Partida Rol por web

Lucy miró al capitán con cara apenada.

-Para mi siempre serás el tío Alex. Contestó la chica. -Está claro que somos como una familia, pero tengo que irme.

Los comentarios de Alex eran inspiradores, pero no es lo que quería oír de él. Todo lo que había dicho ya lo sabía. Y no era suficiente como para que se quedara.

Las palabras de Walter sorprendieron un poco a Lucy, pero dado que era el que menos claro lo tenía de los tres, tampoco le parecía descabellado. Quería hacerle una propuesta, pero no sabía si estaba aún a tiempo. Tampoco la iba a hacer delante de todos. Quizá mientras recogía sus cosas...

Parecía que Lucy lo tenía claro.- Te echaré de menos. Que tengas toda la suerte del mundo- le deseé de corazón, descontando al desconfiado de Salvador era la mejor piloto con la que había estado, tenía por delante un prometedor futuro y el dinero suficiente para hacer lo que quisiera.

Al final, el Alex convincente había aparecido. Puede que un poco tarde ya que Lucy sequía en sus trece de marcharse, pero sirvió para convencer a Walter. Pero ¿Ya Marck?
Alex tenía razón en algunas cosas sonre otros capitanes. Aunque ni todos eran unos tiranos, ni todos eran unos bonachones. Pero siempre uno tenía que ganarse su puesto.

Al final Marck no se pudo marchar, la balanza pesaba más de un lado que de otro. Sobretodo con el "pesado" de Walter.

Qué diablos. Si me marcho sois capaces de tener un accidente serio y moriros todos por no estar con vosotros. No me lo perdonaría nunca.
En fin. Me tendré que quedar en la Fenix un poco más. No puedo dejar a Ilia con dos sinverguenzas como vosotros. alguien debe velar por ella.

Después se volvió a Lucy.

Cuidate mucho pequeña. Y te cuidado ahí fuera. El universo está lleno de cosas sorprendentes, y peligrosas.
Te echaré de menos.

Walter sonrió, al menos Marck se quedaría también, aunque su sonrisa no fue completa pues Lucy se marcharía igualmente.

-Me alegro mucho que te quedes Marck, siempre tuviste mejor mano para convencer a Alex de que en comida no se puede escatimar dinero, pues la buena alimentación es la base de una tripulación sana y feliz.

Se frotó la barriga con suavidad y se acercó a Lucy mientras abría los brazos para darle un enorme abrazo.

-Mi pequeña Lucy, te echaré mucho de menos. Cuidate mucho y dale un abrazo enorme a nuestra querida Precious también. Alargó el abrazo con la falsa esperanza de así poder impedir que la piloto se fuera de la nave, pero sabía que tenía que soltarla y dejarla ir. No te olvides de nosotros, escríbenos, llámanos, para lo que haga falta en cualquier momento, ya sabes que puedes contar con todos.

Se apartó un poco para que Lucy no se sintiera agobiada y pudiera ir a recoger sus cosas. Mientras tanto se volvió a sus tres compañeros.

-Capitán ¿Tienes pensado buscar alguien que cubra los puestos que han quedado libres?

El puesto de piloto podía ocuparlo él mismo, pero ahora solo disponían de una artillera, si bien era cierto que con un cambio de programas las torretas dispararían mejor que antes en modo automático.

Lucy se dejó achuchar por Walter y le respondió con un fuerte abrazo, un poco más largo de lo necesario. -Gracias, Walter. Le susurró en un hilillo de voz y le besó en la mejilla. Cuando por fin le dejó ir, una lágrima resbalaba por la mejilla de la piloto, que se apresuraba torpemente en disimular. Incluso había manchado un poco al mecánico.

-Aix... os echaré mucho de menos. Repitió ella también al resto. -Os escribiré, aunque no sepa donde estéis.

Se fue a buscar la maleta que ya tenía casi acabada de hacer y en unos minutos reapareció para acabar de despedirse definitivamente de la Fénix y su tripulación.

Abrazó a todos y cada uno de los componentes y les deseó de nuevo un viaje seguro y provechoso. Finalmente desembarcó y miró por última vez (de momento) a la nave. -Adiós, pequeña. Cuídate. Y sobre todo, cuídalos. Un par de lágrimas más brotaron del rostro de Lucy que se adentró en la estación en busca de un pasaje.

 Antes de que la piloto se marche, le doy un abrazo y le susurro:

 - Siempre tendrás un lugar esperándote aquí, pequeña...

 Una vez que se vaya, miré a mis compañeros:

 - Tendré que buscar un nuevo piloto y un nuevo artillero, los demás podéis tomaros un par de días libres mientras lo hago y comercio...

Lucy es el segundo tripulante en avandonar la Fenix Estelar, el primero fue Dirck en Yori, Precius fue la siguiente... en Risek y ahora es Lucy quien sale del carguero...

