Partida Rol por web

Crónicas de Cuatro Aventureros

La Última Esperanza de Hondonada.

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20/09/2013, 09:24
Quarion Ringëril

Como siempre, el druida era observado y su lobo más, pero ya estaba acostumbrado, mientras no hicieran nada más que mirar, esos asesinos de árboles no sufrirían las consecuencias. Pasaba una mano por el pelaje del lobo mientras iba a por el "desayuno". Cuando lo vio se quedó impertérrito- ¿Que se supone que es esto? -se preguntaba mientras veía como Berhanu intentaba que le echaran más de esa "pasta".

-Skoll, creo que tendrás que cazarte algo -dijo mientras ofrecía el cuenco al lobo para que lo oliera y este, tras olerlo un par de veces se retiró- tú si que sabes -dijo con una sonrisa mientra seguía a la chica de piel morena hasta uno de los bancos y el lobo seguía sus pasos.

Quarion estaba hundiendo la cuchara y levantándola, mirando con suspicacia esa sustancia que caía en grumos desde su cuchara de nuevo al cuenco. La verdad es que esperaba algo más del estilo de la cena, pero se llevó una grandísima decepción- Creo que al final habrá que cazar, ¿eh? -dijo esbozando una sonrisa irónica. Le hacía gracia pensar que se suponía que con esto se iban a evitar tener que gastar las provisiones, pero no lo tenía muy claro.

Seguía jugando a la excavadora con las gachas cuando Berhanu le nombró y prestó atención- Sí, bueno, la verdad es que vamos a tener que dormir en el bosque sí o sí, porque no creo que podamos hacer todo en un día -dejó la cuchara en el sitio- ahora bien, si según caminamos vemos una zona donde puede haber uno de los ingredientes, podemos variar el rumbo. Una cosa es intentar ir al de más lejos y otra pasar por encima de un ingrediente porque "no es su turno".

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20/09/2013, 12:19
Asha

-Lo será- respondió a Hielo con un guiño  alegre, Berhanu pasó como un pequeño vendaval fuera de control diciendo cosas de pagar y Asha se echó a reír acelerando el paso hasta el barracón, caseta... lo que fueran esas paredes levantadas para procurar algo de refugio mientras daban cuenta de la comida.

Se puso a la cola como una buena chica y tendió su cuenco vacío al anonadado cocinero.

-¡Graciaaas!-canturreó. Buscó con la mirada a Berhanu y a Quarion, que se inclinaba hacia Skoll con su desayuno. Cuando llegó hasta ellos pilló la conversación a medias, con lo que se quedó un poco fuera de sitio- ¿qué me he perdido?- pasó una pierna por encima del banco sentándose a horcajadas, dando cuenta de su desayuno.

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20/09/2013, 15:14
Berhanu

Quarion miraba la pasta de cereales como si fuera algo extraño y exótico. Nada menos desayuno de la gente sencilla de campo, y para algunos pobres desgraciados, la comida y la cena. Si algo bueno tenía vivir perdido en las montañas, donde singun señor feudal reclamaba los animales como su propiedad, ni ninguna ciudad cobraba exageradas tasas a los cazadores, era que podías comer carne a diario, y crecer sana y fuerte. Aunque no demasiado fuerte, y alta tampoco, maldita mi suerte.

El druida, respondí a Asha muy seriamente, señalando a Quarion con el pulgar de una mano sin dejar de zampar gachas con la otra, ha dicho que va a bailar una danza de agradecimiento élfica por la comida. ¿Tú crees que bailará en pelotas? pregunté, inclinándome hacia ella en actitud conspiratoria, pero lo bastante alto como para que lo oyeran los dos hombres, porque qué gracia tenía si ellos no lo oían. Dicen que a los elfos les encanta ir desnudos por ahí.

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20/09/2013, 23:14
Asha

Asha, con la parte cóncava de la cuchara pegada a la lengua. Enarcó las cejas con cierta sorpresa, sosteniendo la cucharilla por su extremo plano, pestañeó un instante intentando imaginarse una danza exótica en la que Quarion se bamboleaba como un junco mecido por el viento mientras que con el movimiento de sus brazos creaba estelas de un material sedoso y semitransparente gracias a unos velos que sostenía en las manos.

