Partida Rol por web

Ángela llega al lugar donde habían quedado para cenar, tras una más que reconfortante ducha y una pequeña y reparadora siesta. Había sido un día algo largo, y era la hora de despejar un poco la mente, y poner en común las cosas que habían averiguado. Guardó en el bolso el número de don Damián, quien probablemente podría resultar una más que interesante fuente de información, y que con una palabra cariñosa y una sonrisa sugerente, caería a sus pies sin problemas.

La abogada apareció en el restaurante ataviada con un vestido de color negro que se ceñía perfectamente a su bien perfilada figura. Su vestido terminaba justo a la altura del muslo, dejando ver una largas y esculturales piernas, firmes gracias a la magia de un tacón de vértigo.

Según llega saluda a Isabel.

- Buenas noches señorita Blanco...

Con un vestido azul celeste ceñido os espera copa en mano en la barra del bar, tiene un escote palabra de honor, y llega hasta los tobillos con una apertura en medio del mismo que permite ver las moldeadas piernas de la secretaria.

- Buenas noches … cuando estemos todos nos actualizaremos con nuestros progresos, mientras tanto por favor pedir lo que queráis que están terminando de ponernos la mesa, he solicitado un cambio de salón de última hora para poder estar más cómodos … he visto por ahí a la Tuna y no me gustaría que nos estropearan la velada …

(de fondo oís … )

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Efel entró en el lugar, perfectamente arreglado como siempre se espera de él, y cuando ve a las chicas solo puede sonreir cortésmente antes de ir a saludarlas como se debe. Cuando llega a la Srta Blanco le dice al oido:

- ¿Podríamos hablar luego en privado? - En un susurro amistoso. Era raro en Efel esa simpatia, contando que era un hombre algo reservado y taciturno.

Luego de la respuesta de Isabel se sentó en la mesa con el resto.

- ¿Que tal el dia?

- Claro cuando quiera señor Efel

Él la mira fugazmente, con cara de "llamame Samuel" antes de seguir escuchando al resto.

Luego del encuentro con Cifuentes, me dirigí al restaurante así como estaba, de camisa sin corbata y un saco medio desprolijo. Al fin y al cabo, me habían tomado desprevenido, o al menos la hora lo había hecho.

Sin hablar demasiado en el viajecito, arribamos al lugar donde nos esperaban una secretaria y una abogada que obligaban a voltearse cuando pasaban al lado de uno.

Madre, parece que lo hicieran a propósito

Con un gesto de la cabeza en forma de saludo me paré frente a los que habían llegado.

-Bueno, acá estamos-

Buenas noches a todos. Disculpad el retraso pero se me fue la hora, ya ven, soy un poco despistado-dije bromeando a la par que me sentaba en la mesa.

En teoría Mario debió de llegar con Horacio o tan solo unos minutos después por lo que Isabel una vez todos en la mesa :

- Bueno ya que os he reunido yo, empezaré a contaros lo que he sacado en claro desde el despacho, la idea es que nos pongamos al día durante la cena, pero luego quienes podáis o queráis nos daremos una vuelta por la ciudad de Cervantes para conocernos mejor, creo que hacer un buen equipo y afianzar nuestra confianza en nuestros compañeros será la clave del éxito … (mira a cada uno de la mesa) … bien lo dicho , hoy la verdad es que el día no ha sido muy propicio pues he tenido que tratar también otros temas pendientes ajenos e este caso, pero al menos he sacado alguna cosa en claro sobre la muerte de Don Manuel, al parecer de las cámaras que hay en el palacio ninguna ha conseguido grabar nada sobre el posible autor, es más apenas hay imágenes de Manuel ese día, he estado realizando algunas llamadas y al parecer han tenido problemas técnicos muy a menudo, por lo que la manipulación por parte del autor la descarto, sobre el caso de los asesinatos tanto el de Manuel como el de Jaime, están asignados recientemente a un hueso duro llamado Raúl Santillana, este hombre perteneció a cuerpos de élite dentro de las fuerzas de seguridad nacionales, y ahora forma parte de la policía Nacional y se encarga de casos homicidas de cierta importancia o dificultad, esto complica las cosas salvo que nos granjeemos la amistad de Raúl, ya que los contactos de la policía que tiene el palacio no están en el caso y ni si quiera simpatizan con Raúl …

Hace un gesto al camarero …

- ¿Vosotros qué tal os ha ido?

Sentado e impaciente por la llegada del camarero, me dediqué a oír el breve informe de Blanco. Cuando lo pidió, me dispuse a presentar el mío.

-Personalmente, me dediqué a hablar con los vecinos del edificio. Con uno en particular. Me la señalaron como la cotilla del lugar, Florencia Maures. Al parecer, mantenía relaciones carnales, tal vez amorosas, con el portero, ta que está viuda. Lo único que pude sonsacarle es que posee la llave de la portería. Además- comencé con una seriedad aún más grave -recibí ciertas "señales" de una atracción física hacia mí por su parte. Puede ser favorable, pero si no tengo que prostituirme por información tanto mejor- sentencié directamente.

-¿Se puede fumar acá?-

Bueno, por mi parte no ha habido mucha suerte...quizas mañana pueda conseguir algo del despacho de Don Manuel. Pero creo que mi compañero tubo alguna complicación asi que no se eso será tan facil. De todas formas iré a ver si no hay algo por donde empezar. Creo que esta va a ser una prueba muy dura...-dije quedandome pensativo.

