Partida Rol por web

Bree en apuros

II. Una casa en las afueras

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08/03/2020, 17:30
Director

El silencioso fuego cruzado continuó en el claro del bosque: la lanza arrojada a la desesperada del Esterlinga adquirió una parabólica endemoniada mientras caía sobre Ruby, quien a duras penas tuvo tiempo de salvaguardarse bajo su escudo, regalo de familia. La lanza se deslizó sobre la superficie del escudo, dejándose en él la mayor parte su carga letal y salió por uno de los lados, hasta golpear en el hombro del hobbit. Ruby reprimió un grito de dolor, y dejó caer el escudo para sujetarse el hombro herido.

Mientras tanto, otra flecha de Mithgannel se hundía en el pecho del esterlinga más cercano a ella, quien caía de rodillas y expiraba sin exhalar un sólo suspiro. La elfa se volvió con preocupación hacia el hobbit, pero una rápida mirada a los ojos del mediano le tranquilizaron. Si es cierto lo que se decía de ellos, eran seres de admirable constitución, con una capacidad de sufrimiento infinita. 

El esterlinga, viendo cómo su lanza golpeaba con fuerza al mediano, estuvo a punto de proferir un grito victorioso, que sin duda hubiera atraído la atención del interior de la casa, cuando un martillo rasgó la noche por detrás suyo, y un brutal golpe en la pierna lo envió de bruces al suelo. La maniobra de sorpresa de Öter había funcionado a la perfección.

En ese preciso momento apareció un esplendoroso Bradoc, saltando por encima del murete derruido de la casa de aperos, y se encontró con el esterlinga desmoronándose delante suyo. Casi por instinto, y con la prioridad absoluta de evitar un grito que les descubriera fatalmente, se abalanzó sobre el malogrado guardia tapándole la boca con fuerza y echando todo su peso encima suyo para inmovilizarlo. 

El enemigo apenas le opuso resistencia. Los corazones de todos latían con fuerza, pero fuera de vosotros el silencio del bosque seguía reinando con total solemnidad.

Rowen salió con cautela de su posición oculta para acercarse a Ruby y ofrecerle su ayuda, pero cuando vio lo que el hobbit estaba haciendo supo que ya no debía preocuparse.

- Aquí lo tenéis - dijo el hobbit sacando el cerrojo de la puerta con un rápido gesto, tirándolo al suelo con rabia y volviendo a agarrarse la herida con la mano - Si es que lo único que necesitaba era un poco de calma, maldita sea.

Notas de juego

El orden de las acciones ha sido:

1. Lanzamiento de arrojadiza del Esterlinga 2 y flechazo de Mirthgannel, cobertura con escudo de Ruby Moss (simultáneos)

2. Ataque sorpresivo con el martillo por la espalda de Öter al Esterlinga 2.

3. Movimiento de Bradoc hasta el combate en el claro. El Esterlinga 2 se demorona delante suyo e instintivamente lo inmoviliza bajo su cuerpo, tapándole la boca.

La resolución de los críticos ha sido la siguiente:

- Mithgannel ha logrado un crítico tipo E, que suma +20 a su tirada de críticos de Perforación: Impacto en el pecho, -1 P.V. por asalto y aturdido un asalto. Lo mata independientemente del crítico.

- Öter ha logrado un crítico tipo E, que suma +20 su la tirada de críticos de Aplastamiento: Golpe en antebrazo, -2 PV y 1 turno aturdido.

 

  Bradoc Mithgannel Ruby Moss Rowen Oter Esterlinga 1 Esterlinga 2
P.Vida iniciales 37 36 62 40 74 37 37
P.Daño     7     MUERE 32
ASALTO 1 Fallo en disparo, no puede recargar este turno

Hiere disparando a esterlinga 1 (-5PV)

Hiere lanzando daga a esterlinga 1 (-13 PV) y crítico C (-2 PV y aturdido 1 asalto)

Hiere lanzando daga a esterlinga 1 (-9 PV) y crítico A (-3 PV)

Se acerca por detrás al esterlinga 2, rodeando las ruinas.

