Partida Rol por web

Cadena Alimentaria

Sr. Olvidable

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05/07/2021, 22:43
Dianne Gongaware

-Buenos días, agentes, y bienvenidos al Departamento de Servicios sobre Mejorados -dijo con la voz y el tonillo clásico de atención al público que sonaba forzadamente amable, tanto como su fingida alegría y simpatía-. Correcto, mi nombre es Dianne Gongaware y, correcto, yo tengo alguno de los expedientes de Ben. -Nuevamente una sonrisa forzada y una amabilidad que no sentía. -No se preocupen por él, el estrés le ha obligado a tomarse un descanso pero seguro que vuelve pronto. -Lo dijo convencida, como si de verdad tomar café y mirar las musarañas del techo pudiera causar estrés laboral. -Déjenme que compruebe el nombre de esa persona para ver si tengo ese caso. Jared Whitten, veamos: W-H-I-T...

Dianne tecleaba en su ordenador sin dejar de sonreír y comenzó a mover la ruleta del ratón de arriba a abajo mientras leía en su pantalla y murmuraba por lo bajo. Durante unos segundos temieron que fuera mandarles al cubículo de otro funcionario pero finalmente Dianne volvió a mirarles y a sonreír una vez más. Esta vez algo más incómoda.

-Sí, Whitten, ajá, aquí tengo su expediente. -Carraspeó algo incómoda. -¿Qué necesitan saber?

Notas de juego

He movido los post anteriores para ordenar alguna cosa.

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13/07/2021, 17:24
Vincent Valenti

Todo. —Contesté con una sonrisa zalamera, sin mostrar los dientes. Jugar al gato y al ratón podía venirme bien para relajar los nervios que aún atenazaban mi estómago con la mierda del admirador secreto de su puta madre. Necesitaba evitar pensar en ese tío y en quién podía ser.

Estará al tanto del incidente con el autobús en la Novena, supongo... Oiga, ¿le ocurre algo? ¿Se encuentra bien? —Hice una pausa dramática, pero no por cortesía profesional hacia Gongaware, sino para evaluar sus gestos, su rictus. Sus reacciones. —Mire, necesitamos consultar el expediente de Whitten en su totalidad. Cualquier detalle, por nimio que parezca, puede resultar relevante. Como sabrá, es un mejorado con un poder bastante chungo. ¿Cómo les llaman...? —pregunté mirando a Adele y frunciendo el ceño, haciéndome el interesante mientras asentía y chasqueaba los dedos.

Volqué luego la mirada en Gongaware y entrecerré los ojos.

Chernóbils. ¿Sabe a qué me refiero? Bombas atómicas andantes. Solo que este chaval tiene el pack Premium al completo. Presenta evidentes signos de vulnerabilidad a la manipulación mental, así que queremos saber, entre otras muchas cosas, si ha estado en contacto con mentalistas en el pasado. También nos ha hecho saber que recibe tratamiento de la doctora Wortham. ¿Figura en el expediente?

Notas de juego

Suspicious... Uso Detectar mentiras en este intercambio, jefe.

¿Ha esquivado deliberadamente contestarme sobre Napier? o_O

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13/07/2021, 18:41
Dianne Gongaware

—Me encuentro estupendamente, gracias— Dianne parecía evidentemente incómoda. Carraspeó la garganta un par de veces y se aflojó el cuello de la camisa y miró a los lados, como esperando a que alguien viniera a socorrerla o a que las paredes del edificio se vinieran por fin abajo.

—Miren no tienen por qué preocuparse— aseguró tras carraspear de nuevo—. Todo funciona estupendamente en el Departamento. Evidentemente, nosotros no tenemos ninguna responsabilidad por cualquier desastre o tentativa en los que Whitten se encuentre involucrado— otro carraspeo más. 

Dianne Gongaware se pasó la mano por la cara para recoger su media melena detrás de la oreja, algo que su corte de pelo estilo ejecutiva no aguantaba durante mucho tiempo al estar diseñado para que el pelo le cayera por los lados de la cara, sin duda aquel gesto era fruto de la costumbre de cuando tenía el pelo más largo.

