Partida Rol por web

Miro con la boca abierta las escenas que ocurren ante mis ojos.... No hay salida.

- ¿Pero qué sitio es este? - Mi voz suena a caballo entre el escándalo y la risa.... Creí que era una fiesta de disfraces... ¿Dónde me he metido? Armand, ¿tú conoces al anfitrión? ¿Es algún tipo de juego?

Al observar la situación inconscientemente apoyo mi espalda sobre su pecho, buscando su mano para rodearme la cintura con su brazo... Buscando su protección.

- Esto es el principio de los carnavales Querida... - Le susurro rodeandola con mi brazo - Las mascaras y el misterio protegen als idenatidades, el deso y la carne son lo que nos ofrece esta semana, poder realizar cualquier fantasia, cualquier deseo, cualquier cosa que tengamos bajo nuestra mascara... - Mis palabras son incitadoras, sensuales... - ¿Tu que deseas Margarett?

Noto en mis manos que no soy la única que está a tono. Me sujeto a él cuando me lleva a la cama, lamo su oreja, muerdo el lóbulo y me dejo hacer mientras me coloca en una postura tan sumisa...Me penetra sin miramientos con sus dedos, mi cuerpo se tensa un segundo, con un gritito de asombro, pero luego separo algo mis piernas y le dejo hacer.

Se levanta y trae velas...

Es tan bestia, tan salvaje...me recuerda a esas jornadas inacabables rodando...Una de ellas se hunde en mi cuerpo, noto el calor de la llama, tan cerca...peligroso...el cosquilleo alrededor de mi sexo me dice que estoy comenzando a ponerme realmente caliente.

La cera hirviendo hace que mi piel se erice según se enfría al recorrerme, su calor me enciende más aun, y no puedo evitar algunos gemiditos cuando Joseph se entretiene con mis pechos. Cada movimiento hace fluctuar la llama y la cera cae, en gotas o reguero, por nuevas zonas de mi cuerpo...algunos hilos se impregnan en la cuerda, y noto el calor tan intenso en los labios de mi sexo...

- Joseph...o me atas las manos o me saco la vela del culo y te follo... tres gotas caen seguidas en mi muslo...las noto caer, mi cuerpo se tensa por el dolor, inspiro aire por entre mis dientes haciendo un ruido susurrante Dios...

Comienza a jugar con mi sexo. Elevo la cadera bastante, algunas gotas comienzan a caer ahora por mi coccis y tratan de llegar a mi espalda. Apoyo el pecho en la cama, y lo miro como juega. mi postura hace que las cuerdas estén tirantes, noto como aprietan la vela y pegan pellizquitos a mi clítoris, a mis pliegues, mientras el maldito americano juega a ponerme cachonda.

Juega a mi entrada, yo quiero que me la meta hasta que me rompa...Anaïs llevaba razón, nos íbamos a caer bien.

Estiro mi mano, si le va el dolor, le va en los dos sentidos, y logro alcanzar sus huevos...los rozo un poco, y mientras me muerdo los labios, los agarro con algo de fuerza

- O me la metes o sigo... Mi mano se cierra un poco más alrededor de él... Un gemido aflora cuando algo de cera cae en mis pliegues abiertos por el tahur...Dios...necesito sexo...

Las palabras me envuelven, mientras toman sentido ante lo que veo. Mis ojos brillan cuando me giro hacia Armand...

- Identidades ocultas, deseos realizados, fantasias hechas realidad.... Deseo ... Probar de todo Armand. Me humedezco los labios repentinamente secos ante mi confesión. Como quien vende el alma al diablo respondo dejándome envolver- Quiero disfrutar de dos hombres a la vez.

Ante su ultima afirmacion la miro con una amplia sonrisa - Deseas dos hombres a asecas o... dos en concreto... gemelos... asiaticos... de color... dos que hayas visto en esta reunion...- mis palabras eran sinceras, sonaban como si pudiera cumplir cualquier deseo que ella me pidiera, como si fuera una diosa a la que tubiera que mimar por encima de cualquier cosa...

