Partida Rol por web

Lo siento amigo. Pero poco puedo decirte de esta ciudad. Llegué hace poco, pregunté donde podía encontrar trabajo, me enviaron a la biblioteca y ahí fue donde nos encontramos. Conozco lo mismo que vosotros de esta ciudad

Señor Anthos, disculpe. ¿Sabe usted dónde podremos encontrar algo que hacer? Ya les informaron a mis compañeros de venir aquí para ello, pero no sabemos si quedarán trabajos pendientes

- Depende -dice sonriendo- ¿Que buscais? ¿Dinero? ¿Fama? ¿Poder? ¿La emoción de vivir una aventura?

Sangre, muerte, violencia... Pero eso no estará permitido pensé mientras Anthos nos hablaba de las posibilidades. Dejé que mis compañeros contestaran nuevamente, y así conocer más sus inquietudes

Conocimiento y poder.- Maik necesitaba eso para poder encontrar al demonio que acabó con sus padres

Poder... Qué excitante

- Sinceramente yo llegué aquí en busca de respuestas... así que pienso como Maik, quizá busque yo también conocimiento y poder, pero lo que está claro es que no quiero fama... la fama nunca me ha gustado... no señor.

A mí siempre me ha gustado pasar desapercibida. Así que... Háblanos de ese tipo de trabajo que mis compañeros tanto desean

- ... esta visto que el espiritu romantico esta muy muerto en estos tiempos, -dice Anthos suspirando- En fin, dado que no puedo recurrir a mis compañeros habituales me vendra bien vuestra ayuda, en las montañas del norte, una región inhospita, la peligrosa banda de La Garra de Askargoth se retiró alli tras ser vencida por el dragon del norte ,Azogath,  hace seis años.

Anthos ahce una pausa para continuar.

- Hace poco pude averiguar su localización, y algo mucho mas interesante, su temido lider, el guerrero bálor Araón se encuentra lejos, quedando solo al mando uno de sus mejores hombres, el nigromante hezrou Gunstaf, creo que seria una gran ocasion para debilitar a esos demonios.

- Háblanos de ellos, qué puedes contarnos y cuál es el motivo para debilitarles

- Son demonios -dice Anthos- y los demonios no son nunca cosa buena, la decada pasada arrasaron Ylvat y acabaron con muchos mercenarios que se envio a detener su avance hasta Rerigor,Los Lobos del Norte, Los Cuervos de Odin, La Garra del Dragón, La Mano del Troll, El Puño de Thor... cuando La Garra de Askargoth llego a Rerigor aparecio el dragon del norte, Azogath y tuvo un gran enfrentamiento con su lider, el resultado fue una victoria muy ajustada del dragon del norte, no pudo destruir el ejercito pero hizo que este se retirara, tranquilos, no nos enfrentaremos al ejercito en todo su esplendor, solo a una de sus facciones y tampoco la mas fuerte.

Cuando Anthos mencionó los demonios Maik levantó la cabeza.

El nombre del demonio, dime el nombre.- el guerrero se alzó un poco en la mesa de los nervios.

Los recuerdos de aquel demonio asesinando a sus padres le asaltaron de nuevo.

- Hay muchos en esa horda asi que podria pasarme el dia diciendo nombres si los conociera todos, al que nosotros vamos a enfrentar es el nigromante Gunstaf, si le destruimos los demonios perderan el control sobre varias legiones no-muertas. -aclara Anthos-un duro golpe para ellos.Si preguntas por el lider, su nombre es Araón.

Los demonios son divertidos. Estos hombres tienen conceptos muy raros...

Bueno, pues si ya sabemos a qué nos enfrentamos, deberíamos ir. ¿Algún sitio para comprar agua bendita? Nos vendrá bien para enfrentarnos a los no-muertos

¿Qué me puedes decir de la compañía de la Garra del Dragón?, ¿Qué demonio acabó con ella?, ¿Algún superviviente?.- el guerrero se puso de pie.

Tantos años de búsqueda, de viajes, de batallas, para poder ver por fin la luz al final del túnel. 

- No lo se -contesta Anthos a Maik- Eso quizas puedas preguntarselo a Gunstaf en cuanto le encontremos. Y no, no hubo supervivientes. en cuanto al agua bendita, en esta ciudad no venden algo asi, es una tradicion sureña, aunque en la capital posiblemente encontremos algo.

- Maik, parece que este tema te afecta personalmente. ¿Hay algo que debas contarnos? Quizá podamos serte de más ayuda.

Dinos Anthos, hay algún aventurero más inmerso en esta misión, creo que nosotros tres seremos pocos para luchar contra una facción entera...

- Cuatro -corrige Anthos- Yo tambien voy. Reunir gente poderosa es muy difícil, al menos gente tan poderosa como las que nos hayamos aqui.

- Pero si vas a venir con nosotros, antes deberías descansar tus conjuros son muy poderosos pero de nada servirán si no descansas antes. ¿Y exactamente, a qué te dedicas y podrás ayudarnos? Quiero decir, a parte de en sanaciones, claro.