—No puedo mostrarles el archivo sin una orden pero... —otro carraspeo —Les puedo asegurar que no hay indicios de que ningún mentalista le... Bueno, le hablara. Lo de la doctora Wortman puedo confirmarlo. Recibía tratamiento por su parte.

Notas de juego

Sobre Napier te dijo que se encontraba bien, que no os preocuparais por él.

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13/07/2021, 19:17
Director

El detector de mentiras de Vincent estaba pitando como un contador Geiser en, precisamente, Chernóbil. Dianne, pese a sus sonrisas burocráticas, estaba mintiendo como una bellaca. Las mentiras más gordas las había dicho precisamente cuando aseguró que ellos no tenían ninguna responsabilidad en lo que hiciera Whitten y que todo funcionaba perfectamente en el DSM. Vincent lo había notado por pequeños cambios en la respiración, por como evitaba mirarle directamente a los ojos y miraba hacia otro lado y, joder, porque con tanto carraspeo no había que ser un genio para deducirlo.

Además Vincent dedujo más información sobre ella con solo examinarla. En su mano izquierda, el dedo anular mostraba un pequeño anillo de piel ligeramente más pálida, lo que hacía indicar que había estado llevando un anillo por un tiempo. Por su juventud, uno podía suponer que se trataba de un anillo fruto de un compromiso que no llegó a materializarse. El reciente corte de pelo le decía a Vincent que por muy traumática que hubiera resultado la ruptura ya estaba lista para dejar las maratones de series lacrimógenas de Netflix y abrirse al mundo de nuevo. Todo eso y algunos detalles más le indicaban a Vincent que un ligero flirteo tirando de sus dotes de galán serviría para aflojar la lengua de Dianne hasta el punto de que les contara lo que necesitaban saber.

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14/07/2021, 16:49
Vincent Valenti

Damn. Gongaware encadenaba mentiras a la misma velocidad que yo hacía combos de diez golpes al Tekken 9, motivo por el cual Adele y Kenzie jamás querían desafiarme en la sala de recreo de la Comisaría. Chicas listas, por otro lado. El único suficientemente ingenuo para desperdiciar el poco honor que le quedaba subiendo al ring era Ryo, y ya sabía leer sus movimientos como si fuese un señor Miyagi de segunda mano.

Le ocurría lo mismo a Gongaware en aquel momento. Estaba tan nerviosa que resultaba patente que quería regatearme como fuera.

A mí.

El zaguero jefe de la línea defensiva de la UDIM en materia de interrogatorios.

Craso error, guapetona.

Carraspeé.

—Oiga, Dianne... ¿Puedo llamarla Dianne? —sonreí, ladino. Si ahora me decía que "no" sería toda una fatalidad, así que no esperé respuesta. Mi estrategia, intuía, iba a suscitar daños colaterales para mi reputación para con Adele y mi hermana, pero había llegado un punto en el que resolver aquel caso venenoso me aislaba de pensar en admiradores secretos y sus putos pastelitos gourmet.

—Verá, andamos algo cortos de tiempo y el asunto, como imagino que sabrá, es... bastante sensible. Lo suficiente como para desplegar una investigación interna si no lo resolvemos pronto. ¿Quiere usted a los chicos de la videocámara haciendo entrevistas por aquí? Yo desde luego no. ¿Y tú, Adele? No, ella tampoco los quiere. Solo tiene que mirarle la cara a mi compañera. Es muy expresiva. Definitivamente no los quiere por aquí. ¿Y qué hay de ti, Kenzie? ¿Quieres a los de las gafas de sol por aquí haciendo preguntas incómodas? Dejé reposar en Dianne la amenazante sombra de los chicos de Asuntos Internos. Si uno es suficientemente sutil, sabe qué palabras pronunciar para despertar, más que la curiosidad, la total atención de tu interlocutor.

