Partida Rol por web

Dominic asintió a Ryo.

Sí, yo también lo he oido. Espero que simplemente sea un perro que sobrevivió a la matanza. En fín, creo que debemos ir hacia la torre central con más cuidado del normal.

- No creo que sea un perro...

Ryo descendió con cuidado hasta el suelo, una vez en el se saco un trozo de tela con un sello de color negro en uno de sus lados al dejarla en el suelo se convirtió en una enorme tienda.       -Señores, se que le sonará poco ortodoxo pero debo cambiarme de ropa, no me llevará mas de un momento, si hacen el favor de vigilar para que no venga nadie

El clérigo seguía a sus compañeros dispuesto a entrar en acción cuando la situación lo requiriera, sin embargo todo transcurría con cierta normalidad, para alguien como Akden resultaban mas extraños los modos de sus compañeros que aquellas criaturas con las que había combatido o los eventos que se desarrollaban a su alrededor, por lo que se contentaba con ser un espectador de todo aquello...

Dominic se quedó atonito cuando Ryo entró a la tienda a canviarse de ropa, por fortuna la extraña piel que le recubria no dejaba ver bien sus rasgos.

Mujeres. Da igual la situación en la que se encuentren, siempre tienen que ir cuidando su aspecto.

A pesar de sus quejas Dominic hizo aparecer nuevamente su arco de energía y este brilló unos instantes, luego se puso a vigilar.

Ryo salió de la tienda al cabo de poco y ahora llevaba unas ropas mas cómodas y practicas, entre las cuales se apreciaba que en su torso se había puesto una preciosa camisa de tonos azulados y de una manufactura tan buena que parecía hecha de hilo de tela de araña, bordados de hojas y flores recorrían su cuello. Sus botas eran de cuero en color rojo oscuro con brillantes suelas del mismo color pero de un tono cobrizo, los guantes eran de color negro y en los mismos se podían ver runas en plata y oro. La capa que la envolvía era de una belleza extrema y gusto exquisito fabricada con materiales Rojos y negros que recuerdan al color de la noche y al del fuego, la misma esta adornada con  filigranas que representan a Hécate. La capucha le tapaba el rostro, así que vestida de esa forma no se la veía, pero se notaba como desprendía un agradable olor a flores

Ya estoy lista. - Le dijo a sus compañeros mientras recogía el pedazo de tela en el que se había convertido la tienda 

Akin avanzó un poco hacia las torres, oculto y silencioso como siempre, y muy atento ahora a cualquier amenaza, incluso las que podrían venir del fondo de la tierra. En su avance, buscó vetas rocosas para hacer las pausas y observar, esperando que eso le sirviese de una cierta aunque improbable protección.

En medio de los temblores, y ante la imponente criatura muerta por Ryo, el grupo se decidió al fin a abandonar el extraño cuerno de cristal que se había desprendido del gusano. Fendoriel, conservó los tres cuernos de marfil de exquisita talla, cuyo valor sin duda rondaría fácilmente las cien piezas de oro por unidad en un mercado importante. Akin, comenzó a reconocer el terreno, adelantándose al grupo, mientras todos avanzaban a la primer torre de Hecate.

Al llegar a la imponente construcción, descubrieron que se mantenía en mejores condiciones que el resto del lugar. Los arboles de los cercanos bosques, estaban arrancados de raíz por alguna implacable fuerza, y las casas y construcciones del poblado, parecían haber sufrido de una masiva destrucción por los temblores y el ataque de Jacking. Sin embargo, las torres, solo mostraban algun deterioro en sus paredes, y grandes rojas acumuladas en la base. Una gran puerta de madera, reforzada con hierro, se encontraba quebrada en tres grandes trozos, y tumbada contra las paredes del tunel de ingreso.

Adentro, desde el túnel abierto, se podía observar una especie de patio, en el cual un perro salvaje, de buen pelaje negro, ladraba enloquecido hacia el frente. Por supuesto, adonde estaban ustedes.

WOOUFFF WOURRRFFF Grrrrrrrr GUAUURF! les gruñe durante unos segundos el perro. Pero en seguida se vuelve a concentrar en otra cosa...una especie de aljibe de gran tamaño, o al menos eso parece desde vuestra lejana posición.
Se trata de un cilindro de unos tres o cuatro metros de diámetro, de piedra, construido hasta un metros de altura. El cilindro no tiene tapa, y se ve una escalinata en caracol que desciende.

El perro, parece aullar con locura, ladrando sin descanso una y otra vez.

El perro, parece olfatearlos y se acerca al trote hacia ustedes cruzando todo el patio y saliendo al exterior de la torre. Alli, mira a Ryo, y se acerca a olfatearla...luego pierde el interés, y se acerca al pequeño Akin, quedándose mirándolo con curiosidad, como si esperara algo de él...
En seguida, da unas vueltas, y se tiende en el suelo, al lado de Ryo, ladrando ocasionalmente hacia el interior del templo y gruñendo.

 Nunca he tenido interés por los animales,pero está claro que en el interior del templo hay algo que le interesa.Intuyo que es un ser querido,o quizá no...

Digo mirando hacia donde ladra el perro.

Hola blacky, veo que no te has olvidado de mi, y por lo que parece tenemos compañia en el templo, no te preocupes.- Ryo parecía estar hablando con el animal con familiaridad, y aunque sus gestos eran tranquilos y nadie podía ver la expresión de su rostro, lanzó una mirada al interior del templo

¡GUAURFFFF! Que pasa? Tengo hambre! Que pasa? Todos murieron! Todos vieron la muerte aparecer, y murieron de terror! Gritando asustados...Que pasa? No quiero comer a los que murieron...no me gusta esa carne....
Que pasa? Mi Amigo Jim murio tambien...porque bajó y bajó, y murio de terror cuando Eso se apareció...

Y Rulfo...mi hermano...murió pero no por Eso...Rulfo se asustó al ver a Eso...y salio corriendo gritando que Eso era el Amo de Establos...Tomas.
Tomas fue siempre malo con Rulfo...y Rulfo corrió y corrió, y se cayó a uno de los posos de afuera.
Pobre Rulfo.

Que pasa? Tengo hambre...Que pasa? No quiero bajar...Eso está ahi abajo...y es feo...es un Lobo grande y fiero....Y yo, de pequeño, casi muero cuando me perdi en el bosque y me persiguieron los lobos....

Guau! GUAU!