Partida Rol por web

-¡Tranquilo, se lo que me hago!- y, disimuladamente, comencé a reducir la marcha para no alejarme tanto de mis dos nuevos compañeros, para nada quería verme como en la situación anterior, estar en inferioridad es un asco.

Era difícil seguir el rastro de aquella cosa verde, ya que era muy pequeña y se movía muy deprisa, pero era el único cabo al que podía agarrarme ahora mismo -Por cierto chicos..., puedo preguntaros ¿como habéis acabado aquí?- hablaba entre jadeos. Correr y conversar no era la mejor de las ideas, pero todo había transcurrido tan deprisa que apenas tuve un momento para interrogar a os dos nuevos portadores de la llave.

Tras una ardua subida por una escabrosa montaña terminada en pico afilado, el grupo pudo ver lo que tenía al frente, un tenebroso castillo cubierto por las brumas al final de un camino sinuoso de piedra que cruzaba lo que parecía ser un pantano. Sin lugar a dudas, ese lugar no era el más acogedor de todos ellos, pero allí era donde aquella criatura se dirigía.

No tarde en alcanzar a Archival, desde luego parecía que yo estaba mucho mas acostumbrado a correr que él... lógico. Mientras seguíamos el camino el rubio nos pregunto un poco sobre como habíamos llegado hasta aquí, fuera donde fuera aquí, se le notaba que le costaba hablar mientras mantenía la carrera.

- Es una historia... extraña. Ya te contaremos cuando no te cueste hablar, concéntrate en respirar apropiadamente por ahora.

Continuamos durante un tiempo llegando a una subida difícil que por mi parte conseguí subir a un ritmo decente, la práctica escalando daba sus frutos así que evidentemente fui el primero en llegar arriba aunque solo por unos segundos ya que me había ralentizado para adaptar mi ritmo al del resto. Desde donde estábamos podía ver un enorme castillo en la distancia.

- A mi ese lugar me da toda la impresión de ser donde un señor muy malo trataría de llevar a cabo sus planes con los muertos usando su caldero mágico -dije en cuanto Archival llego conmigo- Al menos ya no hace falta correr, sabemos donde ir así que no hay prisa. Es mejor guardar fuerzas.

-Vamos hombre, tampoco estoy en tan baja forma, ¿no?- quizá me había estado engañando a mi mismo todo este tiempo. Lo importante era que no había obtenido una respuesta, pero esto quedo eclipsado una vez alcanzamos la cumbre y  pudimos ver la enorme y terrorífica fortaleza ante nosotros -¿Enserio?, yo hubiera dicho que se trata de un hotel de cinco estrellas..., como sea, debemos continuar, ojo con ese pantano, si aparecen más Heartless lo tendremos más difícil para movernos- cogí aire con fuerza y comencé a descender por el camino. Por algún motivo, había asumido que yo lideraba la marcha, aunque siendo justos era el único que tenía un "propósito" en aquel lugar.

-Ya que parece que estamos en esto juntos decidme, ¿cuales son vuestras capacidades?, antes he visto vuestra destreza con la espada, e incluso hacer un poco de magia ígnea, ¿pero contáis con algún truco más?, es más que nada por elaborar una estrategia si nos volvemos a meter un una pelea-.

Levante un dedo para señalar el camino que cruzaba el pantano.

- Tal vez el camino este en buen estado y no nos cause mucho problemas -seguí de cerca a Archival, él era quien mas podría conocer este lugar y el que tenía razones para ir a ese lugar por lo que mientras no tuviera razones no me adelantaría- En mi caso no cuentes con magia de ningún tipo, se defenderme con un arma tanto a corta como a larga distancia. Pero si en algo destaco sin duda es en... bueno, no ser visto y moverme en general. Creo que me entiendes.

Al iba andando en silencio, más atento a su entorno que a sus compañeros. Con cautela comenzó a bajar montaña abajo siguiendo a Archival. Algo era muy raro, ese entorno se debería haber sentido muerto, desierto, sin embargo era todo lo contrario. Lo miró sobresaltado cuando notó que le habían hablado, y tardó unos segundos en comprender la pregunta que le hacían -Tengo muy mala puntería a distancia, pero si se acercan estamos bien - Respondió sonriendo, y volviendose de vuelta hacia el pantano -Soy el único que siente que hay algo raro aquí? -Sentía como si algo nos llamara directo a sus fauces.

