente le pongo una mano tímida en el hombro para llamar su atención.

No te preocupes, Kimura-san. - Digo con voz dulce y con una sonrisa tranquilizadora. - Todo va a ir bien, sonríe. Es un bonito día.

Nervioso por lo de la directora, comenzó a calmarse. Miró a Leen porque quería ver su belleza otra vez pero ella se giró y lo puso más nervioso. El corazón le latía a 1000 por segundo y una mano se posa delicadamente en su hombro. Se queda tieso, como el hielo. Quieto como el depredador mira a su presa antes de atacar. Cuando oye la voz se da cuenta de que es Mitsuko Hotaru. Se tranquiliza un poco y se gira hacia ella, mirándola a los ojos. Al hacerlo, no puede evitar ponerse algo sonrojado.

- ¡Hotaru-san! - se sorprende al oírla - Si...bueno...no creo que todo salga bien. Desde... - se calla de golpe. No tiene porqué enterarse de tu vida. No le interesa a nadie, así que calla. Intentando disimular - Si, bonito día - mientras intenta esbozar una sonrisa pero es algo miedosa dado la metedura de pata que ha cometido. Parece que de momento está tranquilo y no tartamudea, a ver cuanto dura.
 

Pobrecito, parece que lo está pasando muy mal, pero no hay nada que no arregle un poco de amor y alegría así que me acerco a él y le doy un abrazo.

- Seguro que podrás con ello, Kimura-san. - Luego me separo de él para no incomodarle en exceso. - Yo confío en ti, seguro que encuentras la forma de alegrarlo un poco.

La muchacha comenzó por tocarle con una mano pero ahora e da un abrazo. Queda muy sorprendido y atónito. No sabe que hacer. Su cara es muy roja, no por el abrazo en si, que también, sino porque lo hizo delante de toda la clase. Ahora está más nervioso que antes, el corazón le iba a estallar de un momento a otro, pero afortunadamente, se alejó antes de que algo pasara. Menos mal, pensé que me moría aquí.

- Gra-gracias su-sup-supongo - comienza a tartamudear - Como di-dijo Benj-Benjamin Franklin: "La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días" - increíblemente eso lo dice sin tartamudear ni una sola vez - Muc-muchas gra-gracias Hotaru-san. El día ya solo puede ir a mejor - intentándose dar ánimos. Y claro que lo irá, después he quedado con Leen así que irá sí o sí a mejor.