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Crónicas Giovanni I- La última cena

Capítulo I- Escena 3- La cena está servida

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08/12/2014, 16:27
Director

La mesa en el oscuro comedor está servida con una cara y lujosa vajilla digna de un príncipe. La sala zumba de excitación.Los anfitriones están muy animados tras los tormentos, y charlan alegremente entre ellos, recreándose en la diversión que han tenido hasta ahora y aún con ganas de más. Podéis ver a Lothar afanándose a través de la estancia, comprobando ostentosamente el servicio y asegurándose de que todo esté en orden.

Los sirvientes os guían junto a las sillas libres al lado de los anfitriones que acabáis de conocer más “a fondo” hasta que la mesa finalmente queda completa excepto por su cabecera. En la mesa veis ya sentados tanto a Lucien como a Pietro, y os quedáis sorprendidos por ver también a Katia y Maeve Woden. 

Tras sentaros, Claudius aparece y toma asiento a la cabecera de la mesa en compañía de otra joven invitada que aohra mismo veis. 

Lothar hace pasar a tres criados que empujan enormes y humeantes carritos cargados con platos de aroma delicioso. Pato asado, lechón, cuartos de buey y piernas de cordero desprenden un suculento olor que llena la estancia y los sentidos de cada uno de vosotros.

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08/12/2014, 19:55
Maeve Woden

Estaba sentada en la mesa, al lado de Katia y cerca del hombre que nos había llevado hasta ahí y del que, por cierto, aún no me fiaba demasiado. A decir verdad, en aquel momento sólo me fiaba de Katia. Intenté ponerle la zancadilla un par de veces a Lothar cuando pasaba corriendo por detrás de mí, organizando cosas. 

Empezaba a aburrirme muchísimo todo aquel rollo. Sólo quería recuperar mis armas y volver al norte. No me gusta aquella tierra, no me gustaba el clima y no me gustaba la gente que en aquellos momentos nos recibía, todos tan remilgados... Ninguno de ellos sería capaz de sobrevivir en las inhóspitas tierras del Norte, eso seguro. 

Notas de juego

Tengo que tirar para poder ponerle la zancadilla, master? :P

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08/12/2014, 20:01
Carlos Larraz

Me sorprendo de ver a las dos damas del Norte. Creía que habian sido más afortunadas y que evitaron este desafortunado evento... Pero parece que las garras del diablo llegan lejos.

Estoy sentado al lado de Lord Casmir, y entonces vemos las increibles viandas. Tanta carne1 y de tan calidad como nunca antes habia visto ¡Algo propio de las bodas de un rey!

Tímidamente, le pregunto a Doctore "Maese ¿Sabe usted el por qué de esta peculiar reunión?"

Notas de juego

1 Los campesinos (Larraz viene de una familia humilde) SI que comian carne... pero normalmente era el tocino, la médula, o la parte más dura y grasienta: Lo mejor se vendía o se reservaba para los terratenientes.

De hecho, el ayuno y abstinencia en cuaresma (El viernes no comas carne, come pescado o algunas hierbas) realmente se hacía porque los curas se dieron cuenta: Comer TANTA carne y de tan mala calidad NO PODIA SER BUENO. No sabian lo que era un infarto ni la arterioesclerosis, pero decretaron que durante mas de un mes, nada de esa carne tan mala... o castigo de Dios ¡En forma de infarto al corazón!

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08/12/2014, 20:23
Imara

Imara se sentó junto a Sire Wenceslas a pesar que sus instintos más básicos le recomendaban que se alejara rápidamente de él, pero ello estaba educada entre otras cosas a aguantar el castigo hechos a su personas. Aunque estos nunca habían sido hechos sin razón alguna como los cortes que le había hecho, siempre había una razón y en ese momento junto al hombre se encontraba meditando sobre la razón para que aquel hombre le hiciera esa barbaridad.

Mientras pensaba se puso a observar alrededor notando que todos parecian haber terminado en una situacion parecida, aunque le sorprendio que Maeve y Ekaterina se encontraran entre ellos. Les miro con preocupacion, ya que su presencia daba a entender que probablemente no los dejaran escapar tan facil de todo esto.