Falla al arrojar lanza y mueve 3 m hacia el norte Se mueve hasta la anterior posición del esterlinga 1
ASALTO 2 Mueve y bloquea al esterlinga. Hiere disparando a esterlinga 1 (-25PV) y critico E (lo mata) Se defiende de la lanza. Recibe -7 PV. Espera Hiere con el martillo de guerra (-20 PV) y crítico E (-12 PV). Hueso pierna roto y -40 a la actividad. Aturdido durante 2 asaltos. Aturdido y MUERE. Arroja lanza y hiere a Ruby (-7 P.V.)

Bien PJs, buen combate, al menos a mí me ha divertido. Ya habéis visto que es bueno coordinarse y aprovechar las acciones de oportunidad en vuestro beneficio. Además, los bonificadores se pueden disparar si se aprovechan factores como ataque desde flanco, espalda, enemigo aturdido, sorprendido, etc. 

Ahora tenéis que decidir qué hacéis. 

Como veis, lo del cerrojo lo he dejado resuelto, ya que sólo servía para ver si erais capaces de entrar en la casa sin provocar un combate, cosa que no ha sido así. Su apertura es rutinaria y Ruby a la tercera ya lo consigue sin problemas.

Tenéis que pensar qué hacer, puesto que no sabéis cuánto tiempo pasará hasta que el esterlinga que habéis visto dentro de la casa, si es que solo hay uno, salga por algún motivo y eche en falta a sus compañeros. Además, tenéis un cadáver tirado en el follaje a plena vista y un enemigo anulado (pero vivo) debajo del cuerpo de Bradoc.

Ha transcurrido poco tiempo real (escasos minutos) desde que llegó el jinete de la bestia alada, así que todavía estáis a tiempo de infiltraros e intentar averiguar lo que se dice allí.

Pero ¿cómo lo planeáis?  

 

 

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09/03/2020, 16:58
Oter, hijo de Hreimdar

El sonido de un hueso quebrándose era ya conocido para el enano. Había sonidos más desagradables, como el de sacar una espada de un cuerpo con armadura: un borboteo junto con el chirriar del acero del arma con la espada era peor, se hacía más largo, más intenso y más agudo. Öter sabía que le había herido de gravedad y su cuerpo se sacudió la tensión del combate, solo ahora perturbada por el hecho de poder haber llamado la atención a los individuos que se encontraban en el interior de la casa.

El polvorín de los pasos y del combate pasó a un silencio completo, al soplar del viento, solo interrumpido por el fuerte respirar del esterlinga herido, filtrado por la mano de Bradoc, quien rápidamente se había apresurado a taparle la boca para que no pudiera pedir auxilio. El guardia tenía los ojos semicerrados, estaba a punto de desmayarse; las heridas estaban dejándolo sin vida: era el momento de sacarle información o dejarlo morir. 

Miró a su alrededor y en dirección a la casa, para comprobar que nadie más se había percatado del rifirrafe.

- Yo me encargo de no dejar pistas, - dijo el enano mientras enfundaba el escudo y el martillo para después colocarse los pantalones - Bradoc, si ese si no quiere hablar, al menos que no vocifere el maldito. - dijo refiriéndose al esterlinga que sujetaba el guerrero. Después, se agachó al lado del otro cuerpo sin vida y comenzó a registrarlo para ver si encontraba algo que pudiera serles de ayuda. Finalmente, lo cogió por los tobillos y lo arrastró lentamente hacia los árboles donde se encontraban hace solo unos segundos - Vuelvo en seguida.

Maese enano, ¿Qué va a hacer usted?

 - Voy a apartar este cuerpo del claro, no soy ducho en el subterfugio, así que mis habilidades no sirven aquí. 

Notas de juego

1.- Sé que matar a ese pobre indefenso es inmoral (al que está con Bradoc) pero dentro de la interpretación de enano, ese esterlinga es alguien que "ha intentado herirnos y quería matarnos", por lo que no hay piedad. Orgullosos y cabezones. Y bajitos xD

2.- Si lo dejamos con vida nos delatará :'(

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09/03/2020, 18:20
Mithgannel

En un instante todo terminó. La puntería suya había terminado con el primer guardia y el brutal mazazo del enano había descompuesto la cadera y la voluntad del segundo. Por un segundo Mith respiró satisfecha, pero luego recordó a su compañero –¡¿Ruby, estás bien?!– se giró preocupada pero se dio cuenta enseguida que éste había sido rápido en defenderse con el escudo. De ser ella la atacada, ahora se encontraría en peor situación.

