Partida Rol por web

Comenzamos la segunda parte de la aventura por esta web, atrás queda la primera parte.

LA CUEVA DE LA HORDA AULLANTE

Os tomáis el desayuno y cuando habéis repuesto fuerzas os decidís acercaros al lugar donde se sucedió el último encuentro para ver si encontráis algun tipo de huella o rastro que os indique.
Tara encuentra algunas pisadas y consigue rastrearlas durante unos kilómetros. Las huellas os llevan a un camino transitado que lleva a una cueva en la ladera de una colina. Su entrada está a unos 90' (unos 30 metros) de distancia. A medida que os váis acercando tenéis una sensación cada vez mayor de que estáis siendo observados.

después de arreglarse y tomar un desayuno generoso Quentin se encontraba de humor para continuar el camino. no sabiendo donde empezar el grupo decidió volver al lugar donde habían encontrado los primeros trasgos. gracias a las habilidades de Tara que siguió los rastros de los trasgos como un sabueso pudieron dar por fin con una cueva.

no parecía haber nadie, aunque todavía era pronto para estar seguros..

Una vez en marcha, Vankaard se concentró. Estaba atento ante cualquier ruido, ya que nunca se sabe por donde puede venir el enemigo

Al llegar a la cueva, todo parece demasiado tranquilo. Vankaard empezó a mirar hacia todos lados, buscando algo que le diera pistas sobre la presencia de trasgos

Pude encontrar unas huellas en el camino que me daban a entender que allí se encontraban los goblins, una sensación extraña me rondaba, era como si supera que nos espiaban, ¿pero quien? ¿goblins espias? Pero para dar la voz de alarma tendrían que encontrarse cerca de la entrada y en este momento eramos nosotros quien esabamos más cerca...a no ser que fuera una emboscada.

Mire a mi alrededor esperando calmar la ansiedad que sentia en ese momento.

- ¿Hay alguien que sepa de trampas? Quizas esa persona deba adentrarse primero conmigo, mis habilidades rastreando nos serviran para saber por donde ir

Prepare mi arco esperando no tener que usarlo, pero quizas pronto tendría que hacerlo

Zhirkan iba lo mas de contento por el camino, despues de todo habia dormido y desyunado, ¿Que mas le pide uno a la vida?. Y como si la vida le hubiera querido dar la respuesta esucho sn querer la voz de Tara. Hasta el momento Zhirkan estubo mas al pendiente de su bolsillo y de su barriga... quizas ahora podia atender aquello que se encontraba debajo y entre esos dos.

Se abrio paso entre Vankaard y Quentin.

-"Permiso camaradas, la dama necesita alguien diestro y valiente que le acompañe"- Se presentó "galantemente" a Tara -"Digame, señorita de hermosa mirada, ¿en que puedo serle útil?" - y le guiño el ojo.  Mientras aprovecho para atisbar a la entrada y sus alrededores; y por si las moscas, y para impresionar a Tara, saco su ballesta y la cargó.

después de arreglarse y tomar un desayuno generoso Quentin se encontraba de humor para continuar el camino. no sabiendo donde empezar el grupo decidió volver al lugar donde habían encontrado los primeros trasgos. gracias a las habilidades de Tara que siguió los rastros de los trasgos como un sabueso pudieron dar por fin con una cueva.

no parecía haber nadie, aunque todavía era pronto para estar seguros...

Sarth avanzo junto a sus compañeros, Tara demostro de su capacidad para llevarles hasta la guarida de los trasgos pero la sensacion que esta transmitia se contagiaba y Sarth, estando junto a sus "amigos" decidio que necesitaba algo en lo que pensar para poder hacer algo. Asi que observo la zona buscando algo que desentonara.

Ayur se situo en el centro del grupo, protegido y cerca para curar a quien fuese

Ves que junto a la boca de la cueva hay un par de trasgos haciendo de centinelas y un perro guardián.

Sarth obseva la situacion, y viendo lo que les esperaba decide actuar comentandoselo a sus compañeros.

- Compañeros, hay varios guardias en la entrada. Observo al menos a 2 Trasgos mas un perro como guardias en la entrada a sus cuevas. ¿Que opinan?

Comenta Sarth mientras evalua la zona cercana para saber si serian capaces de acercarse, aprovechandose de los follajes naturales para poder sorprenderles desde mas cerca. O por el contrario deberian confiar en la habilidad de sus compañeros diestros en la distancia para acabar con ellos cuanto antes.

 - Deberíamos evitar el enfrentamiento directo, de seguro son los guardias y podrían alertar a los demás tragos, si lográramos distraer su atención y se movieran de la entrada podríamos tomarlos por sorpresa y evitar la alerta a los demás trasgos. Creo que algo de ruido con una flecha a distancia sería lo más apropiado para llamar su atención… o también podríamos dejar las sutilezas, nuestro amigo Vankaard se ve ansioso y podría dirigir el ataque.

- Yo podría esconderme y disparar una de mis flechas contra un trasgo, pero necesitaria por lo menos otro que sea bueno con el arco para acabar con los dos a la vez antes de que les de tiempo a dar la alarma.

Otra opción sería que los arqueros disparasemos nuestras armas escondidos y justo después entraseis los demás, asi en la confusión podríais acabar con ellos antes de que les de tiempo de decir nada, si es que sobreviven a las flechas

Preparo mi arco para el caso de que les parezca bien mi plan y tenga que hacer uso de el

Yo soy diestro, pero lo del arco no lo llevo bien.-dijo con tono de humor.-Ahora en serio, si os parece bien puedo acercarme por el camino simulando ser un vagabundo que se ha perdido, ¿Eso os proporcionaria la suficiente distracción?

Sería exponerte demasiado. Creo que es buena la idea la de que los arqueros disparen sus flechas y el resto les ataquemos. No podrán con tanto

Una vez al frente con Tara pudo ver mejor la situacion. Alguien aviso que habian un par de Tragos frente al entrada de la cueva.

Zhirkan se rascaba compulsivamente la medio-barba mientras escuchaba a sus compañeros debatir sobre cual seria la mejor opcion. Y como èl no era un tipo de mucha paciencia, se adelanto antes que nadie pudiera impedirlo.

A una distancia de tiro de arco salio al descubierto y les grito a los Trasgos:

-"He!, bichos malolientes, desde aqui detecto por sus eructos lo que comieron ayer"- Les mostro el trasero (sin bajarse los pantalones, claro) -"Apuesto el pellejo de sus promiscuas madres a que no me alcanzàn!... si es que tienen madre!"- Y hechò a correr distanciandose del grupo que permanecia oculto.

Uno de los trasgos y el lobo salen fuera de la cueva para ver a Zhirkan quien ha llamado su atención causando bastante alboroto. El muchacho sale corriendo pero el trasgo y el lobo no le siguen.

Lo único que ocurre es que el perro comienza a ladrar y a aullar a modo de alarma.

Sarth observaba las acciones del grupo, y no puedo mas que sentir furia por dentro cuando observo a Zhirkan actuar. Los Trasgos claramente no eran estupidos y cuando observo como el perro-lobo empezo a aullar se cumplieron sus peores espectativas. Ya les habian descubierto.