Partida Rol por web

Crónicas de Á: Tomo 0 - El Amanecer -

Tercera Edad

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26/10/2010, 17:46
Ghiskhaft
Sólo para el director

14 + 5 = 19

(Que mal las ultimas tiradas...)

- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: poder
Resultados: 1, 4

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26/10/2010, 19:12
Aildor
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: Poder
Resultados: 6, 6

Notas de juego

Poder para este turno: 5 (Actual) + 6 + 6 = 17 (Oh, yeah... Gracias a Á... xD)

 

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26/10/2010, 20:48
Director

Notas de juego

Sin mapa... pero Comienza el turno 26.

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26/10/2010, 20:49
Knhoss
Sólo para el director

No puede ser!!! que tirada tan horrible :(

Bueh, tenía 5 pp así que 5 + 3 +2 = 10 :(

Poco voy a poder ayudar...

- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: Poder
Resultados: 1, 2

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27/10/2010, 00:55
Elocc`iso
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: power!!!
Resultados: 4, 2

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27/10/2010, 01:02
Pyaray, The Whisperer
Sólo para el director

3 de poder !!! Arrrg no puede ser !!! xD

- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: poder
Resultados: 2, 1

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27/10/2010, 14:37
Luciel
Sólo para el director

tirada de poder

- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: tirada de poder
Resultados: 1, 5

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27/10/2010, 22:37
Director

Una luz descendió del cielo, una luz que brillaba más que el astro solar, más que las estrellas, y más que las divinidades que peleaban en Albur por un palmo más de tierra, era Á, que descendía de nuevo sobre Albur, una existencia invisible a los mortales, pero tan cegadora para el resto de dioses, que era imposible no percatarse de su descenso.

Tal vez venia a dar alguna explicación al robo de las coronas, tal vez venia a dar una buena nueva a los dioses de Albur, por lo que, las divinidades presentes se acercaron a él, al Gran Á, pero este mantenía la mirada fija en Albur y descendía a gran velocidad, atravesando los cielos, parecía apesadumbrado, y triste.

Los dioses siguieron acercándose cuando vieron que el Gran Á empezaba a tomar una vaga forma antropomórfica, y una mano etérea empezó a avanzar hacia el mundo. Todos se estremecieron, ¿Era este el fin? Á se habia cansado de mantener Albur, pero el descenso de Á no terminaba, seguía avanzando hacia un punto concreto de Albur, y fué Luciel quien abrió los ojos como platos, al ver que el Dios del Origen se situaba sobre la zona inversa. Luciel tembló, incapaz de interponerse a la voluntad de Á, incapaz de entender qué iba a pasar, incapaz de pensar que Á fuera a alzar su mano contra cualquiera de sus hijos.

Luciel se puso a su lado - P-p-pa-padre - Un collar rodeaba el cuello de Á, y sus muñecas, y sus brazos y cintura, sus hombros y codos, y de cada uno de los collares se extendían unas cadenas infinitas, de un azul vivo, lleno de ribetes blancos que se movían como espuma de mar, las cadenas desaparecían en las aguas de Albur, y el gran Á miró a Luciel con su pena más sincera.

Lo siento... Luciel.

La mente de los elementales se volvió más débil, más vulnerable.... algo se acercaba.

Cuando Á hubo alzado de nuevo la mano, las cadenas desaparecieron, y sin más explicaciones el dios de dioses ascendió para desaparecer de Albur con la vergüenza y remordimiento de sus actos.

Notas de juego

Corrupción de los Elementales: -4.

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27/10/2010, 22:39
Pyaray, The Whisperer

No tenía nombre, no lo necesitaba, él era un elemental, un elemental de aire, envuelto en volutas de vapor y dejando su carga eléctrica en pequeños y fulgurantes arcos filamentosos al avance de su movimiento, recogía lo que la marea de la zona inversa le traía del mar bellos objetos que diariamente recogía, como elemental que era, no tenia corazón, posiblemente ni alma, pero aún así, sentía una extraña curiosidad por el mundo que le envolvía.

El elemental alargó una mano y un arco voltaico trajo por electricidad estática una concha de enorme tamaño, su cabeza gaseosa entró en la concha inspeccionándola minuciosamente, ahí dentro sentía una muy agradable sensación, todo se escuchaba mucho más, mucho más amplificado, sentía el oleaje, el sonido de los guijarros al chocar del agua, también escuchó un muy extraño sonido, un sonido que no había sonado desde hacia miles de años

P'pp'ph'pL  P'p HL Lp'p'p'pp

Sacó la cabeza de la concha, y todo volvió a la normalidad, el murmullo habia desaparecido, miró a su alrededor y vió entonces entre las rocas, un misterioso fulgor azul, al acercarse vió una espada, y el murmullo volvió a repetirse, primero confundido con el arrullo de las cascadas de la zona inversa, pero poco a poco, creciente, como una cascada, como un río creciente que engulle el resto de la realidad.

