Partida Rol por web

Solté una pequeña risa cuando la oí hablar en inglés -Jiji, well, no está tan mal... si quieres mejorar your english, tienes the perfect roommate- le dije como una broma. Bien, ya por fin estaba mucho más relajada y casi había olvidado que estaba triste hace un momento.

Ya cuando empezó a preguntarme sobre mi carrera de actriz, los ojos se me iluminaron. Siempre me encantaba hablar de ese tema -Me iba muy bien. Actuar era algo que me encantaba... wait a minute, please- le dije, antes de ponerme a buscar algo entre mis cosas... agg, quería buscar un póster que me había traído para decorar, pero no lo encontraba -Jo, no lo encuentro... well, quería enseñarte un cartel de la última obra que hice, but no lo encuentro...- le dije con cierta decepción, aunque intenté que se me pasase rápido -Well, me iba bastante bien en Broadway; mi padre era director y siempre me daba un papel que me gustase, no siempre era de prota, pero lo disfrutaba igual. Aparte me ponían en otras obras... es más, when the portal of the school appeared, yo iba a un casting para volver to stages- le expliqué con mucho gusto -But please, solo estamos hablando de mi... Where are you from?- le pregunté.

Espero que no tengamos que aprender lenguas, no me veo de heroína internacional. Ya estoy empezando a pillarle el ritmo a ésto de ordenar.

Oh, ya aparecerá el cartel, me haría ilusión verlo. Ahora tengo que decir el nombre de mi barrio, después de que Julia haya pronunciado cosas como "Brodgüei"? Sara, soy yo o te da miedo hablar de ti? Mmm... casi no salí de mi barrio hasta ayer. Es un barrio de la ciudad de Huesca, en España, que mmm, bueno, se llama... bueno, se llama Perpetuo Socorro. Se reirá del nombre, no se reirá del nombre? No hay mucho que hacer allí, así que vamos mucho al ayuntamiento a quejarnos por la falta de seguridad en las calles. Yo no sé ni que hacía por las tardes antes de internet.

Espera, yo leía, yo antes leía. Eh, yo también puedo mostrar ago interesante... pero no mucho. A ver, igual yo también puedo enseñarte algo... Me quito las gafas, las limpio un poco con aliento y una manga, me las vuelvo a poner, y miro a mi alrededor. Después del silencio, enseguida lo reconozco, tan cerrado y tan abierto como siempre. Doy unos pocos pasos, lo cojo con las dos manos, sonrío, me giro, y miro a Julia. Julia, te presento a mi mejor amigo. Se llama Lao Tse. Y le alargo un librito de poesía con poco más de 80 páginas. 

-España, Huesca and... ¿Perpetuo Socorro?- intenté pronunciarlo lo mejor que pude, pero parecía una guiri -Ese es the country of... guitarra, flamenco and... ¿gente corriendo delante de bulls? ¿no?- pregunté algo confusa; no sabía mucho de España, me sacabas de América o de Japón y ya no sabía donde estaba. Parecía que su vida antes era un poco... "escasa en experiencias divertidas"; pero seguro que eso cambia al estar aquí. Al fin y al cabo, es mi compañera de cuarto, yo la sacaré de su monótona vida.

Vi como buscaba algo y lo encontró: era un libro. Luego dijo que era su mejor amigo y algo de Lao Tse, y me lo alargó para que lo cogiera. No soy muy fan de los libros, para mi eran sinónimo de deberes; pero era mi amiga y mostré curiosidad al cogerlo. Lo abrí y lo ojeé un poco las primeras páginas, leyendolas y demás -Interesting...- balbuceé mientras lo ojeaba. Parecía ser una especie de libro de filosofía en forma de poemas -Joe, que culta es mi compañera- pensé mientras lo ojeaba -Is a... interesting book... Una pregunta, ¿porque tienes algo tan espiritual y profundo?- le pregunté con auténtica curiosidad; esto no era algo que alguien se leía por gusto, algún significado tendría.

Sí, mi país se ve como guitarras y flamenco y gente corriendo delante de toros... Bueno, bastante cerca. Sí, ese país.  
Hehe, espiritual y profundo... supongo que eso sería cierto si supiera lo que significa. Mmm... como contrlo de manera que parezca una historia? Me da algo de vergüenza que alguien crea que engo algo espiritual y profundo, mejor me justifico con la historia. De pequeña leía mucho, justo después de aprender a leer leía cualquier cosa porque me hacía gracia poder entender lo que ponía, leía hasta las etiquetas de los champús... y un día, cuando estaba en segundo o tercero de primaria me encontré este libro tirado en la calle, así que lo recogí. Me gusta mucho como suena, y lo que dice de que es mejor estar en silencio y no hacer nada, pero realmente no entiendo lo que dice. Es como la voz de un amigo que siempre dice lo mismo, o algo así. Y tú por qué tienes una katana? Y tú como conseguiste tu katana?
 

-Ahhh... interesting...- le dije mientras asentía con la cabeza -¿Quien deja por ahí tirado un libro como este?- pensé mientras miraba la portada del libro que aún tenía en la mano -Estar en silencio y no hacer nada... que consejo más horrible- pensé meditándolo mejor.