—Hay mucha presión desde arriba para que se dé carpetazo a este caso, y aunque detuvimos a Whitten y no hubo heridos, en la UDIM tenemos serias dudas de que Jared Whitten actuase voluntariamente. Si lee su informe psicológico, se dará cuenta de que no encaja en el perfil de un psicópata homicida. Estoy seguro de que la doctora Wortham habrá concluido de forma similar. —Y ahora era cuando lanzaba el ataque nuclear. Me incliné hacia delante, juntando las manos y sonriendo con mi mejor mirada vulpina a Dianne. Decidí reservarme la carta del mentalismo porque he aprendido de sobra que conviene tener un as en la manga.

—Dianne, necesitamos aparcar la burocracia a un lado. que usted quiere ayudarnos. Estamos en el mismo barco, ¿sabe? Además, ahem... —En días como hoy agradezco no tener vergüenza. —¿Me han engañado cuando me han dicho que usted era la más simpática del DSM? —Sonrisa de diamante. Ay, viejo Vinnie, no has perdido el encanto. Lo cierto es que Dianne Gongaware no tendría demasiada competencia aquí, en este lado del mundo gris del DSM. Con todo, rezo para que caiga ante este embate de galantería porque, de lo contrario, me veré obligado a invitarla a cenar delante de mi hermana. Putísima mierda.

Notas de juego

Suave Intimidación y desvergonzado Flirteo.

Si hay que quemar puntos, SE QUEMAN xDDDDDDDDDDD

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14/07/2021, 19:28
Mackenzie Valenti

Mackenzie estaba acostumbrada a edificios como aquel. El aire de decadencia que parecía impregnar los edificios públicos podía llegar a resultar deprimente. La propia comisaria desprendía esa sensación. Por un instante, la joven observó a su hermano con una ceja levantada. ¿Era cosa suya o Vincent estaba raro? Más raro de lo normal desde luego. Tomó nota mental para preguntarle más tarde. Ahora tenían problemas más acuciantes. Con la burocracia habían topado. Y no hacía falta ser Vincent Valenti para darse cuenta de que la tal Dianne mentía y a lo grande. Con mirada escéptica Mackenzie miró a aquella mujer que intentaba ocultar algo... a Vincent Valenti. Que Dios se apiadara de su alma, porque su hermano no lo haría. 

Dianne: Miren no tienen por qué preocuparse— aseguró tras carraspear de nuevo—. Todo funciona estupendamente en el Departamento. Evidentemente, nosotros no tenemos ninguna responsabilidad por cualquier desastre o tentativa en los que Whitten se encuentre involucrado.

Vincent: ¿Y qué hay de ti, Kenzie? ¿Quieres a los de las gafas de sol por aquí haciendo preguntas incómodas?

- No, Vincent, claro que no. Los de las gafas de sol son unos cabrones. Aunque verá, Dianne, con todos los respetos debo disentir con que no hay de qué preocuparse. Jared Whitten se subió en un autobús lleno de pasajeros y estuvo a punto de volar por los aires la ciudad de Nueva York. Tenemos razones para preocuparnos y usted también. Jared estaba bajo su supervisión. No seré yo quien determine de quién es la responsabilidad en este asunto, pero puede que el caso de Jared no sea algo aislado. Si, por mano del Diablo, algún otro de sus mejorados mostrara un comportamiento... igualmente imprevisible y acabara muriendo gente... bueno...  supongo que algunos nombres saldrían a relucir. No se ofenda, Dianne, pero no parece usted muy segura y no sé si lo hemos mencionado antes, pero somos de la UDIM. Los tres. - 

Mackenzie sonrió a la funcionaria, una sonrisa lobuna que no llegó a alcanzar sus ojos que permanecieron fijos en ella mientras su hermano seguía intentando engatusarla para que soltara lo que fuera que estaba ocultando. Mackenzie odiaba la burocracia. Solo entorpecía su trabajo y aquella mujer tan solo era un engranaje más. ¿Cuánto aguantaría sin romperse? 

