Partida Rol por web

Mientras se tumba acepta aquello que minte le da, y le da un bocado. Mientras mastica se para y alza la mirada al techo, al agujero que deja entrar un rayo de luz, luego les mira a todos. Gracias amigos, la verdad ya me siento mejor, podemos seguir, pero deberíamos parar en la iglesia por provisiones, insisto, si a ese pueblo que hay más allá de la corriente le llamabais cavestone, ahora se le puede llamar río infranqueablHRRRRMMJJJ tose.

Empezáis a oír leves voces fuera, parecen dos para que luego en grito se les una, la tercera.

Gira un poco la cabeza Parece que hay alguien fuera. Id a ver, quizá sean soldados o supervivientes del pueblo.

-Ahhh pequeño Meeus, no es la muerte no...más sigue intentándolo, aún te queda hasta que la noche caiga para averiguarlo junto a Wyric.

Cuando el anciano termina de hablar, comienzan a escucharse voces fuera de la casa y Conrado advierte a los presentes para que salgan por si se trata de supervivientes.

-Minte, niños, mirad aver de quién se trata, quizá necesiten ayuda.

El guerrero a pesar de estar en bajas condiciones se había dado cuenta antes que todos nosotros de la presencia en el exterior del pueblo ... y tenía razón ... al agudizar todos nosotros los oídos pudimos apreciar como parecía que empezaba a haber movimiento en el exterior ...

Meeus intentaba resolver el acertijo ... pero no lo acertó ... cosa que yo deseaba con todas mis fuerzas ... debía ser yo el que lo acertara ...

Una sonrisa se mostró en mi rostro cuando Ernestus le negó el acierto del acertijo ... me acerco hacía ellos y les digo ...

-Es demasiado difícil para ti Meeus ... no lo intentes ... digo dándole dos palmadas a la espalda ...

-Vamos afuera a ver quien anda por aquí ... quizás necesiten ayuda ... o quizás nos la puedan prestar ... anda vamos ... y no pienses tanto ...

Una nueva sonrisa y me dirijo hacía la plaza del pueblo ...

-Hasta ahora ... digo despidiéndome con la mano ...

Me dirijo a Ernestus y Conrado

Será mejor que vaya a ver, vuelvo ahora mismo

Ve al viejo al otro niño y al herido... dios santísimo, ¿es usted un caballero de cristo? hay algunos como vos rondando por el castillo... quedaos aquí trataré de volver con un caballo...

Incorporándose un poco... lo primero llévenos a todos a la iglesia, creo que está de camino al castillo, luego ya veremos donde vamos. KKKKTH tose.

El anciano, algo sobresaltado, se encuentra perdido ante las nuevas voces que penetran en la casa.

-¿Qué pasa? ¿quiénes son estas gentes?...

Por sus palabras, deduce que debe tratarse de alguien muy cercano al campo de la guerra...un soldado del castillo o alguien parecido.

El afable pastor Rether Blycick, vecino de Drillstoke, aparece poco después que el soldado.

-Apóyese en mi. - se ofrece al caballero herido - El pueblo no es seguro...ninguno lo es. La gente se está organizando en la iglesia. Hay fuego, comida caliente y los heridos son atendidos. Hemos traido un carro, pero tendrán que compartirlo con los difuntos. - no tarda en reconocer a Ernestus y su condición, así que le da la mano, una mano basta y callosa pero cálida.

Entro tras todo el grupo de gente y viendo como Ernestus se empieza a sentir confundido me acerco a el y le doy la mano ...

-Tranquilo Ernestus ... esta gente parece que ha sobrevivido a la tormenta ... van a ayudarnos ... nos acompañaran de camino a la Iglesia ...

Con un gesto con la mano les indico la dirección donde yace el cuerpo del tonelero y les digo ...

-Ahí está el muerto que les dije ...

Aparezco por el marco de la puerta tras haber estado un rato observando el ajetreo en casa del tonelero desde fuera.

Mi rostro parece cansado, a pesar de haber sobrevivido a la tormenta, mi figura se encorva y padece una ligera cogera mientras camino. Unas ojeras excesivas se demarcan sobre la blanca piel de mi cara. Me pregunto cuantos hombres habrán perecido por gracia del Señor...