En situación peliaguda se hallaban todos ahora que habían reducido a los guardias. Habían muchas posibilidades pero debían actuar rápido y salir de ahí cuanto antes. Sin los guardias, de cualquier modo los conspiradores sabrían que algo había pasado, y dependía de ellos y de la escena que dejaban para que éstos pudieran vislumbrar en mayor o menor medida a lo que se exponían. La afirmación del enano trataba de zanjar el dilema del segundo guardia. Si dispusieran de medios podrían transportarlo amordazado. Y en caso de no poder sacarle nada debido al idioma, quizá los exploradores hobbit puedan hacer algo. ¿Pero podrían confiar en ellos? De no llevarlo, ¿tendrían que silenciar al guardia indefenso para evitar que hablara de ellos? La cordura le decía que si, pero la moral no le iba a la zaga. Muchas dudas, muchas opciones, poco tiempo... La joven sinda vio al enano arrastrando al guardia y no pudo contenerse –Maese enano, ¿Qué va a hacer usted?–

Notas de juego

Quedo pendiente a la respuesta de los compis. Mi intención es entrar a la casa

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09/03/2020, 19:33
Bradoc

Apoyó el cuerpo sin vida del esterlinga en el suelo, que ahora yacía atravesado por una de las flechas de la elfa. Recogió de su cuerpo la daga del mediano y miró hacia Ruby, que les comunicaba que al fin había conseguido deshacerse del cerrojo.

— Buen trabajo — le dijo a Ruby y a sus compañeros, a la vez que hacía un gesto de aprobación con el pulgar de su mano derecha y le devolvía la daga al mediano con cuidado.

Inmediatamente sacó la cuerda que había comprado ese mismo día y comenzó a amordazar al esterlinga que permanecía inconsciente. Primero comenzó tapando su boca y luego continuó con sus extremidades.

— Necesito un poco de ayuda aquí — dijo en voz baja al notar que el hombre del este podría despertarse en cualquier momento — En cuanto lo atemos me lo llevo junto al otro cuerpo, con el enano. No os demoréis... — les dijo a los que se quedaban al lado de la casa — en cuanto descubran que faltan estos dos estaremos en peligro. Y quiero estar lo más lejos posible cuando esa bestia vuelva... — añadió por último señalando el oscuro cielo con un dedo.

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09/03/2020, 23:59
Ruby Moss

Recogió la daga de manos de Bradoc mientras observaba arrastrar al guardia muerto. Antes que Bradoc se retirará se dirigio a él susurrando.

- Si pensáis llevar al guardia a un lugar mas tranquilo, pueda ser útil el caballo de la entrada.

Nada más terminar con la charla miro a Mith y mientras le guiñaba un ojo le hizo un gesto con la cabeza para entrar en la cabaña. Al final había venido a buscar información sobre el traidor y eso iba a hacer. Se deslizo al interior de la cabaña atravesando la puerta, entro muy despacio intentando hacer el menor ruido posible y mirando a su alrededor para no ser sorprendido por ningún de tipo de trampa o vigilancia.

Sea cerco lo mas que pudo al extremo opuesto de la puerta y agazapándose escucho en silencio para descubrir al traidor a alguna pista que le pudiera ayudar en su venganza y la lucha contra el adversario. 