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14/07/2021, 20:20
Dianne Gongaware

Las palabras de Vincent parecían haber surtido su efecto, la funcionaria le miraba con un renovado interés. Asintió con timidez para dejar que la llamara por su nombre de pila y su rostro fue surcando diversas emociones con las palabras de Vincent, desde el interés a la curiosidad, pasando por el miedo ante la posibilidad de que se iniciara una investigación interna en su lugar de trabajo y terminara salpicándole algo de manera indirecta por no ser del todo sincera con los agentes. La argumentación de Mackenzie terminó de convencerla. Después soltó una sonrisilla tras el flirteo del detective que resonó en el pequeño cubículo con una breve y espontánea alegría. No se podía negar que Dianne tenía una risa bonita. La funcionaria miró a todos lados y se inclinó en la mesa hacia los agentes. Cuando habló de nuevo lo hizo en voz baja, adquiriendo un tono de confidencia.

—Vale, miren, pero esto se lo cuento de manera extraoficial, ¿de acuerdo?— evidentemente Dianne quería salvar el culo cuando los de las gafas de sol llegaran. Que aunque fuera un farol de primera categoría por parte de Vincent, estaba claro que terminarían llegando de verdad y enterándose del asunto. Ahora Dianne tendría un bote salvavidas en el que poder excusarse.  —Cuando Napier empezó a sufrir estrés por el trabajo, nos dijo que había descuidado a Whitten y a un número bastante considerable de otros registrados por el artículo dieciocho. Con Whitten, al menos, me consta que Napier afirmaba tener un contacto regular, cuando no tenía ni idea de lo que él y los otros registrados estaban haciendo. Hay informes en sus archivos sobre el tratamiento para la depresión de Whitten, que es un efecto secundario de sus poderes perfectamente conocido—Adele, que conocía bien el diagrama de Quade, podía confirmar que la depresión estaba relacionada con los poderes de autodetonación que parecía presentar Whitten Los informes de Napier son un puto desastre. Le faltan datos, otros es probable que se los inventara... En el caso del archivo de Whitten hay informes acerca de que Whitten recibiera un tratamiento para la depresión, pero no figura el nombre del terapeuta. Napier no ha puesto nada sobre vulnerabilidad a la manipulación mental, ni sobre otros trastornos como delirios, esquizofrenia u otros problemas mentales más graves. De haberlo hecho, Whitten tendría que haber sido clasificado y la frecuencia de visitas se hubiera incrementado. Pero tampoco me extrañaría que Napier también haya estado a cargo de estas visitas y terminara falsificando los informes.

Dianne sostuvo la mirada de Vincent. Esta vez el detective pudo ver que no le estaba mintiendo. El carraspeo se había ido de su garganta y sus palabras parecían sinceras. Aún así, la funcionaria del DSM les mostró una carpeta que tenía en un cajón con el nombre de Whitten escrito a mano en una etiqueta adhesiva. Las hojas eran formularios rellenados con caligrafía deficiente con alguna información sobre Whitten. Nada que no supieran. Las partes más interesantes, como que recibía terapia, estaban mal rellenadas y tal como decía Dianne faltaba mucha información, hasta había casillas en blanco que deberían ser importantes. El único dato que los investigadores no conocían y que descubrieron gracias a ese vistazo fue la dirección de Cole Whitten, que figuraba como padre de Jared, todavía vivo, y residiendo en una de las zonas residenciales de clase media de South Bronx. Un supervisor pasó cerca del cubículo de Gongaware y ésta les arrebató rápidamente el archivo de las manos y sonrió como una auténtica recepcionista de hotel.

Notas de juego

Te descuento un punto de flirteo, el otro con usarlo basta.

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15/07/2021, 09:00
Vincent Valenti

Dediqué una sonrisa pícara a Dianne.

—Esa es mi chica. I'm back, baby. I'M BAAACK.

El informe era lamentable, era cierto; pero tenía un dato muy interesante. Cole Whitten, sugar daddy. South Bronx. Tocaría hacer una visita al padre de Jared.

—¿La doctora Wortham no figura en el informe...? —extrañado, habría querido comprobar con detenimiento el documento hasta que apareció un supervisor y Gongaware me lo quitó de las manos. Torcí el gesto, contrariado.

Aguardé a que el supervisor se las pirase y pregunté en tono confidencial.