Ahora es el momento de cerrar las compras de cargas para la especulacion en otros sistemas y comenzar los preparativos para el despegue... y es a los tripulantes que se quedan a quien pertenece hacer estas labores, la vida continua y no espera a nadie...

Aunque la despedida es dificil, hay que mirar al horizonte y lo prmero que hay que hacer es buscar un transporte que viaje a Risek, eso no es dificil ya que pronto localizas una nave que vuela esta misma tarde a Risek y hacepta pasajeros...

Asi que no le das mas vueltas y embarcas en el Valkiria, rumbo a Risek...

El Valkiria inicia el vuelo puntual y desde la pequeña ventana de tu cabina puedes ver a la Fenix Estelar hacerse mas y mas pequeña, hasta dejar de verla por completo...

En unas horas la nave llega al punto de salto seguro y entra en transito hiperespacial y en una semana llega a Risek donde una lanzadera te lleva a la Arcologia Spinward -2, donde esperas encontrar a Precius...

-Como quieras Alex, si necesitas algo probablemente estaré en la zona de ingeniería. ¿Has pensado alguna vez en aumentar la potencia de la Fénix? No hay mucho espacio en una nave de este tonelaje, pero creo que hay espacio suficiente para algo más potente. Podría hacer los cálculos si te interesa, aunque claro lo ideal sería que la zona de Ingeniería fuera más grande...

Si por Walter fuera la zona de Ingeniería de todas las naves en las que había estado debería aumentar de tamaño considerablemente para poder meter todo lo que el quería, era cierto que se perdía sitio para otras cosas, pero ¿Acaso no eran los reactores lo más importante de una nave?

-Si tienes tiempo te recomiendo que te hagas la visita guiada. Te llevan por parte del trazado del rally de los dos mundos y es alucinante. Yo estoy dispuesto a repetir si quieres compañía. Y si encuentras algún candidato deja que Marck lo examine antes de nada, no quiero que nos encontremos con una enfermedad en mitad del espacio.

Walter sonrió pues sabía que el doctor no dejaría entrar a nadie sin examinarlo antes, era muy meticuloso con esas cosas. Afortunadamente gracias a eso la Fenix no había sufrido ninguna cuarentena nunca, eso era algo desagradable pues no te dejaban salir al astropuerto y comprar más provisiones.

 - Mira a ver como podía mejorarse la potencia, Walter, y me pasas un presupuesto, en un futuro cercano, en cuanto tengamos fondos, te prometo que será mi prioridad...

 Me dispuse a salir de la nave:

 - Voy a ver si doy reclutado a un artillero y a un piloto, a la vez que me encargo del comercio, Los demás quiero que os lo paséis bien en vuestro permiso....

Al final Lucy se marchó, y apunto habían estado de hacer lo mismo Walter y él. Pero por lo visto eran demasiado viejos para ir cambiando a estas alturas.
Iban a echarla mucho de menos, seguro.

Pero la vida seguía. Y había que volver a trabajar para poder vivir. Y lo primero era reponer tripulantes. Por lo menos un artillero más. O programas si no encontraban a nadie. Cuando Alex quisó ir a echar un vistazo, el médico decidió que sería bueno que fuese más de uno.

Alex ¿Te importa que te acompañe?

 - Claro, pero te aviso de que será aburrido... - Respondí sonriente.

Alex y Marck se habían largado a buscar nueva tripulación, no me había importado la marcha de Precious, pero la verdad, si noté la de Lucy, me llevaba bastante bien con ella y se notaba su ausencia.

Fui a hablar con el único miembro de la tripulación que estaba en la Fénix, no tuve que buscar mucho solo con entrar en la zona de ingeniería di con él.

Hola Walter, ¿Como lo llevas?- sabía que el ingeniero se llevaba muy bien con la piloto e igual necesitaba poder hablar con alguien.

Walter comprobaba una y otra vez cada rincón de la sala de ingeniería para ver si podrían meter un reactor más grande cuando Ilia entró a saludarle. Se pegó un pequeño susto pues no esperaba a nadie allí. Como siempre Walter estaba enfundado en su mono de trabajo sucio y lleno de grasa.

-Hola Ilia, me has asustado. Pueeees... estoy midiendo esto, creo que podríamos poner un reactor de maniobra y una planta de potencia que nos permitieran acelerar un poco más rápido, pero la diferencia no será mucha y quizá no compense el gasto, debería mirar los precios cuando tenga tiempo. ¿Alex y Marck ya se han ido?

Suponía que si, no tenía muy presente cuanto tiempo había estado allí abstraído entre los reactores, pero lo normal era que se le pasaran las horas casi si enterarse cuando se concentraba en su trabajo. Se restregó las manos en un trapo para quitarse la suciedad más escandalosa mientras hablaba.