P'p HL Lp'p'p'pp P'pp'ph'pL

El elemental sujetó la espada, y su cuerpo por un momento pareció desvanecerse, palabras de odio, repulsivas, de aversión, increpantes, palabras que jamás habian sido pronunciadas por un mortal en Albur y palabras que ni siquiera podian ser pronunciadas, y entonces... El Silencio.

El elemental metió la espada en su interior nebuloso, y a pesar del silencio de la espada sentía su nervioso palpitar, como arena rozando en el interior de su cuerpo que la sostenía con dificultad. Al volver a los anillos paseó entre sus congéneres, pero de manera diferente, pues se sentía culpable, por alguna razón se sentía culpable de llevar oculta la espada que acababa de encontrar, miraba a otros elementales con nerviosismo sin que el resto mostraran emoción ni sorpresa ninguna por su comportamiento. Durante el paseo, palabras de odio hacia todos ellos se filtraban desde su mente, pero no era la espada, era él mismo, era su voz, era su pensamiento

 ¿¿Porqué pensaba aquello??

¿¿Porqué Luciel permitía que un pensamiento tan atroz inundara su cabeza como marea negra?? Esto no podía ser Luciel

 

Cuando el elemental regresó a su cubil, sacó la espada y observándola... descansó, y los murmullos de la espada comenzaron de nuevo, el elemental observaba la espada y escuchaba esas palabras prohibidas, las palabras de la espada eran propagadas a través de la inexistencia, y estaban llegando más allá del elemental, otros elementales en sus cubiles cercanos empezaron a escuchar el murmullo, sintiendo un atrayente hipnotismo hacia algo intangible, hacia unas palabras misteriosas.

Durante días... semanas, un creciente número de elementales quedaba pegado a los murmullos de la espada, el elemental que la encontró yacía junto a ella, y en la puerta de su cubil habían una veintena de elementales que con los ojos vacíos miraban estupefactos la escena desde hacia una semana. Elementales de tierra, de rayo, de aire, de agua, Pyaray usó una moneda hace cientos de años que les otorgó a los elementales un gran poder, y ahora exigía la devolución por el poder otorgado. Exigía almas.

Y entonces, un dia, la zona quedó a oscuras, luna nueva, cielo oscuro, los elementales de ojos celestes, cubiertos de una extraña capa que recordaría a la ceguera, salieron de sus guaridas para mirar el cielo, ellos no veían las estrellas, tan solo veían el perfil de la luna nueva, oculta, oscura, agorera. A otro lado habia otra luna que estaba llena, era de un azul platino, como una gigantesca perla, una luna tan solo visible a aquellos que han sido cegados por el monstruo de las profundidades.

La espada tomó pulso, la luna le respondió, y las mareas se agitaron en todo el mundo, los elementales cegados se encontraban en un misterioso sopor, en el que escuchaban unas palabras tan nítidas y claras, tan seductoras y prometedoras. Se arrojaron sobre su propio pueblo, la espada encabezaba el ataque atravesando los anillos, atravesando las calles como un río, cantando cada vez que se clavaba en un elemental y disipaba su existencia, canturreando con un metálico tintineo

 

Los elementales no entendieron esto, salieron a las calles y vieron a sus hermanos, un elemental de tierra trató de calmar a su hermano, el fuego, pero este, totalmente cegado, se fundió con la roca, el gigantesco elemental de magma absorbía al resto de elementales alimentando su grotesco tamaño y su violento avance.

Habían enloquecido y ningún mortal parecía poder detenerles. Un elemental de agua rezaba a Luciel entre siseos y una sombra se proyectó sobre ella, cuando abrió los ojos vió al elemental de nubes con la espada azul, y antes de poder dar ni una sola explicación se vió atravesado y engullida su alma por la espada. Luciel oyó este lamento, y muy rápido descendió a Albur viendo la revuelta que se había producido ¿¿Donde estaba su Avatar para poner orden??

