Partida Rol por web

Dishonored Salvaje: El puñal de Dunwall

¿A la tercera va la vencida?

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12/11/2018, 14:54
Vladko

Sin saberlo, Vladko estaba de acuerdo con Sara. Ese tipo de misiones encajaban bastante bien en lo que hacían antes de que todo se torciera por la plaga: infiltración, asesinato, recuperación... y encima estaba la Abadía implicada. Todo redondo. El tyviano dedicó una mirada de reojo a Elian. ¿Qué pensaría él de enfrentarse a sus antiguos compañeros? Por lo poco que sabía de su antigua vida, no les tenía mucho aprecio, pero esperaba de corazón que no se lanzara como un salvaje en cuanto los viera. Seguro que el asesinato de Homoj - no, la torpeza - les enseñara a todos a tener más cuidado.

—Si como dices está bien pagado... Vladko se apunta —dijo alzando levemente la mano —Además, seguro que hay cosas de valor que podemos recuperar de camino en esos despachos. Y en las manos de los Decanos.

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13/11/2018, 22:58
Elian

Los ojos y el entendimiento de Elian se nublaron por un segundo. Descubrir que en aquel próximo encargo podía acabar con varios Decanos era algo que superaba sus espectativas. Su rostro se tornó grave y su voz sono profunda, gutural, casi como si hablara el monstruo lleno de odio hacia los Decanos que habitaba en él.

- Esos malnacidos pagaran uno a uno - dijo apretando los puños - Nunca se cansan de sus jueguecitos de espias y asesinos de pacotilla. Es hora de que les volvamos a recordar quien controlará la ciudad en un futuro... - estiró varias veces el cuello a un lado y a otro; todas las vértebras sonaron con un crujido casi lastimero - Es hora de trabajar..... - miró a sus compañeros y relajó los músculos mientras llevaba su mano hacia la empuñadura de su espada y la rozaba con la punta de sus dedos - ¿Por donde empezamos?

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14/11/2018, 00:28
Director

Música

- Muy bien. Os daré los datos necesarios para poneros en contacto con Miranda Feinmann. Mañana saldréis de la ciudad hacia el norte, donde se encuentra la Academia de Filosofía Natural, fuera de las fronteras de Dunwall. - os dice Bille antes de dar carpetazo a los archivos sobre trabajos y ponerse a otra cosa.

Salís de su despacho para pensar sobre el nuevo objetivo a cumplir. Entrar en la academia puede ser relativamente sencillo por la noche, mucho más aún si la que os da acceso es una profesora que imparte allí. El problema es toparse con los decanos. No son como los guardias o lo chicos de Bottle Street con los que a veces os habéis enfrentado, ya fuese en una misión o para sacarlos de vuestro territorio. Los decanos están hechos de otra pasta...

Entrenados desde niños, arrancados de los brazos de sus familias, son sometidos a rigurosas pruebas. Los que por suerte o por desgracia no las superan, son sacrificados, y los supervivientes pasan a las filas de este grupo de fanáticos. Están entrenados y saben luchar. Especialmente contra los poderes sobrenaturales que el Forastero otorga. Finalmente cuentan con dos armas letales. Por un lado tienen a los molosos, perros enormes de combate que son entrenados especialmente para rastrear, perseguir y atacar. Por último, sabéis que hay rumores sobre un artilugio que utilizan para incapacitar los poderes del forastero. No sabéis mucho sobre ellos, pero los rumores no son nada alentadores.

Cuando pasa el día, Billie os entrega los datos necesarios para contactar con Miranda. La Academia se encuentra en las afueras de Dunwall, en el 15 de Oxblood Way. Su despacho es el 417, pero os citaréis para la noche del día siguiente en la zona trasera, desde donde se accede a los laboratorios. 

Pasáis la noche en vuestra guarida y partís a la mañana siguiente. Llegar a la zona norte de Dunwall es complicado, especialmente desde que llegó la plaga. Sólo el puente de Kaldwin sigue en pie y está atestado de guardias que intentan crear una especie de zona de cuarentena, para que los barrios más adinerados no se vean tan afectados por el contagio.