Le miro, fascinada, impresionada por  la naturalidad con la que me habla... Niego un momento con la cabeza:

- No me he fijado en nadie en el salón.... Dos desconocidos, me dá igual su raza... todo... Sólo dos hombres que se dediquen a hacerme disfrutar.

Gini se deja hacer, y la noto que responde muy bien, su humedad crece por momentos, y las gotas de cera que caen, a veces me alcanzan a mi, en los muslos, abdomen, rodilla..... Un gemido de placer me recorre cuando ocurre, placer y dolor sutil...

Me dice que o la ato las manos o se saca la vela y me folla, y eso no hace más que ponerme más cachondo, más excitado....

Gini se termina apoyando con sus pechos en la cama, y con el trasero completamente en pompa, haciendo que las cuerdas se tensen; entonces alarga una mano y agarra mis testiculos, apretando un poco.

Eso hace morder mi labio de dolór, y me dice que se la meta o sigue apretando.... Me encanta porque lo dice completamente excitada, y eso ya me llega al limite, aparte que asi, duraré más, al haberme apretado los testiculos....

Saco la vela de su ano con un *Plop*  y mordiendo aún mi labio inferiór, hago caer gotas en mi sexo, repartiendolas en toda su longitud, para crear una rugosidad y estrias de cera fundidas en mi sexo, que harán que éste sea estimulante en la fricción.

Una vez conseguido el efecto que quiero, apago la vela y la tiro en la cama; entonces la penetro con suavidad, pero para torturarla un poco mas....

Haciendola sentir el tacto estimulante y rugoso friccionarse, hasta llegar al fondo de su sexo, tan calido, tan empapado, tan estrecho por la cuerda... Ahora empiezo un movimiento ritmico con la cadera en vaiven, agarrandome a su cintura, que cada vez va en aumento, haciendo que la cama bote y los muelles se resientan; chocando mi cadera y púbis con sus nalgas, orquestado por los chapoteos de su sexo en mis acometidas....

-Mmmmm...Mmmmm.... Ufffffff.... Joder.....- Gimo u jadeo echandome sobre su espalda, lamiendo su nuca y mordisqueandosela, a veces un poco fuerte, marcandola levemente, pero luego la lamo y beso en la zona del mordisco....

Julian intentó disimular su cara de sorpresa ante aquel espectaculo tras echar un ojo a las dos primeras habitaciones y luego miró de reojo a Sylvie para cotejar su reacción ¿Sabría ella a lo que venía o estaría tan sorprendida como él mismo?

Fuera como fuera, para el ex-actor era una grata sorpresa. Al menos la situación le ahorraría todo el insustancial cortejo y si la chica estaba realmente interesada pasarían a lo que realmente todos los invitados a aquella fiesta parecían buscar, grandes dosis de sexo y perversión.

Parece que mis armas de convicción son buenas, y Joseph decide que es el momento de sacar de ahí la vela. Lo miro, sigue jugando con ella encendida sobre su propio cuerpo, pero no veo bien qué hace...para ello debería soltarle los testículos, y no quiero. Me mantengo, medio girada, mirándolo, moviendo mi cadera para masturbarme con las cuerdas, acariciando su bolsa, apretando de vez en cuando. Algunas gotas de cera caen desde la vela a la muñeca de la mano que lo sujeta ¿Se está echando cera en su...? Increíble... 

Finalmente se decide, apaga la vela y veo como la lanza a la cama. Sonrío, se que está cerca

- Joseph....vamos...no puedo más... Lo miro con la cara más perra que puedo poner, lamiendo mis labios, y tirando suavemente de su bolsa lo acerco a mi cadera.

Estoy tan caliente, y las cuerdas aprietan tanto, que noto cada una de sus curvas penetrándome, entrando en mí. Suspiro intensamente cuando la noto entrar...Mis labios se cierran alrededor de él, y entonces comienzo a notar, según sigue metiéndola, lo que hacía con la cera ¡Ah!...shhh...Eres increíble...un enfermo, pero increíble...