-... y con siete velos -dijo muy convencida sacándose la cuchara de la boca para darle al elfo con los nudillos de la mano que sostenía el cubierto- no juegues con la comida- le dijo casi con voz de madre antes de llevarse una nueva porción de comida a la boca.

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21/09/2013, 01:05
Berhanu

Me quedé mirando a Quarion fijamente con los ojos muy abiertos, la cuchara llena de gachas metida en la boca y dos hilillos de leche escurriéndose por las comisuras de los labio y descendiendo por mi cuello. ¿Chete veloh? mascullé.  ¿Por qué siete velos? No tenía claro, en primer lugar, a qué se refería exactamente Asha con "velos", pero no sonaba nada bien, así que no estaba segura de querer hacerlo.

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21/09/2013, 11:56
Haizti

Había sido el último en sentarse con su plato rebosante de gachas. Si la textura, el olor o el sabor le resultaban desagradables no lo demostraba a ojos de nadie, pero el baile de su cuchara era constante y rítmico. Del plato a la boca, de la boca al plato haciendo bueno el comentario de Berhanu acerca de lo que Haizti podía llegar a pensar de la comida. 

Ante la pregunta de la humana acerca del itinerario a seguir guardó silencio, una vez que el elfo había hablado y considerando que su respuesta guardaba el sentido común oportuno a sus circunstancias. No obstante, su mirada parecía clavada en el ir y venir de las gachas grumosas de Quarion que parecía encontrar entretenido y fascinante jugar con algo hecho para ser ingerido. Hizo lo propio una vez y no hallando placer alguno en ello se preguntó qué vería el elfo en aquel proceder tan absurdo. Un absurdo incrementado por la conversación que estaba teniendo lugar entre las dos hembras humanas.

-Bailar desnudo y con siete velos -señaló ante lo incongruente de aquella frase. Las observó un instante tras la cuchara en la que estaba pertrechado. Sin duda, ambas debían estar sexualmente receptivas y proyectaban sus fantasías sexuales en el macho élfico a quien imaginaban de aquella guisa. Cabeceó negativamente casi de forma imperceptible y tragó una nueva cucharada de gachas. Tan solo esperaba que el estro femenino no hipotecara la buena marcha de la misión y que no perdieran el tiempo tratando de que el elfo las cubriera. 

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23/09/2013, 17:12
Milon Rhoddam

Mientras discutís animados por el tratamiento de la comida, las contumbres élficas y un sinfín de cosas sin relevancia real, para desolación de Haizti, oís como el comedor se queda en súbito silencio. Una figura se abalanza sobre vuestra mesa con premura.

Amigos, dice un jadeante Milon, tengo malas noticias. Acaba de llegar un correo de Hondonada del Halcón. El hombre toma aire en grandes bocanadas, intentando recuperar el aliento y esperando a ver cómo reaccionáis a sus palabras. Pese a los esfuerzos de Laurel, la enfermadad se ha extendido. Y mi hijo se ha contagiado... dice le hombre en un hilo de voz que resalta más aún con el gran tamaño del leñador. Debéis partir ya. Comienza de nuevo con voz más enérgica, casi autoritaria. Tenéis varias jornadas de viaje para recorrer todo el bosque de ida y vuelta, sin contar los problemas que os podáis encontrar. La vida de muchas personas dependen de vosotros, incluyendo la vida de mi hijo. Si no fuese por esta pierna, dice señalándose a la pierna derecha que ya habías visto que era algo renqueante, iría yo mismo, pero no puedo hacerlo. Por favor, amigos, encontrad los ingredientes necesarios y salvad a mi hijo.

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25/09/2013, 23:46
Berhanu

Milon Rhoddam no podía ser un simple leñador veterano si alguien se molestaba en enviarle a un jinete en mitad de la noche, haciéndole jugarse la salud del caballo y la propia vida en los oscuros caminos, para darle una noticia como esa, que aunque era funesta, podía haber llegado unas horas después. Pero tales cuestiones estaban fuera de lugar. Lo importante era la búsqueda.