- Bueno Horacio, no creo que sea un problema para usted satisfacer a una buena vecina sin tener que sentirse prostituido (comenta divertida a la que guiña un ojo), si ve que es mucha mujer para usted siempre puede llevar ayuda (mira al resto de galanes de la mesa) o sino hacer uso de alguna farmacia (cambia a un semblante serio y añade) elija el método que elija no se exceda no queremos que ese edificio quede desierto …

Se sirve un poco de vino en la copa, mira nuevamente a cada uno … con una dulce sonrisa en la cara responde a Don José …

- No se preocupe padre, es normal que no le faciliten el acceso a ese despacho después de lo ocurrido, lo que si me gustaría (mira a Sammuel) es que por favor ser lo más discretos y correctos que podáis y ante todo que no os relacionen directamente con esta investigación, en ese seminario hay mucho peso y muchas orejas al servicio de grandes cargos dentro del clero … (mirando nuevamente a Sammuel) señor Eff … Sammuel podrá decirme lo ocurrido si quiere en la charla privada que tenemos pendiente, salvo que vea oportuno que el resto de compañeros lo sepan.

- ¿A la encantadora pareja como le ha ido? (dice mirando a Keko y Ángela)

Efel se encoje de hombros:

- Lo que pasó es facil de explicar: El tipo estaba haciendo ruidos sospechosos en un despacho que pensé que era el del tipo al que buscabamos, y encima estaba el despacho cerrado. Para cuando abrí la puerta de un empujón, me di cuenta de lo ocurrido... Un pequeño descuido que no se repetirá. Ya hablaremos luego...

Ángela sonría ante el comentario de la señorita Blanco y le dedica una tierna mirada a Keko.

- Nosotros estuvimos charlando muy animadamente con un más que colaborador notario llamado don Damián. Creo que es una vía interesante ya que no solamente era amigo personal de don Manuel, si no que conoce personalmente a Raúl Santillana, al cual parece tener en una gran estima.

Ángela mira a Horacio y sonríe tímidamente.

- No sé amigo mío que sucederá en ese edificio, pero parece que la temperatura se les sube cuando tienen visitas...

(Riendo tras el comentario de Ángela ...) - Vaya cuándo todo termine quizá tengamos éxito como una agencia de contactos en la calle libreros (dedica una divertida pero a la vez sonrisa a Horacio) creo que vuestros encantos nos pueden ser muy útiles para sacar más información de ese edificio, y en cuanto al notario la verdad es que creo saber a quien te refieres, pues investigué acerca de los vecinos del edificio, y la notaría me llamó mucho la atención, me alegro de que exista una conexión tan buena entre tu y el notario (guiñó a Ángela) quizá el pueda facilitarnos la manera de llegar antés a la información que está manejando la policía (mira el escultural cuerpo de Ángela) cielo si tienes que ser algo mala con él lo entenderé (sonríe abiertamente) y ya sabes lo mismo que le he dicho a Horacio (mira a Horacio nuevamente y mordiéndose el labio y guiñándole un ojo) si necesitas refuerzos no dudes en utilizarlos …. (con una sonrisa de oreja a oreja y mirando a Sammuel) tengo ganas de fiesta, creo que ya no tomaré nada más, voy a ver si me da algo el aire, cuándo quieras puedes salir y hablamos Sammuel … te espero (guiña un ojo y se levanta de la mesa) de hecho os dejo a solas para que debatáis en mi ausencia os espero fuera a todos y quien quiera salir de fiesta podrá acompañarme … os invito (sonrie nuevamente y se gira para comenzar a andar)

Se marcha con un andar alegre, y se detiene a la altura de la Tuna que les da algo de conversación y algo de dinero, tras eso la Tuna va detrás de ella y salen juntos del local …

Bueno, parece que me he quedado un poco fuera de lugar aunque casi lo prefiero, la verdad, no estoy seguro de que me gusten vuestros metodos. En fin, me gustaria usar metodos mas eticos pero bueno supongo que es su trabajo. Me alegro igualmente de compartir esta cena con todos ustedes y me alegro tambien de que sepan algo mas de todo este asunto.-Dije sonrriendo, con algo de desaprobación con el tono que un padre usaria con sus hijos.

Madre mía, ¿dónde estuve metido todos estos años? pensé mientras procesaba los guiños y las miradas insinuantes.

-A veces, don José, sólo a veces, el fin, justifica los medios- expliqué brevemente. -Ahora si me disculpan, me retiro por esta noche- dije mientras me levantaba y daba un saludo general con la cabeza.

Salí del restaurante viendo como a Isabel la precedía la Tuna. Encendí un cigarrillo y comencé a disfrutarlo, mirando la calle, la Luna, las estrellas. Mirando lo que allí hubiera.

Envía en privado lo que quieras comentar a Isabel ….

Ves como una vez fuera ,la tuna se dirige hacia la plaza Cervantes mientras Isabel les mira divertida como marchan, cuando se da cuenta que sales por la puerta y te diriges hacia la parte del hospedaje vecino, se despide cordialmente de ti y te desea un buen y merecido descanso.

Samael sonríe:

- Chicos, necesito tomar el aire y hablar con Isabel de unos asuntillos... - Y se levantó de la mesa para ir fuera con ella.