Partida Rol por web

Está acusado de ser Heinz Gerber, un notorio jefe fuera de la ley que lidero a otras escorias para cometer robos, asaltos y otros crímenes contra la gente honesta de esta región durante los pasados cuatro meses. ¿Que tiene que decir para defenderse?

Yo.., yo pido clemencia, señoria. Porque ¡No soy el hombre que dice que soy!

Mi nombre es Emmerich Handler, no Heinz Gerber. Por favor perdóneme la vida señoría y me marcharé de estas tierras.

La expresión del capitán hace ver a leguas que no cree las palabras del prisionero y añade:

¿Que pruebas tiene de su inocencia?,¿Quien vendra y confirmara sus afirmaciones?

La historia de Myrcella es muy propia de los humanos, padres despreocupados que tienen demasiadas bocas que alimentar y que deciden desentenderse de sus vástagos entregandolos a la iglesia. Nunca entendería a los humanos, aunque es cierto que en sus ciudades se nota que no tienen un control de la natalidad adecuado ... a un paso de esos sucios pieles verdes. Estaba pensando en esas sucias cosas cuando Myrcella me alcanza una bolsa de monedas, durante un segundo pienso que he podido extraviarla, pero no soy proclive a extraviar cosas ... respiro pausadamente ... - Parece, que no solo voy a tener que cuidarme del oro que brilla en la oscuridad, cojo la bolsa y niego con la cabeza poniendo voz seria, - No esperaba esto de usted señorita Myrcella, no se como son en su comunidad pero en la mía ... eso no se hace. 

Tras lo ocurrido con Myrcella, poco ánimo tengo para seguir con la charla. Solo esperaba llegar a la posada y terminar con la misión que nos había reunido. El alborozo en los alrededores es generalizado, parece que el juicio ya ha comenzado y por lo que podemos ver la cosa pinta mal para el hombre enjaulado. Es una oportunidad la que tenemos en caso de que queramos evitar ver al pobre hombre ajusticiado. Entre la gente que rodea el cadalso, alzo la voz, ya lo había hecho en salones de enanos y esto no era un salón de enanos.

- ¡Capitán!. ¡Yo recuso sus afirmaciones y aquí tengo las pruebas que solicita!. Señalo a la mujer. - Ella puede dar fe de la identidad del hombre y trae un papel que lo demuestra. 

Mi ingeniosa broma no le hizo gracia a Maese Mordrin por lo que traté de pedirle disculpas y prometí no volver a actuar así, al menos no en su presencia. Aún así durante el resto del viaje el enano estuvo dándole vueltas y me sentía mal por ello. Empezaba a sentir que era un buen amigo y no quería que eso cambiase.

A medida que nos acercábamos al muelle los nervios empezaron a aflorar, en especial los de la mujer. Otto trató de tranquilizarla y la confortó con sus palabras. Tras bajar de la barcaza y pagarle al barquero nos apresuramos a llegar hasta la posada. Se vislumbraba un gran revuelo y muchas gentes habían acudido al lugar.

Con tanto murmullo y gritos no éramos capaces de hacernos escuchar por lo que se me ocurrió subir a una enorme roca y una vez me coloqué de pie silbé con todas mis fuerzas apoyando los dedos en mi lengua.

¡¡Shhuuuuuuuuuuuiiiiiiiiiitt!! - se escuchó con gran estruendo haciendo que la gente se girase y consiguiendo llamar la atención. Haciendo el gesto de querer hablar y de que prestarán atención la gente fue guardando silencio y los murmullos se apaciguaron.

Justo en ese momento escuchamos la voz del capitán dirigiéndose al reo y preguntándole que pruebas podía aportar y quién vendría a confirmarlas. El enano habló y yo volví a reafirmar sus palabras.

¡Está mujer es su esposa y puede testificar en su favor! Trae documentos que avalan que ese de ahí no es Heinz Gerber sino Emmerich Handler. ¡Su señoría! Compruebe al menos si es verdad o no lo que afirmamos antes de hacer bailar a ese hombre junto a Morr

Nuestras palabras habían sido claras y la gente empezó a dudar de todo lo que estaban a punto de hacer. La mujer empezó a andar hacia su marido bajo la atenta mirada de todos.
Confiemos que sea suficiente. Esa hombre merece tener una oportunidad...

