Partida Rol por web

Gálmaro se sintió complacido por las buenas maneras de su Hermana y le alegró el corazón, aun a pesar de declinar su oferta.

- Sn duda, son fuertes - le dijo a Raiza, cuando le hablo de los Barbaros. Quizas un pueblo tan fuerte, como los Enanos resistentes y quizas por eso los había elegido como inicio de la nueva era.

Tras las ultimas palabras de su Hermana y escuchar su propuesta Gálmaro le dijo:

- Esa sera su voluntad y seran los Enanos quienes decidan si reciben o declinan su oferta, pues les die la libertad de elegir, aunque nadie lo sepa. 
 Pero ten por seguro esto, mi pueblo ama crear obras, sean de metal, piedra o madera. Dales nuevos materiales y ellos los tomaran con gratitud. De eso estoy seguro.

Khalis aun observaba la reaccion de Raiza, si no fuera por la mascara que impedia ver su rostro, podria jurar que estaba con la boca abierta.

-Hermana, de nuevo me pones contra las cuerdas... No se si eres la mejor estratega que hay entre nosotros o es que realmente algo te impide escuchar correctamente nuestras palabras... Lo que si que tengo claro es que eres una hipocrita. Enloqueciste hasta el punto de bajar a la tierra cuando asesine a la elfa, y ahora que he hecho lo mismo con un protoss ni has pestañeado ¿Te parece mi raza inferior acaso? Tambien dices que los barbaros eran el unico amor que te quedaba... Y, ya no te digo que no pidieras ayuda, que hubiese sido lo razonable. Tu orgullo te impidio aceptar la ayuda que te ofreciamos.

Se encoge de hombros y mira a los lados, imitando confusion.

-Tu misma te has vuelto paranoica y piensas que conspiramos contra ti, tu eres la que nos insultas; a nosotros y a nuestros hijos y pones en tela de juicio nuestras opiniones. Tu misma eres la peor enemiga de tu propia raza, tu y los pieles verde. Lo demas que ves aqui, somos hermanos y cualquiera te ayudara en el momento que tengas el valor suficiente como para pedirlo.

Tengo valor suficiente para mandarte a la mierda Khalis, para ver que bajo tu mascara intentas intrigar con unos y otros haciendo tu voluntad. Tus seres no me importan porque jamas les he visto demostrar un sentimiento que valga la pena preservar, son como tu.

Soy orgullosa, es cierto, tengo el orgullo que os falta a muchos pero digo lo que pienso de vosotros de viva voz, no como otros que susurran en cuartos unos hermanos contra otros. Yo soy el rival mas duro que teniais, uno solo no podria conmigo.. la necesidad de poner opiniones en mi contra fue una extrategia brillante. Ademas lo has hecho sin que parecca que tu mano anda detras de los hilos...

Tengo una propuesta, puede que la unica que considereis sensata pero necesitamos un mediador. Todos nosotros. Necesitamos un juez justo que medie en nuestras disputas o todas las razas iran a la mierda una detras de otra. Pensar en ello... yo tengo otras cosas que hacer ahora....

 -madre? porque nos ignoras?- la voz volvio a sonar en la cabeza de raiza- no podras callarnos, pues tenemos parte de tu esencia en nosotros-

 honor, valor, hermandad, complicidad, pureza, union, son varios de los atributos protoss, te escribo desde el bajo que me a tocado venir a currar -.-

Raiza aparecio en su cuarto.- No os ignoro... se quien sois pero lo que habeis hecho me a apenado. Yo amo a todos mis hijos, y me hubiera ocupado de vosotros si hubiera sabido que estabais alli. ¿Comprendeis lo que os digo? 

Khalis nego con la cabeza.

-Y a pesar de todas esas palabras horribles y cargadas de odio que escupes yo mantengo mi ayuda. Mis protoss no se parecen en nada a mi, ya me encargue de que su caracter fuese diferente para no encariñarme con ellos y que pasaran... Bueno, este tipo de cosas. ¿No cumplen los estandares que tan orgullosamente proclamas? ¿Hermandad? Son mas que eso, toda la raza se comporta como uno solo, unen sus mentes y no sus cuerpos. ¿Valor? Con uno solo que caiga los demas estan dispuestos a perder su vida para que este no caiga en el olvido.

