Partida Rol por web

    Son las diez y media de una soleada mañana del 23 de Diciembre de 1948. El clia que se respira en la ciudad es todo lo alegre que puede esperarse en estas fechas. A pesar del fantasma de la recesión que se empeñan en agitar los opositores, Truman ha sido reelegido y el Plan Marshall está empezando a hacer efecto en la devastada Europa, poniendo un enorme mercado a disposición de quienes sepan aprovecharlo.
    Cada uno de ustedes ha sido convocado a almorzar en "Le Gourmet du Pierre" por David Loxton. Tanto el sitio (el restaurante de moda del momento) como vuestro anfitrión impresionan, ambos son "exclusivos", por decirlo de alguna manera, y a todos os ha tomado por sorpresa que Loxton os haya convocado. Si bien todos le conocéis (algunos más y otros un poco menos) hacía bastante que no tenían un contacto tan directo, aunque en estas fechas también es costumbre que las personas, incluso las ricas e influyentes, se reúnan para intercambiar buenos deseos.
    En la calle podéis ver el típico ambiente navideño de personas ajetreadas haciendo las últimas compras y trabajadores repartiendo apretones de manos a diestro y siniestro, todo el mundo sonríe y hasta parece que el tránsito es más fluído (o al menos hay menos bocinazos).

Con las mano derecha en el bolsillo del piloto, un pequeño portafolios de cuero en la izquierda, colmado de suplementos bursátiles, cotizaciones  e informes escritos púlcramente en una Perkins último modelo del despacho así como un New York Herald, Charles Montgomery Burns camina por la Walnut Street, al momento de ser cortada perpendicularmente por la Pickman Street... 

En la esquina, una casa residencial tiene entornada la ventana arco, bow window, y de su interior Monty escucha al pegadizo Dean Martin entonar su "Let it snow", tan popular en estas épocas del año...

Sí claro... Que nieve, cuanto más copioso mejor... Que se quede el ocioso en su morada comiendo pop korn mientras los tigres salimos a la cancha! Allí está la presa... Hay que salir a capturarla! No entiendo como Alexandra no entiende... Por supuesto que estaré en casa para acción de gracias, y claro está que he de comprar un hermoso presente para mi pequeña Maegry...     

Ya pocos pasos lo separan de la calle en que Loxton lo había citado para un almuerzo de negocios... Y mil ideas rondan la mente del aguerrido ejecutivo, y una sola lo distrae de las que realmente importante (al menos importante en la víspera de lo que puede ser un jugoso paquete de negocios)...

El regalo... Sí, una "pepona"... Esas muñecas de trapo y cara de loza... Dineral que puede costarme...

Una juguetería a poca distancia, el frío viento invernal, y la calidez del pueblo americano gastando cuanto gana de su labor en una fiesta que lejos de ser predominántemente religiosa se ha ido convirtiendo en una maratón de compras y ventas...

Ah! Preciosa tendencia del pueblo más poderoso del mundo... ¡Consumamos! La la lai laraira
It doesn't show signs of stopping, And I brought some corn for popping laira la li la laira
Let it snowwwwww sí sí, que nieve, que nuestra gente compre, y gaste jeje, vamos, pongan en marcha el multiplicador económico, so gandules... Let it snow!

-¡Por supuesto, me encantaría! ¿Doce y media? Allí estaré...-

Armando colgó el teléfono algo anonadado. David Loxton, un cliente regular de su disquería, acababa de invitarlo a almorzar. Pero no a un bar cualquiera, sino que al Le Gourmet du Pierre, un restaurant bastante exclusivo. El viento y la nieve prometían un frío característico en épocas de Navidad, por lo que se abrigó bien antes de salir. Miró su reloj, que marcaba las diez y media.

Aún tengo tiempo. Y ya estoy despierto...

Se decidió por tomar una caminata y recorrer las calles de la ciudad. Irónicamente, el ambiente era más cálido, aunque Vitale no tuviera con quien compartir esos días. Luego de casi una hora, sediento y aburrido, optó por acudir a su bar predilecto. Al llegar, tomó asiento y pidió una cerveza.