Me echo hacia atrás, fuerte, para que me penetre entera, para notarla llagar hasta mi final. Emito un grito ¡¡DIOS!! Acaricio, masajeando, sus testículos, mientras las envestidas son suaves, pero el incremento del ritmo me hace soltarlo, temiendo poderle hacer verdadero daño.

Apoyo ambas manos en la cama, arqueándome como una gata, o como una leona, pues comienza a morderme la nuca como hacen los felinos en los documentales. Mis gemidos incrementan en volumen. Son agudos, rítmicos...parecen sacados de una peli porno. Me besa y lame allá donde me muerde... Sigue...sigue mordi-¡aah! ¡MUERDEME, POR D--¡¡AAHH!!

Elevo mi torso, poniéndome de rodillas en la cama, sentada casi en sus piernas, y le cojo las manos, para dirigirlas a mis pechos, tensos, duros, apretados por las cuerdas. me giro cuanto puedo para lamerle los labios, morderle la mandíbula, agarrándome a su cuello, acariciando su pelo, mientras muevo mi cadera frenética

- ¡ahh! ¡¡aaahh!! ¡¡AAAHHH!!

Le miro con intensidad. "Es cierto que son gemelos. Pero eso ya me lo había avisado Tyler" La porción de mi rostro visible se sonroja pensando el rato que ha pasado con Tyler en el jacussi.

- En realidad, es que Tyler es mi anfitrion. No se si ... tu tienes alguien a quien atender - miro a mi alrededor algo desconcertada - No estoy muy en mi salsa en la fiesta - sonrie nerviosa - ... no se que hacer

De repente me doy cuenta que he podido ofenderle

- Pero no tengo problema en acompañarte. Estoy un poco sola - busco alguna cara conocida en vano, puesto que a mi alrededor no hay mas que gente anonima - ¿Sabes porque nos han asignado... anfitriones? - pregunto curiosa a Jean

"¿Seran iguales en .... todo?" Un pensamiento poco recatado pasa por mi mente. Tyler me parecio encantador atento y que se lo pasaba bastante bien. Me hizo sentir como hace tiempo nadie lo hacia. Desde Stefano, nadie me habia mirado con tal intensidad como una mujer. ¿Por que debia marcharse? Pensé que estaria a mi lado, bien cerca. Me siento incomoda con tanta gente.

Me gusta como Gini desea ser penetrada, como me suplica excitada al borde de la locura, y eso a mi, me pone a mil....

Cuando la penetro su sexo envuelve al mio, apretandolo por las cuerdas, y ella siente la cera acoplada en mi sexo, estimulandole de forma multiple... Sus palabras de gozo entre gemidos me excitan... Se echa hacia atras de manera fuerte, haciendo que la penetración sea más profunda, y llego a su fondo.

Un grito de dolor placentero aflora en sus labios y agarra mis testiculos, pero al incrementar el ritmo decide soltarmelos por no hacerme daño, seguramente... Es adorable...

Se arquea apoyandose en la cama y noto su reacción a mis mordiscos en su nuca mientras sigo con las acometidas ritmicas, cosa que parece que la encanta tanto como a mi, porque me pide que no pare, y asi hago... Mordisqueo y muerdo su nuca, lamiendola a la par entre mis dientes.

-Mmmm....Ufffffff....Mmmmmmm...-

Entonces Gini varia la postura, eleva su torso y se sienta en mis piernas, llevando mis manos a sus pechos, que agarro, masajeo y aprieto sus pezones, estirandolos y masajeandolos...

Gira la cabeza para lamer mis labios, morder mi mandibula, agarrarse a mi cuello y acariciar mi pelo; mueve su cadera para acoplar nuestros movimientos...

Bajo una de mis manos de sus pechos a su sexo, para masturbar y estimular su clitoris, que lo noto junto con el vaiven de mi sexo entrar y salir de ella.

