Gunnar abrió la boca para decir algo, pero la cerró tan pronto escuchó a Tressa dar la alarma acerca de las ¿personas? que se acercaban por uno de los pasadizos. Miró a sus compañeros.
La sugerencia de Strumni era la más sensata, por lo que el capitán skaldi intentó acercarse y esconderse detrás de uno de los grandes pilares de soporte del arco que daba entrada, o salida, depende de dónde uno viniese, a aquel pasadizo. El sigilo nunca había sido el forte del capitán, pero lo intentó de todas formas. Acto seguido desenvainó su espada con lentitud para que el acero no silbara. Cuando estuvo listo, Gunnar asintió a Strumni.
Motivo: Sigilo.
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 4, 4 (Suma: 10)
En cuanto Tressa les advirtió las voces que venían eran claras y nítidas. Pero por más que miraba a su alrededor Runi no veía donde podía esconderse. Así que ni lo intentó.
El viejo se quedó en medio del pasillo mientras los demás trataban de pasar desapercibidos. El cuervo se posó en su hombro a su señal y miró justo al frente de donde venían la luz y las voces. Su mirada no era nada tierna ni amable.
-No voy a lograr esconderme, pero si puedo hacer que se fijen en mí podré daros a los demás una oportunidad mejor de esconderos. Estad alerta y no os preocupéis por este viejo, quizás incluso podamos evitar una lucha.-
Runi estaba totalmente erguido y desafiante esperando a que viniesen. Era imposible no verlo, pero era justo lo que quería.
Con mi 0 en sigilo ni lo intento. A ver si los logro distraer y les podéis sorprender vosotros.
Siguiendo las indicaciones de Strumni, Tressa se posicionó a un lado cerca de la entrada del camino con la espada preparada para atacar en el momento en que viera salir a alguien.
Agudizando sus oídos intentaba averiguar por las voces a que distancia se encontraban, cuanto más claras se escuchaban más notaba como sus pulsaciones iban en aumento. El tener que estar en silencio y sin realizar muchos movimientos por temor a hacer ruido hacia que los latidos de su corazón aumentaran por la tensión.
Inspiró profundamente para luego soltar el aire despacio, eso pareció ayudar un poco a sentirse mejor.
Mientras los guerreros se escondían junto al arco de la puerta, Runi se preparó para hacer de cebo. Si todo iba bien, sería una emboscada perfecta. Con el cayado firmemente agarrado, esperó mientras la luz y las voces se acercaban por el pasadizo. Sin embargo, de pronto, tuvo una sensación extraña. Una de esas voces le resultaba conocida...
Entonces, los que se estaban acercando llegaron a la esquina y la rebasaron. Runi los vio y no supo muy bien qué emoción era la que sentía con más intensidad, pero se debatía entre la alarma, la confusión, el terror, y la furia. Se trataba de dos hombres, que sin duda eran skaldi, e iban acompañados por dos esqueletos que les escoltaban. Pero lo peor no eran los cadáveres andantes, si no que Runi conocía perfectamente a uno de esos hombres. Y cuando vio al viejo mago, aquél hombre también le reconoció.
Sven, el consejero del rey Thoran, estaba petrificado en mitad del pasadizo. Sus ojos estaban muy abiertos y fijos en los de Runi, al que iluminaba la lámpara que sostenía en la mano derecha.
—Tú... —el consejero estaba pálido como la cera—. ¿Có... cómo has...?
Pero enseguida, Sven pareció recobrar el dominio de sí mismo. Y sin perder tiempo, se dio la vuelta y huyó por donde había venido.
Motivo: Rayo de hielo
Tirada: 3d6
Resultado: 3, 6, 1 (Suma: 10)
Motivo: Daño Rayo de hielo
Tirada: 1d6
Resultado: 3
Motivo: Intimidar
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 3, 6 (Suma: 11)
Lo pongo sólo para tí, porque no sé si voy a poder actuar antes de que se vaya o no. Y lo que pueden hacer los demás. Ya luego lo arreglas tú.
EDIT del DJ: Lo paso después de mi post. ¡Que mira que has sido rápido, joder! xD
Mientras Runi se preparaba para hacer de cebo, los dos guerreros y el montaraz enano se escondieron junto a la entrada lo mejor que pudieron. Prepararon sus armas, y luego se mantuvieron alerta con la vista fija en el viejo mago, que aguantaba firme frente al arco de piedra.
Los pasos se acercaban, y entonces la luz de una lámpara iluminó a Runi. Se pusieron tensos, quien quiera que estuviese viniendo por el pasadizo ya debía haber visto al mago. Pero entonces, los ojos de Runi se abrieron muchísimo. Parecía aterrado o asombrado. En ese instante, se oyó una voz en el corredor, aunque no podían ver quién hablaba.
—Tú... ¿Có... cómo has...?
Pero Runi no respondió, estaba como petrificado en aquél lugar. Y entonces, la luz de la lámpara dejó de iluminar al mago y se escucharon unos pasos apresurados que se alejaban. Alguien huía.