No se preocupe, señor Milon, dije con sinceridad, estirándome para apretarle el hombro para reconfortarle y darle confianza; no me fui difícil hacerlo, porque mi corazón no albergaba la menor duda al respecto en esos días. ¿Qué clase de peligro podíamos encontrarnos que no fuéramos capaces de vencer o sortear entre los cuatro? Estaremos de vuelta con esos ingredientes antes de que su hijo se haya dado cuenta de que está enfermo. Aunque sí me escamaba que el viaje fuera a llevarnos varias jornadas. Tenía sentido, evidentemente; el bosque no era precisamente un punto en los mapas de papá. Pero la escala del mapa improvisado me había hecho hacerme ilusiones. Aún nos quedaban provisiones del viaje a Hondonada, y el elfo y yo podíamos cazar lo que nos hiciera falta, así que no esperaba que fuera un problema, en cualquier caso.

Me llevé el cuenco a la boca y empujé las gachas que quedaban con la cuchara al agujero. La leche me empapó la pechera de cuero endurecido; no me molesté en secarla, tan envejecido estaba el pobre peto que una mancha más no se iba a notar.

Amoh pallá, dije masticando aún la pasta de avena, y me levanté de ese banco que me había dejado el trasero aplanado.

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26/09/2013, 21:22
Haizti

Haizti siguió masticando pese al abrupto tono de su anfitrión de la víspera. Era capaz de comprender su angustia, mas las prisas nuca eran buenas consejeras, máxime cuando cinco minutos no suponían cambio alguno. Por ende, la fría mente del semielfo analizaba la secuencia temporal de todo aquello. Habían transcurrido menos de veinticuatro horas desde que aceptaran el encargo de aquella misión. De hecho, hasta oscurecer el día anterior, Berhanu y él no habían alcanzado el campamento. Apenas había amanecido, desayunaban y Milon les venía con aquella noticia. ¿Cómo era posible que la plaga se hubiera extendido tan rápido como se afirmaba en cosa de unas pocas horas, y que hubieran enviado en mitad de la noche un mensajero arriesgando tanto? El camino no se caracterizaba por su fácil recorrido, las trochas estaban enfangadas por la lluvia y la noche sin luz impedían que una animal de monta avanazara más rápido de lo que lo haría un humano a pie. Por no hablar de las criaturas que se había dicho emboscaban la zona. De algún modo, y sin querer negar la veracidad de lo dicho por Milon, todo aquello parecía una treta urdida para presionarles a abandonar el campamento y comenzar con su búsqueda.

-Eso es imposible, Berhanu. Su hijo ya sabe que está enfermo. No prometas lo que no podemos cumplir. Simplemente intentaremos cumplir con nuestra parte del acuerdo lo más rápido posible -dijo mirando a la muchacha-, algo que de todos modos íbamos a hacer, se extendiera la plaga o no -comentó con una frialdad espeluznante, poniéndose en pie, y pareciendo no consciente del dolor de aquel padre-. Milon Rhoddam, acompaña a tu hijo. Te necesitará tanto como los ingredientes que debemos localizar. O más.

Dicho aquello se aprestó a salir del comedor comunal, esperando fuera a sus compañeros.

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27/09/2013, 09:33
Quarion Ringëril

Quarion se había quedado un poco aturdido ¿Siete velos? ¿Qué pasa con los siete velos? ¿y porqué tenía que bailar desnudo? Seguro que era una tradición de humanos, pero el caso es que el toque sobre jugar con la comida dado por Asha le hizo volver al mundo en el que estaba justo para escuchar al leñador que les había invitado a cenar el día anterior llegar corriendo.

El druida no entendía porqué debían de darse más prisa porque el hijo de ese señor estuviera enfermo, ¿valía más que los otros? Era un niño como cualquier otro, pero sabía que su pragmatismo en ese momento sería algo mal visto y no podía tensar más la situación. Por ello, mientras escuchaba a Berhanu y Haizti discutir sobre las palabras que había dicho la primera, comió unas pocas gachas a toda prisa, tragándolas sin querer saborearlas, como hacen los niños pequeños con la comida que no les gusta.

-¿Nos vamos pues? -dijo poniéndose en pie y haciendo gestos para animar a sus compañeros.

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30/09/2013, 12:01
Asha

Se levantó apoyando una mano en la mesa y pasó por encima del banco la pierna que quedaba en la parte interior. 