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10/03/2020, 00:13
Rowen

Rowen pudo respirar tranquila cuando vio desplomarse el cuerpo del segundo esterlinga. Tras herir al primero de ellos una extraña mezcolanza de sentimientos se había formado en su interior; júbilo por la victoria, asco por el método, respeto por el arma que había vuelto a su mano y tristeza por la vida que se había perdido. Sabía que la vida era dura, te azotaba una y otra vez hasta hacerte llorar. Y podía ser fatal. Se había mantenido, pues, a la espera, algo conmocionada, quizás. Atenta, no obstante, sabedora de que poseía herramientas más poderosas que una daga. Todo había terminando. “¿Y ahora quien detendrá mi corazón galopante?”.
Se reunió con sus compañeros mostrando un aplomo del que carecía. Uno de los guardias estaba muerto, el otro se encontraba con vida. Se alegró de ver que Ruby no había sufrido herida alguna. Igual que Mith. Aunque dudaba que la elfa pudiera ser presa de algo tan mundana. Sucedía lo mismo con maese Öter. En su mente, ellos parecían piezas de un juego que jamás se romperían. Debía recordar que aquello no era un juego y que, por mucho que desease creer en sus infantiles ensoñaciones, todos podían morir allí.
Ruby había ganado también su pequeña batalla contra el cerrojo. Bradoc se disponía a amordazar y atar al esterlinga. Sin mediar palabra, le ayudó para afianzar bien los nudos y que aquel hombre no escapase. Una pequeña idea había brotado en su mente pero Ruby se le adelantó.
—Podemos utilizar el caballo para transporta al esterlinga herido y que la guardia se ocupe de él —susurró.
Mith y Ruby estaban dispuestos a echar un vistazo. Para eso habían ido allí. Era arriesgado pero necesario. Le lanzó una mirada significativa a Bradoc.
—¿Nos encargamos del caballo?

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10/03/2020, 09:34
Mithgannel

La elfa se tranquilizó al ver que el resto de compañeros se ocupaba del otro guardia. Se acercó al esterlinga caído y, antes de que el enano se lo llevara, mientras sacaba la flecha del torso inerte, trató de encontrar en el cuerpo algo de información relevante. 

El hobbit parecía intacto realmente, y con un guiño invitó a la montaraz a entrar en la ahora accesible construcción de piedra. Antes de acompañarlo se giró al par de humanos, y miró a Rowen con expresión decidida mientras agarraba su mano —Tened cuidado si vais a tomar el caballo. Es buena idea pero pensad que solo uno puede escapar con el corcel y el esterlinga. De ser descubiertos, estaríamos separados y mermados en número. Quizá podríais los tres avanzar con sigilo rodeando la casa por el sur, y aguardar hasta que volvamos al amparo de los arbustos que flanquean el inicio del camino— Cada segundo contaba y en estos momentos no tenían tiempo para reformular un plan de acuerdo a las nuevas circunstancias, pero Mith no quería dejar pasar la oportunidad de por lo menos aclarar lo que podrían hacer ellos en el peor caso. La felina sinda se aproximó al dunlendino con aire aguerrido, le susurró algo al oído y se marchó hacia la puerta oeste de la casa. 

- Tiradas (1)

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 2(+37)=39 [2]

Notas de juego

Tiro Percepción por ver si encuentro algún distintivo en el cadaver, alguna marca significativa, un broche... pero me quedo ciega =_='

Si el esterlinga tiene una capa y la consigo ver xD, la cojo. 

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10/03/2020, 10:13
Mithgannel

Se habían conocido hacía poco, menos de un día, estaban embarcados en un enrevesado asunto y ahora compartían una situación delicada. Todos habían dado la talla, habían trabajado de una forma mas o menos coordinada para sortear los primeros escollos, y la sinda comenzaba a sentir que podía confiar en ellos. El joven dunlendino le daba buenas vibraciones. No sabía si tenía algún problema con la bebida pero sin duda durante los momentos tensos parecía mantener la calma, y eso era de admirar. La exploradora se acercó al oído del montañés, y tomándole del hombro susurró  —Bradoc, intentaremos no aventurarnos demasiado. Pero si la cosa se pone fea o la bestia alada regresa, no os expongáis, no nos esperéis... alguien debe poder seguir con esto— Con una leve sonrisa y un aire cargado de valor, la elfa lo dejó junto al guardia noqueado y a la que parecía su inseparable dunadan, y el chico pudo ver como el peculiar duo se adentraba sigilosamente en la casa.