 

Ars-Kia corrió por todos los anillos, sus congéneres se estaban matando entre ellos, esto era una locura, ¿Qué podía desencadenar algo así? ¡¡ No tenia ningún sentido !! Luciel, furioso, poderoso y omnipresente descendió hasta la mente de su Avatar: ES PYARAY, ES LA ESPADA, BUSCA LA ESPADA, EL ACERO AZUL

La voz de Luciel estaba tan llena de ira e impotencia que Ars-Kia sintió un horrible y pegajoso dolor en su interior que logró superar para ponerse a buscar en el campo de batalla en el que se habia convertido la zona inversa. Muchos elementales huían de sus hermanos poseídos mientras otros luchaban por matarlos con el dolor y la pesadumbre de estar atacando a sus similares, imágenes clónicas de ellos mismos.

Ars-Kia empezó a sentir, por primera vez en la existencia de los elementales, la raza entera sintió, sintió miedo, la sombra de un dios malvado se cernía sobre ellos, caprichoso y ocioso manipulando sus pensamientos, sus anhelos... Ars-Kia bajó hasta el 3r anillo donde vió al elemental de nube, flotando cansado con la espada azul en sus manos. El Avatar de los Elementales se lanzó contra su congénere partiendole en dos, la nube se volvió a rehacer como humo y dió una sablada por detrás al Avatar que hizo hincar sus rodillas para quedar impotente observando todo a su alrededor.

El fuego aullaba, el viento ululaba, la tierra crujía y el agua se retorcía, dolor, miedo, ansiedad, era una pesadilla, una auténtica pesadilla imparable, tal vez los elementales no tenían corazón, pero sí alma, y ahora estaba siendo desgarrada la civilización entera, como un enorme rastrillo que pasa por la tierra apilando su etereïdad.

Notas de juego

Catástrofe, cae Alexandra, y todos sus anillos

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27/10/2010, 22:51
Director

Notas de juego

Catástrofe. Un poder de área de destrucción sin igual.

Efecto: Se destruyen Alexandría y todos sus Ejércitos. Para salvar las Ciudades, Luciel tiene 24hs a partir de este post para gastar el poder equivalente a una (10pp) y narrar un post de como sobreviven las Ciudades (que no los Ejércitos). El Avatar Elemental no sufre daño ni efecto.

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27/10/2010, 22:50
Elocc`iso

El Avatar de los Elementales se lanzó contra su congénere partiendole en dos, la nube se volvió a rehacer como humo y dió una sablada por detrás al Avatar que hizo hincar sus rodillas para quedar impotente observando todo a su alrededo...

El humo se amoldo a una forma humana, una forma familiar para el Dios de los sueños, una forma que tiempo atras le habia prometido fidelidad y sumision. Una forma que aun habitaba en otros lugares de Albur, lejos de los deseos de los dioses. Un forma que tambien servia a otro Dios, una forma compartida y muy familiar. Era El Naya.
Se acerco al Avatar arrodillado, aquel ser era capaz de comprender el cataclismo que estaba viviendo y menos aun comprendia que habia llegado su momento, el final de su existencia y peor aun, que dejaria este y los otros mundos, sabiendo que no habia cumplido su deber, no habia defendido su ciudad. Ahora seria uno mas entre las sombras de Yoonel y toda su gloria se convertiria en vergüenza.
Su rostro reflejo su pena. Su angustia.
Aquel Naya caminaba rodeandolo, con la espada azul en la mano, blandiendola, sonriente, seguro de si mismo. El Elemental no entendia como habia podido llegar hasta alli, que pecado habia cometido para tal resolucion.
- ¿Por que?- pregunto, aunque no obtuvo respuesta. Solo lo veia caminar, siempre vigilante por si trataba de huir. Pero las fuerzas lo habian abandonado y no si quiera, podia levantarse.
- ¿Por que? - repitio, casi suplicante, sollozando ante su destino. - No os atacamos - grito con desesperanza - ¡No os atacamos! - repitio intentando hacerse oir.
El Naya, se freno y entonces pudo verlo con claridad, no era un naya, en un Filo, un soldado de la elite de Elocc´iso y el temor fue mayor. Por leve que fuera su esperanza se desvanecio.

- Nadie trata de esconderse a las fuerzas de El Señor de los Asesinos - dijo la voz y la fuerza del timbre, resono por toda la sala. No era un Naya, no era un Filo, el que salto para cercenar a cabeza del Avatar de los Elementales, no era otro, si no el propio Señor de los Asesinos, el verdadero Dios de la Sangre, se abalanzo sobre el desgraciado que la ultima imagen que vio fue la de un Dios furioso y sediento de sangre.

El cuerpo decapitado quedo tendido en el suelo y la cabeza se la llevo, se elevo en los dioses y con su sangre, tiño una estrella que conmovida por el sabor a muerte, muto y se mostro de ahora en adelante como una estrella de brillante carmesi.
Elocc´iso volvio a su reino y con un grito que estremecio Albur le hablo a Luciel.
- ¡NADIE SE ESCAPA DEL DIOS DE LA SANGRE!