Cuando llego la abundante comida se quedó maravillada observando los distintos platos que en nada se comparaban con las humildes comidas del monasterio. El olor de la comida le hacía darse cuenta porque de esos rumores acerca de que todos los nobles eran gordos, ahora no podía culparlos por caer tan fácilmente en la gula. Sin embargo ella mantuvo su postura y espero a que el señor Claudius dijiera unas oraciones antes de empezar a comer.

Notas de juego

Tras sentaros, Claudius aparece y toma asiento a la cabecera de la mesa en compañía de otra joven invitada que aohra mismo veis. 

La joven es Alicia Mytros?

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08/12/2014, 20:58
Director

Notas de juego

No, Alicia ha sido otra de las invitadas que ha ido con vosotros durante el viaje. Esa es otra chica, luego os pondré una imagen.

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08/12/2014, 21:06
Ekaterina (Katia) Sokolova

La verdad es que la cena distaba mucho de ser la habitual. Mas de un duque podría aprender el significado de la ostentación viendo la bien surtida mesa de la que hacía gala. Pocas veces había visto tan cantidad y variedad de carnes. Desde luego, los Giovanni quieren demostrar su fortuna... Pensé amargamente mientras me llevaba un pedazo de carne asada a la boca. Definitivamente tienen unas costumbres extrañas.

-Cualquiera diría que estás en un funeral Maeve. Come algo. O mejor aun, bebe.- Dije pasándola la copa de vino oscuro y rojo que ya había catado. Por lo visto lo que dijo nuestro encantador anfitrion era cierto. Nadie le haría ni caso a nuestra apariencia con un servicio como este.

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08/12/2014, 21:47
Damir

Al ver la suculenta cena que ofrecían, Damir pensó que en otras circunstancias disfrutaría de semejantes manjares a 2 carrillos, pero con los acontecimientos aun en su memoria, hambre no tenia precisamente. Aunque al menos y temporalmente ellos no eran la cena.

Damir no paraba de mirar de reojo a la mujer que le había amargado la noche. En varias ocasiones se le paso por la cabeza en clavarle el cuchillo a Lady, pero no era lo mas sensato, al menos delante de tanta gente y tantos testigos...

Así que empezó a cenar algo, sin demasiado apetito sin mediar palabra...

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08/12/2014, 23:06
Viridiana Nomen Nescio

Tomé asiento en perfecto silencio, mi rostro era serio y mi mirada solo se centró en el plato vacío que tenía delante de mí, ni siquiera me digné a mirar a Marchettus el Bravo, ignorarle por completo era lo que se merecía tanto él cómo Claudius Giovanni, ni siquiera aquella maravillosa mesa preparada con detalle, ni el magnifico olor que se desprendía de la comida eran suficiente para hacerme olvidar la incómoda situación en la que me encontraba, deseosa por dar la cena por concluida y abandonar los dominios de Giovanni.

Solo levanté la vista para mirar a aquellas mujeres que no había vuelto a ver desde que partieron de la Posada del Cordero Rojo, reconocí la voz de la morena, con tanta gente no había reparado en sus presencias hasta aquel preciso momento.

Permanecí en silencio y atenta a las conversaciones que se producían en torno a la mesa, evitando llamar la atención de los comensales de cualquier forma.

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08/12/2014, 23:54
Maeve Woden

Noté que Viridiana nos miraba y traté de cruzar una mirada con ella; la situación cada vez me preocupaba más y parecía que a ella también.
-Gracias Kat pero no voy a comer nada... Esta situación cada vez me desagrada más - le respondí lo suficientemente alto para que todos me oyeran. Los había estado observando y no era Viridiana la única que parecía preocupada...

Notas de juego

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08/12/2014, 23:54
Maeve Woden

Noté que Viridiana nos miraba y traté de cruzar una mirada con ella; la situación cada vez me preocupaba más y parecía que a ella también.
-Gracias Kat pero no voy a comer nada... Esta situación cada vez me desagrada más - le respondí lo suficientemente alto para que todos me oyeran. Los había estado observando y no era Viridiana la única que parecía preocupada...