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10/03/2020, 15:02
Director

El silencio del bosque podía ser también engañoso. ¿Qué cosa no lo era en todo aquel asunto? Pero parecía que, tras los angustiosos instantes en los que habían sido atacados, por fin los héroes podían llevar a cabo tareas de forma coordinada; e incluso les había invadido una placentera - e inconfesable - sensación, resultado de saberse dueños de aquellas dos miserables vidas tan lejanas a las suyas, casi despreciables. Una de ellas ya la habían entregado a quienesquiera dioses se idolatren en las remotas estepas del Este de donde procedía. Aquellas facciones, que ahora podían examinar con detenimiento, llevaban marcados los inconfundibles rasgos fenotípicos de los hombres procedentes de las ignotas tierras más al este de las Tierras Pardas, ¿incluso Rhûn? Antes de llevárselo el enano a la espesura del bosque, tanto él como la elfa estuvieron revolviendo en sus escasas pertenencias:

- ¡Vaya! ¿Os suena de algo? ¡Me voy a cansar de verlo tantas veces en el día de hoy! - Öter pegó un estirón al broche que sujetaba la capa del muerto y lo mostró a Mithgannel. Idéntico al que encontró en las Colinas de la Torre el día en que su mundo se vino abajo para siempre. La elfa absorbió la impresión al instante, esta vez apenas pasó de puntillas por su maltrecho corazón. Era una fase que ya había pasado. Sin mediar palabra, la elfa cogió la capa del esterlinga, que había quedado desabrochada, y se la colocó por encima. De un saquito de tela que tenía el esterlinga dentro de la pechera sacaron, no sin cierta repugnancia, un puñado de huesos o trozos de hueso de pequeño tamaño, aparentemente de animal. ¿Un amuleto, una inútil e indescifrable superstición del Este? Öter se lo guardó, por si acaso. Pero nada más, aparte de lo visible y evidente, consiguieron obtener de aquel cuerpo.

La segunda de aquellas vidas, tan extrañas y ajenas, había sido puesta a debate y éste se había decidido a favor de su continuidad, por el momento. El desmayo del esterlinga- por puro dolor, sin duda - debía de constituir todo un bálsamo para aquel pobre diablo, mientras era sometido dócilmente al amordazamiento y fuertes ataduras por parte de Bradoc y Rowen. También él llevaba el broche de las tres flechas, igualmente en bronce. Bradoc se hizo con él y pudo observar de nuevo la tosquedad de su factura, tan diferente a la dorada filigrana del que colgaba, aún, de su cuello. A pesar de las dudas, no había encontrado ningún motivo para no volvérselo a poner, tras la escena de la posada.  

Las palabras de Ruby y Mith tenían un agrio sabor a despedida. Ya nada les parecía seguro, ni el suelo que pisaban, ni menos aún el aire que respiraban, aquel cielo que era capaz de descargar bestias aladas. Pero también sabían que, en el punto en el que se encontraban, no podían irse sin saber más. El hobbit y la elfa entraron sigilosos por la puerta y desaparecieron a la vista del resto del grupo, que permaneció en silencio un instante más.

Tras ello, Rowen se acercó al caballo que piafaba a cada rato, sin mostrar signos de estar alterado. Deshizo la cuerda que lo sujetaba al muro y se lo llevó adonde esperaba Bradoc sosteniendo el cuerpo del esterlinga desmayado, como un saco de patatas. Lo colocaron en la silla y lo recostaron contra la grupa del corcel, atándolo a ésta con otra cuerda para que no se cayera, esta vez la de Rowen. Al final iban a ser útiles aquellas compras realizadas con prisa en el barrio de los mercaderes...

En aquel momento Öter regresó de la espesura del bosque, frotándose las manos con gesto grave, pues en el fondo no disfrutaba de estos rituales, si bien eran necesarios. El cadáver había sido entregado a los líquenes y helechos del Bosque de Chet. Con la situación aparentemente bajo control, les pareció sensato situarse tras los arbustos al sur de la casa, lejos de toda visión desde la puerta principal, aunque pudiéndola tener vigilada desde su posición, y en la vía de salida rápida por el sendero, en el caso de que tocara correr.

