Partida Rol por web

1 asalto :

FUERAAAAAAAAA.

Si que esquivo el arma de su rival el espadazo de sir Owen, pero no el de sir Walter, que no pudo su espada traspasar las defensas de su fantasmagorico enemigo. al menos si que acertó a anteponer el escudo 

daño para sir Walter :

27-10-6= 11 daños

 

sir owen.   daña con 9 puntos de daño 

 

- Tiradas (2)

Motivo: ataque al fantasma

Tirada: 1d20

Dificultad: 15-

Resultado: 7 (Exito) [7]

Motivo: daño al fantasma

Tirada: 6d6

Resultado: 22(-13)=9 [4, 4, 2, 5, 4, 3]

sir walter

 

Motivo: espada

Tirada: 1d20

Dificultad: 17-

Resultado: 4 (Exito) [4]

Motivo: daño

Tirada: 5d6

Resultado: 21 [6, 5, 4, 3, 3]

2º asalto de sir owen:

Abrumado por la situación, cae al suelo

2º asalto de fantasma:

falla a sir owen

Este demonio no sólo rechaza mis ataques, además vence mi guardia y me desgarra la piel de mi cuello. La sangre caliente brota al tiempo que siento que me debilito. Me defiendo, pero creo que mi fuerza flaquea. Está claro que voy a sufrir más dolor una vez más. Cuando recibe el nuevo golpe, con las pocas energías que me quedan y casi doblegado lanzo un posiblemente último ataque... débil y torpe... 

Resumen 2 asalto:

Sir owen caido, pero sin recibir golpe, y sir walter con 20-10= 10 de daño

asalto 3 :

Sir owen:

asalto 3 :

sir walter:

 

Motivo: ESPADA 2

Tirada: 1d20

Dificultad: 17-

Resultado: 1 (Exito) [1]

Motivo: DAÑO 2

Tirada: 5d6

Resultado: 23 [6, 4, 5, 5, 3]

Sir Walter:

16 -10- 6 escudo: 0 daños para ti.

Sir Owen.

27-10-6= 11 daños

- Tiradas (2)

Motivo: caido -5

Tirada: 1d20

Dificultad: 10-

Resultado: 4 (Exito) [4]

Motivo: daño

Tirada: 6d6

Resultado: 26 [6, 1, 6, 5, 6, 2]

RESUMEN asalto 3 :

Ni  Sir owen tumbado ni sir Walter en pie pudieron con el impetu renovado del fantasma, al menos ambos antepusieron los escudos, reduciendo en algo el daño.

DAÑO PARA SIR WALTER:

16-10-6 = 0

DAÑO PARA SIR OWEN:

27-10-6= 11 DAÑOS

El escudo y mi armadura de caballero impiden que la fantasmagórica figura vuela a abrir mis carnes. Sin embargo la fuerza del impacto de su pesada hoja sobre el metal y la madera de mi escudo es tan fuerte que me obliga a doblar la rodilla. Así, arrodillado ante esta cosa, caído como mi buen amigo sir Owen, lanzo un golpe débil. Es más fruto de la desesperación que de la instrucción que se me supone. Pero en mi defensa sólo se puede decir que no es lo mismo enfrentarse con hombres, por fieros o diestros que sean, que con seres sobrenaturales. Intento levantarme a pesar de todo, debo hacerlo aunque sólo sea por no fallar a sir Owen. Lo intento con todas mis fuerzas a pesar de mis heridas, temiendo más por mi alma que por el destino de mi cuerpo.

- ¡levantad  sir Owen! ¡si hemos de morir aquí, que así sea. Pero nunca de rodillas!

• al estar owen caido, la proxima se pone en pie.

normalemnte, si un asalto te caes al siguiente te levantas automaticamente. 

Aun pareceia que el susto en sir Owen no habia desaparecido del todo, y que le tenia como agarrotado. Fue muy torpe en su maniobra de ataque, y  casi seguro, que pagaria con sangre aquella torpeza.

FUERAAAAAAAAAA!

zarpazo para sir Walter. 

Motivo: des

Tirada: 1d20

Dificultad: 15-

Resultado: 16 (Fracaso) [16]

Motivo: espada -5

Tirada: 1d20

Dificultad: 10-

Resultado: 1 (Exito) [1]

Motivo: des 2

Tirada: 1d20

Dificultad: 15-

Resultado: 15 (Exito) [15]

Motivo: daño

Tirada: 5d6

Resultado: 22 [3, 6, 5, 3, 5]

26 -6-10= 10 daños para sir walter 

espadazo para sir owen:

16-10=  6 de daño

RESUMEN asalto 4 :

Ambos caballeros atenuados por la lucha, comenzaban a fallar sus ataques. el fantasma acertaba de pleno, y hacia sangra a los caballeros. mala pinta tenia la cosa .

Cuando sus uñas monstruosas como garras destrozan la piel a través de mi armadura el dolor es tan intenso que casi vuelvo a caer justo antes de lograr estar en pie. Pero lo estoy. No es sangre lo que ven mis ojos, es el frío de la tumba tomando posesión de mi cuerpo maltrecho. A duras penas sostengo espada y escudo en alto mientras escucho resonar sus gritos expulsándonos de lo que me parece va a ser mi propia tumba. Tan agotado me siento que perecer aquí me parece más lógico que una huida sin honor. Presiento que sir Owen tampoco huye, pero no le reprocharía el hacerlo... Lanzo mi acero directo al cuerpo de esa cosa, la dirección al menos es la acertada, pero mi brazo se siente tan débil... 