Inmediatamente después, otra voz tronó.
—¡Vuelve aquí, imbécil! ¡Sólo es un viejo inútil, acabaremos con él!
Runi conocía perfectamente la voz que se acercaba, o sí que la conocía. Y pronto iba a lamentar ese hecho.
En cuanto Sven se petrifico el viejo skaldi pudo ver en su cara que no se iba a quedar a enfrentarse a él, iba a huir como el cobarde que siempre había sido. Así que en cuanto el consejero se dio la vuelta la gelida voz de Runi rugió y un dardo helado voló hasta alcanzar la espalda del traidor.
-Si me haces perseguirte va a ser peor para tí. Tienes una oportunidad de acabar de manera digna, no la desperdicies.-
Un gesto con el hombro lanzó al cuervo tras Sven. No iba a llegar muy lejos.
El viejo mago ignoró a los esqueletos y al otro skaldi traidor. Los demás se podrían ocupar de ello.
Resopló ante el estrepitoso fracaso de su plan. No era bueno corriendo, no era bueno persiguiendo y en un espacio cerrado como un túnel su ballesta era tan peligrosa para aliados como para los enemigos. Aquello no pintaba como una situación idónea para sus capacidades y al no contar ya con el factor sorpresa decidió retrasarse.
Las largas piernas de Gunnar, Tressa y Astrid serían más útiles para enfrentar aquella persecución que las suyas. Consciente de que podía entorpecer más que ayudar se mantuvo en un segundo plano y dejó que sus compañeros tomaran la delantera mientras él les favorecía el paso. Tras eso trataría de seguirles el ritmo en la medida que le fuera posible.
Tras escuchar a Runi amenazar a quien estuviese en el camino y descubrir que alguien había intentado escapar, Tressa decidió dejar su escondite. ¿Y si ellos no estuvieran solos? Quizás ese solo era un pequeño grupo y en algún lugar se encontraba mucha más gente. No podían permitirse que ese sujeto escapara y pudiera llegar a pedir refuerzos, así que en cuanto salió se adentró en el camino corriendo con la espada alzada tratando de esquivar a todo ser que le impidiera el paso.
La prioridad era detener al que estuviera escapando y evitar que diera la voz de alarma, no sabían cuantos eran pero enfrentarse a un grupo grande podría ser problemático.
OK, pues obviamente, empezamos combate. Dadme un segundito que prepare todo para que empiecen las leches... xD
Ah, pero ¿no se rinden de inmediato? tsch, estos malos que no saben. XD
Motivo: Iniciativa Tressa
Tirada: 3d6
Resultado: 5, 6, 1 (Suma: 12)
Motivo: Iniciativa Strumni
Tirada: 3d6
Resultado: 1, 5, 4 (Suma: 10)
Motivo: Iniciativa Gunnar
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 4, 6 (Suma: 12)
Tirada oculta
Motivo: Iniciativa Astrid
Tirada: 3d6
Resultado: 3, 3, 4 (Suma: 10)
Tirada oculta
Motivo: Iniciativa Malos
Tirada: 3d6
Resultado: 5, 3, 5 (Suma: 13)
Todo listo en la escena de combate. Consideramos que Runi ha actuado ya, le toca a nuestra querida Tressa y puede actuar con libertad. El resto va por orden de iniciativas.
El rayo que salió de la mano de Runi alcanzó al consejero mientras corría y lo derribó. Sven lanzó un alarido mientras rodaba por el suelo como un conejo asustado, y trató de arrastrarse para seguir huyendo. Pero el ataque helado y el miedo por haberse visto descubierto hacían que apenas pudiera moverse. Por si fuera poco, Svartfloy se abalanzó sobre él y Sven no tuvo más remedio que cubrirse el rostro como pudo para evitar que el pájaro le sacara los ojos a picotazos.
Mientras, el skaldi y los dos esqueletos que le escoltaban se prepararon para luchar, pero al ver a Tressa el guerrero lanzó un juramento.
—¡Es una trampa, no está solo! ¡Lárgate de aquí y avisa a los demás, idiota! —rugió en dirección a Sven.
Tressa corrió detrás de Sven ignorando al guerrero y los esqueletos, no podía permitir que pidiera refuerzos, pero aún estaba lejos y a esa distancia seguramente le daría tiempo a escapar. Por el momento era mejor mantenerlo quieto y evitar que salga huyendo, con ese plan en mente se dispuso a usar magia y tratar de aturdir al hombre. Al pelear prefería usar la espada, pero en este momento estaba agradecida de haber aprendido un par de trucos, venían bien en momentos como este.
Motivo: Aturdir
Tirada: 3d6
Resultado: 8
Motivo: Aturdir
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 1, 2 (Suma: 5)
Perdón, en la primera tirada no marqué la casilla de desglosar.
