Partida Rol por web

En tanto que el minotauro entorna los ojos para ver al enorme ogro junto a sí tratando de triturar a Selt, una flecha vuela rápida y certera para clavarse en plena garganta del gigantón y dejarle temporalmente sin aire. Al ogro se le ve notablemente más cansado, pero también muy enfurecido y peligroso ahora que se ve acorralado.

Selt prosigue esquivando al ogro con la esperanza de que sus compañeros lo abatan... antes de que el monstruo haga lo propio con el abanasinio.

Malon corre a subirse a un pedrusco desde el que tener mejor ángulo de tiro, y larga una nueva pedrada en dirección al ogro sin dejar de insultarle obscenamente.

La piedra alcanza de nuevo al ogro, pero no consigue darle en ningún punto vital.

Freya agradece el gesto a Selt con una mirada y al ver que ya no puede hacer más por Zenram por ahora, se pone en pie y desenvaina su espada, cargándo contra el ogro pasando por encima del minotauro con cuidado... Con tanto cuidado que no presta atención a dónde va su espada y termina fallando su objetivo estrepitosamente.

Freya avanza incautamente sobre Zenram sin notar que el ogro la mira intensamente y no es hasta que levanta la cabeza para murar a los ojos al enorme hombretón cuando ve venir el enorme mazo hacia ella. La sacerdotisa no puede hacer nada para evitarlo, y vuela por los aires para ir a caer decenas de pies más allá. Su respiración se vuelve dificultosa y está segura de tener varias costillas rotas.

Al ver caer a un enemigo el ogro se alegra y se lanza nuevamente hacia Selt, pero éste está plenamente concentrado en su defensa para mantener entretenido al monstruo mientras sus compañeros atacan desde la distancia que, con una rápida y ágil finta esquiva la maza que pasa donde instantes antes estuviera su cabeza.

Selt no tiene tiempo para lamentar ver caer a la clériga elfa, pues bastante hace por esquivar los garrotazos del ogro.

Por Paladine, que como no se den prisa en acabar con ese monstruo...

Malon, enfurecido al ver caer a Freya, arrecia en sus insultos, arrancando a correr en diagonal, pero en una diagonal que busca que el ogro le persiga, alejándole de sus camaradas para darles tiempo a recomponerse... sin dejar que le alcance, claro está.

El minotauro concentra todos sus esfuerzos en evitar terminar como la clerigo, por lo que sin soltar su hacha se mantiene a la expectativa mientras lentamente se levanta...

Damrath agarra una nueva flecha dolido por la caida de la cleriga, rezando, que estuviera viva aun.

El minotauro trata de levantarse rodando ligeramente para alejarse del ogro, pero éste le ve por el rabillo del ojo y no duda un instante en lanzar un poderosísimo ataque que le golpea en plena testa, justo entre los dos cuernos cuando empezaba a levantarse. La fuerza del impacto resulta devastadora aún para Zenram con sus fuertes músculos y su resistencia de acero. Sin poder hacer nada más para ayudar a sus compañeros, se deja ir entre agónicos suspiros.

Damrath maldijo al ver como se perdía la segunda flecha...

El ogro ve escabullirse a Malon, y decidido a no dejar escapar a ninguno de sus infestos enemigos persigue al pequeñajo y con una brutalidad inmensa que no ha podido ser refrenada por Selt en todo el tiempo que lleva distrayéndole acaba espachurrando al kender con el enorme tronco de árbol que le sirve como arma.

Nadie sabe a qué dedica sus últimos y agonizantes segundos de vida Malon, pero para los kenders que años después le recordaran como el primero en explorar las ruinas de la Ciudad Perdida jurarían que los dedicó a reordenar sus saquillos antes del último y más interesante de sus viajes.

¡Ay!, se queja Malon, que antes de sumirse en la inconsciencia tiene tiempo de articular: ¡será bruto!

Malon ve ante sí una brillante luz blanca, y lo que parecen las figuras de Freya y Zenram adentrándose en la misma. Sacudiéndose el polvo del camino, el pequeño kender pone en orden sus saquillos y echa a correr hacia la luz gritando: ¡Eh, esperadme! ¿No os creeréis que os voy a dejar solos, verdad?

Me pregunto qué habrá allá a lo lejos. Bueno, enseguida lo veremos