Partida Rol por web

Nat levanta el extintor y golpea el cuerpo con toda su fuerza, apuntando directamente a lo que debería ser la cabeza. 

Bajamos con cuidado las escaleras, voy palpando la pared mientras poco a poco, damos brincos de escalón en escalón. - apoyese en la barandilla, en seguida estamos, le necesito plenamente consciente, confío en usted.
Llegamos al piso y no se ve absolutamente nada, -hacia donde debemos dirigirnos director? Necesitamos algo de luz...estando en un hospital...es posible que dentro haya alguno de esos seres.
Presto atención mientras avanzamos lentamente en busca de algún sonido extraño que nos pueda indicar la presencia de alguien...o algo.

Megan se alegró de regresar y ver que todo seguía igual. Consideró que era fundamental reencontrarse con el resto y no dudó en hablar.

- Bueno, la inspección a los consultorios ha sido fructífera y considero que es momento de ayudar a asegurar la parte alta del edificio. Emily y yo subiremos a reunirnos con Gustav, Natalie y los demás. Neil, Arthur y Lois, vosotros tres os quedáis aquí y avisáis si hay problemas ¿De acuerdo? Neil, ponles al corriente de lo que hemos visto por la ventana...si logramos encontrar las llaves de la ambulancia, quizá no sea mala idea ir en busca de algún lugar en donde poder buscar seguridad, fortificándolo. Ahora venimos, vigilad las inmediaciones.

Dicho esto, Megan se dispuso a subir las escaleras en busca de Natalie y el resto.

El tubo del extintor hace un ruido sordo cuando golpea contra el cráneo del atacante. Aprovechando la posibilidad, Gustav se da vuelta y lo inmoviliza contra el suelo. Entre luces y sombras puede verse la cara ensangrentada del infectado que intenta morder al hombre que lo sujeta. 

-¡Una más!- grita Gustav. A escasos metros de ellos, se escucha el forcejeo de Fred con su asaltante en la oscuridad.

Cuando llegan al pasillo puede verse a un lado las escaleras que conducen a planta baja. 

-Vamos a revisar este piso primero. En caso de que haya infectados, no quisiera que nos rodeen sin escape. -indica Marcus mientras avanza trabajosamente por el pasillo ayudado por Walker. -Ahora estamos yendo hacia las oficinas. Creo que si alguien buscara refugiarse, se escondería allí. 

Megan sube la escaleras y se encuentra en un entorno profundamente oscuro. Según recuerda, hacia la derecha se encuentra la oficina del director del hospital y 2 salas de cirugía. A la derecha, el pasillo recorre toda la planta del hospital y conduce a oficinas administrativas. Mientras examinaba la situación, la doctora notó que, escaleras arriba, la puerta que daba a la terraza estaba abierta de par en par, cuando normalmente estaba cerrada...

Perfecto Director, esperemos encontrar a mi hija ahí. Digo sujetando con firmeza al Director y dirigiéndonos a la oficina. Dígame Director...sabe algo sobre lo que está pasando aquí? a qué se debe?

Nat vuelve a golpear con el extintor con fuerza apuntando a la cabeza. 

Esta vez el extintor se dirige al lugar justo y el cráneo del infectado se desarma con un fuerte chasquido.

-Buen golpe, doctora.-dice el hombre entrecortadamente. Con algunos jadeos, Gustav se levanta del suelo y se da vuelta a ayudar a Fred. Se interna en la oscuridad y embiste contra el atacante. La linterna rueda por el suelo hasta los pies de Nat.

-Sabemos que es un brote de una enfermedad que funciona como un parásito en el cuerpo. -explica Marcus. -Durante este tiempo, tuve una profesional forense estudiando los cuerpos infectados. Es una de las doctoras presentes en el hospital, Natalie. Al parecer, este parásito toma el control del cuerpo y lo lleva a buscar alimento de carne, y reduce las habilidades cognitivas al mínimo. -termina de exponer el director. 

Cuando llegan al final del pasillo encuentran una puerta cerrada. Cuando el director la abre, puede verse dentro una linterna prendida abandonada en el suelo. Por el destello en el suelo, pueden verse varios pares de pies en la oficina. Los pies comienzan a moverse y se escucha el gemir de los infectados que se acercan rápidamente. Marcus intenta dar un salto hacia atrás pero la pierna le falla y cae al suelo, llevando a Walker consigo. Se puede oír a los caminantes avanzando por el pasillo, algunos siguen de largo atraídos por el haz de una linterna y algunas voces que se oyen acercarse por el mismo camino que transitaron Walker y Marcus, pero uno de los infectados intenta aferrar a Walker por las piernas. 