En los barrios trabajadores hay revueltas y la guardia carga contra ellas. La ciudad cada día que pasa es más un caos. No parece que nada pueda detener a las ratas. Dunwall se hunde y acabará llevándose miles de vidas por el camino...   

Bordeando las zonas calientes tardáis un día entero en llegar a la Academia. Es de noche y está cerrada, pero sabéis que allí hay alguien que os espera...

Bajo la tenue luz de una linterna de aceite os espera una mujer de mediana edad acompañada de un sabueso. - Buenas noches. - os saluda al ver que os aproximáis a ella y viendo que vais con vuestras máscaras y no puede ver vuestra expresión, continúa. - Tengo que darles buenas y malas noticias. La buena es que tengo la llave para que entren a la Academia. La mala es que es lo único que he podido sacar de mi despacho antes de que entraran los decanos a revolverlo todo esta tarde. Siguen allí, por lo que les aconsejo que no se acerquen a la 217. Yo no puedo acompañarles, pues me han relegado de mis investigaciones hasta que no se aclare mi estatus.

- Por si se lo preguntan, es falso que yo haya investigado nada relacionado con el Forastero. No van a encontrar nada y por esa misma razón me temo que Gustav Kalmer, quiera incriminarme con documentos falsos. No se que tiene ese hombre en mi contra, pero parece ser desea verme ajusticiada. Pregunten todo lo que necesiten, pues una vez entren no podré ayudarles más...

 

 

Notas de juego

Muchos de vosotros habéis oído hablar a cerca de la Academia. Fundada hace casi tres siglos, es la principal autoridad de la ciencia en todo el Imperio de las Islas. Aceptando las mejores mentes de todos los continentes, la admisión a esta prestigiosa organización es extremadamente selectiva, debido a un largo y arduo proceso de solicitud. Como tal, solo se permite a los mejores y más brillantes entrar en este santuario exclusivo ubicado en algún lugar del borde de Dunwall; firmemente fuera del alcance de todos "excepto de los miembros estimados y los pocos estudiantes aceptados cada año".

Una organización antigua y estimada, sirve como un punto focal para el estudio de la naturaleza, el cuerpo humano, los cielos y el universo físico. Como tal, sus salas están llenas de químicos, cosmólogos, filósofos, alquimistas, viviseccionistas y cartógrafos.

Para aquellos que no se inician en su academia de clase alta, la única incursión en este mundo exclusivo incluye destellos de cajas exóticas que se llevan a las puertas de atrás del río Wrenhaven, o los olores extraños que surgen de varias chimeneas en la cima de la Academia.

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14/11/2018, 02:09
Vladko

Habían tenido todo el día para prepararse, lo que Vladko aprovechó para meditar, reorganizar sus pensamientos, fumarse una cajetilla entera de cigarrillos, poner a punto su equipo y asegurarse que las fijaciones de su máscara estaban en buen estado. No sólo era su seña de identidad como Ballenero, sino que servía como última protección frente a la Guardia y los Decanos. Y precisamente era contra ellos contra quienes irían aquella noche.

De camino a la Academia, el grupo se mantuvo más o menos separado, aprovechando las sombras y caminando como sólo profesionales podían hacer. Sin embargo, durante un tramo Vladko se permitió acercarse a Elian.

—Elian, друг, amigo, ¿cómo estás? —parecía una preocupación sincera por los sentimientos del asesino —Te toca esto de cerca, lo sé. Pero sabes que el encargo no es pasarlos a todos a cuchillo, ¿da? ¿Por qué no intentamos pasar desapercibidos? Vladko se encarga de esos sabuesos, prometido.

Todos tenían un bagaje emocional importante, por lo que no sabía cómo reaccionaría ninguno en determinadas situaciones. Vladko lo único que quería era permanecer con vida al final del día. Y de la semana. Y del año.