Me preguntó de donde saqué yo mi katana; bueno era comprensible, al igual que yo me preguntaba de donde sacó ella un libro de filosofía, ella se preguntará porqué una actriz americana tiene una espada oriental -Fue a present por mi decimoquinto cumpleaños. My mother me la regaló... she was japanese, y acabábamos de terminar una obra de teatro en la que interpretaba to a sheriff samurai... sound silly, but la obra fue un éxito. Para esa obra aprendí a esgrimir una katana para que mi actuación fuera lo mejor posible, y acabé cogiendo el gustillo a practicar con una, my mother lo notó y me la regaló para que siguiera practicando... me dijo que era de mi tataratataratatarabuelo Kai Gairah que era un herrero durante el periodo Edo y que había pasado como una baratija oxidada de padres a hijos; but encargó que la restauraran for me, ya que ella veía que si la iba a usar... always que la empuño, i remember la ilusión con la que la abracé luego y cuando se inventó el nombre...- le expliqué, y cada palabra reflejaba lo mucho que amaba esa espada y ese recuerdo -Es por eso que me molestó tanto que el profesor Bald me la quitara... isn't only a weapon; es una de las posesiones que más valor sentimental tiene for me- acabé diciendo, aunque se me notaba molesta por recordar que no la tenía.

Chicas, no quiero cortarlas pero creo que me voy a ir a mi habitacion y me quería despedir. Creo que debe haber una epidemia porque me noto más cansada. Igual se me ha pegado tu cansancio Julia, jijiji. Encantada de conocerlas.

Cuanta vida tiene esa katana, para contar su historia habría que escribir una saga familiar. Qué escuela más insensible. Ey, Sara se va.

Muchas gracias por todo Sara, si necesitas cualquier cosa pásate por aquí. Y sonrío un poco.

Igual tendríamos que encontrar una manera de que se la devuelvan, o de que "se la devuelvan", Sara. Mmm... uau, cuanta vida tiene tu katana, Julia. Has preguntado si te la puedes quedar desafilada o algo así? Y si no... Y si no... podríamos intentar convencer al profesor Bald entre las dos. Y si no... Y si no... mmm... podríamos... robarla... 

Hay que tener en cuenta que se me da bien hacer desaparecer cosas, no?
 

Cuando Sara se despidió le dediqué una sonrisa -Igualmente Sara, bye bye- le dije siendo simpática. Luego volví a hablar con mi Sara -Don`t worry por eso Sara. Bald me dijo que si dos teachers se hacían responsables de mi y ella me la devolverían... tenía pensado preguntarselo al par que nos ayudó cuando ese fake but real attack en el salón de actos. No hace falta ponerse en plan Ocean's Eleven... and one thing more, no llames al teacher Bald así delante suya... creo que se llama Valda en verdad; Bald es como un mote que le he puesto por lo obvio- le dije para que se tranquilizara y desde luego para que no llame calvo al profesor y se meta en un lío. Seguro que esos dos profes aceptan hacerse cargo, al fin y al cabo uno de ellos usa una katana.

Luego de eso, no pude evitar soltar un sonoro bostezo; el comentario de la Sara que se había ido me recordó de golpe lo cansada que estaba -Uaaagh... Sara, creo que me voy a echar un ratito, tengo un poco de sueño- le dije mientras me rascaba un ojo y me iba sentando en mi cama -Ya cuando me despierte... continuamos talking, ok?- le dije ya con un tono de que me caía del sueño mientras me tumbaba en la cama -Goodnight... Uagh- y con ese bostezo me quedé frita en la cama.

Bufaba levemente al ver que Gustaf no hacía nada y froté mis manos rápidamente esperando a que estas empezaran a sudar, corriendo y esperando de que así fuera y cuando eso pasó se lanzó corriendo hacia una de las bestias, buscando tocar sus ojos con el veneno para dificultar su vista, quizás así podría ganar tiempo para Gustaf y Ban, saltando y restregando de hecho toda la cara de la criatura con la mano con la espera de que esta hubiera acabado con los ojos también empapados de veneno.

-¡Gustaf-kun! ¡Haz algo ahora!-

Viendo que está todo más o menos en orden y que Julia está más o menos bien, empiezo a pensar en qué me apetece hacer ahora. Una pena que no se diera la ocasión de robar algo... bueno, ya se me ocurrirá alguna cosa. Y ese brote cleptómano, Sara? Ah, no es por cleptómana, igual gastarle una broma a un profe o algo así también serviría, aunque aquí igual sí que se darían cuenta de que fui yo... es un buen desafío. Creo que he visto demasiado internet o tele o algo así. Por eso igual me cuesta recordar que se llama Valda y no Bald, internet te carcome la capacidad de concentrarte, dicen. El profe de ética se llama Valda, Sara, repítelo en tu mente, se llama Valda, se llama Valda, Valda...

Qué bien que puedas recuperar tu katana. Y no te preocupes, seguro que recuerdo que se llama... Valda Valda Valda... Valda. Buenas no...

