“Claro que soy americano, maldita sea. Alguien tiene que poner algo de estilo a este grupo, ¿no?”
(“Lobo” McReady poniendo sus botas en lo alto del escritorio de Sir Douglas Archer)
Aspecto Físico:
Cuarenta y tantos años, ojos claros, cabeza afeitada y barba de tres días. Tu tez tiene una leve tonalidad rojiza debido a tus raíces indias. Ojos pequeños y una sonrisa marcada por una pequeña cicatriz en la comisura de tus labios. Fumas apestosos habanos y llevas siempre contigo un viejo colgante tribal, el cual representa la cabeza y fauces de un lobo (una imagen idéntica al antojo que tienes en el pecho) Vistes una cazadora marrón gastada, pantalones militares, sombrero y botas a juego.
Historial:
Por lo que te han contado, tu padre fue uno de los últimos forajidos de un “salvaje oeste” ya en decadencia. De sus proezas y hazañas no queda nada escrito y esa es una de las razones por las que llevas un diario: no quieres que, llegado el momento, la gente no recuerde tus propias aventuras.
Lo que sí sabes de tu padre es que acabó sus días en el seno de una tribu india, casándose con una nativa de cuya unión nacerías tú. Te llamaron “Lobo” por esa marca de nacimiento que tienes en el pecho. Viviste una infancia dividida entre la educación del hombre blanco y las tradiciones ancestrales de la tribu (enseñadas por el shaman de la misma, un viejo amigo de tu padre llamado “Águila del Desierto”).
Con apenas dieciocho años, te viste obligado a dejar la reserva cuando vengaste la muerte de tus progenitores pues éstos fueron asesinados a sangre fría por una pandilla de racistas lugareños, naturales de un pueblo cercano. Perseguido por la ley, te colaste a bordo del primer barco que salía de los Estados Unidos, el cual te llevó hasta las costas de África. Allí fue
donde comenzaste tu carrera como mercenario: no tardaste en unirte a un grupo de soldados de fortuna con los que aprendiste el oficio y el valor de la camaradería.
Sin embargo, tu experiencia en la Primera Guerra Mundial cerró las puertas de aquella amistad.
Luchaste en las trincheras y fue allí donde, además de contemplar el horror crudo de la contienda, rompiste con tus viejos camaradas. En un momento dado, vuestra misión era debilitar la resistencia británica en una zona que iba a ser bombardeada con un gas tóxico experimental. Fue entonces cuando te negaste a dejar a los británicos heridos allí,
tal y como vuestro patrón os había ordenado hacer.
Gracias a tu insubordinación, el por aquel entonces cabo Douglas Archer salvó su vida esa noche. Y entre él y tú se forjó una amistad que ha perdurado hasta hoy.
Personalidad:
Bravucón, mal educado, impetuoso, algo cascarrabias y, sobre todo, sincero: siempre dices lo que piensas… aunque lo cierto es que jamás piensas lo que dices. Eres desconfiado por naturaleza, creyendo que has vivido las suficientes aventuras como para que el mundo no te guarde muchas más sorpresas. Eso sí: tu herencia india aun te hace ser supersticioso ante cualquier cosa relativa a los espíritus.
Desde que salvases su vida en el campo de batalla, Douglas Archer te convirtió en su guardaespaldas personal. Durante más de quince años, has sido su fiel amigo y confesor: estuviste a su lado cuando su esposa falleció, a causa de una deficiencia cardiaca, dejándole con una pequeña de apenas cuatro años.
También estuviste junto a él cuando entró a formar parte del Servicio Secreto de su Majestad. Sin embargo, y aunque sabes que está involucrado en temas de alto secreto, ni Archer comenta nada sobre ello ni tú haces preguntas al respecto. A fin de cuentas, no es raro que Sir Douglas desaparezca semanas enteras tan sólo para regresar sano y salvo… y cargado de regalos para su pequeña Madeleine.