Quiere que ese tal Gustav Kalmer desaparezca —resumió cuando se reunieron con la mujer y ésta les puso al corriente de las novedades —Y si podemos hacer que las sospechas recaigan sobre él, mejor. Imagino que de poco le servirá que él muera si los Decanos encuentran algo que la incrimine, ¿da? Vale, ¿cuántos Decanos y perros han venido? ¿Cuál es el despacho de Kalmer? Entiendo que él está aquí todavía, si no, no sé qué hacemos aquí.

Notas de juego

Entiendo que recuperamos nuestros Puntos de Poder, ¿no Director?

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14/11/2018, 02:31
Sara Cimitar

Parecía no ser la única vengativa, Elian aparentaba tantas aansias de venganza como ella, aunque si su venganza estaba dirigida hacia quienes dañaban a su familia de balleneros, la del hombre parecían enfocadas en los decanos. Durante los años de entrenamiento creía no haber coincidido con Elian, o no tenía algo que hiciera que Sara le recordara a simple vista a diferencia de Vladko que pese a no conocerle le había visto varias veces con una rata, o Magia, con la que nunca había entablado conversación, pero la reconocía fumando día y noche como la que más.

- yo cubriré tu espalda... Esto... Elian... - era bueno saber el nombre de los implicados, facilitaba la comunicación. Sara sabía mejor que nadie como la venganza corroía el interior más que si una rata viviera en tu estómago, y si bien le habían dicho lo banal de la venganza por matar a dos hombres y un tercero por accidente, no se sentía con el derecho a reprocharle nada. Solo actuaría como la sombra vengativa que sabía que era, en pro a la protección de su compañero.

No sabía si a Vladko le parecería bien eso, aunque si suponía que había sido capaz de mostrar que aquello no era un juego para ella, pese a que le gustara sonreír constantemente, servir debidamente a Daud y por ello vivir y matar por los balleneros eran su motivo de vida. Solo quería declarar que si la ira de Elian se desbordaba, e iniciaba su propia venganza, ella estaría para apoyarle.

Miró a Vladko para ver en su rostro si le parecía bien, hasta que la reunión con la profesora llegó y con ella todos se pusieron sus máscaras. Solo una llave, a lo que Sara suspiró, si era solo por una miserable cerradura, ella misma la abriría, nada demasiado difícil. En lugar de eso cabía esperar algo más que no llegó, ¡maldita sea! Que poca información... Una llave y ese "evitar habitación 217", tenían más información de Daud que de la mujer, eso era hacer las cosas a medias...

Pero estaba preparada, le tocara el trabajo que le tocara, lo haría lo mejor posible, aunque no le hacíasn mucha gracia las trampas mencionadas por Daud.

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15/11/2018, 00:34
Elian

Elian respiraba agitadamente bajo la máscara. Había pasado la noche y el día especialmente nervioso. Las zonas de visión, a pesar de lo preparadas que estabas estas viejas máscaras, estaban empañadas un poco, pero supo contenerse. Recordó que parte del entrenamiento como buen asesino era controlar sus sentimientos, sus impulsos, incluso su ira. Sólo el estar en aquel lugar ya jugaba en su contra. Era dificil no verse reflejado en algun cristal o en alguna sombra, recuerdos vagos de una infancia traumática y una vida dedicada a hacer pagar a todos los Decanos por aquellos amargos años de llanto y dolor. Pero todo aquello ahora no importaba. Sus compañeros, en un detalle que Elian agradecía profundamente, le mostraron su apoyo incondicional pero dejando claro las condiciones del "juego" del gato y el ratón que esa noche tenían que interpretar. Eso ayudó a Elian, Tanto las palabras de sosiego de Vladko como las de apoyo de la joven recien llegada sosegaron los ánimos del asesino. Quizá su vendetta particular debería esperar un poco, pero esperaba que ningún Decano se pusiera demasiado a tiro o no se podría contener.