Así se quedaron, refugiados tras la vegetación y en medio de una tensa espera; en cualquier momento esperaban oír ruido de sables dentro de la casa, para desgracia de sus dos compañeros exploradores. La mano de Rowen jugueteaba con nerviosismo entre los pliegues y remaches de la montura del caballo, hasta que su dedo se quedó palpando, una y otra vez, un relieve ornamental en el cuero, en el lateral de la silla. No hacía falta luz para verlo. Eran siete estrellas, el emblema del Reino de Arthedain.  

Notas de juego

Si no he recogido algo de lo que habéis comentado, me decís.

Los 3 PJs que estáis en los arbustos, declarad si os ponéis en modo oportunidad con algún arma, ya que podéis hacerlo. Ahí donde estáis, no seréis vistos salvo que se busque a propósito en esa zona.

Perdonadme, pero hasta el jueves no podré postear la continuación de esta escena, ahora toca narrativa... Hasta muy pronto!

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11/03/2020, 12:00
Mithgannel

Los sonidos habituales de la noche se habían hecho nuevamente con la escena. La suave brisa del viento se compaginaba con las furtivas voces de aves depredadoras nocturnas y el rítmico canto de los grillos. Era una buena señal, pero no debían confiarse en demasía o lo podrían pagar caro. La hermosa exploradora voló con paso silencioso hacia la posición del pequeño compañero. El hobbit parecía ciertamente envalentonado tras la fugaz refriega que había acontecido hacia unos momentos, y parecía querer internarse en la casa con premura. Cuando llegó a su altura, Mithgannel se agachó ligeramente y murmuró —Maese Moss, debemos ser cautos. Si tienes algo que pueda incomodarte, es mejor que lo dejes aquí ahora. Sé que vuestra especie tiene un don en el arte de pasar desapercibidos. ¿Podrías ir tú primero, y me vas guiando con gestos?—. Aunque pudiera parecer una tontería, lo cierto es que cada raza y cada cultura tiene sus propias formas de comunicarse por señas, y en algunos casos lo que para uno pudiera parecer una afirmación rotunda, otra persona podría entender completamente lo contrario. Había que tener también en cuenta las capacidades visuales de cada uno y las condiciones de luz, tanto fuera como dentro de la casa, y tanto en la oscuridad de las salas vacías como en la claridad de las salas ocupadas. En cualquier caso, con sorpresiva habilidad la pareja acordó rápidamente una serie de gestos para comunicarse en silencio. Despejado, ven, quieta, gatear, tú allí, hay dos sentados ahí, a la pared... y las mas importantes de peligro y salgamos de aquí con la velocidad de las cabalgaduras de Araw—Ahora estamos solos, Ruby, y aunque yo quiero tanto o más que tú desvelar quien es el traidor y contra que nos estamos enfrentando, debemos aventurarnos lo justo como para poder sacar algo en claro y como para que no nos descubran. Te sigo, compañero— Los ojos de la sinda reflejaban el brillo de la luna mezclado con un aire decidido y comprometido con la causa. Una sonrisa cálida surgió en su rostro, y con una ligera reverencia cedió el paso al mediano.

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11/03/2020, 13:03
Oter, hijo de Hreimdar
Sólo para el director

Máster, supongo que en el post marcamos a todo el grupo o a la gente con la que estoy?

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11/03/2020, 17:26
Director

Buenas! Ahora solo a la gente con quien estas (como regla general, se hará asi cuando esteis separados, y cuando os reencontreis desvelare al resto de PJ los posts simbolizando que os contais lo que ha pasado) 

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12/03/2020, 13:54
Bradoc

Rowen, Other y Bradoc permanecían ocultos de nuevo bajo la protección del bosque por sus dos compañeros que se habían atrevido a entrar con extremo sigilo en la casa. Mientras esperaban la maga jugueteaba nerviosamente con la montura del caballo, acto que les permitió reconocer el emblema del Reino de Arthedain grabado en la montura.

— Hum... — suspiró Bradoc al identificar el emblema — No creo que mucha gente pueda llevar tan a la vista el emblema de Arthedain, veamos si encontramos algo de información en la silla.