Elevo un poco la voz para hacerme oír sobre el murmullo de la gente reunida en la plaza y ganarme su favor .Seria interesante saber que pruebas tenia el que le acuso y si le movía que se hiciese justicia o cobrar la recompensa atrapando al primer desconocido que se encontró en su camino ..Señalo a a varios ciudadanos .Pensad que podrías haber sido vosotros , llegar a un pueblo siendo un extranjero y que de repente te golpeen , te encierren y te condenen a muerte .Que aunque clames por tu inocencia nadie te haga caso y todo eso sin mas pruebas que la palabra de un esbirro que cobra por presa .Pues bien, nosotros si tenemos pruebas de su inocencia como dicen mis compañeros;si no os vale la palabra de su esposa y la nuestra que hemos estado en su casa también tenemos una carta del templo de Shallya en Gersdorf .

Una parte de mi segía sin poder creerlo, habiamos llegado a tiempo. Y por lo que parecía el discurso de Otto había calado hondo en la gente. Al menos podríamos probar que ese no era Gerber, pero mi paranoia seguía trabajando. Solo esperaba que el cazarrecompensas no intentara nada raro, pero por si acaso, escoltaría a Heidi hasta el patíbulo para entregar la carta.

No te preocupes.- le susurre mientras la ayudaba a avanzar.- Estaré a tu lado en todo momento, ahora debes salvar a tu señor esposo.

Y observé rapidamente a la multitud por si alguien intentaba hacer alguna estupidez.

La mujer observa horrorizada como su marido se encuentra en el cadalso y  comienza a llorar desconsoladamente. La mujer toma del brazo a Konrad y avanza entre la multitud dando traspiés hacia el capitán.

Los ojos del reo se encuentran con los de la mujer y parece que respira aliviado.

Yo soy Heidi Handler y he venido desde Gersdorf para demostrar la inocencia de mi marido Emmerich. -dice señalando al reo con el dedo.- Doy gracias a Verena para que el camino de estos caballeros se cruzarse con el de mi pobre Emmerich..., Y si alguno duda de la veracidad de mi testimonio aquí tengo un documento expedido por las Shallyanas que lo acredita es entonces cuando de su vestido saca una tira de cuero con una paloma blanca grabada en ella.

La multitud se empieza a agitar con las palabras de la mujer y el gesto del capitán se tuerce en una mueca de sorpresa mientras el cazarecompensas os fulmina la mirada.

Tras unos segundos de confusión, el capitan se vuelve hacia Lars y le abofetea en el rostro.
 

Vuelve a malgastar mi tiempo Lars...-dice con voz seca el capitán.- y seras tu el que cuelgue de una soga la proxima vez...

Después dirigiéndose a sus hombres:

¡Soldados liberar al prisionero y y pongamos rumbo al oeste pues otros quehaceres más importantes nos esperan allí! -tras decir esto montan en sus caballos y abandonan la plaza en dirección oeste sin tan siquiera disculparse ante los Handler.

Los  vigilantes bajan a Emmerich del pequeño banco donde se encontraba y sueltan sus muñecas de la cuerda que las sostenía. El hombre corre a abrazar a su esposa y se estalla en lágrimas.

Gracias a vosotros sigo vivo…-dice el hombre mientras las lagrimas corren por su cara y sorbe por la nariz.- No tengo como pagaros esta deuda de vida salvo con las puertas de mi casa abiertas para ustedes.- después dirigiéndose a la mujer añade.- Cariño al menos tenemos unas monedas para invitar a comer a mis salvadores ¿Verdad? -Ella asiente todavía con los ojos húmedos y una sonrisa de felicidad en el rostro- ¡Pasemos a la posada y sellemos nuestro reencuentro con salchichas hervidas y cerveza!, pues apenas he probado bocado mientras estuve en agujero.

