El día siguiente con la misma rutina que el anterior. Soldados y plebeyos reciben las primeras horas del día entrenado en el patio del castillo supervisados por los dos caballeros. Estos días andan más severos los dos caballeros enseñantes. Las chanzas son minimas, y la seriedad impera en la labor de adiestramiento.
A mitad de los ensayos, aparecerán el señor y el hijo uniéndose a los entrenos de espada, eso si en un lado del patio y aislados.
En un descanso del entreno con el chaval, el señor reunirá a los caballeros y a los pjs y les dirá :
Hora est, de patrullar el condado. Agora que semos más, aprovecharlo faremos.
Bien est eso que fablais mi señor, pero tenia idea de hoy marchar con los nuevos caballeros et sacar caza pues no habemus en demasia et más adelante no estaremos aca por marchar en patrullas.
No enredeis ni a vos ni a los nuevos con cazas agora. Gastad el tiempo en apatrullar con soldados los derredores. Marchad los 5 caballeros en dos grupos, que bien sabré yo resistir si fuera menester, que bien sabeis que nunca temblonme la mano si se terciaba agarrar la espada, y nunca hubo pereza ni desgana en mi cuerpo, si que poner armadura hora era.
Por los suministros no inquetaros sir Portius , pues si no habemos de tronchos que se coman berzas.
Tras terminar el adiestramiento de tropas, lavarse y comer un bocado ligero, los pjs marchan con sir Portius y sir Gravent a cumplir el mandato del castellano sir Bradwen.
¿ algo que matizar?
Lo cierto es que Cadwallon prefería patrullar los alrededores que cazar. No es que se le diera mal, pero tampoco era demasiado aficionado a ello. Si había la oportunidad de combatir... lo prefería.
Nada que añadir por mi parte. Al lío :D
La cacería por necesidad nunca había sido una de mis aficiones preferidas, más lo prefería como deporte. Así es que, la idea de patrullar y encontrar la gloria en el combate, me gustó más. Esperé pacientemente a formar los dos grupos y no comenté nada. Allí estaba para obedecer y en eso estaba.
Me levanto y escucho las órdenes. Lo cierto es que la caza no es mi afición preferida. Está bien como deporte y eso, pero la guerra es donde me siento más útil, así que estoy contento de no tener que empeñarme en semejante acción. Mejor patrullar.
Por mi, pongámonos en marcha.
Los cinco caballeros acompañados por una docena de soldadesca a caballo salen del castillo. Llevan dos mulas con suministros y aparataje para acampar, asi que no parece raro que os toque echar noche fuera del castillo. Además de esto, cada soldado carga con sus propios suministros. No parece esta marcha un paseo entre horas para hacer tiempo.
Las torres y las entradas andan vigiladas por el doble de vigías, y es el propio sir Bradwen quien ejerce de caballero defensor último y único del castillo.
Tras al menos 15 minutos de cabalgar al paso, la comitiva se detiene. Sir Gravent manda dividir en dos al grupo. Los jugadores iréis en un grupo con 6 soldados a caballo. Los otros 6 soldados a caballo irán con sir Gravent y sir Portius. No ha dejado dicho, quien de vosotros ejercerá como jefe de la compañía, o si habrá varios independientes. Eso será cosa vuestra decidir llegado el momento, si es que da lugar.
Podeis tirar por confiado o suspicaz, OCULTO,lo que os plazca, para interpretar ESTA DECISION.(vosotros 3 juntos, y ellos dos juntos). Ya os daré al final de la aventura la marca y la gloria que corresponda.
Tirada oculta
Motivo: Confiado
Tirada: 1d20
Dificultad: 9-
Resultado: 2 (Exito)
Ya he hecho la tirada
No quiero pensar mal del hecho de que se vayan por su cuenta. Del hecho de que dejen a los nuevos solos con la soldadesca esta, del hecho de que ellos dos se vayan juntos y del hecho de que no nombren a nadie como mando. Pero... bueno, yo no dejaría a unos recién llegados así como así.
Pero seguro que simplemente han estimado que, como estamos habituados a estar juntos, combatiremos mejor juntos. Sí, seguro que es eso. ¿Seguro, verdad?
Motivo: confiado
Tirada: 1d20
Dificultad: 10-
Resultado: 5 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: confiado
Tirada: 1d20
Dificultad: 10-
Resultado: 1 (Exito)
Obviad la primera tirada, que no la hice oculta.
Tirada oculta
Motivo: Confiado
Tirada: 1d20
Dificultad: 14-
Resultado: 8 (Exito)
va a parecer que sir Gravent confía en vosotros , pues os ha dado el mando de una unidad con soldadesca. Crees haber convencido a sir Gravent de tu valia, y a pesar de tu habilidad en batalla, te crees de sobra preparado para hacerte cargo del grupo.
va a parecer que sir Gravent confía en vosotros , pues os ha dado el mando de una unidad con soldadesca. Crees haber convencido a sir Gravent de tu valia, y a pesar de tu habilidad en batalla, te crees de sobra preparado para hacerte cargo del grupo.
Va a parecer que sir Gravent confía en vosotros , pues os ha dado el mando de una unidad con soldadesca. Crees haber convencido a sir Gravent de tu valia, y a pesar de tu habilidad en batalla, te crees de sobra preparado para hacerte cargo del grupo.
Marcharan ambas compañías en dirección opuesta, una al este, la otra al oeste. Al llegar al limite acordado, ambas enderezaran al norte, hasta otro nuevo punto, en el que volverán a girar la del oeste hacia el este, y la otra al revés, con intención ambas compañías de formar un cuadrado aproximado que bordee el condado.
Los puntos exactos de giros solo los conocéis de nombre, puesto que sois novatos en el condado. El problema queda resuelto, al estar acompañados por un grupo de soldados duchos en la geografía de los alrededores.
Con una de las mulas de suministros y aperos marcha cada compañía, tras despedirse de una manera formal y discreta, pues aunque nadie lo ha mencionado aun, las tropas están alertas. Es probable que los otros caballeros sepan algo que vosotros no sabeis, o que esta sea una maniobra habitual , y el proceder cotidiano.
Aunque os estais separando,. aun podeis decirles algo si os place.
- En Catterick era más habitual cabalgar todos juntos. - dijo Cadwallon, lo suficientemente alto como para que le oyeran sus dos compañeros, pero no tan alto como para que le escucharan los caballeros locales. Miró a Sir Loren y Sir Flaín y se encogió de hombros. - Puede que sean las costumbres del lugar, pero me parecen algo imprudentes...
Me encojo de hombros. Será un modo de realizar más rápido la ronda. Al fin y al cabo, parece evidente que sir Gravent confía en nuestra valía, ya que nos ha dado el mando de esta tropa soldadesca.
Miro a mis dos compañeros, afirmando con la cabeza, y luego a los soldados. Vamos, compañeros. A ver si encontramos algo interesante por le camino.
- Vaya, vaya. Parece que nos quedamos solos, como bien dice Sir Flaín, con una soldadesca a la que liderar. - Sonrío de forma maliciosa. - Veamos, - adelanto mi caballo para colocarme primero, - no os entretengáis en charlas absurdas y continuemos el paso. Tenemos que llegar al punto de encuentro a tiempo. - Miro hacia atrás. - No podemos hacer esperar a nuestros compañeros.