-Ya veo, bueno, parece que tocamos palos diferentes entonces, yo manejo un poco de las dos cosas, tanto magia como esgrima- intente hacer una especie de giro con la keyblade para demostrar lo diestro que era, pero acabe haciendo un movimiento muy ridículo en el que el arma se me cayó al suelo -Eeeh..., es parte de un truco nuevo que estoy probando, consiste en distraer al enemigo fingiendo ser torpe para luego asestarle un golpe letal desde abajo- genial, primera impresión de diez.

Continuamos descendiendo en dirección al siniestro pantano -Si, a mi esto también me da mala espina, pero a fin de cuentas, estamos entrando en la guarida de un brujo malvado, tiene que dar mal rollo, ¿no?- intente relajar un poco el ambiente, a estos dos los había traído hasta la guarida del lobo, tenía que demostrar por lo menos que tenía las cosas bajo control, aunque no fuera así de verdad.

Tome una larga inspiración mientras Al recalcaba el hecho de lo raro que era este sitio, a mi no me lo parecía tanto en realidad.

- Imaginaciones tuyas, es tan solo un pantano que lleva al castillo algo amenazante -con las manos tras la cabeza mire de reojo el espectáculo de Archival guardando mis propios pensamientos para mi mismo, para luego suspirar

Mire el castillo en la distancia mientras avanzábamos, mientras lo hacia preguntas surgieron en mi mente ¿como podría conseguir mas poder? Antes había estado muy por debajo de las capacidades de aquel sincorazón, me había sentido débil y no quería sentirme así era algo que no quería volver a experimentar creía haberlo superado, creía ser lo suficientemente hábil o eso me había hecho pensar el struggle, que iluso por mi parte ese golpe de la realidad había vuelto a despertar mi deseo de mejorar pero en este caso era diferente, no quería aprender a blandir mejor un arma, quería poder puro... quería sentir como el enemigo se quebraba bajo cada uno de mis golpes, quería la fuerza que me faltaba.

El grupo se acercó al castillo, la caminata había sido larga y tortuosa, sin lugar a dudas el dueño del castillo o no salía demasiado de el o era de los que le gustaba dar caminatas largas y tortuosas a la hora de tirar la basura... quizás tan solo no le gustaba que los vecinos que no estaban dispuestos a dar caminatas largas y tortuosas para pedir un poco de azúcar se acercaran a interrumpir a la hora de las comidas.

La enorme puerta principal estaba abierta de par en par, como si estuviera esperando por algo; mientras que las antorchas encendidas connotaban que era cierto que alguien estaba viviendo en el interior de aquel castillo... probablemente alguien con una personalidad acorde con alguna de las opciones previamente presentadas.

-Bueno, pues aquí estamos.... ¿deberíamos entrar sin más?, no se, no parece la clase de lugar donde acogen amablemente a los viajeros extraviados- algo me decía que estábamos entrando en la boca del lobo, solo nos faltaba una manzana en la boca y ya seriamos la carnaza perfecta.

Trague saliva, mire de reojo a mis compañeros, y eche un rápido vistazo a la entrada de aquel lugar.

¿Nos estaba esperando? También existía la posibilidad de que ese bichejo se dejara la puerta abierta... ¿a quien pretendía engañar? Seguramente ya había avisado a su amo y sabía que vendríamos.

- Una suerte que no seamos viajeros extraviados, debe estar esperándonos...

Con las manos en los bolsillos mire a todos lados buscando cualquier cosa fuera de lugar, principalmente otra entrada que no fuera la principal digamos que no me gustaba la idea de hacer las cosas como otros podrían esperar, manías de ladrón y escapista.

-Pues como ustedes no vean otra opción... - La niebla del pantano hacia difícil ver muchos detalles del castillo, y aunque lo intentaba no lograba ver absolutamente nada más que la gran puerta que tenían enfrente - No nos vamos a quedar afuera después de venir hasta aquí - Se cruzó de brazos, recargándose en su llave espada. Tampoco tenía mucho sentido ser sigilosos si el bichejo ya había avisado que venían. Una idea se le fue formando viendo las piedras del camino.