Unos minutos después os encontráis sentados en una mesa mientras el posadero todavía asombrado por lo vivido anteriormente os sirve una bandeja llena de embutidos, salchichas y col hervida, todo ello regado por jarras de cerveza que ya se empiezan a acumular sobre la tabla de roble que hace de mesa.

FIN DEL PROLOGO.

Bueno al menos esta vez he conseguido que un pobre hombre no sea aplastado por el sistema legal del imperio .Sonrío satisfecho hasta que recuerdo que esa frase era algo que solía decir Ernest. Espero que su negra alma se pudra con el resto de su cuerpo .
Me pongo al lado de Konrad con la mano sobre la empuñadura de la espada mientras clavo la mirada en el caza-recompensas.
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Durante la comida en la taberna entre bocado y bocado el hombre nos agradece nuestra ayuda .No íbamos a dejar que un hombre inocente fuera colgado . Y tengo que decirte que te lo has tomado muy bien yo hubiera tenido unas palabras con ese cazarecompensas y con la gente de este lugar . digo elevando ligeramente el tono para que lo oiga posadero .

Nuestras interrupciones van haciendo que el clima festivo ante la ejecución se vaya crispando, durante un momento temo que seamos objetivos de la ira de la muchedumbre. Son la facilidad de palabra de Otto, mas el discurso sentido de Heidi y el escrito sellado por las Shallyanas, lo que decanta la historia a nuestro favor. Por la reacción del capitán, estaba claro que le habíamos destrozado tanto el espectáculo como su palabra, y no parecía un hombre al que le gustara que eso pasara. Su reacción ante el caza recompensas era de esperar.

- Buen trabajo Otto, mucho mejor que el trabajo de un caza recompensas ... que solo piensa en sacar oro.  

Aunque nuestras acciones habían sido desinteresadas, recibir una recompensa ... aunque fuese una comida caliente y unas cervezas era algo que agradecer, por flojas que fueran las cervezas. 

- Tras un trabajo bien hecho, es necesario celebrar ... pero sin pasarse. Aun recordaba lo hecho polvo que había quedado, tras la competición de hacía dos días. - ¿No conocíais entonces, al caza recompensas?. Nada pasa al azar y todo este asunto tenía mala pinta. 

La intervención de Otto fue fundamental para que la gente reaccionara a nuestro favor. Más de uno al verse interpelado y ser capaz de meterse en la piel del reo le hizo reflexionar.  Agradecí con la mirada y pulgar hacia arriba haber cambiado definitivamente las tornas.

El capitán se sintió decepcionado y visiblemente contrariado. Con quién descargó todo ese sentimiento fue con el caza recompensas que se llevó un buen guantazo. 

Te lo mereces...y más aún...ya me gustaría verte en el lugar del señor Handler...

Finalizado el acontecimiento, la gente fue despidiéndose...incluso unos pocos se disculparon con Emmerich y su mujer, entre ellos el posadero. El capitán y sus hombres ni se molestaron si quiera y Lars el caza recompensas nos miraba con verdadero odio. Sentí que no tardaríamos en tener noticias de él y a mi pesar, éstas no serias para nada agradables.

Celebramos la liberación del reo y disfrutamos de su contagiosa alegría. Hasta el enano se bebió un par de cervezas, las primeras tras la competencia, pero esta vez con moderación. Escuché a algunos de los aldeanos alardear de estar presentes cuando Maese  Mordrin batió el récord e incluso un par se atrevieron a felicitarle. Sonreí y me sentí feliz por momentos. 

¡Compañeros! ¿iremos juntos a Talabheim ahora que hemos cumplido nuestro objetivo? -  pregunté al grupo.
Señor Handler, me gustaría acompañaros de regreso a Gersdorf  pero siento que me he demorado mucho ya y debería regresar. ¡Confío en que estaréis bien!¿cierto? Dadle un abrazo a la pequeña de mi parte- dije con una sonrisa al  mirar la feliz pareja.

Les deseo una buena vida... un nuevo comienzo después de esta dura experiencia...