Escuchó atentamente cada detalle que salió de la boca de la mujer y arrugó la frente bajo la máscara. No aportaba demasiado a los datos que ya conocían. Elian se sumó impaciente al interrogatorio de sus compañeros.

- ¿Tiene algún mapa del edificio? ¿Algo que nos ayude a orientarnos? - aprovechó aquellos segundos para insistir también en las preguntas que ya había formulado Vladko - ¿Sabe cuantos són? ¿Qué tipo de armamento llevan? ¿Si esperan refuerzos? - tomo aliento, notaba que empezaba a acelerarse demasiado preguntando; tras unos segundos prosiguió - ¿Ha notado algún cambio de rutina extraño en los últimos días en compañeros o guardias del lugar? Cualquier detalle, por pequeño que le parezca, nos puede ser útil...

El éxito o el fracaso de la mayoría de misiones dependían de un detalle, a veces incluso absurdo, que el asesino conocía y la víctima no. Siempre era así. Matar, cobrar, sobrevivir....para seguir matando.

Pero en esta ocasión no era cuestión de dinero, no era cuestión de elixir, no era cuestión de supervivencia. Esta vez no. Elian sabía que podría cumplir la misión, que trabajaría codo con codo con sus compañeros, cubriéndose, ayudándose.... pero que, pese a todo, formaría parte de su venganza personal, de esa "vendetta" que recreaba cada noche en sus atormentadas pesadillas....una y otra vez.
 

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15/11/2018, 22:04
Matka

Matka pasó ese tiempo antes de la misión preparando sus armas y su cabeza. Mantener la cabeza fría es algo que no le costaba hacer, porque la vida le había enseñado a ser lo suficientemente despreocupada y encargarse sólo de su propio beneficio. Ahora tenía una familia de compañeros con los que compartía oficio y afecto, pero en lo que a los demás respecta, la asesina era lo más parecido a un ángel de la muerte implacable.

Se fumó cuantos cigarrillos le pedía el cuerpo, que significaba uno detrás de otro. A pesar de su temple, los nervios previos a lo desconocido estaban ahí.

Ahora que estaban interrogando a esa mujer, mil dudas la asaltaban. Las principales ya habían sido formuladas. Saber cuanto más mejor de quienes iban a ser sus enemigos era una ventaja siempre. 

-¿Cómo entraremos en el despacho? ¿Qué tipo de seguridad tiene ese lugar y esa puerta concreta? ¿Y para salir, una vez cumplida la misión? ¿Hay algún modo fácil de hacerlo?

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15/11/2018, 23:23
Miranda Feinmann

- Exactamente. - responde a la primera pregunta de Vladko. - Sí matan a Kalmer pero encuentran pruebas en mi contra, únicamente servirá para que recaigan aún más sospechas sobre mi persona. Sobra decir que les he contratado a ustedes por que son discretos y no dejarán pruebas de su asesinato. Si deciden quitárselo de en medio, hagan que parezca una desaparición o un accidente. 

- Sí. Kalmer está trabajando en uno de sus proyectos día y noche, por eso les he citado a estas horas. Su despacho está adyacente al mío, es el 416. En cuanto al numero de decanos... no sabría decirle. - continúa aclarando aquello que el tyviano requiere. - Quizá media docena de ellos. Sólo se que hay uno en la entrada principal con uno de esos horribles perros. Casi se lanza a por mi fiel compañero. - dice acariciando al sabueso que la acompaña y recibe un par de lametones en la mano como respuesta.  

La mujer parece tener una relación bastante afectiva con el perro. Suponéis que son cosas de la gente de alta alcurnia. Los perros sirven para cazar o proteger las casas, no son animales para hacer compañía y mucho menos amigos. Todos menos Vladko por su afinidad con las alimañas os extrañáis. Elian quizá el que más, pues lo que han visto sus ojos han sido maltratos de toda clase, peleas entre canes para enseñarles a matar, dejarles sin comida para que sean más voraces, etc. Y con los que no valían o acababan malheridos o muertos, al río.