 

Notas de juego

Catastrofe. mato el avatar de los elementales.

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28/10/2010, 21:09
Luciel
Sólo para el director

El cielo, amplio y eterno relucía con la luz de las lunas de Albur, resplandecientes.
Pero de repente algo empezó a cambiar unas sombras, tinieblas del mas oscuro negro, tanto que parecía engullir todo lo que tocaba en una oscuridad eterna y sin fin tapo las Lunas y el plano celeste.
Unos rayos cargaban el ambiente, pero estos eran rojos como la sangre el cielo se volvió del color de la muerte mientras un pequeño hilo surgía trazando un circulo encima de alexandris y otro y otro y dio forma a un fenómeno que hacía años no se producía.

Era el velo, tan oscuro y poderoso como hacía años pero mas pequeño en su interior cabía la zona inversa entera.
Rayos y llamas surgieron de él y golpearon el fondo marino, estos danzaban destruyendo y hoyando el terreno como un látigo de miles de puntas estallando sobre la piel de un pobre desgraciado.

De pronto un ciclón comenzó en las nubes custodiado por llamas de hielo, nieve de fuego y rayos de viento fue bajando hasta la tierra y el velo cayo y cuando se disipo el tornado apareció el dios de las sombras Luciel en persona apareció allí mismo tan alto como la misma zona inversa una sola de sus palabras podría crear un huracán que destruiría kilómetros a la redonda. Y desde el interior de su garganta como una voz oscura. y tenebrosa, más fría que la muerte y mas aterradora que el miedo primigenio surgió

¡¡¡ Y LAS PAREDES DE LOS CIRCULOS Y LAS MAREAS ALREDEDOR DE LA ZONA INVERSA EMPEZARON A TEMBLAR ANTE EL ALIENTO Y LAS PALABRAS DE LUCIEL AMO Y SEÑOR DE LAS TINIEBLAS!!!

Como osais, como os atrevéis a mancillar mi terreno ,mi reino y mis criaturas con vuestra contaminada presencia .
Quienes pensáis que sois.

Tu ser del caos, bestia primigenia que disfruta con el dolor, a ti en primer lugar antes que el resto te digo que en un futuro, cuando los dioses no posean la tierra, padecerás el mismo destino que buscas para los mortales, tu poderosa espada, no será más que un cuento antiguo surgido de la época de leyendas custodiado y perdido para la humanidad.
Oh si pues sufrirás por ser olvidado en el mismo caos que tu provocaste
Y entonces levantando un dedo señalo al reino de Elocc`iso
Tu, Dios de los secretos, intrigante y mentiroso .
Durante siglos has vivido de los engaños y tramas ocultas, apuñalando al aliado e hiriendo al indefenso, levantando a las alturas a unos para momentos después hacerlos caer del más alto precipicio.
Tu qué crees que tu palabra es ley y con ella dictaminas quien vive o muere, bajo tu lengua cubierta por veneno, tan mortal como la daga más afilada.
A ti te nombro Elocc`iso,a ti me dirijo.
No me molestaras mas ni a mi ni a tus victimas de Albur ,tal vez no pueda castigarte a ti pero puedo destruir el corazón de los que lo mas amas y ahí asestare mi golpe mortal mi cuchillada como uno de tus asesinos degüella bajo la luz de las nuevas lunas.
Yo maldigo a los tuyos, tus seguidores tus iniciados y a todo ser que te rinde culto.

A partir de hoy todos y cada uno de ellos recibirán el veneno de Luciel ,la marca de la serpiente.
Y su piel caerá a tiras como la lepra, sus rostros llagosos contendrán miles de pústulas que nacerán desde allí al resto de su cuerpo.
Y entre estertores y gritos de dolor sufrirán un castigo que ningún entrenamiento, mente, ni cura podrá aplacar .
Y solo la enfermedad podrá esparcirse entre tus seguidores, pero estarán condenados a ser parias y renegados pues el resto del mundo jamás conocerán ese detalle y los rechazaran y los evitaran ,y a veces incluso acabaran con ellos por temor a ser contagiados.
Más aun pues la marca llevara consigo un aura de desconfianza y mentira que hará que nadie confíe en ellos jamás.

Y un gran salivazo del color del veneno de los reptiles salió del interior de los labios de Luciel.

Ese es tu castigo y maldición gran mentiroso ,es lo que mereces desde que viniste a este mundo.