-Grazie- dijo al barman mientras le pagaba. Cuando su reloj marcaba las doce y cuarto, partió hacia el restaurant.

David Loxton, ¿quién lo hubiera pensado?

A Martin lo habia sorprendido el llamado del Sr. David Loxton y su invitacion al restaurant " Le Gourmet du Pierre", uno de los mejores de la ciudad era lo que se comentaba. A estas horas estaba atendiendo un paciente que habia caido en una depresion despues de que su esposa lo dejara.

Luego de despedir a su paciente y siendo las 11 de la mañana Martin opto por realizar una ultima recorrida por la zona comercial de Arkham y asi ver un poco como actuaba la gente en estas fechas, en momentos asi se quedaba sentado en algun banco y estudiaba a la gente, sus expresiones sus convesaciones, le encantaba ver como se desarrollaba la vida cotidiana. El dia era soleado por lo que le daba cierta calidez que no era propia de las fechas pero que se agradecia, se despuso a ir caminando hasta el restaurant, dejo el coche en la consulta, esta mañana tenia ganas de estirar un poco las piernas...

Cuando llego al restaurat de moda del momento, y por la hora que era este estaba lleno de gente que entraba y salia, se notaba un nivel socio-economico medio-alto, intento buscar al maitre del salon para dar aviso de su llegada esto faltando unos 7 minutos para la hora citada...

En este momento una pequeña ansiedad corrio por el cuerpo de Martin...porque me habra citado el Sr. Loxton ya que es una fecha en la que tendra seguramente muchos compromisos...[I]que se traera entre manos....[/I]

"Le Gourmet du Pierre" impresiona ya por fuera, pero por dentro es directamente fastuoso. Para empezar hay muchas menos mesas que las que pensábais, lo que da una intimidad bastante buena a los comensales. Y el servicio es, por lo que se ve, rápido y silencioso. Un buen observador notará que hay un camarero cada dos mesas, lo que habla de lo bueno que es el servicio y de lo caro que es el sitio.
Al llegar os encontráis los tres ante la tarima del maitre, quien tenía instrucciones de llevaros a la mesa a todos juntos, y os volvéis a sorprender cuando al seguir al maitre véis que éste cruza todo el salón comedor y sube unas escaleras que terminan por conducir a un apartado donde están las mesas "importantes". Estas mesas se hallan en un salón imponente, metidas en cubículos de 25 metros cuadrados y puestas con todo el lujo que os podáis imaginar.
El maitre se detiene ante una mesa ocupada por un solo hombre, Loxton, quien os mira sonriente y hace un gesto para que os sentéis.

-Bienvenidos, poneos cómodos.- os dice vuestro anfitrión mientras hace un gesto que abarca toda la mesa.
Inmediatamente el maitre hace un gesto y un camarero se acerca con una botella de clarete en la mano, sirviendo un poco en cada copa.
-Espero que os guste.- dice Loxton -Yo siempre empiezo mis comidas con este vino para ir abriendo el apetito.-

El lugar era alucinante. Rebosaba de lujo por donde se lo mirara, y solo en el área más común. Loxton ocupaba una mesa en un sector aún más despamapanante, lo suficiente para hacer que Vitale se sintiera suertudo.

Hace mucho tiempo no disfrutaba una comida de este calibre

David lo invitó a sentarse, pero para su sorpresa no solo a él, sino que a dos individuos más. El asunto se volvió más extraño, pero contaba con que sus interrogantes serían despejados durante el almuerzo. Loxton tendría sus razones.

-Buenos días, Sr. Loxton. Agradezco la invitación- dijo Armando con un respetable dominio de la etiqueta. -Saludos señores-

Probó el vino cuando el resto de comensales se hubieran sentado, degustándolo con placer. -Buena elección-

Cuando Martin ve a sus colegas Vitale y a Monty, los saluda extrechando sus manos y con una reverencia a cada uno luego comenta:

-Buenas dias señores y felicidades, un gusto verlos en visperas de navidades.