-¿Crees que podrán encontrar a alguien? Lucy era muy buena piloto, siento que se haya ido, pero Precious parece que le hizo una oferta irrechazable. Me alegra que tu y Marck os quedeis, no me gusta mucho la gente nueva, suelo tardar en conectar con ellos, pero supongo que Alex y Marck no cogerán a cualquiera. No se si te lo dije, pero eres buena reparando circuitos electrónicos, además de disparando torretas claro, esa es una de mis asignaturas pendientes, me gustaría saber algo de circuitos pero la verdad es que los motores y las reparaciones me tienen ocupado demasiado tiempo, espero que los próximos viajes sean más tranquilos, aunque difícilmente podremos superar nuestra última misión...

Sí, se marcharon hace un rato a buscar personal nuevo. Una pena lo de Lucy, era muy buen piloto- le digo al ingeniero- Espero que tenga suerte. Al final ¿Aceptó la oferta de Precious o se fué por libre?- Suponía que se estaría con Precious, pero seguro que Walter lo sabía, porque ellos eran bastante amigos.

Gracias Walter, estudié electrónica en la universidad, pero comparada con Marck reconozco no soy más que una vulgar aficionada.

Sí -le confirmo- pasar una temporadita sin ataques piratas y sin secuestros estaría bastante bien, la verdad.

Finalmente Ilia le confirmó lo que él imaginaba, Alex y Marck habían salido a buscar remplazos para los puestos que habían quedado libres.

-Seguro que si la tiene, es una chica muy lista y muy buena piloto. Si, finalmente aceptó la propuesta de Precious, supongo que era una buena oferta después de todo. Aunque la echaremos de menos por aquí, a las dos.

Al fin y al cabo Precious no tenía ni idea de como pilotar una nave, así que a diferencia de Alex que aunque no era tan bueno como Lucy sabía pilotar, Precious si que necesitaba a un piloto si quería formar una nueva nave y nadie como Lucy para el puesto.

-Aficionada o no lo hiciste muy bien, al final lo que cuenta es poder trabajar bajo la presión de las circunstancias difíciles, reparar algo en el dique seco de un astropuerto está al alcance de cualquiera, pero cuando la nave está en peligro y la vida de la tripulación depende de ello es otra historia. Me alegro que los piratas te entregaran a nosotros. Debiste pasar muy mal rato, no quiero ni imaginarme si me pasa a mi lo mismo, creo que me moriría de miedo. Y disculpa si fui algo rudo contigo al principio, pero estábamos muy nerviosos con todo el asunto del intercambio con los piratas y al verte amenazar a Marck me entró el pánico. No estoy hecho para ese tipo de situaciones.

Ilia parecía una chica sensata, al menos eso lo habían ganado, Precious siempre estaba deseando ese tipo de situaciones para demostrar todo lo que había aprendido en el ejército, pero a Walter le gustaba tener una tranquila vida espacial.

-Afortunadamente creo que en eso estaremos todos de acuerdo, esta misión ha sido muy beneficiosa pero nos ha dado más de un susto, estoy deseando volver a nuestra tranquila vida comprando y vendiendo mercancías.

El médico se encogió de hombros ante la advertencia de Alex.

No importa.
Además, en la nave no tengo nada que hacer, y si me quedo mucho tiempo lo mismo Walter me pone a ayudarlo a reorganizar ingeniería.

Yo también me alegro Walter, sino se hubiesen confundido con las capsulas ahora podría estar exclavizada en un harem. No te preocupes, que no fuiste brusco- le mentí un poco al ingeniero, pero dadas las circunstancias de nuestra presentación su comportamiento era muy comprensible.- Yo tampoco me comporté como una educada señorita.

¿Te importa que te ayude? Desde el ataque pirata me he dado cuenta de que necesitamos un segundo mecánico, alguien que pueda echarte una mano si la cosa se complica o que te ayude en las reparaciones menores cuando lleguemos a puerto.

-Hubiera sido terrible, no se como todavía hay basura espacial que trafica con personas, tanto los que las venden como los que las compran, me gustaría meterlos a todos en una nave y dirigirlos contra una estrella.

Se sorprendió un poco ante la petición de la mujer pero no tenía ningún problema con eso.

-No, claro que no. Normalmente la gente no suele prestar mucha atención a estas cosas, me sorprende que estés interesada, pero estaré encantado de que me ayudes. ¿Conoces todas las herramientas? Si no es así deberíamos empezar por eso, si vas a ayudarme al principio te dedicarás a observar y a alcanzarme las herramientas que necesite, después ya podrás ir haciendo las cosas tu sola seguramente.

Empezamos por donde tú quieras Walter, eres el profesor- Le dije poniendo atención a sus explicación. La verdad es que nunca me había interesado mucho la mecánica, pero en el combate contra los piratas me dí cuenta de que en una nave tan pequeña como en las que estaba trabajando últimamente saber hacer de todo podía significar la diferencia entre la vida y la muerte.