Pero soy benévolo en el fondo y habrá una cura para ellos y un regalo entregado a A.
Si un mortal jura con un corazón puro fidelidad a A como su nuevo Dios y reniega de ti para siempre el Dios A podrá entonces mostrar clemencia y curar al individuo.
Pero este pertenecerá a A para siempre y no podrás intervenir en el jamás.
[B]Y si esos a los que llamas hijos gran mentiroso los nayas tambien seran entregados hasta el fin d elos dias a A,este es mi ultimo regalo a ti.

Y eso noe s todo ahora te toca a ti ,oh si a ti Gran A padre de todos los Dioses.
Tú me creaste me trajiste a este mundo para ser la perdición, la oscuridad y la corrupción sobre albur.

Mi corazón no quería comprenderlo, quería pensar que aun había amor en mi, que tu aliento me había dado esperanza.

Pero hoy miro en mi corazón y veo lo que verdaderamente contiene y es el mal si Padre supremo, es oscuridad y tinieblas lo que insuflaste en mi .
Me corroe por dentro me aplasta el pecho y destroza mis pulmones aquello que habita en mi ser, el vacio la muerte las tinieblas que me embargan .las mismas que dan forma a mi alma a mi espíritu.

No es amor lo que siento es odio,es rencor contra ti gran padre .Pues tu eres el peor de todos ellos ,te sientas sobre Albur como un titiritero esperando que seamos los actores y marionetas que den vida a tu función.
Pero no lo somos, yo jamás lo seré y por ello y por lo que hoy me hiciste por última vez yo reniego de ti A.
Y te digo que todo aquello que tu crees yo lo destruir y todo aquello que destruyas lo hare renacer de nuevo pues yo soy hoy tu nemesis.

Y te juro por el vacio primigenio que no descansare hasta que un dia mi trono este por encima del tuyo y solo seas un viejo recuerdo

Vosotros que creéis que podéis lastimarme os digo que hoy sacrifico la sangre y la vida de todos estos elementales que aquí habitan y con ellos su odio eterno a vosotros enemigos de Luciel señor de las tinieblas[/B]
Y los elementales de las ciudades de alexandris y sus anillos estallaron en un mar de sangre que envolvió como una corriente la zona inversa y las ciudades como brillantes estrellas explotaron en un haz de luz enviando el liquido de la vida por el cielo.
Y la sangre vertida se elevo convertida en maldición y una nueva constelación ilumino el cielo nocturno, la constelación del lucero del alba ,los 4 anillos y en su centro alexandris…

Notas de juego

Bueno hay te dejo el post y me miras como esta y si quieres cambiar algo.

La maldicion de la serpiente solo la padecen en principio los miembros d elas ordenes de El,pues son como sus sacerdotes...Despues se podria expandir,pero hay cura la pone en el post.

Lo de pyarai es una orden que creare mas adelante que se encarge de esconder la espada por todas las generaciones siguientes para siemrpe jamas para custodiarla,la idea es que no peuda haber ams armas que peudan contener a un dios.
Ambas cosas son solo transfondo para el juego que solo se pondra en efecto cuando la partida acabe(bueno la maldicion ya pero no afecta a las misiones ni nada de las ordenes solo es transfondo)
Es solo trama para el juego ,ninguna de las 2 afectara a la partida.

Sacrifico las ciudades y vidas elementales de las 5 ciudades y 8pps para hacer el evento de la maldicion.

El renegar de A y demas pues revela la autentica naturaleza del dios al mundo y digamos que se convuerte como lucifer en su nemesis...

Cuentame que te parece y lo publico o lo publicas tu como quieras.

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28/10/2010, 21:58
Aildor

Salem, el Gran Orador

Los años pasaron y los Har-Ail demostraron unas dotes inauditas para la oratoria. Su técnica se iba perfeccionando a lo largo del tiempo, y su poder de persuasión aumentaba a cada discurso que componían. Se habían vuelto elocuentes, capaces de persuadir o disuadir a quienes quisieran. Así como la espada de fuego, tenían de su lado la palabra. Porque la palabra era también un arma poderosa.

Así fue como Aildor se llegó a interesar por estos Har-Ail que debatían. Asistió en secreto a sus reuniones, escuchó con atención sus discursos, incluso se vio tentado a participar en ellos. Para eso escogió a una hembra Har-Ail y la impregnó con su esencia. Esa Har-Ail elegida se convertiría en la madre del leónido que más ha perdurado en la historia de la Cámara de Helos.

Salem, el Gran Orador enviado de Aildor, se convirtió en una importante parte de la Cámara de Helos. Participaba por su padre en los debates, discutía y aprendía con sus hermanos al mismo tiempo que se instruía. Llegó a convertirse en un gran estratega, no avezado únicamente a la oratoria si no también al combate. Con la ayuda de Mirlat instruyó a su propio ejército, la élite de los oradores. Los Paladines de Mármol, guerreros eruditos con grandes dotes estratégicas, capaces de decantar a su favor la balanza, o como mínimo equilibrarla.