Luego el maitre los invita a que lo sigan por el comedor llevandolos a travez de el exquisito restaurante, al subir las escaleras y ver la zona reservada para gente importante Martin quedo asombrado por el lujo del salon.... Hasta llegar a la mesa en la que se encontraba el Sr. Loxton, cuando este los saluda Martin contesta:

-Buenas dias Sr. Loxton y feliz navidad...Martin estira su brazo para extrecharle la mano al mismo tiempo que se quita el sombrero y realiza una reverencia... -hace tiempo que no tenia noticias suyas... Cuando Loxton los invita a sentarse, Martin lo agradece y prueba el vino que les ha traido el camarero, con un gesto de aprovacion... Luego agrega...-Bueno Sr. Loxton aqui estamos todos, bueno a no ser que haya algun invitado mas....luego continua dice mirando a Loxton... podriamos hablar del motivo de la reunion antes o despues del almuerzo como a usted le paresca mejor....Martin estaba ansioso de saber el motivo de la reunion junto con sus tres compañeros....

Caballeros...

Tras haber estrechado las manos que le fueran tendidas al ingresar en Le Gurmet Du Pierre, habiéndole solicitad al maitre le guarde donde considere oportuno el paquete con la muñecota para su pequeña hija y el sobretodo, Charles (siempre con una espléndida sonrisa en el rostro), se limita a seguir a la curiosa comitiva hasta el punto de encuentro.

El V.I.P... Esperable en mister Loxton... No tanto por el lujo sino por la reserva.

Mister David Loxton, ha sido muy amable con la invitación, con permiso...

Al ser invitados a tomar asiento, hago lo propio y, tras un instante, pruebo el exquisito vino, observo su color, percibo su aroma, y finalmente tengo a bien el catarlo... Un brevisimo instante de degustación en el paladar, y nuevamente la más espléndida sonrisa que un buen americano pueda tener a gusto portar.

Digno de un marajá. Excelente gusto estimado.

Escucho como el señor Stuard va directo al grano y de inmediato trato de, disimuladamente, indagar en la reacción que esto causa sobre Loxton.

-Antes que nada...- dice Loxton luego de responer cordialmente a todos los saludos -... permítanme que los presente, ya que si bien todos me sois cercanos es poco probable que os conozcáis.- se detiene un momento para beber un sorbo de vino y os va señalando con un gesto, mientras dice -Este señor es Charles Burns, un experto en todo lo referente a finanzas. Este otro caballero es el Doctor Stuard, quien además de su profesión investiga algunas cosas que me están empezando a interesar, y este otro aquí a mi derecha es nada menos que Armando Vitale, el proveedor de la mas exquisita música de este lado del océano.-
Mientras os deja que vayáis intercambiando miradas e inclinaciones de cabezas Loxton termina su vino y se inclina hacia atrás con aire satisfecho. En ese preciso momento se acerca una persona a la mesa con cuatro carpetas de piel que os va entregando a cada uno, y Loxton dice con expresión satisfecha -Ahhh... permítanme presentarles a Pierre, un exquisito summellier y el artífice de todo esto.-

-Enchanté, monsieurs.- os dice Pierre a todos en general y luego de una ligera inclinación agrega -Os dejo los menús, para que vayáis eligiendo lo que os apetezca.- dicho lo cual se retira discretamente, aunque podéis notar como se queda observando desde un rincón, seguramente para poder tomaros el pedido en cuanto os decidáis.

Cita:

Ninguna reacción en especial, Loxton sigue a lo suyo tan normal y sonriente.

-Merci monsieur le contesta al recibir la carta de Pierre.....Martin al ver al camarero en el rincon lo llama muy sutilmente y le dice , seguramente habra platos deliciosos ¿que especialidad de la casa me recomienda monsieur Pierre? le contesta Martin rapidamente a este al ver la carta en Frances...y agrega, -Por mi parte lo dejo a su seguro magnifico criterio.... Cierra la carta y se la entrega a Pierre. Luego se dirige a sus compañeros y al Sr. Loxton, -Señores ustedes ya estan para ordenar o le decimos al Sr. Pierre que espere un momento??....