Volvio a guardar el cadaver del protoss en el bolsillo de su chaqueta.

-Yo no conspiro, ni muevo hilos, proclamo mis pensamientos generales en voz alta. Y comparto mis preocupaciones con quienes me las preguntan o con quien las quiere escuchar. ¿Cuantas veces he acudido a hablar con vosotros cuando estabais mal? Siempre ¿Y quien me ha buscado a mi para preguntar como me encontraba? Me sobran dedos en una mano... ¿Tu eras nuestra rival mas fuerte? Yo te pregunto ¿Rival para que? ¿Que objetivo es con el que rivalizamos contigo?No existe mas rivalidad que la que has creado en tu propia mente. Raiza, abre los ojos. Te alejas de nosotros, de una forma que hasta a mi me preocupa.

 -oh no madre, es todo mucho mejor asi, sentir este poder casi divino.... es... lastima que se acabe... o no... gracias a ti y a khalis existimos de una manera diferente al resto de las cosas, pero nacimos fuera de la linea del tiempo, al matar a sereana, no llegamos a existir, la energia que iba a influir a sereana extraida de ti y de serune quedo perdida, y nosotros muertos, pero al revivir a sereana, en parte fuimos revividos fuera del tiempo y esa energia vino a nosotros... ahora, tenemos poderes casi divinos, y lo mejor, es que no somos dioses, y los orcos nos reciben como a una raza aliada...les llevamos presentes y ellos creen en nosotros- una risa siniestra se escucho en tu cabeza- jaajaja... pensabamos que la energia que nos disteis, o que os robamos, se acabaria y desapareceriamos, pero invertirla en los orcos nos a mantenido con vida....

-para que ser una simple creacion en el mundo, pudiendo ser un ser extra planar- se hizo una pausa- es probable que el chollo orco se nos acabe y dejemos de existir, pero mejor existir poco y dejar huella, que vivir eternamente siendo uno mas...

- por cierto, el ataque a tu aldea, parece haber tenido en cierto modo el exito esperado... - y la voz callo.

¿Porque dices eso.?

Raiza le hablo con cariño, de alguna manera era su "hijo" tambien, su mano invento una caricia para el.- No voy a tomar reprasarias pero teneis que jurarme que no volvereis a atacar a los barbaros, ellos son hermanos vuestros tambien... yo os ayudare si lo prometeis.

Serune regresó del mundo finalmente, apenada, pero sin derramar más lágrimas.

Más discusiones.

Ella y Raiza. Medusa y Raiza. Airlia y Raiza. Khalis y Raiza. Estaba harta.

-Mediar entre nosotros...no debería ser necesario. ¿Te estás escuchando, Raiza? El rival más duro, ninguno podría contigo...ni tu con ninguno. ¡Por que somos iguales, ni más ni menos poderosos! ¡No deberiamos pelear ni discutir! Somos hermanos.- su voz es firme, no se eleva, solo se torna más vehemente.

Pero menea la caeza, discutir con Raiza es...perder el tiempo, gastar palabras. Mientras se aleja hacia un balcón, a una fuente dónde pasa la mano para ver el devenir de sus hijos, solo añade una cosa más, de pasada, sin verdadera importancia.

-El orgullo es debilidad, no es una virtud. El orgullo te impidió pedir ayuda, el orgullo te impidió salvar a tus hijos, quizá no hubiesemos podido hacer nada....quizá si. Al menos...no han muerto todos.-

La voz de Raiza se mostro suave y tranqui- Tu no eres nada mio Serune, lo fuiste...ya no. No quieres discutir mas... de acuerdo, no habra mas discusion. Nada dire, dejarme en paz. Soy orgullosa, malvada, mato a mis hijos con mi orgullos y lo que vosotros querais... no me importa ya nada de lo que puedas decirme. No voy a malgastar mas energias con vosotros, tengo otras cosas que hacer y ahora ¡DEJAR DE JODERME CON VUESTRAS MIERDAS!.- concluyo alzando la voz. Solo queria que la dejaran pensar y obrar pero no consegia que la dejaran tranquila ni para oir sus pensamientos. Sus hijos la necesitaban, tenia que ayudarlos y no aceptaria la ayuda envenenada de Serune.

El Señor del Fuego alzó las manos, apaciguando.