Los Paladines de Mármol representan a la Cámara de Helos, son su brazo armado y su guardia, y también los dirigentes de los ejércitos Har-Ail. Gracias a la sapiencia de Salem fueron adiestrados para pensar fríamente en todo momento, para valorar las posibilidades y escoger siempre la opción más apropiada. Aquellos que son capaces de proteger a sus hermanos, aquellos que dirigen un combate con sabiduría son los verdaderos Paladines de la Cámara de Helos.

 

Azul heráldico (Fragmento de La Fuerza de la Justicia, de Gaham, Quinceavo Orador)

Si hay algo curioso en los Har-Ail es que cada uno de sus ejércitos es un mundo. Cada uno de ellos ha sido entrenado de un modo distinto, o para una finalidad u otra. Sin embargo, los más nobles y corteses de todos son los Caballeros Azur. Instruidos por Mirlat y entrenados para ser unos rivales dignos en el campo de combate. Los Caballeros Azur no luchan sólo por la justicia, si no que lo hacen por el honor. Son muy orgullosos, y es fácil ofenderlos, por lo que siempre están proclamando duelos para pagar todo tipo de afrentas.

Su trecho más característico visiblemente son sus brillantes armaduras de un oscuro azul. Llevan largas capas blancas y portan majestuosas armas forjadas por los mejores herreros de Alharei.  

 

Grifos de Esperanza (Fragmento de La Fuerza de la Justicia, de Gaham, Quinceavo Orador)

Desde que se establecieron en Alharei aquellos Har-Ail nacidos con la marca lo habían tenido más difícil para llegar a sus grifos. Año tras año se organizan partidas de varios aspirantes, que realizan un largo viaje y se enfrentan a la oscuridad de la ruinosa Ovidia. Los Har-Ail jóvenes se reúnen para aunar fuerzas, como una propia orden de caballeros. Hubo una vez un grupo, no demasiado numeroso. Eran 5 valerosos leónidos que se embarcaron en la gran aventura que supone ir a encontrarse con tu propio grifo. Es peligroso, pero a la vez emocionante. Los hermanos que nacen atados a un grifo gozan de una gran suerte. El vínculo de los Har-Ail con los grifos es muy fuerte, y ha perdurado durante muchos años.

Aquellos que comparten su alma con un grifo gozan de ciertos poderes especiales. Pueden ver a través de la visión verdadera de los grifos, son más fuertes, más resistentes. Grifo y jinete pueden sentir sus presencias, estén donde estén.

La etapa más dura de la vida de un jinete es la pérdida de su grifo. Si un jinete muere el grifo muere junto a él. Pero si el que muere es el grifo el jinete sigue viviendo, arrastrando con él todo el dolor que conlleva. Los grifos son naturalmente más longevos que nosotros, los Har-Ail, por lo que estas situaciones se dan sólo cuando el grifo resulta herido de muerte en un combate.

Pero aquellos 5 Har-Ail que fueron juntos a Ovidia aún conservan sus grifos, porque en su viaje sellaron un vínculo más poderoso que cualquier otra fuerza existente. Sólo los dioses podrían separar a estos jinetes de sus grifos.

En su viaje sortearon peligros, superaron difíciles retos, se internaron en las oscuras ruinas de Ovidia, que antaño había sido la ciudad de justos. Se dice que allí combatieron contra oscuras criaturas que se habían hecho dueñas de la ciudad. El ascenso por La Balanza fue sólo la parte más corta y leve del viaje. Volvieron en varios ciclos lunares, los 5, montados en sus majestuosos grifos. Trajeron consigo historias y aventuras que se transmiten ahora de generación en generación. Ellos 5 fundaron el más glorioso de nuestros ejércitos. Los Jinetes de la Esperanza, porque sobre sus grifos nos brindaron un nuevo camino. 

Notas de juego

8pp Crear Avatar: Salem, Gran Orador
1pp Comandar Avatar (Salem): Intento de avance "Estrategias de combate, Ataque +1"
1pp Comandar Avatar (Salem): Crear ejército "Paladines del Mármol"

1pp Comandar Avatar (Mirlat): Crear ejército "Caballeros Azur"

2pp Comandar Ciudad (Alharei): Crear ejército "Jinetes de la Esperanza"

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28/10/2010, 22:13
Director

Notas de juego

Te pido disculpas, no miro mucho esta escena pues resuelvo dudas en las otras; esta la reservo para leer con cuidado los posts (algo para lo que tengo tiempo muy de noche y cada tanto).