Algo distante y confuso logro balbucear unas palabras Buenos días... hago una ligera reberencia y me quedo observando la escena.

Un resoplido escapa de mi boca al ver tanto trajine de gente de un momento a otro. Ayudo a Conrado a levantarse mientras digo a los demas

Venga chicos, será mejor que recojáis lo que pueda sernos útil mientras yo ayudo a estos hombres a subir a Conrado al carro... será mejor que nos pognamos en marcha..

El anciano se calma gracias a las tranquilizadoras palabras del pequeño Wyric y la bondad que transmite la mano de un hombre, sin duda un hombre que trabaja la tierra de sol a sol, sus cayos y durezas son fiel reflejo de ello.

-Ahhh, asi que vienen a ayudar...Wyric, hijo mio, ayuda tú también a Minte para que Conrado pueda subir al carro...yo iré andando.

La tarde se nos está echando encima...no creo que pasemos de la iglesia hoy...y aunque intente evitarlo, sé que lo más sensato es pasar la noche allí...si los caminos nunca fueron seguros ahora lo serán menos, el comportamiento salvaje habrá aflorado en los más desfavorecidos, el pillaje y la envidia serán las nuevas leyes que se impondrán en la tierra devastada...

El anciano comienza a toser y luego se lleva una mano a la cabeza, donde son visibles los moratones causados por el granizo. En su rostro, una venda sucia, que oculta unos ojos que hace tiempo dejaron de ser útiles.

Conrado se levanta ayudado por minte y wyric gracias amigos acompañado por ellos se deja arrastrar allá dónde le lleven...

La llegada de Vrank, con sus ropajes oscuros, justo cuando el niño les señalaba el cadáver, trae a la mente de Rether la imagen de un cuervo.

-Vrank, tienes trabajo. Te ayudo a llevar a ese pobre difunto al carro.

Después, colabora con Minte y los demás en buscar todo aquello que les pueda resultar útil: ropa seca, comida, mantas, herramientas...

-Si claro Ernestus ... digo ayudando a levantar a Conrado ...

-Vamos Conrado ... te subiremos al carro ... y te llevaremos a la Iglesia ... quizás allí se encuentre alguno de tus hombres ...

Lentamente para no hacerle hacer movimiento bruscos salimos hacía la Plaza en donde se encuentra el carro ...

-Meeus ... ayuda a Ernestus ... no se conoce esta zona y necesita ayuda ...

Vuelvo a aparecer por la puerta procedente de la Plaza y al ver como Meeus aún seguía buscando y no me había hecho caso en lo de ayudar a Ernestus resoplo y niego con la cabeza mirándole ...

Me dirijo hacía Ernestus y cogiéndole de un brazo le ayudo a levantarse ...

-Vamos Ernestus ... ahora te toca a ti subir al carro ... así podrás descansar ... agárrate fuerte a mi ...

Me sentía orgulloso de como me estaba comportando ... ahora me necesitaban ... tenía que dejar de ser un niño y comportarme como un hombre ...

Me quedo esperando a que Ernestus esté preparado para empezar a andar ...

El anciano se levanta con ayuda del pequeño gran hombre en que se está convirtiendo Wyric. Desde luego no era un niño como los demás, no había más que observar al inquieto Meeus, cuya mayor preocupación era correr aventuras por todo lo largo del feudo...sin embargo Wyric...era distinto, quizá debido a haber sido criado por el viejo, o quizá porque su alma estaba predestinada a ser así, pero el chiquillo era trabajador y noble como el que más, su cabeza no paraba de plantearse soluciones a los problemas que pudieran rodear a su única familia...el viejo Ernestus y sus vecinos, los Sloderick.

-Si hijo mío, ayuda a este pobre anciano...

Una vez de pie, Ernestus acerca su boca a los oídos del chiquillo, y con voz seca habla.

-Wyric, no quiero montar en ese carro...la muerte lo ha reservado para sí...prefiero ir caminando, ven a mi lado.