DEFENSA | 14 |
PUNTOS DE GOLPE | 57/57 |
ATAQUE BASE | +3 |
INICIATIVA | +1 |
REPUTACION | +1 |
SALVACIONES:
FORTALEZA | +6 |
REFLEJOS | +5 |
VOLUNTAD | +1 |
CARACTERISTICAS/BONOS:
FUERZA | 15 | +2 | INTELIGENCIA | 8 | -1 |
DESTREZA | 12 | +1 | SABIDURIA | 10 | +0 |
CONSTITUCION | 15 | +2 | CARISMA | 13 | +1 |
ATAQUES/DAÑO:
Cuerpo a cuerpo +6 | 1d6+2 |
Pistola .45 +4 | 2d6, 7 balas |
Subfusil Thompson M1921 +4 | 2d8, 50 balas |
HABILIDADES/BONO:
Intimidar +7 / Concentración +6 / Conducir +3 / Saber Mundología +6 / Idioma (inglés)
DOTES/EFECTOS:
Competencia Avanzada con Armas de Fuego Personales |
No sufre penalizador al usarlas | Pelea | Suma +1 a los ataques desarmados, y hace 1d6+FUE en vez de 1d3 | Sentido del Combate +1 | Gana +1 al combate contra un oponente que designe. Cambiar de oponente es una acción. |
Competente con Armas Sencillas |
No sufre penalizador al usarlas | Permanecer Consciente | Puede realizar acción parcial aún estando en puntos de vida negativos | ||
En el camino del daño | Puede interponerse en los ataques de un aliado que elija para cada combate. Debe declararlo antes de las tiradas de ataque. | Reducción de Daño 1 |
Ignora 1 punto cada vez que reciba daño |
Prólogo, sinopsis:
Rick habla hace varios meses con el padre de Maddie, Sir Douglas Archer, para que la cuide. No obstante lleva demasiado tiempo desaparecido. Puede buscar entre sus contactos sin éxito, y puede acompañar a Maddie por si acaso.
CAZADORES DE LEYENDAS. PROLOGO
9 de Julio de 1936.
Una fecha señalada en el calendario, probablemente la fecha más importante para Douglas Archer. La más importante, porque era la fecha del cumpleaños de su única hija, Madeleine. Y el viejo no apareció.
Rick no suele preocuparse demasiado por las ausencias de Archie. Sabe que es algo más que un simple diplomático, pero tampoco considera necesario preguntarle pos sus verdaderas actividades. Es cosa suya.
Sin embargo esta vez es diferente. El viejo no se hubiera perdido jamás el cumpleaños de Maddie. No voluntariamente. Hasta ese pimpollo de Wilson-Harris sospecha que algo no va bien. Y Maddie... la pequeña Maddie se lo ha tomado bien, muy bien. Demasiado bien. No cabe la menor duda de que trama algo, pero ¿qué hacer al respecto?
Duda:
Se supone que soy el guardaespaldas de Mr. Archer, ¿no? Si es así, ¿como es que no se nada de sus viajes o de donde está?, ¿son habituales sus desapariciones sin dejar rastro y sin escolta?
Después de varios años te has convertido más en el guardaespaldas de su hija. Sabes que no es olo un diplomático, sospechas que es algo más, ejem ejem, y por eso siempre ha querido que protegieras a Maddie.
De hecho, gracias a tí ella ha aprendido... todo lo que no debería haber aprendido, a decir tacos, beber, ser más bruta que un arado... pero es que no puedes negarle nada jejeje.
Las desapariciones de Archer sí que suelen ser habituales, pero nunca de tantos meses, y menos aún sin acudir a algo tan importante para Maddie.
Oki doki!
Vamos que por las fechas, puedo sospechar que es... coff... un... cofff... espía... cofffff... inglés... coffffff...
¡Plas!
¡Ahi! ¿y ahora porqué me pegas?
Vamos, que ahora soy el guardaespaldas de la niña y encima le tengo consentida, ¿no?
Jajja, sasto. Aunque en realidad sea un espía o no, te da igual. Te acogió en su día, así que le eres muy leal.
En cuanto a Maddie podría ser tu hermana pequeña, casi. Y la consientes sí, pero ante todo la proteges, que se le va mucho la pinza. XD
Vale, lo he leído todo dos veces y reconozco que estoy perdido. ¿Que se supone que tengo que decir o hacer ahora? Rolear la búsqueda de Sir Archer?? Investigar lo de la niña?? Reconozco que estoy perdido y además hoy no ha sido un buen día... :(
Sorry
El hielo comenzaba a fundirse dentro del vaso, que ya estaba a la mitad de bourbon. Bourbon del bueno. Hubiera preferdo un buen whisky escocés, pero últimamente resultaba complicado encontrar un brebaje decente en las tabernas del centro londinense. Algún problema con la región escocesa y sus impuestos, como siempre.
Rick se encontraba medio recostado sobre la barra de su tugurio habitual, un lugar oscuro y nada limpio llamado irónicamente The Queen's Proud. ¡Ja! Como si una reina pudiera estar orgullosa de algo semejante.
Por la cabeza del estadounidense rondaban muchas preguntas, y pocas respuestas. ¿Qué diantres había sido del viejo Archer? Douglas no era un tipo que se prodigara en explicaciones, sin duda debido a lo confidencial de su trabajo. Pero perderse el cumpleaños de la pequeñña Maddie... aquello no encajaba. Algo le había ocurrido.
Lo más sensato sería ir a casa a verla. Seguro que está tramando algo, esa cabecita loca. Aunque tal vez Rick pudieraintentar tirar de contactos por los bajos fondos, esa gente siempre sabía cosas. No es que esperase que supieran algo sobre alguien tan distinguido como un diplomático del Foreign Office, pero era otra opción...