- Encontrarán un mapa en la planta baja. Desde aquí. - dice señalando la puerta que queda a su espalda. - se accede a la cafetería. Es la zona menos vigilada de la Academia. Sigan hacía la entrada principal y allí lo verán cerca de placas conmemorativas y bustos de antiguos directores.

-Mmm... - murmura pensativa tras la avalancha de preguntas que formula Elian. - Los guardias de seguridad apenas son dos y llevan porras. Hacen la ronda tranquilamente y no les supondrán ningún problema. Intenten no hacerles daño por favor, son buena gente, solo hacen su trabajo. Les conozco desde hace años, tienen familias que alimentar. 

La mujer parece sincera en su preocupación por los guardias de la Academia. Lo que parece es ignorar el armamento que puedan tener los decanos. No tiene ni idea. Pero Elian sabe perfectamente que van armados con un sable, una pistola y a veces con granadas. 

- ¿Algo distinto?... la Academia está como siempre. Lo único diferente es que están reformando el aula magna que está en la planta baja y no se puede entrar. Los albañiles llevan semanas con ello... Y bueno, como siempre hay rumores infundados sobre mi persona y la relación que tengo con el Forastero y el ocultismo. Son unos desgraciados que no soportan que una mujer haya llegado a los más alto por méritos propios.

Miranda se gira entonces a Matka, la mujer que supone es más cercana a su edad, por la voz que sale de su máscara de ballenero. Dos mujeres antagónicas y que pese a todo trabajan ahora por un objetivo común, de alguna manera en el mismo bando...

- Los despachos de los profesores no tienen más seguridad que una llave particular. - dice mostrándole el llavero a Matka. - Aquí tengo cuatro llaves: La de los laboratorios, la del aula en la que imparto Vivisección avanzada, la de mi despacho y la de la puerta principal. La cafetería... - dice señalando a la puerta que hay a su espalda, de nuevo. - tiene la puerta estropeada desde hace tiempo y no la han reparado. Será el lugar desde el que podrán entrar y salir de forma segura.  

- Lo que si les recomiendo. - dice refiriéndose a la seguridad, mientras entrega las llaves a la ballenera tyviana. - es que no se acerquen al despacho de Anton Sokolov, el director de la Academia. Tiene medidas de seguridad que pueden freirles en un instante.

Finalmente la mujer se despide de vosotros y se marcha paseando al perro como si tal cosa, desapareciendo en la oscuridad de la noche....

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16/11/2018, 00:24
Sara Cimitar

Accidente o desaparición, no matar a los guardias, evitar el despacho del director y vigilar con el aula 417, encontrar pruebas falsas, ¿ese era el resumen? Si no podían acercarse a los decanos por seguridad, ¿como les quitarían las pruebas que tuvieran?

Accidentes y desapariciones, eso no se le daba tan bien, se supone que debía utilizar el reverso de su arma con los guardias, ¿pero como fingía un accidente si se topaba con un decano? Billie y Daud siempre le hablaron de pasar desapercibida y matar limpiamente,... Se creaban en su mente nuevos retos...

- ¿y la cloaca más cercana? - si se trataba de hacer desaparecer algo, las ratas eran el mejor método, recordar a Homoj le bastaba para saberlo, en ese caso no hicieron el trabajo de limpieza por la interrupción de Vladko, pero apostaría a que no dejarían ni los huesos.

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16/11/2018, 02:02
Vladko

La mujer dio toda la información que le pidieron, aunque no tuvo respuestas para todas, sobre todo para las más importantes y que podían matarles.

Despacho 416. Dos guardias. Alrededor de seis Decanos. Al menos un sabueso. No acercarse al despacho de Sokolov, cuyo número veremos en el mapa. Vladko repasó mentalmente la información de que disponían para no meter la pata durante la misión. Muchos puntos negros.