Me percaté que en una de las mesas del fondo había una desconocida que nos miraba fijamente. No sabía exactamente cuáles eran sus intenciones pero no me parecieron una amenaza. La saludé desde mi posición y la invité a acercarse a nuestro grupo.

Al final todo había salido bien, se habia demostrado la inocencia del homre y ahora podría volver a casa con su familia. Parecía tan contento que ignoraba el trato que había recibido hasta ahora de esas gentes.

Yo habría quemado el granero... pensé con una siniestra sonrisa.

Pero la comida estaba caliente y la cerveza corría, eso me ayudó a divertirme con mis compañeros, durante unas horas al menos. Tocaba volver al camino.

Creo que deberíamos volver a ponernos en camino de nuevo.- comenté entre cervezas.- Aunque podriamos esperar hasta mañana, el camino por la noche puede ser peligroso, y la cerveza esta bien buena, ¿No es así maese enano?

Mientras la gente se dispersa defraudada por el desenlace de los acontecimientos, Styrine trata de ganarse el favor de algunos lugareños, de entre ellos un gesto que no pasa desapercibido para ella.

Una joven abraza con ternura a Josef el posadero y este devuelve el gesto con un beso en la mejilla de la joven, con astucia y algún truco que le enseñó la vieja, consiguió llamar la atención de la hija del posadero para que le sirviera un plato de estofado caliente gratis.

Aceptando humildemente la invitación volvió a la taberna de la posta deseando saciar su ya de por si gran apetito. El ambiente había cambiado las risas alegres habían sustituido a las canciones soeces de leñadores y cazadores, el olor a comida estofada había sustituido al olor almizclero del vino mezclado con grasa de oso.

Habiendo disfrutado de la única comida caliente que había tomado desde que partió de Reikland, Styrine se centró en el siguiente paso que debía dar, su marcha hacia el oeste.

Valorando sus opciones, Styrine no se plantea atravesar el Gran Bosque, demasiado peligroso y un pasaje en diligencia no se lo puede permitir, así que decide preguntar por viajeros que partan a pie hacia el oeste. De entre el ruidoso gentío de la taberna destacan los comensales de una mesa en particular, el recién liberado Emmerich comparte su alegría con su mujer y unos amigos, atraída por aquella imagen tan familiar y protectora, Styrine se dirigió hacia ellos.

- ¡Buenas tardes buena gente!...Disculpen la intromisión pero sentía la imperiosa necesidad de felicitar a los salvadores de herr Emmerich.-inclina la cabeza como gesto de admiración y continua mirando a Emmerich- Me gustaría ofrecer mis servicios como curandera al recién indultado, espero que los guardias no se cebasen con usted, mas si alguno de los presentes gustase prestar de mis servicios -dice desviando la mirada hacia el resto de los presentes- será un honor para mí ayudar a tan nobles personajes.

- No tan buena señor Konrad, pero a falta de otra cosa. El enano se encoje de hombros - Habrá que conformarse, ...no acaparéis las salchichas.

El ambiente era distendido y aunque el público no había obtenido lo esperado, no dejaban pasar que estaban en una posada. Así que no es de extrañar las cara nuevas que abarrotan el lugar, aunque si es extraño, que una joven se acerque hasta nosotros.

- Solo hemos hecho lo correcto, eso no da ninguna nobleza. No me fiaba de los desconocidos, no hacía tanto siquiera hubiese ayudado al hombre que ahora pagaba nuestras viandas.  - Y por suerte, en esta ocasión no hemos sufrido daños. Miro de arriba a abajo a la mujer que nos interpela ... ¿que buscaba? .... 

Cita:

.Uff , de nobles tenemos poco nosotros nos ganamos la vida trabajando y no a costa del pueblo.Replico un poco achispado por el alcohol que he tomado para celebrar esta pequeña victoria . De todas formas como ha dicho el buen enano cualquiera habría hecho lo mismo o al menos eso quiero creer .. Levanto la vista para examinar a la recién llegada .¿curandera, eh ?Mientras no quieras vendernos ningún remedio que apeste puedes sentarte