Notas de juego

No sé si la silla tiene alforjas o algo así, pero Bradoc rebusca en la silla a ver si encuentra algo.

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12/03/2020, 14:30
Oter, hijo de Hreimdar

Todos se acercaron poco a poco al lugar donde los cuerpos yacían. No tardaron mucho en ponerse de acuerdo en que la mejor idea era alejar de ahí a los esterlingas, al menos, al que estaba sin vida. Öter se colocó la cota de malla para poder agacharse con comodidad para inspeccionar el cuerpo. Mithgannel se acercó a la misma vez que el enano:

- Tranquila, mi señora elfa, no todos los enanos somos unos ladrones... - le dijo con una sonrisa de medio lado - no pensaba quedarme nada sin que vos lo supiera.

Tenía un emblema que hacía de broche en la capa, el cual el enano arrancó. Se lo ensenó a la elfa.

¡Vaya! ¿Os suena de algo? ¡Me voy a cansar de verlo tantas veces en el día de hoy! - dijo el enano, mientras seguía buscando algo de interés. 

De un saquito de tela que tenía el esterlinga dentro de la pechera sacaron, no sin cierta repugnancia, un puñado de huesos o trozos de hueso de pequeño tamaño, aparentemente de animal. 

- "Quizás alguien sepa algo más" - pensó el enano, mientras se dirigía hacia Bradoc y Rowen. La elfa y el señor mediano ya habían partido hacia la puerta que habían abierto escasos unos minutos.

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12/03/2020, 14:40
Oter, hijo de Hreimdar

El enano sacó del bolsillo el saquito y lo mostró usando sus dos palmas gruesas y grandes.

- ¿Estimados compañeros, sabéis qué puede significar semejante artefacto? Mis conocimientos no alcanzan a darle una respuesta - comentó Öter, mientras echaba un vistazo alrededor para cerciorarse de que no había ningún peligro inminente.

- Con respecto a nuestra enmienda, ¿qué tienen pensado hacer con este guardia? - dijo mientras le echaba vistazo por encima, entrecerrando los ojos - En lo que coincidimos es que no podemos irnos hasta que el señor mediano y su acompañante salgan de la casa. Quizás alguno de los dos podrían echar un vistazo por el otro lado de la casa.

Notas de juego

Bradoc o Rowen, no sé como estáis de Acechar/Esconderse, pero si alguno maneja buenos valores no estaría de más mirar por el el otro extremo. Lo digo, más que nada, porque no sabemos lo que van a tardar los otros y vamos a estar parados.

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12/03/2020, 18:08
Director

La espera se estaba haciendo insoportable. Era difícil mantenerse así, inmóvil, sin hacer nada. Con todo lo que podría estar ocurriendo, o a punto de ocurrir. Rowen ya había mostrado a sus compañeros el relieve de las estrellas en el cuero de la silla, e incluso Bradoc estaba buscando infructuosamente entre los repliegues de la silla cualquier rastro que pudiera darles más respuestas a sus preguntas. Öter jugueteaba con los huesos en su mano, dándoselos a examinar a una Rowen que, a pesar de su sabiduría, no parecía poder arrojar ninguna luz. En definitiva, los tres aventureros eran todo un manojo de nervios. 

Pero de pronto se quedaron petrificados. La puerta de entrada, la que anteriormente había estado custodiada por los esterlingas, se abrió, y de ella salió otro guardia. Extrañado, miró a ambos lados. Con pasos vacilantes, y ahora ya esgrimiendo su lanza, se acercó hacia el lado oeste, luego apresuradamente al este. Desapareció un momento y volvió a aparecer, a la carrera, por el lado oeste, tras rodear toda la casa. Empezó a llamar, primero en un susurro, después con voz cada vez más fuerte, hasta alcanzar la intensidad de un grito contenido. Eran las mismas dos palabras ásperas, indescifrables, terminadas ambas en algo parecido a "...fang", sin duda los nombres de sus malogrados compañeros. Con visible nerviosismo, y tras escudriñar en la distancia hacia el bosque sumido en la sombra, se metió de nuevo dentro de la casa, cerrando la puerta tras de sí.