Por eso mismo te aclaro, no leí tu post en realidad, solo lo ojié más o menos.

La maldición sería un evento? Ok, 8pp me parece bien.
Quedamos entonces en que no hay efectos mecánicos? No entendí bien eso.

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28/10/2010, 22:17
Luciel
Sólo para el director

Si es un efecto fuera de juego posteo yo o tu???

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28/10/2010, 22:26
Director

Notas de juego

Tú eres el autor, postealo, claro.

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28/10/2010, 22:32
Luciel
Sólo para el director

.Lo hare en un rato entonces
Esq no m dja copiar y pegar dsde el movil

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28/10/2010, 21:39
Jeldhor, el errante

Hace 3 meses

Los Ocho se reunieron en el Corazon, era la hora señalada por los Oraculos, en los siglos de vida de la ciudad flotante nunca se habia producido algo asi, pero todos los signos eran claros, la ruta de la ciudad se iba a modificar, tan solo el poder de los dioses podria conseguir eso, solo Jheldor mismo podria guiar la ciudad por Albur fuera de su ruta.

Los Ocho se reunieron tensos en el corazon, no para guiarlo sino para ayudar a que el viaje fuera mas suave para la ciudad. No tardo mucho, no una sino varias presencias llenaron la gran sala de El Corazón, el poder se convirtio en una sustancia casi sólida y los Ocho boquearon con problemas para respirar en la atmosfera cargada.

Fuera la ciudad flotante giro al norte, el cambio fue suave pero perceptible en toda la ciudad. Los Vandrer miraron en todas direcciones, los oraculos les habian advertido, los preparativos estaban hechos, todas las posadas de la ciudad estaban ocupadas por los Har-Ail, los campos y llanuras fuera de la muralla ocupadas por los campamentos Kohiri, los Vurmak inquietos en sus viviendas se preparaban tambien. Vandrerfán iba a la guerra.

Ayer

Hileras e hileras de guerreros se preparaban mientras sus oficiales les repetian los planes y les arengaban.

Los fuertes Har-Ail eran el segundo contingente mas numeroso, orgullosos y relucientes en su busqueda de Justicia

Los Kohiri, los mas selectos de sus guerreros se habian reunido guiados por el Señor del Camino para dirigir la carga por tierra

Los Vurmak, los pacificos hombres pajaros tan distintos a sus primos los Tvus formaban el contingente mas pequeño, guiados por su lider, el Oraculo Hurmak que se decia estaba infundido con la presencia del mismisimo Vagabundo

Y los Vandrer, sus legiones ocupaban todo lo que se veia, orgullosos guerreros, poderosos Hastur y ricos carros de guerra y de carga, estos últimos destinados a bajar a tierra a los Kohiri

Todos estaban listos y esperando

Hoy

Durante milenios todo ha sido silencio y muerte, nada ha cruzado la tierra ni el cielo de la llanura de almas, hasta hoy

Una sombra enorme entra en el territorio prohibido, su enorme mole parece ocultar el cielo, de repente de ella salen como un enjambre nubes de tormentas cargadas de rayos y relámpagos. Solo que no son nubes de tormenta. Los Hastur cabalgan y a su paso el cielo se abre, los gritos de guerra rompen el silencio, como una tormenta de destrucción descienden sobre la llanura

Notas de juego

evento 9pp desvio Vandrerfán

creo avatar temporal, el Oraculo Hurmak 2pp

3pp comandar avatares Oraculo Hurmak, Los Ocho, Eutharkos crear 3 ejercitos

3pp evento compartido, abrir el camino en la llanura de almas

total 17pp

 

ataco con 12 ejercitos y 2 avatares (los 8 y el Señor del Camino) el palacio de Yoonel

ataco con 4 ejercitos y 2 avatares (Eutharkos y el Oraculo Hurmak) el Templo de almas

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28/10/2010, 23:22
Aildor

Vanderfrán, horas antes del ataque

Salem caminaba de un lado para otro, pensando en la estrategia que debería seguir. Junto a él sus dos paladines más capacitados lo asesoraban. Dirigir el ataque no iba a ser nada fácil. Los esqueletos habían demostrado en el pasado que podían vencer a los Har-Ail. Pero ésta vez sería diferente, razas de todo Albur se habían aliado para combatir las fuerzas de la injusticia. La balanza había sido demasiado desequilibrada. Además, los esqueletos aún tenían un castigo pendiente por aplicar. El fuego purificador de Aildor arrasaría el desierto de blanquecino polvo.