Había llegado a la primera planta y debía tomar una decisión. ¿Ir hacia el despacho del director y las salas de cirugía? ¿Ir hacia la zona de las oficinas administrativas? ¿Subir hasta la terraza? Con Emily a su lado, quién era la que llevaba la linterna, debía ser cautelosa al moverse. Realmente era extraño que la terraza estuviese abierta y eso indicaba que alguien había acudido en aquella dirección por lo que no tardó en hablarle a Emily.

- Lo importante es que no nos separemos, Emily. Debemos decidir a dónde nos dirigimos. ¿Vamos primero hacia la terraza a ver si encontramos al resto y ya después recorremos los oscuros pasillos? Si está abierta la puerta es que han ido hacia allí...creo que es la mejor opción.

Dicho esto esperó a ver si objetaba, de no ser el caso ambas subirían las escaleras y cruzarían esa puerta para ver qué acontecia en la terraza.

Nat coge la linterna y enfoca hacia el lugar donde se ha dirigido Gustav, preparada para atestar otro golpe si fuera necesario. 

Le doy una patada al caminante e intento levantarme lo más rápido posible ayudando al director. En la mano llevo el hacha pequeña dispuesto a hundirla en la cabeza del primer caminante que se nos acerque mientras reculo estirando del doctor. ¡EMMA! grito en un momento de locura esperando que aquella linterna vaya de la mano de mi hija.

Al subir algunos peldaños, Emily golpea por accidente la linterna contra la baranda metálica y genera un ruido que resuena por el pasillo. Desde allí puede oirse un poco más claro el sonar de la bocina del coche. 

Emily sopesa las posibilidades y finalmente manifiesta -Creo que deberíamos echar un vistazo rápido a la terraza. Quisiera observar un poco las cosas. Además, si la memoria no me falla, podemos encontrar algo útil aquí arriba. 

Después de unos segundos de focejeo, Walker da una fuerte patada al infectado y se lo saca de encima. Mientras se levanta del suelo y se dirige hacia los caminantes y la luz se escuchan señales que indican que alguien está luchando contra los no muertos. 

La escena que se presenta ante Natalie al levantar la linterna es a la vez horrorosa, desesperante, y confusa. Lo primero en lo que se enfocan sus ojos es en Fred siendo aferrado por un zombie que le está arrancando la oreja con los dientes. Gustav corre hacia ellos y trata de separarlos a la fuerza. Detrás de ellos, un hombre que Nat no conocía pero resultaba familiar venía corriendo contra ellos con un hacha en la mano, al grito de "¡Emma!"

Nat reconoce el nombre. Una voluntaria del hospital que solía ir los fines de semana se llamaba Emma. Sin embargo, Nat no podía recordar si estaba en el hospital cuando se desató el brote. 

Vamos Director por favor, puede ser Emma! Digo llevando al Director casi en volandas de camino hacia la trifulca. EMMA!! sigo gritando mientras atisbo como unas personas forcejean con los no-muertos. Hacha en mano y sin soltar al Director acudo lo más raudo posible.

Las palabras de Emily convencieron a Megan, irían primero a la terraza. Rápidamente subieron los escalones y al llegar trataron de entender bien la situación.

Por fuera, la noche estaba oscura pero la luna comenzaba a iluminar el paisaje a su alrededor. La terraza está desierta. Justo enfrente de la puerta de entrada puede verse la escalera de incendios. El seguro que hace que ésta llegue al suelo estaba destrabado. Emily empieza a rebuscar el suelo cerca de la puerta y se levanta con una sonrisa. -¡Aquí está! Hace poco recordé que el conserje me comentó que había olvidado esto aquí.

La enfermera tenía en su mano una linterna gigante. De esas que pueden alumbrar una gran distancia con claridad. -Vamos a echar un vistazo- dice Emily. Se acerca al borde de la terraza y se ve con claridad la entrada del complejo de hospitales. 

A la izquierda de la entrada, Emily alumbra el auto y puede verse claramente que está desocupado. La bocina está sonando sola. Del otro lado de la entrada, puede verse la ambulancia. En el asiento del conductor hay alguien sentado, aporreando la puerta y queriendo ir hacia el sonido. Si bien no puede verse su rostro, se puede distinguir claramente en su ropa el brillante azul del uniforme de los enfermeros...

Luego de ello, Emily enfoca hacia el edificio de internaciones y puede verse en la ventana a una chica de cabello castaño atado en una coleta. Casi con total seguridad se trata de Emma, la voluntaria.