—Dianne, ¿desde cuándo se lleva haciendo usted cargo de este expediente? ¿Cuándo pidió la baja Napier?

Notas de juego

Es evidente que aquí la pista es la dirección de Cole, pero estoy mosquísima con la Dra. Wortham... 

¿Qué pensáis, grrrls?

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15/07/2021, 11:59
Dianne Gongaware

—Sí, sí, la doctora Wortman sí aparece en los informes. Pero a ella le llegó el caso derivado recientemente, hará cosa de quince días. La terapia de la que les hablo ocurrió hace un año según las fechas que anotó Napier, y si nos podemos fiar de que sean ciertas...

Dianne Gogaware hablaba en tono bajo. El supervisor había puesto mala cara al pasar junto a ellos y los miraba desde la lejanía. Ella trató de sonreír con naturalidad aunque estaba visiblemente nerviosa.

—Hace unos pocos días. La semana pasada.Parecía que iba a añadir algo más sobre lo mucho que les fastidiaba tener que comerse el marrón de Napier y arreglar sus mierdas pero el supervisor pasó cerca de nuevo y Dianne se limitó a sonreír. 

Notas de juego

Vosotros diréis, si no queréis añadir nada más podéis decidir vuestro siguiente destino. Os comento en el off.

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15/07/2021, 21:48
Umbridge

Umbridge frunció el ceño. Tenía la mosca detrás de la oreja. ¿Era posible que alguien hubiese importunado a Napier para poder echar mano de sus casos más problemáticos? Sin supervisión y con un sistema tan burocratiizado, aquel caos podría servirle a cualquiera con malas intenciones como una tienda de golosinas. Solo tenía que escoger a los individuos más peligrosos y condicionarlos para provocar atentados por la gran manzana.

Desde luego, Vincent se estaba luciendo. Ella ya habría perdido la paciencia al primer "buenos días". Gracias a la labia de su compañero ya tenían varios hilos de los que tirar.

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15/07/2021, 21:54
Vincent Valenti

Miré de refilón a Adele.

Creí con absoluta convicción que iba a rugir para luego clavar sus garras en Dianne Gongaware y comerse sus entrañas mientras la desdichada funcionaria aún conservaba la consciencia.

A Umbridge no le sentaba bien el ambiente enrarecido de aquel edificio. Demasiados funcionarios por metro cuadrado.

Decidí salvar la vida a Dianne y me levanté, ofreciéndole la mano en gesto de paz y armonía interdepartamental.

—Gracias por todo, Dianne. Una última cosa: Si quisiéramos localizar a Napier para charlar con él sobre el caso... ¿podrías darme la dirección? —Media sonrisa. Un guiño rápido. Muy confidencialmente, por supuesto.

Notas de juego

Ahí va mi último puntito de Flirteo, por si sirve para conseguir la dire de Napier bajo cuerta ;-)

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17/07/2021, 19:02
Dianne Gongaware

El guiño de Vincent debió ser lo suficiente irresistible para que a Dianne le temblara la frágil máscara de seguridad que había reconstruido desde que les revelara lo ocurrido con Napier. Dianne dudó, miró a su alrededor, el supervisor no le quitaba ojo. Sonrió a Vincent y asintió levemente con la cabeza. Después, mientras se esforzaba en mantener la sonrisa murmuró algo.

—Tengo que consultar en la ficha de trabajadores. Déjeme su número y le mandaré un mensaje —tras lo cual alzó la voz sin perder la sonrisa—. El placer es mío, agentes. Lamento no haberles podido ser de más utilidad.

La consulta de la doctora Wortman no estaba muy lejos del DSM, se encontraba en una clínica pública del centro de la ciudad claramente sobrecargada de trabajo. Los asientos de la sala de espera estaban repletos de gente, todos personas con la apariencia de llevar una vida dura y llena de problemas. Informaron a alguien de quienes eran y poco después les dijeron que la doctora les atendería cuando acabara con el paciente con el que estaba. Entre tanto les llegó un mensaje de Dianne.  "Apartamentos Horbert, portal 12, apartamento 9." Vincet podía vacilar de que su toque con las mujeres seguía intacto.