Jajaj, weno, era un principio abierto, para darte la oportunidad de comenzar dónde y como quisieras, pero no te preocupes, te concreto yo más.
Doy un breve trago al whisky y miro a mi alrededor, buscando algún chiquillo de los que pululan por allí dispuestos a ganarse un chelín a cambio de algún trabajo sencillo.
- ¡Eh!, ¡chico! - Le digo en voz alta mientras le hago gestos para que se acerque. - ¿Te apetece ganarte un par de chelines? Sólo tienes que ir a buscar a Mad O'Hara y decirle que Lobo McReady le está buscando. Dile que me busque en los lugares habituales, que tengo un trabajo sencillo y bien pagado para él.
El viejo Mad O'Hara es un contacto en los bajos fondos, que se mueve en diversos ambientes gracias a que tiene contactos con las meretrices más caras de la City. No es que espere que sepa nada, pero por unas libras se moverá y preguntará por si últimamente ha habido algún suceso extraño o si han visto al viejo Archie por algún sitio.
Después de despachar al crío, palpo el regalo para Maddie, ya es toda una mujercita y ya es hora de hacerle un regalo como Dios manda. No es un regalo que esté muy de moda entre la gente de alta alcurnia de la City, ni de Inglaterra en general, pero es un regalo que se que le va a gustar, sobretodo teniendo en cuenta que es un regalo muy poco femenino y que nadie se espera que le hagan. Se trata de un flamante revolver Smith & Wesson del calibre .38 recién llegado de Nueva York en barco, junto a su munición correspondiente y dos fundas, una sobaquera y otra de cinturón en cuero fino, trabajado y grabado con sus iniciales.
Termino mi bourbon tranquilamente y después, sin prisa, me acerco paseando hasta casa de Maddie.
Siento mucho la tardanza en contestar, estas últimas semanas han sido bastante raras y no he aportado, sorry.
Tanto el tema del regalo como el tema de Mad O'Hara son libremente "anulables" si crees que es demasiado.
Personalmente, siendo yanqui, llevaría dos Colt 1911 en funda sobaquera, tal y como se ve en la foto :D
El pequeño truhán alargó una mano de uñas sucias por la mugre de una vida difícil y se llevó la moneda a la boca, mordiéndola para comprobar su veracidad. Como si un crío pudiera comprobar algo ai con tanta facilidad. Costumbres adquiridas, supuso Rick.
El muchacho asintió muy solemne antes de salir a toda velocidad de la taberna, para cumplir su encargo.
No obstante, el yanki sabía que O'Hara era un tipo escurridizo, y tardaría en dar con él. Por tanto, decidió encaminarse a la Mansión Archer, a ver qué tramaba Maddie.
no problem, lo único que ya te voy a meter con más pjs, pero no pasa nada ;)
Si es lío, espero a OHara
Rick salió a hurtadillas de la mansión Archer, con sumo cuidado, intentando no ser detectado por nadie.
El norteamericano observó con atención la calle en derredor de la mansión, sin encontrar nada sospechoso. No había rastro del automóvil que vigilara la casa a su llegada, lo cual no sabía si era buena o mala señal.
Ahora sólo restaba decidir qué hacer a continuación...
Una vez fuera de la mansión me dirijo a mi tugurio habitual, para poder tomar un whisky, que al fin y al cabo el que me dio la Señora D se quedó posado a ver si lo bebía Maddie, y saber si el pilluelo ha podido encontrar a "Loco", o para saber si se ha pasado por allí.
Veo que volvemos a la personal :D
Jejeje, sip. Por ahora no hay noticias del chaval ni del "Loco".
Toca esperar a que Sirius y Gori acaben su prólogo, y comenzamos :P
No problemo, me quedo en el bar tomando un par, o tres, de whiskys antes de retirar a dormir.
De paso le pillo un par de botellas para el camino :D
Mi idea es coger un coche para ir a buscar a Maddie a su casa. No voy a dejar que vaya sola al aeropuerto, al fin y al cabo es mi trabajo. Y aunque me odie, yo creo que hasta la Señora D estará de acuerdo conmigo en este punto.
¿Hay margen para hacerlo o voy por mi cuenta?
Sin problema, preguntale a oona si le parece bien, y si dice que si, llegais juntos ;)
Dudas:
1.- Estoy dando por sentado que llevo las dos pistolas encima, ¿el Tommy lo llevo también?
2.- Para memorizar lo que comenté, ¿tirada de Inteligencia (8- en 1d20)?
Hombre una cosa son las pistolas, que las llevas en sus fundas, pero más allá, en un hotel, desentonaría un poco. No obstante a la expedición puedes llevarlo, sí.
Haz una tirada de Inteligencia (1d20+INT). Pero el mapa os lo llevareis, claro.