-Oye chicos, no os lo había preguntado antes ya que nos hemos conocido en una situación un tanto movidita pero..., ¿de donde venís?, quiero decir, ¿vosotros también habéis viajado por uno de esos portales no?, supongo entonces que vendréis de alguna otra parte- no había conseguido ver nada sospechoso, y eso en un lugar como este podía ser peligroso, así que decidí distraer la mente con un poco de charla insustancial.

Aunque para ser justos, si que tenía curiosidad por saber más sobre mis dos nuevos compañeros, después de todo, aparecer justo en el lugar y momento apropiados después haber perdido a otros dos compañeros... parecía cuanto menos sospechoso.

Mis ojos se pararon en un punto concreto mientras analizaba todo el lugar al detalle*, realmente estaba prestando poca atención a lo que hicieran tanto Archival como Alphonse, al menos así fue hasta que el primero hizo preguntas por nosotros dos y de donde veníamos. De inmediato mire al peliazul buscando que cruzáramos miradas, en el poco tiempo desde que me había conocido podría saber perfectamente que era alguien mas bien... desconfiado podríamos decir por lo que decir cosas demás no entraba en mis planes.

- De un lugar lejano... -respondí de forma seca- Y no se de que portales hablas, vinimos aquí para hacer nuestro trabajo... acabar con Heartless. Eso es todo.

-Yo soy de Villa Crepúsculo - Contestó Al, totalmente ajeno a las miradas de su compañero, mientras seguía juntando piedritas del suelo. Solo levantó la mirada cuando escuchó a su compañero y ladeó la cabeza confundido - Portales? -

Se incorporó metiendo las piedras en su bolsillo y limpiándose las manos en la ropa - Tú de donde vienes? También viste al tipo raro? -

- Caray, perdón si he preguntado algo demasiado personal...- Nate parecía más distante con su compañero, uno de esos a los que no les gusta soltar demasiada información, un "tipo duro" como diría mama.

- Yo vengo de un lugar llamado Ciudad de Paso, un lugar bastante... aburrido, la verdad- Lo cierto es que recordar mi hogar me hizo sentir un poco melancólico, no sabía cuanto tiempo había pasado desde que me adentre en aquel portal con Rika y Akihiko, pero no debía de ser mucho ¿no? - ¿Entonces no sabéis nada de los portales?, tal vez fuera cosa de una de mis antiguas compañeras, se le daban bien los trucos de magia, en cuanto al tipo raro del que hablas..., ¿podría ser más específico?, me he cruzado con gente muy rara hasta llegar aquí- definitivamente estos chicos sabían mucho más que yo sobre lo que sea que estuviera pasando: conocen el nombre de nuestras armas, el nombre de esas criaturas,...

Tal vez sea buena idea tener un ojo atento a mi espalda, más de lo normal.

Para fortuna de los tres muchachos, el buen ojo de Nate al parecer había sido suficiente como para darse de cuenta de lo que parecía ser una nueva forma de entrar, a la altura de las aguas cenagosas de aquel lago, quizás una zona de embarcaciones, o quizás un desagüe demasiado grande, sea cual sea la opción, aquel lugar era posible para entrar sin que fuera demasiado evidente.

Me puse un mano en la cadera en forma de jarra mientras levantaba un dedo hacia alguna especie de salida o entrada que nos permitiría colarnos sin llamar tanto la atención. No me sorprendió la actitud tan confiada de Al hacia un perfecto desconocido,  aunque en realidad todos eramos desconocidos, en realidad se podría decir que lo esperaba era de esa clase de gente... el tipo de gente completamente opuesto a mi.

- Por ahí hay un sitio por el que podríamos entrar sin llamar al timbre de la puerta.

Deliberadamente ignore el tema de conversación actual, otros en mi lugar se sentirían perdidos, añorarían su hogar, buscarían volver, por suerte yo no tenía nada a lo que volver.

-Je, Villa Crepúsculo esta bastante bien, aunque la gente... tiene habitos muy arraigados - Completo encogiendose de hombros después de pensarlo un rato. Todavía estaba fresco en su memoria la corrida que le pego la señora del perro después de que accidentalmente mojó su diario matinal mientras limpiaba. "Fue un accidente" Se repitió para sí sonriendo con el recuerdo, había sido divertido.

-No se que es un portal exactamente - Aclaró observando hacia donde señalaba Nate. - Vamos entonces - Sin pensarlo mucho se encaminó hacia el desagüe o lo que fuera que fuera ese gran hoyo en la pared.