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17/07/2021, 19:40
Dra. Jillian Wortman

A la doctora Jillian Wortman no le hacía mucha gracia eso de tener que dejar de atender a sus pacientes para colar a unos policías que venían a acosarla con preguntas, y su gesto de pocos amigos así lo demostraba. Se le notaba cansada, había atendido a más pacientes del ratio estipulado para su puesto y sin embargo todavía había unos cuantos esperando fuera de la consulta. La pila de expedientes que había sobre su mesa hacían indicar que tenía una sobrecarga de trabajo de tres pares de narices, aunque por lo visto no debía ser la única doctora allí que estuviera así de saturada. Así las cosas no fue tan simpática con ellos como lo fue con la doctora Alexa Davis de la policía. Wortman era más veterana y llevaba demasiado tiempo en el sistema como para tener que forzarse a ponerle buena cara a unos polis que le impedían seguir pasando consulta, como creyendo que el suyo era el único trabajo que tenía preferencia y que los demás debían dejar lo que estaban haciendo para atenderles a ellos.

¿En qué puedo ayudarles? —Lo dijo enarcando una ceja y en un tono que dejaba claro que si por ella fuera los mandaría a hacer gárgaras al Niágara. 

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19/07/2021, 17:19
Vincent Valenti

Cuando entré en el despacho de la doctora Wortham, supe que mi sex appeal no iba a salvar el día en aquella situación. Tampoco es que la mueca avinagrada propia de una destilería de ácido sulfúrico que presidía la cara de Jill Wortham me inspirase demasiado, todo sea dicho.

Tocaba hacer intendencia a la vieja usanza.

¿Qué tal, doctora? Inspectores Mackenzie Valenti y Adele Umbridge. Mi nombre es Vincent Valenti. Somos hermanos. —expliqué con un ladeo de cabeza dirigido a Kenzie.

Lancé un silbido de admiración cuando contemplé la Torre de Babel hecha expedientes que yacían sobre la mesa de Wortham como si se tratasen de un colosal cetáceo varado en una playa de arena gris.

Trabajo no le falta, por lo que veo. No queremos quitarle el tiempo que usted dedica a sus pacientes, doctora; le aseguro que estamos aquí por un asunto de suma relevancia. Está relacionado con un paciente bastante singular que se le ha derivado hace escasas dos semanas. Su nombre es Whitten. Jared Whitten. Supongo que estará al tanto de los periódicos... ¿Terror en la Novena? ¿Le suena? —dije aquello como si fuese el último blockbuster estival de moda, pero lo cierto es que captar la atención de aquella mujer me pareció importante para sobrellevar la entrevista lo mejor posible.

Decidí romper el hielo con una pregunta abierta hacia ella, sin mostrar todas las cartas que barajábamos en aquel momento mis compañeras y yo en la investigación.

Nos gustaría saber... ¿Cuál es su opinión profesional sobre Jared?

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21/07/2021, 18:55
Mackenzie Valenti

Mientras salían del DSM Mackenzie puso los ojos en blanco ante los comentarios de su hermano. Desde luego aquella victoria era justo lo que necesitaba Vincent para alimentar su bestia interior. Ellos no habían conocido a su abuela, pero Vincent tampoco lo había necesitado. - A ver, tíos, ¿a alguien más le parece que el tal Napier está de mierda hasta el cuello? Desde luego que el tipo manipuló el informe de Jared. Creo que tuvo contacto con alguien antes de llegar hasta Wortman y que Napier ocultó la identidad de esta persona. Y ahora viene la pregunta interesante... ¿con cuántos más lo habrá hecho? - 

Inmersa en cierto pesimismo ante la posibilidad de enfrentarse a un grupo de mejorados manipulados y potencialmente letales, llegó al despacho de Jillian Wortman. Parecía una mujer ocupada y desde luego no se alegraba de verlos, aunque esto era hasta cierto punto habitual. Mackenzie saludó con un gesto a la doctora mientras echaba un vistazo a su despacho, buscando alguna pista de qué tipo de mujer era. - Somos de la UDIM, doctora. Hemos hablado con Jared y hay algo que no encaja. Podría haber matado a mucha gente, pero no parece un terrorista. Solo queremos llegar al fondo de este asunto, a poder ser evitando que haya pérdidas humanas. - 