No dió lugar al espadazo que sir Walter tenia preparado, pues algo o alguien hizole el gesto, y a fe que consiguio  parar el ataque del heridisimo caballero. Y ese alguien o algo, debio de llevarlo lejos de ese amenazante lugar.

De hecho se encontraba en un lugar ajeno a aquella cueva. Tumbado en el suelo y con dolor en las tripas, pues ahi es donde recibio varias estocadas del fantasma de la cueva. Aun asi, no habia sangre ni tajo en la panza de sir Walter.

El lugar aun extraño no le era ajeno del todo, pues a fe que lo habia recorrido y no hacia mucho.

Se encontraba en la encrucijada anterior, aquella en cuya elección habian dado a parar a la gruta, origen y causa del percance.

Aun se mantenia intacto aquel lugar de embrujo feerrico. Aun se veia el camino elegido que les llevaba a la cueva y otro desconocido sendero que tornaba en otra dirección.

Tras la fresca noche y no menos fresca mañana, continuais ritmo. Seguis andando. El sol no termina de calentar, y vuestros huesos no han entrado aun en calor. La monotonia de un paisaje enfermo y gris, lleno de arboles y raices enfermos y secos, se rompe con la visión de un sendero bifurcado. Esto es, hay un camino que gira al norte, y otro al este.

¿ cual seguireis?

Acomodado en el suelo, no te pareció mala idea quedarte un poco quieto, como adormilado, pues las heridas dolian y la postura al fin se tornaba cómoda. Sin remisión duermes.

Ahi andabas a gusto, medio adormilado, cuando unos suspiros , a veces jadeos te despiertan. Te son familiares, puesto que parecidos los padecistes hace poco, consecuencia del dolor. La voz tampoco te es ajena, pues la reconoces como la de sir Owen.

No parece estar mejor que tu, pues se sigue retorciendo de dolor. Le tomas algo de delantera, pues los tuyos( los dolores) van menguando y te permiten pensar, razonar e incluso puede que levantarte del suelo. Creo que estas mejor que tu compadre que se retuerce de dolor, de forma semejante a la tuya hace un rato.

¿ que haces?

Abro los ojos de par en par. Compruebo que sir Owen respira tal y como yo mismo hago. Contemplo la bifurcación aún perplejo preguntándome si esta segunda oportunidad será parte de algún tipo de acertijo faérico. Recuerdo al fantasma armado mientras me levanto con dificultad y tiendo la mano a sir Owen con media sonrisa en mis labios.

Arriba, mi buen amigo. Aunque me duele hasta el alma creo que no es momento de descansar. Peor camino no pudimos haber elegido, tomemos la otra bifurcación. Difícil será que sea peor elección. Debemos encontrar algún tipo de ayuda antes de regresar a esa cueva. La cosa que mora allí ha demostrado que no somos rival para ella. ¿qué decís mi buen Owen? ¿estáis listo?

Tan pronto recobremos el aliento comienzo a seguir el camino que no conduce a la cueva. Espero que los escuderos y los caballos estén bien, pero estoy concentrado en resolver este asunto. Cada problema en su momento. La muerte ha estado demasiado próxima en esa cueva y no creo que haya una tercera oportunidad...

Mas fablaria et no poco si non fuere por el dolor que acá me manca en las costillas.

Respondio visiblemente molesto sir Owen. No obstante prosiguio.

No es cosa de guerreros, yacer aca tirados, y mucho menos de caballeros, a los que se les supone de natural con cabalgadura. Bien quisiere yo levantar mis carnes, et lo haré pasado un rato, nada más que recupere el aliento y las fuerzas.

Et no creo que aquella cosa fuera mal rival para nosotros, lastima que erramos mas de lo que con pudor pudiesenos contar. No obstante fabrá que regresar a rematar a aquel fantasma, lo que no se si será pronto, agora, en seguida o de aca a unos dias.

¿se os acurre que cosa hacer la próxima?

Amigo mío, no soy entendido en lo faérico. Mi última aventura con seres de más allá de nuestro mundo fue guiada por Merlín, el druida de nuestro Rey. Creo que poco podemos hacer salvo buscar a alguien que nos aconseje cómo enfrentar a esa cosa. Quiero pensar que debe existir alguna debilidad para darle el descanso definitivo a semejante ser. Despertar aquí doloridos pero vivos es una segunda oportunidad que no debemos desperdiciar. Si vamos en nuestro estado a su encuentro nuevamente será un acto valeroso, pero demasiado estúpido, creo yo. Sigamos el otro sendero y confiemos en la providencia. Extraña lógica gobierna en el mundo faérico, pero como ocurre en el nuestro todo tiene un comienzo, un final y un por qué. Vamos, esperemos hallar respuestas por el otro camino, sería un suicidio regresar a esa gruta en estas condiciones.

Sonrío con una mueca de dolor a sir Owen y comienzo a caminar en dirección al sendero de la bifurcación que no conduce a la gruta.