Partida Rol por web

El primer número es el de la puerta que acabáis de atravesar. Lo que está entre paréntesis indica los números que véis en las puertas de arriba, abajo / laterales)

Aún te preguntas por qué aceptaste el trabajo. Llegaste a un edificio blanco, un edificio cualquiera de oficinas, te vendaron los ojos y te pareció que caminaste durante un día entero. Cogiste más ascensores de los que habías limpiado en toda tu vida, y después de darte un trago de agua, aún con la venda puesta, te hicieron atravesar un espacio a gatas, del que saliste sujetándote a una escalerilla. Sonó un "clonc". Y silencio.

Lucius esperó unos instantes para escuchar si alguien le indicaba qué hacer a continuación.El tiempo pasaba,y,vendados sus ojos como estaban,le daba laa sensación de que no discernía con exactitud con qué rapidez lo hacía.

¿Hola? preguntó al fin,dubitativo ¿Hay alguien?¿puedo quitarme ya la venda?

Nadie respondía.Una vez llegado a un punto de nerviosismo sin retorno,decidió quitarsela,no sin antes advertir a quine fuera que estuviera gastándole ta broma sus intenciones. Bueno,me la quito,¿eh?  Silencio De acuerdo,allá voy

Lucius abrió sus ojos,ya libres de la tira de tela que leobstaculizaba la visión...

Enfocas y poco a poco ves el espacio donde te encuentras. Es una habitación muy extraña, todas las paredes, suelo y techo tienen la misma composición a base de cuadrados y paneles traslúcidos. Estás sólo allí, vestido con un mono azul de limpiador, un cubo con agua y jabón, una fregona y un cepillo. En cada una de las portezuelas, que están cerradas, hay un número grabado y el silencio reina alrededor. De repente, suena un fuerte golpe, no sabrías definir a qué distancia. Observas que en tu cubo hay un "1" enorme.

UNa vez retirada la venda y acostumbrados sus ojos a la esasa luz del lugar,Lucius quedó aún más extrañado por dónde se encontraba.

¿se supone que tengo que limpiar esto? preguntó en voz alta Sin embargo,la curiosidad ya aguijoneaba su mente.Esto le sonaba,pero sabía realmente porqué.

El joven dedicó unos instantes a contar el número de puertas que existían en la habitación,y en concreto intentó calcular por dónde había accedido instantes antes para intentar ubicarse espacialmente.

Tan sólo se trata de un sencillo problema de geometría... bien creo que entré desde esa dirección... se dijo hablando sólo mientras procuraba dejar orientados sus bártulos hacia donde creía haber procedido.

No escuchas respuesta a tus preguntas, tan sólo el rumor de unas voces a través de las paredes, bastante lejos.

Una vez presa de la curiosidad,el limpiador ni siquiera probó a abrir la puerta por la que había llegado.Resultaba evidente que estaba allí por algún tipo de prueba para su nuevo empleo,de modo que decidió avanzar.

Aunque las puertas que se alzaban ante él llamaban su atención por sus números escritos,la que más poderosamente lo incitaba era la más inaccesible: la del techo.

Lucius empuñó su arma preferida,la fregona, para intentar empujar la puerta superior.

Tardas poco en descubrir que la manivela que está delante de todas las puertas se gira, al girarla 360 grados, la puerta se mueve hacia la izquierda, con un extraño sonido de descompresión. Al abrirse, deja ver un espacio negro, vacío.

Lucius aprovechó las recién descubiertas escalerillas para trepar hacia la estancia superior,no sin antes asegurarde los pocos objetos de que disponía para subir con ellos.El limpiador atravesó la fregona y el cepillo bajo el asa del cubo,de modo que sujentando ambos aún con una sola mano,el cubo no cayera.Mientras asía con la mano derecha y los pies los peldaños,se encaramó hasta la trampilla superior,intentando no derramar demasiada agua en lo que izaba el cubo.

Una vez hecho,él mismo subió hasta la estancia superior.

*Cuando llegas a junto a la trampilla y te dispones a cruzar, te das cuenta de que esa oscuridad no era más que una pared negra, de algún material mineral que desconoces.

Lucius maldijo en silencio cuando llegó finalmente hasta la trampilla del techo.Le había costado bastante llegar hasta ella,y para colmo el cubo se había bamboleado tanto que parte del agua se había salido.y de repente,se le quedó la cara de tonto más impotente de su vida.No exisitía nada tras la trampilla,tan sólo pared.

Bastante indignado consigo mismo,por cometer tal estupidez,Lucius descendió al suelo.Antes de abrir otra puerta,el hombrecillo se dedicó a limpiar con la fregona toda el agua salpciada,escurriendo después en el cubo lo que pudo salvar de ella.

una vez acabada su tarea,se dirigió a la puerta grabada con el número 29...

Justo cuando te dispones a abrir la puerta, ésta no se abre, y esuchas un ruido muy fuerte, del estilo de una moto o un coche de fórmula 1. Es tan fuerte que te obliga a taparte los oídos y, cuando termina, te sientes mareado, incluso vomitas un poco. Cuando cesa, la puerta se abre con normalidad. Al otro lado, hay otra habitación, con las paredes verdes.

Muy enfadado consigo mismo,Julius termina de limpiar-otra vez- el suelo del extraño cuarto,ya que no sería nada decoroso que el propio encargado de la limpieza dejara su vómito en el suelo.

Cuando terminó,ya se le había pasado el dolor de cabeza causado por ese pitido,y las naúseas remitían,aunque no etnendía muy bien qué demonios estaba pasando.

Esto es muy extraño pensaba mientras accedía a la siguiente estancia...

Las paredes blancas te obligan a cerrar un poco los ojos nada más entrar. El silencio contínuo te hace sentir nervioso, crees que te volverás loco si algo no lo interrumpe, pero... no dejas de escuchar el sonido, y el ruido que haces tú mismo al moverte costosamente entre las salas.

La cinta que está en suelo es una cinta de tela, corriente, negra, lisa.

Recojo la cinta de tela...