 

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22/07/2021, 17:54
Umbridge

—A ver, tíos, ¿a alguien más le parece que el tal Napier está de mierda hasta el cuello? Desde luego que el tipo manipuló el informe de Jared. Creo que tuvo contacto con alguien antes de llegar hasta Wortman y que Napier ocultó la identidad de esta persona. Y ahora viene la pregunta interesante... ¿con cuántos más lo habrá hecho? 

Espero que sea cosa de Napier, porque si es alguien externo significa que estamos ante una persona calculadora que conoce muy bien el sistema —añadió Umbridge con tono ominoso—. Deberíamos consultar la lista de "individuos mejorados" a los que coordinaba e investigar si existe alguna conexión entre ellos. Si fueron derivados al mismo especialista, si tomaban algún tipo de medicación, si padecían trastornos previos, etc. 

Suspiró.

* * *

Nos gustaría saber... ¿Cuál es su opinión profesional sobre Jared?

Somos de la UDIM, doctora. Hemos hablado con Jared y hay algo que no encaja. Podría haber matado a mucha gente, pero no parece un terrorista. Solo queremos llegar al fondo de este asunto, a poder ser evitando que haya pérdidas humanas.

 —En especial su historial médico. Si seguía algún tipo de tratamiento o si fue derivado a algún otro profesional, es posible que le manipulasen para llevar a cabo el intento de atentado y que haya otros como él. Por eso es tan urgente que nos cuente todo lo que sepa.

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23/07/2021, 19:37
Dra. Jillian Wortman

El rostro de la doctora se fue endureciendo como si sus sospechas sobre que aquellos agentes venían con ínfulas de superioridad se estuvieran volviendo realidad con las primeras exigencias que le hicieron llegar. De nada sirvió el interés que Vincent le dio al nombre del caso, ni la urgencia que Umbridge puso a la situación o la mención a las vidas humanas que podrían salvarse a las que Mackenzie apeló. La doctora Wortman era intransigente, y se notaba que les había pillado ojeriza o que sufría de una antipatía mal disimulada hacia los agentes del orden y la ley.

—Me temo que esa información, y especialmente su historial médico, están protegidos bajo la confidencialidad médico-paciente. Lo único que puedo decirles es que mi trato con el señor Whitten fue el suficiente y necesario, y me aseguré de que se le proporcionara la medicación correspondiente. Más allá de eso, poco les puedo decir.

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23/07/2021, 21:48
Umbridge

Umbridge respiró hondo. Ya llevaba un tiempo aguantando a personas que la menospreciaban y ya iba siendo hora de que plantase cara.

Conozco el juramento hipocrático, doctora Wortman, le agradecería que no nos despachase con tecnicismos. Puede que se le permita darnos datos confidenciales, pero el historial médico es otra historia. También le preguntamos por sus impresiones respecto a tratamientos anteriores y posteriores a su paso por este hospital. Podemos presentar una orden para investigar el asunto, pero queríamos tener un mínimo de cortesía y esperábamos lo mismo de usted. Especialmente sabiendo que hay vidas en juego.

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24/07/2021, 16:51
Vincent Valenti

Arqueé una ceja al tiempo que miraba a mi hermana con absoluta perplejidad.

¿Umbridge estaba entrando en modo Badass? Ya empezaba a considerar que se trataba de una leyenda urbana.

Aunque algo cansado de las continuas trabas que nos salían al paso en forma de funcionarios negligentes u hostiles hacia nosotros, decidí mantener la calma y la sonrisa distendida. Umbridge parecía dispuesta a jugar el rol de poli malo y me gustaba esa pinta de leona escapada de la sabana que gastaba cuando fruncía el ceño.