Mi boca busca su cuello, sus labios, que muerdo y absorbo, como su cuello y detras de su oreja, junto con su lobulo...

Me masturba a la vez que me penetra. Noto sus dedos, su pene erecto recorrerme...

Juega con mis pechos, tironea de mis pezones y me hace gemir, gritar, loca, entregada completamente a él. Agarro su cadera con mis manos, moviéndome violentamente hacia arriba y abajo, algo inclinada hacia abajo, para poderlo recibir completa y profundamente.

Abro mucho mis piernas, tanto como puedo para seguir apoyada en mis rodillas, mientras, agarrada a su cadera me muevo gimiendo, completamente excitada, a punto de lograr el orgasmo...

- Joseph...ah....dios...estoy...ah!!...llegando¡¡AHH!!...

Mi cuerpo se tensa, deteníendose por un instante, para comenzar una serie de gritos y gemidos. Mi cuerpo se arquea, me tengo que apoyar en la cama, aunque comienzo de nuevo mi movimiento, incrementando la fuerza del orgasmo, que me recorre y lo aprieta. sigo moviéndome un poco más, hasta que se me ha pasado, momento en el que aprovecho, para sacarla rápidamente y dirigirla, húmeda, empapada por los fluidos de mi orgasmo, hacia mi ano.

La sujeto con una de mis manos, me muevo, acariciándola con mi piel, con mis nalgas, sin penetrarme...ese es su trabajo

- Vamos, vida...aun quiero más...solo hemos empezado...

Comienzo a masturbarlo mientras aprieto un poco contra mi entrada estrecha...

- Te estoy esperando...

Gini gime, grita, jadea.... Es lo que buscaba, y me encanta; se agarra a mis caderas y se mueve para acompasar nuestros movimientos y hacer la penetración más profunda.

Abre las piernas y gime mi nombre cuando alcanza un orgasmo, su cuerpo se tensa y noto sus fluidos empapar mi mano y mi sexo con su calor... Se echa hacia delante, apoyandose de nuevo en la cama mientras sigue con los movimientos de cadera, y su sexo contraerse al mio, cosa que me arranca gemidos y jadeos a mi....

-Mmmmm...Ahhhhh...Mmmmmm...-

Entonces parece que se calma un poco, y se saca mi sexo de dentro, para guiarlo a su ano. Mi sexo brilla recubierto de sus fluidos y humedad... Sujeto mi sexo por su mano, jugetea rozandolo contra su piel, sus nalgas; lo masturba apretandolo contra su entrada, pero me deja a mi el penetrarla, cosa que me insta con sus palabras.

Asi que no la hago esperar más...

Aprieto mi glande duro contra su ano, introduciendose lentamente toda la longitud de mi sexo, aún con la cera en él...

Su estrechéz me vuelve loco, y agarrando de sus caderas empujo hasta el fondo, hasta alojar mi sexo completamente en ella.

Paso una mano hacia su entrepierna para masturbarlo y estimularlo, e inicio las acometidas contra su ano, subiendo el ritmo cada vez....

-...Uffffff....Mmmmmmm....- Gimo y jadeo en su oido, lamiendola y sorbiendo su lobulo....

La poca, o nula más bien, estimulación, el no haberlo dilatado, hace que cuando Joseph me penetra de un grito, de dolor, en el que se contrae todo mi cuerpo, apretándolo más, y haciendo el dolor algo más intenso.

- ¡Joder! Me encanta...

Digo entre dientes, con las mandíbulas apretadas y los ojos cerrados. El calambrazo que ha recorrido mi cuerpo desde mi entrada hasta la punta de mis dedos, me ha encendido...me encanta cuando duele un poco, es el punto perfecto de salvajismo, de descontrol, de entrega.

La cera me roza aun más, y noto como la entrada desde atrás roza puntos que no se consiguen a través de la vaginal. Dentro de mi todo está tenso, es en momentos como este cuando una se da cuenta del tamaño enorme de su pene...cada roce es una mezcla de placer y dolor que hace endurecer mis pezones.