Aquí mi plan —dijo a sus compañeros cuando se marchó la parte contratante —Reducimos al Decano de la puerta y nos deshacemos de su sabueso: necesitamos entrar por el café y tener la salida libre de problemas. Cogemos ese mapa y nos desplegamos para localizar a los Decanos y a los Guardias, así los incapacitamos sin levantar sospechas. Ataques rápidos y contundentes, sin derramar sangre.

Miró deliberadamente a Sara cuando dijo esto último. Deseaba de todo corazón que entendiera lo que quería decir eso.

Una vez los Decanos estén fuera, sólo tenemos que ver qué hay en el despacho de esa mujer, coger las pruebas, si las hay, e ir a por ese Kalmer. Incluso puedo hacer que el sabueso de la entrada se encargue de él si conseguimos no matarlo a la primera. ¿Qué opináis?

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16/11/2018, 02:53
Sara Cimitar

Sara suspiró, estaba acostumbrada a usar el filo y punta de sus armas, tomó su cimitarra y le dio la vuelta, de ese modo un ataque inconsciente golpearía también con el reverso, y sujetó su estoque hacia atrás para golpear con su empuñadura en vez de atravesar al objetivo... Esto iba a ser un poco soso, pero era parte de la misión.

Notas de juego

Para quien no lo sepa (pues lo dijo cuando íbamos los tres de vuelta) golpes no letales (-1) :3

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16/11/2018, 17:06

- A mi me parece bien - dijo Maevis abriendo la boca por primera vez. Aún seguía pensativa por su otra misión, sin embargo era perfectamente capaz de poner su mente en el momento presente. - Solo me gustaría que nos asegurásemos de que no vana culpar a nuestra clienta... Algo que pueda alejar las sospechas de ella lo más posible - compartió con sus compañeros de forma escueta. Por más que entraran y actuaran de forma discreta, habría al menos uno o dos muertos en este asunto. La mujer que los había contratado, a pesar de su aversión por cultos ajenos había suscitado la simpatía de la joven, a parte. Ella entendía cuan facilmente las mujeres podían ser subestimadas en un mundo de hombres... Quizás por eso entre los balleneros se sentía especialmente cómoda. Mientras hicieras bien tu trabajo....  - Quizás podríamos hacer pasar el ataque como un robo, o algo así. - sugirió.

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18/11/2018, 13:03
Elian

Elian escuchó atentamente a sus compañeros. Ya tenían clara la misión. Ya tenían bastante más información que antes. Ya tenían un objetivo claro y un plan casi marcado. Era el momento de cerrar los detalles y actuar.

- Tiene razón Maevis - comentó Elian tras meditar un momento - Si no robamos algo, no quedará nada claro por que alguien asaltó y mató a varios decanos justo en este lugar. A parte de matar el sujeto, debemos robar algo. Pero no debe ser del despacho de la víctima o seguiran pensando en nuestra clienta - se detuvo observando por un instante la reacción de sus compañeros - Debe ser otra cosa, de otro despacho, algo que nos llame la atención. Liquidamos a Kalmer y salimos. Rápido y limpio... - apretó los puños - ...y de paso.... dos decanos malnacidos menos que infectaran este mundo.

Volvió a mirar a sus compañeros que empezaban a empuñar sus armas.

- Señores, tenemos un trabajo que hacer. Unos Decanos nos esperan. - y empezó a caminar lentamente hacia la entrada de la cafetería. La máscara ocultaba el odio que mostraba su rostro.

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19/11/2018, 00:13
Director

Elian, con paso firme y decidido, se adentra por la puerta de la cafetería que apenas opone resistencia para acceder a su interior. La falta de mantenimiento de aquella puerta os da a entender el poco interés que tiene la dirección de la institución en el cuidado de la cafetería. Es un lugar dedicado al esparcimiento de los alumnos, donde poder compartir ideas o directamente hablar de cosas ajenas a sus estudios y simplemente socializar.