Tressa se mueve 2,2,3,2
Tressa se había apresurado a dar caza a Sven para que este no pudiera escaparse, y trató de aturdirle con uno de los sencillos hechizos que conocía. Pero todavía no dominaba bien aquellos poderes que utilizaba tan poco a menudo, y el conjuro se disipó sin hacer efecto.
Al menos, había quedado más cerca del consejero traidor, que luchaba por levantarse mientras se sacudía la escarcha del proyectil de Runi e intentaba que Svartfloy no le picara los ojos y el rostro. Ahora, Sven lo tendría bastante más complicado para escaparse. Pero la guerrera no debía perder de vista a los esqueletos, pues se había quedado al lado de uno de ellos.
Turno de Sturmni.
El conflicto había comenzado y no tenía ningún sentido tratar de evitarlo así que se limitó a tratar de finalizarlo de la forma más rápida. Para eso Strumni confió en su fiel ballesta y con un movimiento mecanizado por la práctica se la echó sobre los brazos y apuntó. Buscando un mejor ángulo de tiro el enano varió su posición hasta poder ver con claridad a todos los oponentes a los que tendrían que hacer frente y ya con ellos en su visión se preparó para disparar.
Tras una rápida evaluación el montaraz optó por atacar al guerrero skaldi que acompañaba al consejero traidor. Sin mayores preámbulos, apretó el percutor de su ballesta y esperó a que su virote siguiera el camino que él deseaba.
Motivo: Disparo
Tirada: 3d6
Resultado: 6, 5, 3 (Suma: 14)
Motivo: Daño
Tirada: 1d6
Resultado: 1(+2)=3
Strumni hace un desplazamiento a 5 para poder ver a todos los enemigos y dispara sobre el skaldi.
El dardo de Sturmni voló desde la ballesta del enano y se clavó en el brazo con el que el guerrero skaldi sujetaba su escudo. No fue un impacto letal, pero bastó para que aquél traidor lanzara un alarido de dolor.
—¡Maldito tapón, me las pagarás! —exclamó furioso—. ¡Sven, lárgate de aquí de una vez! ¡Vosotros, atacad!
Los esqueletos esgrimieron sus espadas roñosas, preparándose para unirse al combate.
Turno de Gunnar.
Si Sven estaba aquí (esa maldita rata traicionera), ¿qué había sucedido con los enanos que había dejado con él? Gunnar entrecerró los ojos, hastiado de las traiciones, de las mentiras y, sobre todo, de aquella maldita situación. Sin embargo, quieto como estaba no iba a conseguir nada, así que avanzó hasta encarar al skaldi traidor y así evitar su avance.
— El castigo para la traición es la muerte —dijo con voz exenta de emoción, al tiempo que descargaba un tajo sobre el guerrero traidor.
Con Sven la cosa tendría que ser más lenta, pero estaba seguro que, para cuando terminara la siguiente hora, el viejo consejero también yacería inerte en el suelo.
Motivo: Ataque al skaldi.
Tirada: 3d6
Resultado: 1, 4, 6 (Suma: 11)
Motivo: Daño
Tirada: 1d6
Resultado: 2
Motivo: Daño
Tirada: 1d6
Resultado: 5
Gunnar se mueve 1 - 1 - 1 para interceptar al skaldi y atacarlo.
Con una mirada mortal en los ojos, Gunnar se lanzó sobre el skaldi traidor. Este trató de defenderse, pero no logró bloquear del todo el ataque del capitán y tuvo que conformarse con que la herida recibida no le pusiera inmediatamente fuera de combate. Atacó a su vez, tratando de hundir su hoja en el estómago de Gunnar, pero su embestida fue bloqueada sin problemas.
Mientras tanto, el esqueleto que estaba más lejos avanzó y atacó también al capitán skaldi. Gunnar también se defendió del ataque, aunque no le pasó desapercibido que aquellos cadáveres eran mucho más fuertes que el que habían destrozado en la linde del bosque. El nigromante debía haber recuperado sus poderes ya.
El segundo esqueleto atacó a Tressa y la guerrera levantó su escudo para detener el envite. No iba a permitir que ese engendro la distrajese de su cometido, que era evitar que aquél consejero traidor escapase. Y Astrid, aunque estaba todavía muy mermada por las heridas del anterior combate, no se lo pensó dos veces y se abalanzó sobre el traidor para apoyar a Gunnar. Pero su ataque no tuvo efecto, ya que su adversario logró bloquearlo in extremis.
Tirada oculta
Motivo: Ataque skaldi
Tirada: 3d6
Resultado: 3, 6, 3 (Suma: 12)
Tirada oculta
Motivo: Ataque esq 1
Tirada: 3d6
Resultado: 2, 6, 2 (Suma: 10)
Tirada oculta
Motivo: Ataque esq 2
Tirada: 3d6
Resultado: 5, 1, 1 (Suma: 7)
No puedo actualizaros hoy el tablero, sorry... De todas formas, en las notas de la otra escena dejo anotados los movimientos, y colocaré todo en su sitio en cuanto vuelva.
Turno de Runi.