- Bien, dioses y diosas. Entonces está claro que nadie quiere discutir. La diosa de la Guerra no quiere que los demás nos entrometamos, aunque sabe de sobra que recibirá nuestra ayuda siempre que lo pida; asímismo, creo que es mejor que dediquemos nuestros esfuerzos para unirnos y averiguar más cosas acerca de esa fuerza misteriosa que ha surgido.

Dio unos pasos más por la sala. Sus llamas arrancaban destellos en el suelo y el techo, y lamían su armadura como cachorros insaciables.

- Ya sabéis de qué hablo. Hablo de esa Fuerza Oscura que ha movilizado la isla de Airlia, y la que habla con los Orcos. Debemos detenerla.

Su silencio me intranquiliza.- ¿Porque habeis dicho eso? Tengo preguntas que haceros y no podre protegeros si no casi nada sobre vosotros. Por favor... contestarme.

la voz no volvio a responder y al estar fuera del tiempo, era imposible localizarlos, o casi...

Raiza se sento en el suelo de su cuarto, tenia que pensar y tenia varias ideas. Tenia que ayudar a sus hijos pero tambien cuidar a los orcos y sacarles de la cabeza su mania de cazar elfo.

- Hay hacer que los no nacidos nazcan. Si tienen cuerpo en este plano dejaran el otro... son almas atrapadas en el tiempo.. solo hay que buscarles cuerpos... de alguna manera.

salió al fin de sus pensamientos y miro al resto de la sala a estado escuchando un poco ausente todo lo que decían miró a raiza con desden

mis hadas son retrasadas mentales?...pues parece que no les va tan mal...experimentan con cosas peligrosas  pero quizá eso les sirva después para defenderse mejor que otros...

miró después a tabahätta un poco preocupada

la verdad es que si, no se porque han movido la isla de sitio no lo llego a comprender que motivos les ha llevado a ello, mis hadas no sufrieron ningún daño eso es cierto pero no me gusta que me muevan las cosas de sitio sin mi permiso

dijo mientras se ponía en pie y la nube se desvaneció tras de ella, dio unos pasos por la estancia mientras caminaba con pasos cortos pensativa

podría devolverla a su sitio pero...seria un esfuerzo que ahora mismo no me puedo permitir...

No hay honor en sus juguetes, juegan con cosas que no entiende. Se va a lastimar... mas cuando viven en un arbol y juegan con cosas que provocan fuego... Tus hadas son retrasadas Airlia, mira como hablan... como crios de dos años.

Khalis se froto las manos con entusiasmo, investigar era lo suyo, los misterios su alimento, los enigmas el aire que respiraba.

-Cierto, tenemos que descubrir que otra fuerza puede compararse a la nuestra como para alterar nuestra propia geografia. Y si, nadie hubiese interferido desde un principio los no nacidos serian... Eso.. No nacidos de verdad.

Pero entonces Khalis parecio caer en la cuenta de algo.

Cita:

-Un momento... ¿Y como puedes saber tu eso?

- No me costaría moverla, si es lo que deseas. Pero quizás deberíamos de saber primero qué intenciones tenía esa Fuerza para moverla. Aún está alejada de la costa, así que sólo aquellas razas que dispongan de medios para navegar podrían atacarlas. Creo que los orcos aún no han aprendido, ¿no?

Cruzado de brazos, Tabahätta meditaba las palabras de la diosa de la guerra. No han nacido, así que hay que hacerles nacer. Era tremendamente lógico, pero se escapaba de sus conocimientos cómo hacerlo. Lo que más le preocupaba es que esas criaturas moraran en el Reino Inferior, y sus criaturas tuvieran que enfrentarse a ellas. De los orcos sabía qué esperar, pero ¿de ellos?.

- Hermano - dijo, mirando a Gálmaro - ¿Sabes si tus hijos han tenido encuentros con alguna fuerza desconocida?

Raiza sonrio.- No soy una de las hadas de Airlia... por favor Khalis no me subestimes... Se mas de lo que imaginas pero ahora ese no es el asunto. Estan atrapados y por tu reaccion veo que no es nuevo para ti tampoco, debemos sacarlos o alli actuaran por toda la eternidad a su antojo.

Los barbaros saben navegar pero estan lejos y son ahora muy pocos.