La sala está bastante ordenada y limpia, las sillas puestas sobre las mesas boca abajo y un el suelo reluciente en el que casi podéis ver reflejadas vuestras siluetas. El ruido de vuestros pasos resuena un poco pese a ser cautelosos. No hay un sólo alma en el lugar salvo vosotros cinco. 

En la barra pueden verse ceniceros de metal incrustados, algo típico en una zona de esparcimiento. Tras ella hay un surtidor de cerveza y más allá, en la pared del fondo una vitrina con botellas de vino, licor y algunas de mayor graduación, además de tabaco y puros. Quizá no sea el botín que buscáis, pero nada os impide haceros con algo de lo que allí se guarda... para alegrar las horas de descanso en vuestra guarida.

Veis que allí no hay nada que os suscite interés, más allá de lo anteriormente mencionado. Tras unas cortinas podéis ver como hay una puerta acristalada y al apartarlas con sumo cuidado podéis ver un largo pasillo. La puerta esta vez bien engrasada se abre sin hacer ningún ruido. 

Con Elian al frente os disponéis de la siguiente forma. Vladko y Sara a los lados, Matka y Maevis cubriendo la retaguardia..

Las salas que veis a derecha e izquierda tienen carteles que indican lo que puede encontrarse en su interior. Son salas donde principalmente se lleva la administración, los expedientes y la secretaría de la institución, en resumen, pura burocracia académica.  

Tras llegar al otro extremo del pasillo hay una amplia puerta abierta, de dos hojas y hecha de madera de calidad. Al otro lado del arco puede verse como se abre ante vosotros una gran recepción. A vuestra derecha la entrada principal que da al sur y a vuestra izquierda la gran escalera que va tanto hacia los pisos inferiores como superiores. Entre medio podéis ver multitud de bustos, estatuas, placas conmemorativas y demás parafernalia para recordar cuan grandes fueron los que pasaron por estas aulas llegando a lo más alto del mundo académico.

En ese momento recordáis que en una ocasión corrió el rumor de que Daud, en su juventud, había estudiado durante un semestre en la Académia de Filosofía Natural. No os lo imaginabais entonces y no lo podéis hacer ahora... ¿pero y si fuese cierto? quien sabe...

Os miráis entre vosotros cuando encontráis lo que andabais buscando en primera instancia. No tenía pérdida ni forma de confusión, ahí estaban los planos de la academia, justo frente a vosotros, enmarcados en un cuadro acristalado.

Notas de juego

Podéis robar algo de tabaco y alcohol si así lo decidís, depende cuantos de vosotros lo hagáis y de la cantidad, veremos que os lleváis.

Como Elian ha sido el más decidido, lo he puesto el primero en la formación. Vladko va a su lado y Sara sigue a su ahora mentor. Maevis no es muy dada al combate directo así que va en la linea trasera junto a Matka que como está PNJtizada, cubre ese hueco sobrante.

Si en cualquier momento queréis cambiar la formación hacédmelo saber. Por ahora esa es la que está como predefinida de base.  

El mapa lo podéis sacar del marco acristalado sin problemas, es sólo cuestión de bajarlo con cuidado y abrirlo. Pero también tenéis la opción de memorizarlo, como queráis. Si optáis por llevároslo os daré algún detalle más pero perderéis algunos minutos de tiempo, en cambio si decidís memorizarlo no perderéis tanto tiempo pero os daré un mapa más simplificado. Es vuestra elección ;)

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20/11/2018, 18:17
Elian

Al pasar junto a la barra de la cafetería, Elian no desaprovechó la oportunidad para estirar el brazó y, con un rápido movimiento, alcanzar varios puros que estaban mas a mano y los guardó en el bolsillo de su gabardina. Tiempo tendría luego, si todo marchaba como estaba previsto, para celebrar junto a sus compañeros dando algunas caladas tranquilas a aquellos habanos.