El Gran Orador ya había discutido con Los Ocho sobre la organización del ataque. Ellos atacarían el templo de las Almas de Yoonel, con la fuerza de la Justicia doblegarían la defensa del enemigo. En su cabeza se acumulaban planes, mezclados con los consejos que le susurraba su padre al oído.

Los cinco ejércitos de los Har-Ail se erigían ante Mirlat como una gran fuerza dispar, pero a la vez poderosa y capaz. Los Caballeros Blancos permanecían en silencio, inmóviles. Su función principal había sido siempre la de proteger su templo, pero ahora se veían obligados a combatir como atacantes. Pese a su forma de ser pacifista no podían obviar las necesidades de la justicia. Los Paladines de la Llama no se encontraban tranquilos, sus armas incendiadas se mecían con nerviosismo. Los ejecutores se encontraban emocionados por la batalla inminente,  deseaban luchar con todas sus fuerzas. Los Caballeros Azur se encontraban en perfecta formación, dibujaban en el aire las runas protectoras de su Padre. Los Paladines del Mármol se encontraban junto a Salem, planificando el ataque. Ellos estaban tan o más tranquilos que los Caballeros Blancos. Tenían confianza en ellos mismos. Y por último, los Jinetes de la Esperanza, ya sobrevolaban la ciudad en sus grifos, preparándose para descender en picado.

Mirlat observó a sus hermanos con una mezcla de cariño y temor. Muchas vidas serían arrebatadas en esta gran batalla. De su dirección dependían gran parte de ellas, no podía decepcionar a su padre. Él había salvado a sus hermanos, él los había llevado a su justo santuario. Ahora debía llevarlos a la victoria.

¡Escuchad, hermanos! – todos los Har-Ail que se encontraban hablando callaron de pronto. Salem alzó también la cabeza para ver al joven pero sabio Har-Ail, que había vivido durante largos años sin envejecer –Hace mucho tiempo los esqueletos nos arrebataron nuestra ciudad natal, Ovidia. Ahora se derrumba dentro de los dominos de nuestro Padre como una sombra de lo que fue. Sus calles están ahora llenas de oscuridad, sus callejones llenos de perversas criaturas, y sus alrededores llenos de hermanos que enloquecieron con la guerra. Los esqueletos nos arrebataron aquello a lo que amábamos. Ha llegado la hora de castigarlos.

Caminó hacia un lado, y miró sonriente a su hermano Salem. Confiaba en él y en su inteligencia para llevar a buen puerto esta batalla.

Una vez os pedí que me siguierais, para llevaros a un nuevo hogar. El viaje fue duro, pero finalmente conseguimos nuestra ansiada paz, nuestro ansiado equilibrio. No podemos permitir que el equilibrio de este mundo siga siendo perturbado. Por eso os pido ahora, ¡seguidme, hermanos! ¡Luchemos juntos contra la injusticia que azota esta tierra! ¡La tierra de Á será justa, nosotros somos sus ejecutores! ¡Nosotros haremos cumplir su ley!

Los Har-Ail vitorearon al experimentado líder. Se encontraban motivados, no combatían sólo por su pueblo, combatían por el mundo entero. El Templo de las Almas no podría resistir la acometida de la justiciera espada de Aildor.


Notas de juego

Ataque 5 ejércitos + 2 avatares (Mirlat y Salem) contra Templo de las Almas. Uno fuerzas con los ejércitos de Jeldhor que atacan al mismo sitio.

Comparto 3pp con Jeldhor para el evento.

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28/10/2010, 23:40
Ghiskhaft

Dos miembros del Concilio se internaron en las profundidades de Skaag. Debían dialogar cuanto antes con Nograt y Magrat pues los preparativos para la marcha ya habían comenzado.

-Nograt, Magrat, es un placer volver a veros, como siempre- los cuatro se saludaron efusivamente, pues siempre habían sido buenos vecinos.

-La hora tan esperada acaba de llegar. Debemos marchar a la Llanura de las Almas. Hemos montado un gran operativo de seguridad esta vez... los portales se abrirán.

-Pero no sólo eso venimos a avisar. También queremos saber si contamos con vuestra ayuda para recuperar nuestro antiguo hogar. Ya una vez nos dieron cobijo aquí y se los agradeceremos eternamente. Pero la sangre tvu quiere lo que le corresponde por derecho. ¿Marcharéis a nuestro lado contra las legiones sirénidas? -El tvu conocía la respuesta, pero era su deber solicitar el apoyo formalmente.

Notas de juego

Pongo esto en nombre de Knhoss, luego que willen lo haga oficial...