Oiga, doctora Wortham, sabemos que no nos quiere por aquí. Tiene usted un rostro muy expresivo, ¿sabe? —omití a conciencia que su especialidad debía ser reflejar la ingesta de considerables dosis de vinagre concentrado. A su manera, era un talento especial. Desagradable, pero especial.

Mire, el informe puede ser confidencial, pero el paciente ha dado su consentimiento expreso para que le sea leía su propia mente durante un interrogatorio policial. Con honestidad, doctora, no creo que a estas alturas le importe que revisemos su expediente médico. Sabe que estamos intentando demostrar que fue utilizado, lo que a nivel penitenciario puede resultarle ligeramente beneficioso. ¿Tiene usted algún inconveniente personal en colaborar con nosotros? —mi pregunta llevaba el veneno de una cobra brasileña. Hice un calculado silencio para que Wortham replicase, porque quería evidenciar si esta agria mujer tenía algún interés propio en ralentizar nuestra investigación.

Cuanto antes nos ayude, antes los largaremos de aquí y podrá seguir con su trabajo. No es un mal trato, ¿no?

Notas de juego

Voy a usar Negociación con ella, dado que es tan hostil hacia nosotros.

Por cierto, uso Detectar Mentiras con esta pava... No me fío de ella desde que fue mencionada en la partida.

En ambos casos, estoy dispuesto a gastar puntitos ;-)

@Umbridge: Coincido con lo que expusiste en tu penúltimo mensaje. Hay que echar un ojo a Napias y a sus informes, no vaya a que por ahí nos la haya colado.

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26/07/2021, 22:29
Dra. Jillian Wortman

La doctora Wortman no parecía impresionada con las amenazas de los agentes, pero las menciones a la perdida de tiempo que podía suponer para su trabajo el tener a esos policías husmeando por allí le hicieron recapacitar. Tamborileó con los dedos sobre la mesa y miró el reloj que había en la pared a su izquierda con evidente impaciencia. Después chasqueó la lengua y terminó cediendo, aunque su mirada no había bajado ni un ápice la hostilidad que mostraba hacia ellos.

—Está bien, ustedes ganan. Lo que sea con tal de que se larguen de aquí cuanto antes y me dejen atender a mis pacientes. ¿Han visto cómo está este lugar? Algunas personas llevan ahí fuera esperando más de una hora, estamos sobresaturados, nos falta personal y recursos... No quiero perder el tiempo con sus órdenes y demás tonterías.

Se separó de la mesa echando la silla hacia atrás y lanzó el bolígrafo que tenía en su mano sobre el montón de archivos que cubrían su mesa. Luego se apretó el puente de la nariz con los dedos masajeándose delicadamente como si considerara qué información les podía revelar sin violar el acuerdo de confidencialidad con su paciente, y de que manera lo podía hacer para que lo consideraran suficiente y le pudieran dejar realizar su trabajo con normalidad.

—La cosa está así: no puedo conceder a ninguno de mis pacientes el tiempo que se merecen. Esta es una clínica pública, gratuita y mal financiada por la Administración. Esto se traduce en que no podemos llegar a conocer a nuestros pacientes como nos gustaría, y en el caso de Jared Whitten no hay excepción. Jared era un paciente disperso y difícil, que sufría pérdidas de memoria y esquizofrenia y depresión. En ocasiones no acudía a las citas, y otras veces aparecía de forma inesperada y exigía tratamiento inmediato —la doctora hacía gala de una buena memoria, recordando detalles sin necesidad de consultar el expediente, algo que sin duda le sería útil a la hora de hacer sentir a sus pacientes lo más atendidos posible; al menos dentro de las circunstancias que rodeaban al centro—. Desde el primer momento sospeché que lo que le afectaba era la depresión, de acuerdo con su posición en el diagrama de Quade que supongo que conocerán. El surgimiento de la esquizofrenia no se ajusta al patrón habitual, y cuando surgieron los primeros brotes sospeché que pudiera ser inducida. Lamentablemente no pude indagar más porque Jared dejó de acudir a las citas. Él me dijo que sus problemas empeoraron de verdad como un año antes de que apareciera por la clínica, pero no quiso darme más detalles. Probablemente tampoco pudiera.