Partida Rol por web

NUEVOS APOSENTOS DE LAS CORTESANAS.

El nuevo ala preparado para las cortesanas es más luminoso que el anterior y tiene esplendidas vistas al lago, ya no se puede observar eso si, el patio del castillo, con lo que no es tan fácil escapar de noche.

Dejo lo que porto en las manos en mi habitación bien guardado y después vuelvo con Letta y entro junto a ella en la sala común de esta nueva zona del castillo que nos han habilitado a las cortesanas. Me quedo algo decepcionada ante el hecho de que no se vea el patio central, echarémos en falta la animación y el bullicio que poseía y que seguramente acabará recuperando con el tiempo, pero por otra parte me impresiona su luminosidad y la alegría que este hecho aporta. Letta, sentémonos y pidamos algo de almuerzo, ya ha empezado a caer la tarde y al menos yo no he probado bocado... Llamo a alguna de las sirvientas y le indico que nos traiga algo de comer, mientras esperamos a ver si alguna de nuestras amigas aparece.
Bueno, parece que no habéis tenido mucha suerte, Letta, llegáis y todo se pone patas abajo, pero no os preocupéis todo volverá a su cauce y esta vez os pilla con algo a vuestro favor y es el hecho de que os habéis comportado como una verdadera dama... cuando en realidad hubiera sido comprensible que a vuestra edad no lo hubieráis hecho, de manera que animémonos y caminemos hacia adelante... las cosas han de ir a mejor. Pienso en la última encomienda de Sighard, o eso espero... Un escalofrío recorre mi espalda.

Llamo a la habitación Se puede pasar,soy Terresia

Dos chicas jóvenes os traen la comida que habéis pedido. Un caldo de verduras que huele fenomenal y dos muslos de pollo joven, acompañado de alubias hervidas; tras esto un trozo de pan recién hecho para cada una, una jarra con vino dulce y vasos. señoritas... su comida

Hola Terresia! Te perdí antes y he estado con Ghela. Es que te fuiste muy deprisa... Mi tono es entre enfurruñado y con un poquito de rin tin tin, ya que me ha parecido mal que me dejase sola. Pero al ver llegar la comida olvido todo para centrarme en el hambre que tengo, que llevo sin comer todo el dia.

Perdona cariño es que fui a buscar a mi padre pero es como buscar una aguja en un pajar a saber donde se mete este hombre ,bueno que hambre me habeis dado,sirvienta traiga otro plato porfavor no comido anda en todo el dia

Una de las sirvientas que antes habían traído la comida, vuelve con lo que ha pedido Terresia. aquí tiene señorita, que les aproveche.

Buenas tardes, Terrezia... Acabamos de tomar asiento, come junto a nosotras y charlemos un rato... ¿No vistéis a vuestro padre? Quizás esté con los soldados y el resto de caballeros en el cuartel, les convocaron a todos...iban a realizar una batida para atrapar algún malhechor, no sé si habrán salido ya... Pienso para mí tratando de calcular mentalmente cuánto tarda en hacerse una batida... el recado que me queda por hacer cae por esa zona y la verdad... no me apetece verme involucrada en una sangría, pero por otro lado, tampoco me puedo retrasar...quizá fuera aconsejable enterarse.
Al ver aparecer de nuevo a la sirvienta, llama su atención y le pregunta, ¿podría decirnos si han partido ya los caballeros y soldados del cuartel?

La sirvienta se detiene mira a la señorita Ghela no mi señora, aún no han partido, les he oído de camino a las cocinas.

Es tipico de el siempre le gusta estar donde esta la aventura, hay gente que se aprovecha de las desgracias agenas de estos dias para cometer delitos me pareze algo terrible,espero que lo atrapen y nostante yo hasta que vuelva todo a la normalidad no saldre de la seguridad del castillo creo que en estos tiempos haciagos que nos toca vivir hay mucho indeseable suelo.Por cierto sabes que hoy fui a visitar a tu hermano creo que se animo algo a pesar que creo que por dentro le duele estar asi de vez encuando le ataco al plato mientras pero no hablo con la boca llena ni comiendo.

Sí, ciertamente está más animado... y sobretodo ahora... esperemos que todo vaya a mejor, aún conservo la ilusión de que se recupere su pierna... ver que todavía no han decidido amputársela, reaviva mi esperanza... eso y la posibilidad de que esa mujer del bosque a la que me envía, pueda hacer algo al respecto...
Entre bocado y bocado observo a Letta, estamos venga a hablar de pesares, malhechores y piernas amputadas, pobrecilla, desde luego vaya comienzo ha tenido en el feudo... Bueno, no nos preocupemos, seguro que los caballeros harán su labor y limpiarán de malhechores el feudo... y mi hermano acierto a pensar que se recuperará... Hago una pausa y trato de cambiar de tema: ¿Sabéis a quién he saludado hoy? Mi tono es alegre y animado: A Dewekinus, nuestro tutor, supongo que pronto se pasará por aquí y nos traerá a mandamiento... Me río, no pongas esa cara Letta, vamos a divertirnos de lo lindo o por lo menos se intentará... y entre todas puedo asegurarte que te ayudarémos a pasar el mal trago. Le hago un gesto de complicidad a Terrezia. ¿Dónde se habrá metido, Mille? Hablé con el ella en el patio, creo que le dije que estaríamos aquí o en las cocinas... Seguro que estará abajo... Ahora cuando acabemos si os parece, podríamos ir a buscarla...

Pensar en el tutor hace que se me caiga el alma a los pies, pero cuando voy a protestar Ghela me lo impide e intenta animarme. Ya ya, pero estudiar sigue siendo estudiar... A pesar de eso se me ocurre una pregunta Y en el castillo no hay mas niñas como yo?

Sube de nuevo las escaleras que dan a la sala que hay en el centro de los aposentos de las señoritas de la corte y las ve sentadas acabando de comer... ¿retiro los platos señoritas?... por cierto, los caballeros ya han partido hacia Frog Trees...

Pues que yo sepa no, Letta, pero en cualquier momento pueden llegar al castillo más muchachas entorno a tu edad, le sonrío y trato de levantarle el ánimo con mis palabras, no es algo que os pueda asegurar, pero yo también me sentía sola antes de que aparecieran, Mille, Jutta y Terrezia... Al recordar a Jutta, mis pensamientos se pierden entorno a su recuerdo durante un instante, pero luego al oír el comentario de la sirvienta le contesto: Sí, retírelos... y gracias por mantenernos informadas... ¡Bien! Ya era hora por Dios... Debo estar atenta a su regreso, pero ahora que no tenemos vistas al patio, me lo han puesto mucho más difícil ciertamente... Para tranquilidad de las aquí presentes: ¿Se sabe en cuánto tiempo se estima su regreso?