Notas de juego

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09/12/2014, 00:55
Águeda Valverde

Seguí al sirviente y tomé asiento junto a Don Leopold, al cual no llegué a mirar directamente en ningún momento, pues mantuve mi vista en la mesa, aunque no pude evitar que mis ojos se desviaran, en varias ocasiones, y de la forma más disimulada posible hacia él.

El olor de la comida que acababa de entrar en la estancia a mano de los sirvientes hizo que levantase el rostro. Al ver los platos, tragué saliva. Hacía años que no comía nada parecido. No es que en el monasterio se comiese mal, pero sin duda las comidas eran mucho más humildes que la que aquí se presentaba, digna del más poderoso señor del país.

Cuando se sirvieron los platos, tomé algo de lechón, el cual comencé a comer llevándome a la boca en pequeños bocados de cada vez. Tras lo que había ocurrido no es que tuviese demasiada hambre, pero si queríamos hacer algo, necesitaba fuerzas.

Mientras masticaba, recorrí la estancia con la mirada, deteniéndola primero en el maese Giovanni, en la dama que le acompañaba después, pasando por Lothar, los sirvientes, y para finalizar en las dos damas que aunque habían estado con el resto de nosotros en la posada, no las habíamos vuelto a ver -o al menos yo- hasta ahora. Alcé las cejas a modo de sorpresa.

¿Tendrían las mismas intenciones que el resto? De ser así, ¿tendrían algún plan? Era difícil saberlo, pero estaría atenta a ambas por si acaso. Sin duda ellas parecían ser las que podrían tener mayor éxito en un plan tan alocado como el de escapar.

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09/12/2014, 08:42
Maeve Woden

Todo el mundo estaba inquieto, mirando a todas partes. Aquello me inquietaba. Miré a Kat y en voz tan baja que sólo ella pudiera escucharme le dije:
-Tenemos que salir de aquí, cuanto antes, ahora mismo si es posible.

Notas de juego

Master, dos cosas: puedo tirar algo para convencer a Katia de que me haga caso? XD
dos, quiero revisar la estancia, cuánta gente hay, cuántas salidas, cuántas ventanas, en qué piso estamos, etc. Tengo que tirar algo? XD

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09/12/2014, 11:05
Mabuz MacColl

Mabuz acompaña a los otros hasta el comedor y toma asiento junto a Lady Amisa a la que hace une leve reverencia. La mujer se sigue mostrando fría, como decepcionada con él. Observa que las mujeres que partieron de la posada también se encuentran a la mesa y ese hecho es lo que termina de convencerle de que no hay más salida posible que la que haya preparado Maese Giovanni, solo queda ver cómo discurre la situación e intentar no salir perjudicado...en exceso.

Acepta de buen grado la comida pues se percata de que tiene hambre y por la extraña cita con la mujer que se sienta a su lado no sabe si será la última. Repasa con la vista las carnes y aunque está acostumbrado a una corte esto excede con creces los banquetes en los que ha participado.

Aunque hace intento de mantener conversación intrascendente y educada no tiene mucho éxito.

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09/12/2014, 21:03
Director

Notas de juego

Master, dos cosas: puedo tirar algo para convencer a Katia de que me haga caso? XD

Jejeje, no suelo dejar hacer tiradas para convencer entre pjs -prefiero ver como rolean entre ellos y a ver si se le convence-. 

Descripción de la estancia:

Aparte de vosotros, hay 13 personas mas (12 invitados mas, y el Señor Giovanni). Al lado del Señor Giovanni una mujer que es la primera vez que veis.

El comedor es enorme, pero austero, aparte de la mesa y las sillas donde os encontráis, hay varios cuadros por las paredes y una enorme chimenea en una de las mismas. Lo que mas te llama la atención es que las pocas ventanas que parece que hay están con las cortinas corridas.  