Nota mental, pedir escritos sobre la empatía  y la asertividad y regalárselos a Hielo.

Qué bien le había puesto el nombre, desde luego. 

Sentía lástima por el hombre con su hijo enfermo pero también la sentía por el resto de enfermos y no por eso iba perdiendo el culo tras un remedio. Como decía el sabio dragón plateado de su tribu: las cosas hechas con prisa no valen ni para limpiarse el culo.

Suspiró mientras seguía al grupo hacia fuera.

Aaaah,cuánta razón tenías...

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30/09/2013, 12:40
Director

Una vez fuera del gran edificio y con el estómago algo más caliente gracias a las gachas, comenzáis a otear el horizonte para ver por dónde podrías empezar a andar. El mapa tiene unas indicaciones que parecen indicar que la puerta del norte del campamento podría ser la ideal para internarse en el bosque.

Poco después, cuando el mapa vuelve a estar guardado, vuestros pasos se dirigen hacia allí.

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30/09/2013, 20:36
Berhanu

Salí de allí tras los pasos de mis compañeros, sonriendo a Milon como si Haizti no hubiera hablado, como si no existiera, como si hubiera sido simplemente una ensoñación, una alucinación. Me tropecé con varios tipos que andaban por allí, y apunto estuve de comerme una mesa con la tripa, pero me las arreglé para sortearla sin dejar de mirar al veterano leñador hasta que me escurrí por la apertura de la tienda hacia el exterior.

La niebla todavía no se había despejado, pero el sol estaba más alto y el día más iluminado. El frío era punzante, pero agradable, te mantenía despierta y te obligaba a moverte para calentar el cuerpo, siempre lista para la acción. Dando saltitos de un pie a otro, me acerqué a Haizti, el hombre de piedra.

Haizti, le dije, es una de esas cosas de las que hablábamos de camino aquí. No tenía la menor idea de cómo explicárselo. No de decir la verdad de forma precisa, sino dándole un toque personal para que resulte más digerible. Nunca esperas tener que explicar estas cosas, se aprenden de forma natural. No es que haya mentido a Milon; él sabe que lo que he dicho es imposible, pero si nota que tenemos confianza en nuestras habilidades, le ayudará a tener confianza él mismo. Y tampoco es que estuviera acostumbrada a explicar cosas, normalmente solo me tenía a mí misma para hablar, y buena parte del tiempo, solo a papá, y nuestras conversaciones a menudo consistían en intercambios de gruñidos o insultos. Y si tiene confianza, tendrá esperanza.

Me mordí el labio mientras trataba de recordar exactamente lo que había dicho. No es que fuera importante; Haizti era Haizti, ya lo conocíamos,  y en el fondo me gustaba como era, a pesar de su particular personalidad. Seguro que si pasábamos mucho tiempo viajando juntos acababa por aborrecerle, pero eso era algo normal, ¿no?.

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02/10/2013, 20:33
Haizti

Haizti suspiró. Aquella era una de las ocasiones en las que los procesos mentales de unos y otros, o para ser precisos, el suyo frente al de los demás, jamás llegarían a aun acuerdo. Afirmar que un aserto era imposible y que a un tiempo no era una mentira, constituía en sí mismo una contradicción. Y es que aquella era la naturaleza humana, plagada de contradicciones y cegueras, capaces de decir que una mentira podía ser valorada como una verdad porque venía imbuida de algún oscuro y poco preciso contenido emocional. ¿Cómo, en aquellas circunstancias, iba a ser posible un diálogo si los referentes mutuos eran incompatibles?

-Confianza, esperanza. Puedo entenderlo. Basadas en la confianza a su vez en nuestras propias aptitudes y habilidades. ¿Cuándo hablaste con Milon de esa confianza en nosotros mismos? Debió ser parte de una conversación que, lamentablemente, no escuché -dijo caminando hacia la puerta norte, al igual que el resto-. De todos modos, tampoco creo que sea importante. ¿Cuál va a ser el primer objetivo?

