Partida Rol por web

[DF 05/19] Sangre y Arena

[ARENA] Primer combate: tanteando

Cargando editor
04/05/2019, 21:35
Gronk

Gronk miró como el goblin deslenguado ardía. Se estremeció, la brujería le preocupaba, pero al menos sabía que obedecía a un poderos y malvado o brujo que asesinaba por placer, algo tradicional en todo orco. 

El semiorco miró a los bufones y payasos del palco y vió que ponían los pulgares boca abajo. ¿Qué querría decir eso? Era un misterio. Bueno, el combate ya había terminado y tenían que irse. Limpió su hacha en la arena y desfiló hacia los calabozos. No se le ocurrió rematar al Ettin. Ahora estaba en manos de los Dioses. 

Cargando editor
04/05/2019, 22:02
Tenshia

Dejo que el goblin salga corriendo. Ya no tiene sentido seguir reteniéndole. Lo que quería estaba en mi mano, un signo para demostrar a todo aquel que volviera a tener el valor o la estupidez de mentarme que acabaría deslenguado...

- Corre y díselo a todos. Ah no, que no puedes... - río socarronamente.

Pero en ese momento una llamarada lo envuelve haciendo que mi rostro busque entre la gente del palco a alguien con esas capacidades mágicas. Lanzo una mirada severa. - Que poco dura la diversión si todo acaba abrasado... - me lamento negando con la cabeza mientras me agacho a recoger la lanza que solté momentos antes de sacar la daga.

Vuelvo mi vista por última vez al palco y escupo en el suelo antes de entrar de nuevo a las angostas celdas. - Como odio tener que volver ahí... malditos sean todos los dioses por tenerme encerrada como a una bestia - mascullo mientras se me ve desaparecer.

Cargando editor
05/05/2019, 09:26
Rashid

El monstruoso ser de dos cabezas cayó al suelo sin fuerza ya para mantenerse en pie. A pesar de estar malherido, al final habían sido necesarios los virulentos ataques combinados de tres gladiadores para hacerle hincar la rodilla. Pero habían podido con el temible Ettin.

Ahora el público pedía su muerte, o eso le habían explicado que significaba el sencillo gesto de apuntar con el dedo pulgar hacia abajo. El Rakasha sintió rabia al ver con que facilidad decidían acerca de la vida o la muerte de un ser vivo, sin haber hecho otra cosa para ello que pagar las pocas monedas que les permitían la entrada a aquel espectáculo. Pero había algo más detrás de todo aquello. Él era un guerrero y sabía que no pocas batallas se libraban como demostración de poder, y era eso lo que el público de la arena estaba haciendo ahora mismo: demostrar su poder. Un simple gesto y el gladiador caído era ejecutado por el victorioso. Estaban jugando a ser Dioses sin mancharse las manos.

Vio como sus compañeros rechazaban seguir la orden dada y decidió imitarlos. Él era un guerrero y, como tal, había aprendido a luchar hasta la muerte, pero también a respetar a sus enemigos. No hay honor cuando se mata por diversión. Ni por la propia, ni por la de otros.

Caminó hacia el foso con la mirada puesta al frente.