Me lame y muerde la oreja, gime, junto conmigo, que he sustituido los gritos por onomatopeyas mezcla del placer y el daño que me provoca

- Shh...Joseph...eres enorme....¡ah-ay! uufff.... Su ritmo incrementa, el  dolor va desapareciendo según me dilato en cada cometida, y solo queda el gusto provocado por su pene y sus dedos, que no paran de tocarme Dios...eres un Dios...¡¡Ahh!!...

Su estrechisimo ano se aprieta a mi del dolór al penetrarla sin estimulación, solo lubricado con sus efluvios en mi sexo....

Pero parece que la encanta, y eso hace aflorar una sonrisa de satisfacción en mis labios.

Noto a Gini claramente excitada, caliente, traviesa.... Y eso hace que mi excitación esté en lo alza... -Mmmmm...Mmmmmmm...- Mis gemidos se adueñan de mi boca,  mientras mi sexo entra y sale del ano de Gini repetidamente, agarro sus nalgas y las aprieto, juntandolas y envolviendo mi pene; haciendo más estrecha aún la penetración y la estimulación de su ano con mi sexo y la cera alojada en él. Sigo con un ritmo ascendente, chocando mi cadera contra sus nalgas. Mis manos se aferran, una  a sus pechos y la otra a su sexo, masturbandolo.

Lamo su espalda, su columna, y vuelvo con mi boca a su nuca y hombros, mordisqueandolos y succionandolos; luego busco girar su cabeza para besarme, de forma pasional y salvaje.

-Diox, Ginni....- Susurro entre jadeos.

Sonrio echando andar hacia las nuevas salas de la fiesta mientras llevo a la preciosa Andrea de mi brazo - Los anfitriosnes se asignan para todo, pues en estas fechas la mayoria d ela gente viaja a la ciudad en busca de algo que no fuele aparecer en als guias turisticas, el misterio del disfraz, la protecicon d elas mascaras, volver a esa epoca victoriana donde todo valia, no se conocido... y lo mejor es que alguien que venga solo tenga un guia para no perderse... - Le sonrio amable bajo la mascara.

Voy por los pasillos observando cada una de las salas, mi gesto no se distingue bien bajo la mascara y poco a poco, en pequeños sorbos que manchan de carmin la copa voy terminandome el champang...

- ¿Que es lo que buscas tu de estos carnavales Julian? - Le pregunto con voz melosa dejando la copa vacia a un lado.

Entrais en una de las zonas que se abren dandoos cuenta que las salidas estan cerradas, y si ahora mismo quisierais iros a vustras habitaciones no sabriais como.

Al cruzar las cortinas os encontras en un larguisimo pasillo que debe ir de un extremo del hotel a otro... La luz es muy baja como de velas artificiales, y a los lados del pasillo hay nuevas cortinas "abiertas" que dejan ver salas interiores, algunas son como habitaciones, otras como reproduciendo lugares, bares, despachos... lo que os podais imaginar.

Dentro de algunas salas hay gente de la fiesta, algunos con mascaras, otros sin ellas, algunos parece que cumplen fantasias y otros aprecen aun escogerlas....

Seguiis avanzando por los pasillos y tu mirada se pierde en una se las salas que esta acondicionada como una especie de sauna y duchas de hidromasaje, dentro puedes ver a dos chicas desnudas que comienzan acariciarse y lamerse el cuerpo, es algo inevitable el echo de que tu mirada se pose en ellas.

Lo miro sonrojandome un poco y desviando un segundo la irada - Eh.. Lo siento... estaba buscando a mi anfitrion y.. por la mascara... bueno pense que... - Le comento avergonzada mientras vuelvo a posar mi vista en el - Me llamo Daira... - Le digo en respuesta a su presentacion, acercandome a besar sus mejillas, dejando que las plumas de mi mascara acaricien con un cosquilleo su rostro.