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02/10/2013, 20:48
Quarion Ringëril

Quarion caminaba con los demás mientras escuchaba la discusión sobre filosofía, esperanza y confianza que estaban teniendo Haizti y Berhanu, peor optó por no entrar al trapo y centrarse en el trabajo que tenían por delante. Cuando Haizti volvió a preguntar por cual iba a ser el primer objetivo no pudo evitar resoplar- ¿En serio? ¿Otra vez con lo mismo? -negó con la cabeza- Yo ya dejé clara mi postura durante la cena y es ir al punto más lejano, que creo recordar que son las ruinas enanas esas -dijo mientras hacía un gesto con la mano como mostrando que no lo recordaba bien del todo.

Hizo un gesto a Skoll y el lobo se adelantó un par de metros al grupo- iremos con Skoll en cabeza, y nos repartiremos en los flancos y detrás Berhanu, Asha y yo -miró al mestizo un momento- ¿Cómo te desempeñas en los entornos naturales, Haizti?

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02/10/2013, 21:50
Haizti

-Que lo dijeras no quiere decir que se tomara una decisión al respecto. Yo, al menos, no lo recuerdo -dijo con total tranquilidad el semielfo-. Y para evitar equívocos, ¿qué entiendes por cómo desempeñarse en entornos naturales?

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03/10/2013, 09:41
Asha

Asha caminaba meditabunda en la retaguardia, mirando a unos y a otros con cierta incomodidad que podría ser fruto de que esas gachas no eran las más ricas del mundo y se le empezaban a remover las tripas... pero no, no era solo ésa la razón.

Lanzó una mirada al animal compañero de Quarion

"Si me escuchas, cómetelos a todos"

Sí, esa era la solución.

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03/10/2013, 09:48
Quarion Ringëril

-¿Sabes cazar? ¿Rastrear? ¿Esconderte? -preguntaba mientras seguía caminando- se que Berhanu era cazadora y, al caminar con ella averigüé que era hábil en esas lides, en cambio no se que es lo que se te da bien a ti, y antes de que nos repartamos deberíamos averiguar los puntos fuertes y débiles para saber que esperar unos de otros.

Miró a Asha que parecía tener mala cara- ¿Te encuentras bien?

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03/10/2013, 14:53
Berhanu

Se me escapó una risita cuando Quarion preguntó a Haizti sobre su habilidad como rastreador. ¿Os lo podéis imaginar a cuatro patas buscando rastros? Pues yo tampoco. Más bien al contrario, me lo imaginaba siendo rastreado de ciudad en ciudad y pueblo en pueblo, solo mirando los gestos de confusión en los rostros de ciudadanos y aldeanos. No haría falta preguntar si habían visto pasar al semielfo de cabellos blancos, no.

Como dije anoche, me parece bien empezar por el lugar más lejano y acercarnos desde allí. Era o eso, o hacerlo en el orden opuesto, en cualquier caso. Yo me quedaré el flanco derecho, Quarion el otro, y Asha y Haizti en el centro de la formación. ¿Os parece?

No me había fijado en la cara de Asha hasta que el elfo la había mencionado. Yo la veía como siempre. Aunque no era normal, nada normal, que estuviera tan callada y no estuviera pinchando a Haizti. En eso sí que parecía otra persona. Me dejé caer a su lado y le susurré confidencialmente.

¿No será hoy...? ¿Había pasado ya un mes desde la última vez? la verdad es que no estaba segura. ¿Quieres ir montada encima de Haizti? Eso siempre te anima.

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04/10/2013, 15:20
Haizti

-Llegado el momento supongo que podría hacerlo con mayor que menor fortuna -dijo tras unos instantes pensativo-. Nunca he sentido especial gusto por la caza, no he tenido razones para esconderme, ni para seguir un rastro. Pero no creo que sea especialmente difícil hacerlo, si se cuenta con la base necesaria. Unos buenos ojos y sentido común. De oído tampoco ando mal -señaló sin más.

Miró entonces hacia Asha y Berhanu. El rostro de la primera no mostraba en su opinión mal aspecto. Al menos en comparación con el de la segunda. Simplemente parecía ensimismada y se mostraba anormalmente poco comunicativa. Sin duda, problemas intestinales. Lo más probable es que llevara varios días sin hacer de vientre. Un asunto que podría tratar en otro momento con el elfo, quien con su conocimiento de plantas, podría hallar algún laxante natural.