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09/12/2014, 21:18
Damir
Sólo para el director

Notas de juego

En el momento que nadie me mire, muy disimuladamente me meto un cuchillo en la manga, habrá que ajustar mas tarde las cuentas con Lady Dimitria por su osadia de antes...

Ya me comentaras si he de realizar alguna tirada para ello.

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10/12/2014, 12:02
Maeve Woden

-Kat, escúchame -le susurré, obligándola a bajar la copa que estaba otra vez a punto de llevarse a los labios-, no te conozco desde hace mucho pero te he cogido aprecio. Tenemos que salir de aquí. Tengo un sexto sentido para estas cosas ¿sabes? La última vez que tuve esta sensación y mi padre no me hizo caso atacaron el castillo, los mataron a todos y a mí me secuestraron. 

Puse cara de circunstancias. 

-Por favor -continué- créeme; tenemos que salir de aquí cuanto antes, no sé qué es exactamente, pero esto no me huele nada bien. Hay que largarse. Y rápido. 

Notas de juego

Jope... por algo tengo liderazgo, tiene que valerme para algo, no? jajaja es broma XD oki^^

Otra pregunta: obviamente yo no me voy a sentar al lado del hombre que nos ha sacado de ahí así que seguramente le he cedido ese honor a Katia, yo estoy al otro lado de ella así que, ¿a quién tengo a mi otro lado? ¿Estoy cerca de alguno de los que han puesto mala cara (Damir, Viridiana, etc.) como para hablar en voz baja con ellos?

Y la última: ¿cuántas puertas hay? ¿Están abiertas o cerradas?

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10/12/2014, 15:55
Temujin

Si hubiera podido elegir su asiento sin duda estaría en el extremo puesto al que le habían asignado, algo que le detuvo y le hizo dudar unos instantes. Por fortuna aquella mujer apenas reparó en su presencia y se limitó a hacer lo propio con ella, escudriñando con su analítica mirada al resto de comensales. Deseaba conocer sus intenciones, el ánimo que movía sus anteriores actos, comprender esa turbia emoción que agitaba su ansiedad. Fue entonces cuando el olor del exquisito banquete bloqueó su voluntad. Si la cena anterior supuso un gran alivio, aquello sobrepasaba si quiera merecerlo. Para entonces cuando las palabras de Don Carlos llamaron su atención, era pronto para buscar respuestas, pero sin duda todos los presentes necesitaban conocerla.

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10/12/2014, 22:06
Director

Notas de juego

Solo hay una puerta de entrada a esta sala.

Aparte de Katia, tienes al lado a este hombre,

Y al lado de este se encuentra Carlos. Y no, no te encuentras lo suficientemente cerca como para hablar con ellos en voz baja, jejeje.

Voy a esperar a que te conteste Katia, que tampoco quiero postear y cortaros.

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10/12/2014, 23:17
Maeve Woden

Notas de juego

Jajajajaja sía mí me llegas a poner que me rescata ése me voy con él seguro jajaja
pues nada, esperemos a ver qué dice ella pues...

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11/12/2014, 09:30
Ewald Jan Eggenberg

El repertorio de alimentos pasó desapercibido para Ewald, no conseguía pasar por alto lo sucedido. Contínuamente miraba a un lado y a otro , evitando mirar a su anfitriona, intentando ver si existía una posibilidad de salir de allí. Cada pocos minutos cogía uno de los relucientes cubiertos que tenía a mano y buscaba su reflejo en él para confirmar que todo estaba en su sitio.

Escuchó los comentarios de los comensales sorprendido que algunos tuvieran fuerzas para comer, o bien no debían saber lo que sucedía a su alrededor o bien formaban parte de la trampa en la que otros se veían envueltos. No sólo las damas de la mesa estaban inquietas, el extraño hombre oriental o señor Larranz mostraban síntomas de que habían vivido algo parecido a su experiencia.

Se guardó para si un cuchillo de los que había en la mesa, para tener la sensación de tener una pequeña seguridad. No se dejaría hacer otra vez aquello.