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12/03/2020, 18:12
Ruby Moss

Justo antes de entrar en la cabaña y tras las recomendaciones de su compañera decidió dejar su petate junto con la cuerda en la puerta. No tenía que dejarse llevar por la ira y la venganza, si no se movía con inteligencia podría tener problemas en el interior. Hizo un gesto a sus compañeros con la esperanza de que al menos lo recogieran y se lo alejaran. Por si las cosas se ponían complicadas era mejor ir ligero de equipaje habría tiempo de reponer alguna cosa. Su integridad física y la de sus compañeros era más difícil de remplazar.

Miro a su compañera elfa con esperanza de encontrar respuestas en el interior. Averiguar quién era el traidor entre la guardia. Esa información les permitiría jugar con ventaja en el embrollo en el que se habían visto envueltos.

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12/03/2020, 18:19
Director

Según lo que elfa y hobbit habían acordado furtivamente, entre susurros, antes de aventurarse en lo desconocido, Ruby Moss abrió camino con cautela. Tal como habían adivinado, aquello se trataba de un almacén de provisiones, por donde se debía recibir y expedir en otros tiempos las carretas con los alimentos y otros materiales. Pisaron sobre sacos desparramados de trigo ya podrido, a duras penas esquivaron los toneles desvencijados de vino y aceite en la penumbra de la pieza. Al otro extremo, se colaba una luz amarilla por las rendijas de una tupida cortina tendida a modo de puerta. Hacia ella avanzaron con leves pisadas, hasta alcanzarla. Tras descorrer con extrema cautela unos milímetros de cortina, Ruby le hizo las señas acordadas a Mithgannel para colocarse en el otro extremo e imitar su gesto. Ello les permitió tener una vista privilegiada de la escena: la estancia estaba totalmente vaciada de muebles, a excepción de una silla y una estantería de pared tras de ella, vaciada también. En el lado opuesto a la posición de la cortina, se encontraba el hogar de una chimenea, lleno de polvo y de restos de leña carbonizada. Tanto en la estantería como sobre la repisa de la chimenea se amontonaban, en hileras, una enorme cantidad de cirios, todos ellos prendidos, que daban a la estancia un oscilante y fantasmagórico resplandor. Grandes regueros de cera se desparramaban cayendo desde los estantes, llenando el ambiente con un olor litúrgico. Aquellas velas debían haber estado ardiendo durante horas.

Sentado en la silla, rodeado de aquella panoplia de luces tintineantes, una figura envuelta en ropajes negros, de manos enfundadas en guantes de cuero, también negros, ejercía sobre aquel ambiente cerúleo una todavía más opresiva presencia. Sólo su cabeza permanecía descubierta de aquellos negros hábitos, dejando ver unas facciones totalmente desfiguradas, sin duda debido a los estragos del fuego. Unos ojos extrañamente claros eran lo único que acercaban a aquel rostro a una humanidad mínimamente reconocible. 

Frente a él se erigía en actitud sumisa Ossandrei, segundo del Capitán de la Guardia de Bree. 

Ruby y Mith observaron con atención: habían llegado en medio de la conversación. Era aquel ser desfigurado el que hablaba ahora.

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12/03/2020, 18:19
Caballero con el rostro desfigurado

- Supongo que no querrás que el Rey Brujo empiece a saber de tu existencia por motivo de tu incompetencia - su voz sonaba como un susurro a través de aquella casi inmóvil mandíbula.

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12/03/2020, 18:21
Ossandrei

- Mi señor, tengo nuevas para vos - hizo una histriónica pausa, como si estuviera paladeando ese momento de expectación sobre su persona - Vuestra hermana. Está en Bree. Estuvo este mediodía ante mi presencia.

Aunque ello fuera físicamente imposible, el inexpugnable rostro quemado pareció adquirir una expresión de máxima incredulidad.

- Es ella, lo sé. Mirad - le tendió un papel con un símbolo reproducido en carbón - Dijo que lo recogió cerca de la Colina de la Torre. No me pareció que mintiera. Tiene que ser ella.