-Permítanme recomendarles el faisán con nueces de Pierre acompañado por un buen vino tinto. Es realmente exquisito.- sugiere Loxton ante el requerimiento del doctor, y agrega mientras sonrie -Por mi parte, es lo que voy a tomar.-
Pierre toma nota del pedido de ambos y se retira a su sitio a esperar que el resto se decida sin interferir en la intimidad del grupo.

Sin cerrar la carta aún, Monty mira a Pierre y con gesto amable pregunta

Observo ternera Príncipe Orlof monsieur, si acaso puede confirmarme que su factura puede colocarse al menos cerca de vuestro faisán con nueces, pues, entonces esa será mi elección, acompañada por  un Romané-Conti dice al tiempo que ahora sí, cierra la carta y la devuelve  Merci.

Meditando un instante, esperando que Pierre se retire para interpelar al interlocutor primero, consulta a Loxton.

¿Señor Loxton, cuales asuntos son esos que están comenzando a interesarle y tienen algún punto tangencial entre nosotros, sus invitados?

Cita:

Pierre arquea ligeramente una ceja ante el pedido en un gesto que denota que los clientes de "Le Gourmet..." suelen ser más adinerados que entendidos, y mientras toma nota dice a Monty:
-Puedo asegurarle personalmente que quedará usted satisfecho, monsieur.-
Hecho lo cual vuelve a su puesto.

Cita:

-No es nada que nos impida disfrutar de una buena comida, amigo Burns. Pero puedo adelantarles que se trata de un pequeño temilla inmobiliario que me esta preocupando un poco... nada que me quite el sueño, pero como usted sabrá mejor que yo, nunca es bueno dejar los problemas para mañana y mucho menos esperar a que se resuelvan solos. Además de eso, en casi todos los negocios sucede lo mismo de manera casi axiomática:"Quien tiene la información tiene el poder". Pero precisamente por eso, hablaremos del tema cuando ya estemos saciados, con un café y algunos cigarros que nos ayudarán a determinar la situación.- carraspea un poco y continúa -De todas maneras y como ya les he adelantado, no es nada grave, asi que sugiero que comamos tranquilamente y ya más tarde "todo se andará". Por cierto ¿Con quien van a pasar estas fiestas?-

Abrió la carta expectante, pero se sorprendió al ver que todo estaba en francés y tampoco podía decantarse por algo medianamente accesible. Para su suerte, Loxton hizo su recomendación.

-Pediré el faisán- dijo brevemente mirando a Pierre. Con las mismas pretenciones que Loxton, esperaba la comida antes de entrar en materia, pero el resto de comensales se mostraban impacientes. Ante la pregunta, se removió un poco en su asiento.

-Me temo que las pasaré junto a Miles Davis, y tal vez algo de Charlie Parker- dijo tratando de sonar gracioso, aunque con escaso éxito.

-Como usted diga señor Loxton, dejaremos los negocios para cuando tengamos el estomago lleno...Martin sonrie -Yo por mi parte tengo bastante trabajo estas navidades...muchas historias clinicas que acomodar....muchos documentos....Pero bueno mas vale que sobre trabajo y no falte....luego pasare a visitar a mi padre y despues creo que cenare solo...que tambien tiene su gustito...Martin sonrie nuevamente....

-Ustedes señores que haran? Mira a sus compañeros y al señor Loxton esperando una respuesta....

Monty se encoje de hombros con una sonrisa más propia de hollywood que de Arkham...

Pues, supongo que soy afortunado entonces... He de pasar las noche buena con mi esposa e hija, en casa de mis suegros. Ha de asistir mi anciana madre, sin duda, con su exquisito pavo a la Chicago he he... Eso, claro, salvo que las circunstancias ameriten otra compañía...

Dice como al pasar dejando muy en claro que una buena oportunidad haría a Charles cambiar el festejo en familia por otro tipo de reunión...

Debieran saber comprender... Un estilo de vida como el que llevan no se alcanza con falsos fetiches como la navidad... Primero trabajar, triunfar, y en ese instante descansar y disfrutar de la familia...