Con extrema precaución avanzó junto al resto de asesinos, como sombras implacables que lleva el diablo, por aquellos pasillos sumidos en la penumbra de la noche. Sus pasos resonaban levemente sobre el frio marmol del piso. Al fin llegaron a la bifurcación y apareció ante sus ojos, tal y coo les había indicado su clienta, el mapa.

- Creo que deberíamos memorizarlo - dijo a sus compañeros casi como un susurro - No debemos levantar sospechas si alguien pasa por este mismo lugar o la patrulla anda haciendo la ronda. Los pasillos seran nuestros aliados y a la vez... el ataud de los Decanos - centró su atención en el mapa. Era consciente de que se le daba mejor matar que estudiar, pero un asesino debía saber reaccionar ante cualquier situación, y no siempre podían solventar todo empuñando su arma. Aunque tiempo tendrían en esta misión para utilizarla. Dió una última ojeada al plano que colgaba frente a él pero no contento con su capacidad de retención de todos los detalles, prefirió trabajar seguro y apoyarse en el grupo, por que como grupo eran mucho mas fuertes. - ¿Vladko, tienes claro pon donde debemos seguir? - murmuró volviendo la vista hacia el asesino. Sus compañeros eran más jóvenes que él, pero en las misiones que habían coincidido, habían demostrado unas cualidades muy destacables en todos los campos. Y a Elian, sus años, empezarían a pasarle factura en algun momento. Junto a ellos se sentía mas fuerte, más asesino. La sangre bullía en sus venas en cada misión.

Y sabía que esa noche, una vez mas, los Decanos iban a probar su acero.

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21/11/2018, 00:34
Director

Notas de juego

Este es el mapa que podéis observar...

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21/11/2018, 06:07
Sara Cimitar

Mirando el mapa tras pasar la cafetería, torcía su boca pensando bajo la máscara.

- laboratorio... Ficheros... ¿Que tal si un mal alumno resentido quisiera borrar las pruebas de su fracaso académico? ¿Sería exagerado quemar el lugar y sacar a los guardias tras dejarles inconscientes?

Tal vez sería excesivo, y eso borraría ese lugar de reunión hasta su reconstrucción, los decanos podrían morir en el incendio, aunque la clienta perdería su trabajo igual... - tal vez como plan B... - se autodijo. Lo veía un buen plan, parecería la posible obra de un alumno, se eliminarían las pruebas, de rebote podrían caer los decanos o salir heridos, pero dejar sin trabajo a los guardias y a la contratante podría resultar contra productivo. Con aquellas botellas de alcohol allí sería fácil...

- déjalo Sara, pensar demasiado no es lo tuyo - rescatar a los guardias, demostraría al menos que ella no lo había hecho... Matar era más fácil. Incluso si lo hiciera ella, al menos no sería lo habitual.

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21/11/2018, 11:08
Vladko

Elian pareció leerle la mente cuando agarró aquellos puros, aunque no sabía si serían para uso personal o para compartirlos con el resto. El asesino tomó nota mental de mencionarlo cuando todos estuvieran de regreso, sanos y salvos.

Aham, como plan B —respondió a la joven. Si bien la idea no era mala, quemar los Archivos, donde habría gran cantidad de papel, organizaría un incendio de proporciones incalculables. Eso condenaría la base del edificio, cortándoles la principal vía de escape. Además, tampoco le hacía mucha gracia quemar ese sitio. Se acercó al antiguo Decano cuando llamó su atención y escudriñó el mapa con él— Debemos llegar a la planta cuarta. Usar uno de esos ascensores está descartado, haríamos mucho ruido. Debemos usar las escaleras. Mejor ir planta por planta incapacitando a los Guardias y Decanos.

Pareció recordar algo, mirando a su alrededor, pero no encontró lo que buscaba.

¿No debía de estar un Decano con un sabueso por aquí? Tened cuidado.

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21/11/2018, 11:23
Director

Notas de juego

Hacedme una tirada de Notar a -2 para averiguar donde esta ese supuesto decano con el moloso.

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21/11/2018, 11:36
Vladko
Sólo para el director
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