Y antes de que pueda decir nada más, Julia se cae frita, como que de golpe ya duerme profundamente. Como debe cansar mentalmente lo de las copias. Y ahora qué hago? Pos ya que estoy un poco de Lao Tse pa calmar la mente, que vaya día eh, aquí haciendo daño a Julia, poniéndote tÓah esquizofrénica ahí, me irá bien escuchar algo que ya me sé de memoria, Sara. 

Así que me pongo a leer y a ver si voy pillando sueño.

-Pero...yo...lo...vi...-cada palabra la decía en un tono mas bajo y me quede un momento mirando al suelo- ¡De acuerdo, no me crean entonces me tender que hacer cargo yo solo!- grite antes de salir de la habitación corriendo.

No sabía hacía donde corría así tras unos segundos corriendo pare y mire al suelo.

¿Pero que puedo hacer yo? No soy mas que un simple estudiante y ni siquiera se a que me enfrento. Supongo que lo único que puedo hacer es preguntar a todos lo que vea. Pero primero necesito un libreta donde apuntar lo que me digan.

Sin darme cuenta había acabado relativamente cerca de mi habitación así que fui allí cogí una libreta, un bolígrafo y un de mis pilas de la mochila. La pila me la metí en la boca y la empecé a chupar  para "recargarme" y salí del cuarto. Al primer alumno que vi le pregunte si había visto alguien de aspecto sospechoso y luego a otro y luego a otro así durante un rato anotando todo dato relevante.

El ataque improvisado de Makoto pareció funcionar ya que al tocar a uno de los seres, un quejido se oyó y retrocedió hacia atrás, aullando hacia su compañero. Entre aullidos pudisteis escuchar: "Hoekom doen hulle ons aan te val"como si estuviera hablando en una lengua antigua y mística. Vista la situación, al parecer solo quedaba una criatura que os pudiese atacar.

Parece que habrá que nivelar todo esto. - dijo una voz que nadie en el grupo supo identificar.

Tras escuchar esto, todos notais como os fallan las fuerzas durante un segundo. Una sensación similar a la que tuvisteis cuando Wolfgang os aumentó los poderes, pero al revés. Antes de que os dierais cuenta, no teníais esa fuerza que os daban vuestros dones. 

A ver como salís de esta, chavales.

Sin perder un segundo y viendo vuestro desconcierto, el ser saltó avalanzandose hacia Ban, a quién aprisionó entre sus patas, lo que hacía que no pudiera hacer nada

En tu búsqueda de encontrar a alguien que hubiese visto algo, solo te cruzaste con gente escéptica que te tomó de loco como mínimo. La única respuesta que tuviste fue la de Adwin que te dijo:

¿El primer día y alguien sospechoso? Tú por ejemplo, but chill bro. Tienes que aclimatarte. Anda, vamos hacia las habitaciones. Necesitas descansar, tienes muy mala cara. ¿Vienes?

-Shimatta-

Mencionaba tragando saliva y corriendo me dirigí hacia la bestia que estaba atacando a Ban, intentando lanzar un placaje con mi menudo cuerpo para apartarla de encima del muchacho, tan solo golpeando al ser pero sin provocar precisamente demasiado empuje, era alguien físicamente débil y con razón.

El débil empujón de Makoto hizo que saliese rebotado del lobo sin moverle ni un milímetro el cual te miró para poco despues volverse y volver a empezar a acercar su cara hacia Ban.

Parece que esos segundos habían conseguido que Ban se serenara y tomó la iniciativa ya que cerró los ojos y sacó de una funda que llevaba amarrada a la espalda, una espada con la que golpeó al ser y se consiguió zafar. El ser había quedado aturdido. Con una criatura aturdida y otra cegada, Ban empezó a correr

¡Vamos pasmarotes! ¿Quereis morir?

-¡Si estaba intentando evitar que te comiese! ¡Shimatta!-

Pronunciaba antes de empezar a correr. Fijándome en que Gustaf no se movía, agarrándolo de una de las mangas para empezar a correr tirando de el.

-¡Vamos!-

Suspire de nada me servia desesperarme así que decidí esperar a que el hiciera el siguiente movimiento.

-Si, creo que me estoy preocupando en exceso -suspiro- ¿vamos a comer algo? me muero de hambre. No he comido nada desde que llegamos, bueno casi nada.

No paraba de darle vueltas a ese hombre pero acompañe a Adwin intentando dejarlo pasar.

Había sido una pelea poco común. Pero aún así habíais conseguido escapar. Una vez llegados a la escuela, unos cuantos estudiantes se quedaron mirandoos.

Ey, tranquilos, que la comida no se va a acabar raritos. Suelen hacer comida para todos, no hace falta que corrais.

Ban no dió mucha importancia ese comentario y siguió a lo suyo.

¡¿Qué narices eran esas cosas?! - os gritó a Gustaf y a ti. ¡¿Pero que es esto Hogwarts y esos son los mini fluffys?!

Mirad, demasiadas emociones por hoy. Prefiero ni saberlo. Me piro a dormir. Deberíais hacer lo mismo, prefiero no levantar miradas, no deberíamos haber estado allí. Mañana nos vemos, chavales- dijo Ban, despidiendose de forma rápida.